Changkyun no sabía lo que era sentirse vigilado las 24 horas del día, tener pesadillas todas las noches y no poder salir de casa sin sentirse aterrorizado de que algo malo le suceda.

No sabía lo que era sentirse desprotegido en su propio hogar.

Él jamás experimentó el verdadero miedo. Ese miedo que te paraliza el cuerpo y sientes como tu corazón quiere escapar de tu pecho. Ese miedo que te hace imaginar lo peor. Ese miedo que, sabes que nunca vas a poder recuperarte del desgaste mental y emocional que provoca.

O al menos no hasta que se muda a un nuevo vecindario y conoce a su vecina del frente: una bella muchacha que trabaja en una panadería.