Liam despertó de golpe, sus ojos abiertos de par en par mientras miraba alrededor de la habitación en busca de Zayn. Habian salido del hospital hacia un par de días y no se habian separado en ningun momento. El pequeño moreno habia estado pegado a él aunque Ed les habia asegurado que tanto Jacob como su hijo estaban en custodia. Zayn aun tenia miedo de todo lo que se movia demasiado rapido para él, varias veces habia gritado solo porque Bubba habia entrado de golpe a la habitación o le saltaba encima cuando estaba desprevenido. Habia un largo camino para él y demasiados problemas adelante pero estaria bien, Liam estaba seguro.

Saliendo de la cama, se dijo a si mismo que su bebé estaba dentro de la casa donde estaba totalmente protegido y nada podia dañarlo pero aun así, no logró que su corazón detuviese su galope. El miedo lo arañaba por dentro ya que la última vez que lo habia perdido de vista habia sido cuando Jacob se lo habia llevado y sabia sin lugar a dudas que él tambien necesitaria un tiempo para sanar ese susto pero hasta que llegara a ese punto, se iba a encargar de estar siempre al lado del menor.

—¿Zayn? —murmuró, escuchando con atención en busca de alguna pista.

—Estoy aquí.

Liam siguió la suave voz de su chico, encontrandolo sentado en el suelo, cerca de su escritorio, con un libro en el regazo. Bubba estaba tirado a su lado, disfrutando de las caricias distraidas que el moreno dejaba en su cabeza de vez en cuando. Sus grandes ojos ambar lo miraron un tanto asustados cuando se acercó.

—¿Que haces, bebé? —se sentó a su lado, observando a Zayn cerrar el libro y apoyarse en el lado de su cuerpo. Paso su mano por su cabello en una larga caricia—. Es tarde, deberias estar durmiendo.

—No podia dormir —jugueteo con las cubiertas del libro en su regazo antes de dejarlo en el suelo—. Pensé que leer un poco me ayudaria.

—¿Como te esta yendo con eso?

Miró hacia arriba, una pequeña arruguita apareciendo en sus cejas—. No funciona.

—¿Quieres hablar de ello conmigo y ver si te ayuda?

Zayn se trepó a su regazo, a horcajadas, y se acomodo contra su pecho, sus manos dirigiendose directamente hacia los collares antes de suspirar—. Solo... —hizo una pausa, como si pensara en lo que iba a decir—. Me di cuenta de que estoy solo ahora.

—¿De que hablas, bebé? —colocó sus dedos bajo su barbilla para que lo mirara directamente—. Nos tienes a nosotros, somos tu familia ahora.

Se mordisqueó el labio—. No es lo mismo, Liam. —susurró—. Perdí una parte de mi vida, simplemente desaparecio y me siento un tanto perdido en este momento. Sé que quieres que vea a tu familia como mia pero nunca será completamente de ese modo.

—Es todo lo que te puedo ofrecer, lo siento.

—Lo sé y jamás te pediria más de lo que me das —apoyó su cabeza en su pecho—. Es solo que... es dificil darte cuenta de que las personas que debian quererte sobre todas las cosas, son las que estan dispuestas a utilizarte como si fueras un objeto intercambiable para obtener lo que quieren. Y duele mucho, Liam.

Liam apreto sus brazos a su alrededor y beso su cabello, cerrando los ojos al escuchar los sollozos del menor. Fue en ese momento que se dio cuenta de que la inocencia de Zayn le habia permitido pensar que esos hijos de perra lo habian querido al menos un poco y todo lo sucedido habia explotado su burbuja, logrando que el pequeño mundo donde el chico estaba viviendo se tambaleara peligrosamente.

Pero Liam no iba a permitir eso, su bebé no estaba listo para ver el mundo con esos colores tan opacos, no aun.

—Mirame, Zayn —pidio con suavidad, esperando a que esos humedos ojos se posaran en el antes de seguir hablando:— Eres un niño hermoso, bebé. Todas las personas que tienen el placer de conocerte, te aman automaticamente. Y en verdad siento muchisimo que ellos no hayan visto lo increible que eres, pero no puedes llorar por personas que no merecen tus lagrimitas. Debes ser fuerte, levantar la cabeza y mantenerte firme, confiando en el amor de todas esas personas que te adoran, porque creeme, hay muchas de ellas.

El moreno se aferro a él, aun sollozando suavemente—. ¿Como hago que pare el dolor?

—No parara —dijo con suavidad, conteniendo sus propias lagrimas mientras dejaba largas caricias en la espalda del menor—. Solo puedo amarte muchisimo para que no pienses en el dolor pero no puedo hacerlo desaparecer, bebé, lo siento mucho.

—Liam —se lamento en un susurró, su cuerpo agitandose con los sollozos.

—Estoy aquí, Zayn —besó su mejilla humeda con suavidad—. Siempre estaré aquí, tesoro, solo debes aferrarte a mi.

—La realidad duele.

—Lo hace. —aceptó—. Pero no vivas en ella sino quieres, tendremos nuestro propio mundo, ¿quieres?

—¿Podemos hacer eso?

Sonrió suavemente—. Por supuesto, solo seremos nosotros dos —lo arrullo con cuidado en sus brazos—. Cuando te enfrentes a una realidad que no te guste, recuerda que siempre puedes volver a nuestro pequeño mundo. Siempre tendré mis brazos abiertos para ti, para mantenerte seguro del mundo. Es todo lo que te puedo ofrecer.

—Es todo lo que quiero —hipo, escondiendo su rostro en el cuello del mayor—. Te amo muchisimo, Liam.

—Tambien te amo, pequeño.

(...)

—¡No quiero hacer esto, Lucy!

Harry esquivo las manos de Lucy y volvió a arrojarse en la cama, boca abajo. La castaña habia aparecido en su casa luego de no haberse visto por días y lo habia sacado de la cama, obligandolo a vestirse para poder asistir a la universidad. Harry seguia negandose a ello pero ella parecia bastante decidida a obligarlo.

—Deja de comportarte como un bebé. Deje pasar que cancelaras tu cita con Kallen pero no voy a dejarte hacer esto —lo jaló de la parte trasera de la camiseta, intentando que se levantara—. ¡Debes ir a estudiar, joder, no quiero que seas un maldito vago!

—¿Como tu?

Lo soltó de golpe, logrando que cayera en la cama desde los pocos centimentros que habia logrado levantarlo—. ¿Disculpa? —jadeo—. Por si no te has dado cuenta, yo tengo un diploma colgando en mi dormitorio.

—Lo compraste. —musitó.

—Pudrete, deja de atarcarme a mi —gruño, dandole un golpe en la espalda con todas sus fuerzas—. Yo no fui quien rompio tu pequeño corazoncito, no quieras hacerme la culpable de todo.

—Tecnicamente, tu me diste la noticia —apuntó—. Así que fuiste tu quien lo rompio.

Lucy volvió a gruñir, levantando las manos y dejandolas caer con brusquedad—. ¿Vas a seguir comportandote de esta manera por mucho tiempo?

—¡Que te jodan!

—Ojala, pero estoy muy ocupada intentando sacarte de la cama para poder ir en busca de alguien que cumpla la tarea —otro golpe—. ¡Levantate, culo flaco!

—Callate, tu estas llena de silicona. —masculló.

Lucy abrio la boca en shock antes de sentarse a su lado en la cama—. Voy a dejar pasar ese comentario solo porque sé que no estas en tus cabales en este momento —dijo con suavidad antes de hacer una pausa—. Sé que te duele, Harry, y que lo menos quieres en este momento es enfrentarte a Louis pero debes hacerlo.

—¿Por qué?

—Porque necesitas un cierre de todo esto —explicó.

Harry la miró de reojo—. Suenas a la patita fea de Chicken Little.

—Escuchame, idiota —rodó los ojos—. Necesitas que Louis te desilusione para poder sanar y volver a empezar, es un proceso doloroso pero necesario. Sino hablas con él ahora, viviras tu vida preguntandote "¿y si...?"

—Va a doler.

—Pero sanara pronto, te lo prometo. —paso su mano suavemente por su espalda—. Sanar un corazón roto es más facil que vivir con la ilusion de algo que no va a suceder. Debes seguir adelante y este es el primer paso.

Los ojos verdes de Harry parpadearon en su dirección antes de que tomara su celular, marcando un numero y poniendo el altavoz. El aparato rebotó en la cama cuando lo soltó allí, el sonido de tono aun haciendo eco en la habitación.

—¿Hola? —una voz adormilada traspaso el auricular—. ¿Harry?

—Hola, Louis —susurró, con voz clara a pesar de que una lagrima resbaló por el lateral de su rostro—. Te llame para hacerte una pregunta, necesito que me contestes con sinceridad, ¿si?

—Seguro —Louis estuvo alerta la instante—. ¿Estas bien? ¿Quieres que vaya a verte o algo? Si quieres...

—¿Estas comprometido? —cortó.

El silencio fue tan fuerte que Lucy tuvo el impulso de decir una estupidez solo para romperlo pero no lo hizo, solo espero hasta que Louis volviese a hablar. Fue un murmullo, apenas entendible pero era un inconfundible—. Si.

"Oh dios" Harry gesticulo en su dirección mientras apretaba los labios juntos, las lagrimas resbalando por su rostro. A la castaña le rompio el corazón ver al chico, usualmente alegre, tan roto pero no dijo nada, intento pasar desaparecibida y dejar que actuara por si mismo.

—¿Por qué...? —se ahogo, tragando sonoramente—. ¿Por qué no me lo dijiste?

—¿Que debia decirte? —Louis sonaba bastante claro—. Te repeti mil veces que me dejaras en paz, Harry, nunca me escuchaste.

—Pero- —se mordió el labio tan fuerte que un poco de sangre se filtro de él—. No se suponia que fuera así.

—Lo siento, Harry —susurró el ojiazul—. Lo que sucedio en el hospital jamás debio haber sucedido, no sé lo que estaba pensando. Yo realmente lo siento y no...

Harry se inclinó y presiono el botón para cortar la llamada antes de hundir el rostro en las sabanas y soltar un grito ahogado. Lucy se inclinó hacia él, su mano flotó por su espalda antes de apoyarse en ella, intentando darle un poco de consuelo, sus propias lagrimas apenas contenidas.

—No sé que decirte, Hazz —dijo con cuidado—. Lamento muchismo hacerte pasar por esto pero nunca lo creerias realmente sino lo escuchabas de él.

—Dios, duele más de lo que pensaba. —murmuro contra las sabanas.

—La realidad a veces nos golpea duro pero debemos aprender a levantarnos y seguir adelante —acaricio su cabeza—. Solo debes levantarte y seguir tu camino.

—No creo poder —se retorcio, intentando hacerse pequeño sobre la cama—. Lo único que quiero es desaparecer.

Lucy pensó en ello por un momento, intentando encontrar una solución al dolor de su amigo—. Liam me llamó esta mañana —dijo—. Zayn tuvo una crisis ayer en la noche y cree que lo mejor para él es olvidarse de lo que sucedio aquí, tener otro entorno y ver otras personas. Piensa irse a vivir a Estados Unidos en cuanto todo esto del juicio termine, decidí irme con ellos para poder tomar un par de cursos y... —suspiró—. Si quieres irte con nosotros, eres más que bienvenido.

Él parpadeo hacia ella, aun agitandose por los sollozos—. ¿Quieres que me vaya a vivir con ustedes a Estados Unidos?

—Es exactamente lo que te estoy proponiendo.

Harry tomó aire, su rostro humedecido por las lagrimas mientras intentaba detener el llanto—. Quiero irme, quiero irme ahora.

Lucy asintió—. Podemos hacerlo, esperaremos a Liam y Zayn allá, ¿te parece?

El rizado asintió contra las sabanas, sus intentos de no llorar fallando miserablemente. La castaña se acercó, intentando consolarlo torpemente. Lucy deseo tanto tener algun tipo de remedio para un corazón roto pero lo único que podia hacer era esperar que Harry fuese lo suficientemente fuerte para poder pasar por ello con rapidez.