Aniversario.

Cierto diablillo de cola puntiaguda  no paraba de caminar de un lado al otro en su cuarto. Los nervios y la ansiedad de saber lo que le pasara en el día de hoy lo estaba matando.

*BIIP BIIP BIIP*

Sonó su celular, al ver el nombre no se extraño en lo absoluto ver que quien lo llamaba era nada más y nada menos que Stolas.

- ¿Que pretendes hacer? - pregunto de una, atendiendo la llamada, el sonido de su voz demostraba la inquietud que tenia.

- ~Blitzy, hola mi pequeñito~ - su voz se escuchaba coqueta - ~quiero que por favor vengas a mi palacio, tengo algo muy importante que darte para este día tan especial~ - su voz profunda seguía al tope.

- Ahhgg, no lo se estolas - se rascaba la nuca de los nervios - ¿Es muy importante que vaya ya?...¿Y que sea hoy? 

- Blitzy, sabes que no te pediría que vinieras si no fuera algo importante, y este día es muy importante - explicaba tranquilo - ven por favor, te daré y después de eso si lo deseas te puedes ir.

El imp volvió a pensar, le intrigaba el saber que le tendría preparado, pero no por eso sus nervios habían bajado...

Hoy se cumplían 3 años desde que Blitzø y Stolas se conocieron; nombrando por el propio Stolas que seria su aniversario.

El primer año Stolas fue a la oficina del imp a regalarle un trozo de pastel de chocolate que el mismo orneo; como desayuno sorpresa, Blitzø al ser muy amante de ese tipo de postres lo acepto con gusto y alegría, dando la casualidad que por falta de tiempo no había desayunado. El diablillo lo comió de inmediato con Stolas de espectador. No pasaron ni 30 segundos cuando al chico imp comenzó a sudar, a calentar y como toque final...tener una gran erección involuntaria.

El diablillo exigió una respuesta sobre eso, a lo que Stolas estaba confundido, le confeso al cuernudo todos los ingredientes que contenía. Primero empezó por los básicos, como los son la harina, los huevos, chocolate en barra y en polvo...hasta que llego al ingrediente que era el ocasionante de esto; era el aceite de almendras. Stolas al escuchar por la boca de Blitzø que eso hacia que sus hormonas se alborotaran es debido a un extraña condición medica con la que nació, no era mortal para el para que se catalogara como una alergia, pero si ingería cualquier alimento con esta sustancia, tendría los mismos síntomas que da la muy famosa píldora de la viagra.

Blitzø por obvias razones no podía salir así. Le reclamaba, gritaba y le sermoneaba al búho pero este muy lejos de arrepentirse, sonreía por el resultado, justificándose también que desconocía su condición, algo que Blitzø le dio la razón.

"Yo provoque esto, así que yo te la quitare" - dijo con cinismo en aquella oportunidad el príncipe.

Ya muchos sabrán a lo que ese pajarraco pervertido se refería con "quitar"

Desde ese día fue que Blitzø se le ocurrió poner una alarma que tenga como nombre de "Stolas"

El segundo año la cosa fue un tanto diferente. Stolas había comprado dos boletos para una corrida de caballos, Blitzø al no poder escuchar la palabra caballos sin emocionarse, brinco de la alegría y fueron al final del trabajo. El diablillo decidió "disfrazarse" en aquel comento para pasar inadvertido frente a los demás (Aunque solo fuera con su sudadera de caballo con la capucha puesta), todavía quería que todo lo relacionado con Stolas fuera en secreto. Por otro lado, el infierno le tenia otra jugada y es que a mitad de la carreras, los propietarios de ese hipódromo que estaba en el anillo de la avaricia, le copiaron a los juegos de béisbol en poner algunas cámaras para dar el "beso en pantalla". 

Iban enfocando pareja por pareja a cada par de demonios que se encontraran en las gradas; inclusive enfocaron a un par de demonios que no eran nada, ni siquiera conocidos pero de igual manera se besaron, importándole poco de que la pareja de ese par estuviera al lado.

Blitzø se carcajeaba de ellos, le parecía algo vergonzoso que todos los vieran de esa forma, y el amaba la pena ajena...

"Hoo pobres tontos, no me gustaría estar en su lugar" - seguía riéndose el imp a tal punto que tenia que secarse un par de lagrimas que salían de sus ojos por el esfuerzo que ocasionaba su risa.

Sus carcajadas fueron frenadas de golpe al ver como en aquella pantalla era transmitida sus caras, rodeado de un corazón como marco de un porta retrato. Claramente les decían que se besaran.

Los ojos parecían que se le saldrían a Blitzø por la sorpresa y rabia que traía.

"¡¿Que mierda?! - gruño enfadado, pero se calmo para luego el sentimiento que más lo domaba era el de la pena.

Sobra decir que Stolas estaba más que encantado por eso, era como si los productores habían leído sus pensamientos.

El emplumado ser acerco su rostro al del imp, como si le estuviera diciendo "Vamos...solo sera un beso".

Al contraria de Blitzø se alejo un poco de su acompañante, pero aun estando ambos sentados, hasta que el resto de demonios decidieron intervenir.

"¡BESO, BESO, BESO, BESO!" - gritaban todos al unisono, como si le estuvieran dando un pequeño empujón a los dos.

Blitzø al verse atrapado en aquella presión social, frunció el ceño encarando a Stolas "Solo sera un beso, ya hemos cogido así que esto es nada ante las demás situaciones" - pensaba una y otra vez aquel imp desconcertado.

El más pequeño tomo de la cara del otro y sin decir otra cosa lo atrajo a el, sellando así el gran sonido del ambiente con un beso, claro era que Stolas lo correspondió con muchas ganas, tomándolo al imp de su cuello para pegarse más a el.

Y ahora en el tercer aniversario, ya se estaba preguntando que era lo que le tendrá ahora. Ese búho tenia como una especie de maldición; siempre al principio se muestra cariñosos y dulce por regalarle algo aparentemente inocente, pero terminan de manera sexual o lo más angustiante aún así... el lo permitía, o simplemente se dejaba llevar...

En la ocasión del pastel, puedo solo correr a Stolas por su descaro accidente de excitación y después se ayudaría así mismo con su "mano amiga"

El curioso y apenado momento del hipódromo también pudo hacer algo además de besar a Stolas, pudo a verse marchado y ya...pero no, siempre se quedaba, siempre toleraba su comportamiento extraño y siempre se preguntaba porqué lo aguantaba.

Muchos dirán que es por el Grimorio, pero da la casualidad que esos eventos no eran de luna llena como ellos habían acordado. Blitzø sencillamente pudo negarse a todo lo que le proponía Stolas al salirse de sus trámites de trato que acordaron y rechazar las invitaciones como si nada, porque no era su obligación.

Pero no lo hacía, simplemente acedia tomando el riesgo que este terminara en algo sexual o amoroso al final de todo.

Volvió a caer y termino llegando a la casa de Stolas, este ultimo le informo que no era necesario que entrara por el balcón, estaba solo y podía entrar con total confianza asía dentro. Lo hizo y como si de su propia perdición estuviera entrando golpeo un par de veces la puerta de la enorme casa, el príncipe personalmente fue quien la abrió, esperando impaciente al imp, este lo invito a entran y paso.

- Blitzy, estoy muy contento de que estés aquí - dijo el búho abrazándolo.

- Si ,si, de cualquier modo terminemos con esto de una vez - lo alejo y empezó de desvestirse, empezando por quitarse su larga gabardina negra.

- ¡¿Que haces Blitzy?! - pregunto riéndose - hoy no es luna llena.

- Si lo se, pero no se como le haces pero siempre en esta fecha terminamos teniendo sexo - se bajo los pantalones - ahora ¿Quien sera el pasivo el día de hoy? - pregunto sereno.

Stolas río a lo bajo acercándose al otro.

- Es tentadora tu oferta - lo tomo de los brazos, deteniéndolo - pero no tenemos porque hacerlo a juro porque si, Blitzy - lo miro a la cara al diablillo semi-desnudo - solo quiero darte un regalo de aniversario.

- Pero ese es el problema, cuando me das algo o tiene alguna cosa que nos lleve a la cama o habrá alguien más que nos orille a eso...¡O simplemente el puto infierno conspira para que lo hagamos y ya! - agitaba sus brazos frustrado.

- Blitzy~...- lo tomo en sus brazos - no hay nadie, tu sólito te estabas aventando a la lujuria, y me estas atrayendo bastante por eso~ - se mordía el labio inferior.

- A-así que...no hay sexo y...otra cosa carnal ¿No? - pregunto algo tembloroso, sentándose los dos en el sofá. Stolas negó con la cabeza.

- Solo quiero darte esto - metió su mano detrás del sofá que estaban, sacando un objeto rectangular pequeño y plano - toma. Feliz aniversario, querido.

Blitzø algo nervioso y confundido tomo el regalo con sus manos, se veía aparentemente normal, se le paso por un momento si era algún juguete sexual o un traje raro y apretado, pero lo que presenciaron sus ojos al romper el papel colorido de aquel regalo fue algo que nunca pensó...o que simplemente olvido. 

Era la primera selfie que se había tomado con Stolas, en marcada correctamente, los dos se veía muy felices ahí, fue antes de que se acostaran, pero se la estaban pasando bien en ese día.

- T-tu...¿Como la conseguiste? - Estaba desconcertado.

- Es un viejo recuerdo que conserve. No podía olvidarme de ese momento en que me estabas coqueteando para acercarte al Grimorio~ - sonrió.

- Huuu siii...me fuera gustado que haya sido diferente nuestro primer encuentro - río nervioso.

- No te preocupes, Bltizy...de cualquier modo ~no sabes lo mucho que atesoro ese día~ - sus ojos se encendieron de un rojo brillante por un par de segundos para tomarlo del rostro - y me alegra que me escogieras a mi para que intentaras robar el libro, jeje - los dos se rieron, era irónico bromear de un momento donde te robaron algo, pero que gano algo muy importante y especial. Stolas no lo soporto más y le robo un pequeño piquito a Blitzø - ~te amo, Blitzy~ - susurro teniendo sus bocas muy cercanas.

- H-he Stolas...yo - tartamudeaba con miedo.

- Sshhh - lo callo poniendo sus dedos en los labios del imp - no tienes porque sentirte obligado a decir lo mismo, si algún día te nace seria el demonio más feliz de todo el infierno, pero por ahora...también lo sigo sintiendo con solo estar unos momentos a tu lado - lo acurruco en un abrazo.

Blitzø sentía un millón de cosas ahora. No sabia si algún día le diría "Te amo" a Stolas, pero ¿Por que debería? A fin y al cabo no son del todo una pareja, pero sabia que Stolas sentía algo más que solo ser un acompañante de fornicación...y por más que le cueste admitirlo...estaba poco a poco cayendo en ese mismo vil agujero de sentimientos, se asusto al pensar que algún día pudriera botar la baba por ese ricachon presumido...pero le miro las ventajas de ello y si que eran muchas.

No quiso pensar más en eso. Que el tiempo haga lo suyo y ya...

- Gracias...tonto pájaro que...cada día me sorprendes más - agradeció feliz tomándolo del cuello para abrazarlo.

Por fin después de un par de años, considero que la maldición de esta fecha había sido rota. 

Mmhh...tal vez fuera sido mejor...no lo se, pero nunca he querido pareja así que no se como lo celebraran en sus aniversario, por ello aquí yo invente una loca XD, espero que les haya gustado, hasta el próximo día, los quiero muchísimo, cuídense, bye.