El viento ya no rugía, de hecho, se sentía una inmensa paz dentro de la casa. Lyna abrió los ojos y se estiró; su cuerpo estaba adolorido y su rostro le ardía, al igual que su labio inferior. Giró su rostro, James dormía dándole la espalda; la respiración del hombre era pausada y suave, parecía que tenía un sueño tranquilo. Los dedos de la chica recorrieron su espalda, tocándola con un poco de timidez ya que no deseaba despertarlo. Él balbuceó algo y se dio la vuelta, pero continuo dormido. Lyna sonrió y se acercó más a él para besar su pecho y acariciarlo. Deseaba admirar su desnudez y llenar su vista con la hermosura de su cuerpo, ella deslizó su mano por su pecho y sonrió, dejando varios besos sobre sus pectorales. ¡Parecía un niño durmiente! Eso le causo una inmensa ternura y deseó con todas sus fuerzas abrazarlo y besarlo varias veces en el rostro. Se inclinó más para hacerlo, sin embargo, él abrió los ojos de golpe y su mano izquierda se movió con impresionante rapidez, atenazando el cuello de la mujer y presionando con fuerza.

Lyna intentó retroceder y gritar, pero no pudo hacerlo, la mano del soldado apretaba con fiereza su cuello, impidiendo que respirara. Los ojos de James estaban rojos de ira, parecía que no reconocía a nadie, él era otro, un hombre lleno de odio que no mostraba piedad por nada. Lyna estaba aterrada, sus dedos se resbalaban sobre la superficie de esa mano metálica, intentando con todas sus fuerzas soltarse de su agarre, la chica lloraba, y con voz entrecortada le imploraba que la soltara.

-¡P-Por f-fa-favor! – Dijo Lyna sin poder decir nada más.

Con un esfuerzo sobrehumano, Lyna llevó una de sus manos hasta la cara de James y la arañó, sacándolo de su horrible trance ya que esa acción lo volvió a la realidad y soltó inmediatamente a la chica. Ella lo miró con terror y se levantó como pudo, corriendo hasta un rincón de la habitación, cubriendo la cara con sus manos y llorando desconsolada. Bucky jadeó al darse cuenta que había estado a punto de matarla y se sintió culpable por lo que acababa de hacer. ¡Había visto esa expresión antes! En la cara de algunas de sus víctimas. El soldado cerró los ojos y suspiró, levantándose y caminando a toda velocidad hasta dónde se encontraba Lyna hecha un ovillo.

-¡Nena! – Dijo con voz suave tocando su hombro.

-¡Déjame! – Gritó Lyna - ¡No me toques! ¡Aléjate de mí, por favor! – Sollozó.

James no se apartó y suspiró sin soltarla: - Lo siento, yo... - guardó silencio.

-¡Querías matarme! – Lo interrumpió la joven – Vi ese brillo asesino en tus ojos, idéntico al del día del ataque, ¡él día que me secuestraste!

-¡No, yo no deseaba hacerte daño! – Exclamó Bucky abrazándola – Tuve una pesadilla y me llenó de terror, creí que pensabas atacarme, pero no era tu rostro el que vi, era el rostro de otra persona.

Lyna se dio la vuelta para mirarlo y se estremeció. James parecía un animalillo asustado, indefenso y dispuesto a huir a la menor provocación. Sus ojos azules estaban húmedos y brillantes, parecía que el llanto se desataría en cualquier momento. Lyna ya no tuvo corazón para no perdonarlo, se arrojó a sus fuertes brazos y lo besó en todo el rostro. Él la envolvió y dejó que ella le diera amor, ¡lo necesitaba!

-¿Qué fue lo que soñaste? – Preguntó Lyna incorporándose y tendiéndole la mano para que él también se levantara.

Bucky no dijo nada, sólo suspiro y se dejó conducir mansamente hasta el colchón, donde volvieron a echarse y se abrazaron, envolviéndose entre las mantas: - ¿Vas a compartir esa pesadilla conmigo? – Preguntó de nuevo la mujer.

-En mis sueños veía el rostro de un hombre fornido, con gafas redondas y metálicas. El tipo me miraba burlón y decía que yo me convertiría en el nuevo brazo de HYDRA – Jadeó James respirando agitadamente – Había sangre por doquier y se escuchaban los gritos desgarradores de alguien que suplicaba. ¡Quizá era yo! No estoy seguro, pero después, un par de hombres se aproximaron hasta mí, lo único que yo quería era salir de ese sitio y los ataqué, deseaba partirles el cuello – Exclamó mientras cerraba los ojos y se acurrucaba junto a Lyna - ¡Abrázame por favor! – Suplicó – Y no me sueltes, ¡no me sueltes!

-¡Jamás lo haría! – respondió Lyna rodeando a Bucky con sus brazos y cubriendo de besos su rostro – Quizá no entienda perfectamente cómo te sientes, pero sé lo que es vivir una pesadilla. – dijo la chica entre lágrimas – De niña fue muy enfermiza y seguido pasaba los días en el hospital. – exclamó mientras guardaba silencio – La niña debía quedarse sola en la habitación y aunque suplicara porque mamá se quedara con ella, ¡no era posible!

Bucky cerró los ojos e imaginó a la niña Lyna recostada sobre la cama y estirando los brazos suplicando a su madre que no se fuera, pero su madre entre lágrimas abandonaba la habitación sin voltear a verla. La pequeña se quedaba ahí, indefensa y echa un ovillo con los ojos llenos de lágrimas. Quizá él también se veía como un niño indefenso, suplicándole a su madre que no lo abandonara. Ocultó su rostro en el pecho de Lyna y dio rienda suelta a su llanto, ¡necesitaba desahogarse! Necesitaba sacar un poco de ese dolor y ese miedo que lo carcomían por dentro.

La chica lo abrazó con más fuerza y acarició su cabello, lanzó un fuerte suspiró y ella también comenzó a llorar. ¡Le dolía verlo así! Devastado, como un enorme edificio que se yergue majestuoso y que al sentir la furia del terremoto, se desmorona lentamente. A pesar de la mala actitud de James hacia ella, Lyna sentía la necesidad de cuidarlo, de protegerlo, de darle amor. Tenía que decirle que él jamás estaría sólo, pues la tenía a ella y que juntos tratarían de superar sus miedos.

-¡Ya precioso, ya! – suspiró la joven luego de unos minutos de llanto – No estás solo, ¿acaso no me tienes a mi? Jamás voy a dejarte, ¿sabes por qué? – dijo y él levantó el rostro en espera de una respuesta - ¡Porque te amo! – exclamó Lyna besando los labios de James.

Bucky sujetó el rostro de la chica con ambas manos para incrementar la fuerza y la pasión del beso. Él la necesitaba cerca, hasta ahora Lyna era la única que lo había tratado como a un ser humano, no como a un animal o un experimento de laboratorio. Ella le había dado cariño y trataba de comprenderlo, a pesar de la mala manera en la que se habían conocido. Quizá era enfermizo lo que ambos sentían, y en esos momentos solamente se tenían el uno al otro.

-Yo también te amo, Lyna. – dijo James apartándose un poco de los labios de la mujer – Mi hermosa chica de los ojos de cielo, mi mundo entero. – exclamó para volverla a besar con pasión.

-Deberías dormir, James. – exclamó Lyna luego de que su apasionado beso terminara – Necesitas descansar y dormir te ayudará a sentirte mejor.

-¡No, no necesito dormir! – respondió el soldado – Si lo hago las pesadillas volverán a aparecer y no quiero cometer una locura de la cual me arrepienta por la eternidad.

-¡Te cantaré una canción! – dijo la chica acariciando sus cabellos castaños – Mi madre solía cantarme una en las noches de tormenta, cuando los truenos y los rayos me asustaban, o cuando soñaba con fantasmas o seres del más allá. – exclamó Lyna con una sonrisa – Siempre fui una niña asustadiza y miedosa, pero lo superé. Traté de ser valiente, no sólo por mí, sino por aquellos a los que debía brindar mi apoyo y mi ayuda.

-¡Eres muy valiente! – añadió el soldado – El hecho de estar encerrada aquí, junto a un loco como yo, demuestra que tienes valentía. – suspiró el hombre recargando la cabeza en el pecho de Lyna y cerrando sus ojos.

Ella depositó un suave beso en sus labios y siguió acariciando sus cabellos mientras comenzaba a cantar: - Cuando las piedras se fundan con el calor de tu piel. Cuando los años te pudran, en ti yo viviré. – Cantaba la chica con mucho sentimiento - Lo que florezca en tu cuerpo no se podrá marchitar. Los pétalos son los recuerdos, regados con llanto de libertad. El tiempo, los sueños, el llanto de libertad. El viento se lleva las alas del miedo. El tiempo, los sueños, el llanto de libertad. El viento se lleva las alas del miedo (**Escuchar tema del vídeo localizado en la parte inferior**).

https://youtu.be/7fwd7ew5KPE

Lyna continuó cantando y de vez en cuando besaba el rostro de su amado James. Él se mantenía con los ojos cerrados escuchando atentamente la hermosa canción que brotaba de la garganta de la chica. Sus párpados se volvieron más pesados y un profundo sueño lo venció, pero ya no tenía miedo, Lyna estaba a su lado y de alguna manera el se sentía protegido en los brazos de esa mujer a la que amaba.

**********

Bruce dejó caer unas pinzas al suelo y miró a Tony que dormía en un rincón. Habían trabajo por cinco días seguidos, sin dormir. Sólo se turnaban para dar pequeñas siestas de un par de horas o poco menos. Pero el resultado fue mejor de lo que esperaban, pues en esos días de trabajo extenuante y duro, lograron construir los tres trajes que al parecer funcionaban a la perfección. Habían roto su propio record y eso era lo más satisfactorio, ahora era momento de volver a reunirse para idear un plan con el cual poder atacar sin contratiempos a la base de HYDRA en Tungur.

-¿Qué fue eso? – exclamó Tony alarmado al escuchar como las pinzas caían estrepitosamente al piso - ¿Es la segunda guerra mundial?

-¡No mames, Tony! – dijo Bruce entre risas – En ese entonces tu no habías nacido y ese ruido que te despertó, fueron estas pinzas que cayeron de mis manos. – respondió Banner agachándose para recogerlas.

-¿Has hecho más pruebas con los nuevos trajes? – preguntó Tony incorporándose para acercarse al doctor – No supe cuanto tiempo dormí, pero es necesario que estos funcionen bien, ¡no queremos errores! No me gustaría que la misión fuera un fracaso y termináramos muriendo a causa de un nuevo virus y lo peor, ser nosotros quién lo propaguemos por el mundo.

-El traje de Hawkeye funciona a la perfección – Dijo Bruce quitándose las gafas – Te corresponde ahora a ti probar el traje de Steve y el tuyo. ¡Yo muero de sueño! – Bostezó el doctor Banner – Así que si me lo permites, me iré a echar una siesta a tu rincón.

-De cuerdo, Banner – Suspiró Tony entrando en el cuarto de baño – Me lavaré la cara y seguiré con lo mío. ¡Tú ve a descansar! Que lo necesitas.

Bruce se hizo un ovillo en el sillón y de inmediato se quedó dormido, lanzando sonoros ronquidos. Tony salió del baño y se encamino hasta su propio traje para revisarlo y probarlo. ¡Todo estaba perfecto! Era obvio, él lo había diseñado, trabajando en un antiguo traje y modificando algunas funciones. Lo probó, checó su funcionamiento y se vanaglorió por la perfección de su creación.

-Definitivamente ¡soy un genio! - Dijo saliendo de su traje – Ahora vamos a probar el de Rogers y todo estará más que listo para ponernos en acción.

Tony se midió el traje de Steve, por fortuna este se ajustaba al cuerpo de su portador, al igual que el de Hawkeye. Pasó lo mismo que con su armadura, ¡no había ningún problema! El traje era inmejorable, lo más sofisticado en cuestión tecnológica y biológica.

-¡Ponte a temblar, Ekaterina! – Exclamó Tony – Vamos a destruirte y a desmantelar tu laboratorio de "Mi Alegría". No permitiremos que continúes dañando a gente inocente.

Stark se sacó el traje y lo colocó en su lugar mientras tomaba un sándwich frío que estaba en una bandeja. Se dirigió a JARVIS pidiéndole que se comunicara con el resto del equipo y con el doctor Bramson.

-Diles que los espero en la torre dentro de unas tres horas – Finalizó – Después de comer me daré un baño relajante y tomaré una siesta, ¡ha sido demasiado para tan pocos días!

JARVIS hizo lo que Tony la pedía y de inmediato se puso en contacto con el Capitán Rogers, Thor y Hawkeye, así como con el padre de Lyna. El hombre suspiró un poco más aliviado, tenía la esperanza de que su hija aún estuviera viva. Agradeció a la IA por la información y tomó el teléfono para comunicarse con el líder de las Naciones Unidas, para que les diera luz verde y así atacar la base de HYDRA en Tungur.

**********

Bucky despertó y sintió que su estómago rugía, ¡ese olor a comida había despertado su apetito! No tenía idea de cuánto había dormido, pero había tenido un descanso placentero y sus sueños habían sido tranquilos, sin pesadillas. Buscó a Lyna y la descubrió de pie junto a la chimenea. La chica había vuelto a usar ese vestido horrible y llevaba encima un chaleco. Atizaba el fuego de la hoguera y lo alimentaba con varios trozos de madera. James se levantó y buscó su ropa para vestirse, el frió calaba pero podía soportarlo.

-Deberías ponerte un abrigo. – lo regañó Lyna parándose frente a él con las manos en la cintura – Si no lo haces vas a enfermar.

Bucky rodó los ojos, la abrazó y la besó sintiendo la calidez de su cuerpo. Se apartó lentamente y ambos rieron al escuchar el sonido que emitían sus tripas.

-¡Tenemos un día sin comer, mi amor! – dijo la chica mientras se dirigía hasta la chimenea para servirle un plato de atún con papas en salmuera.

-Se mira asqueroso, no tiene muy buena pinta. – exclamó Buck mirando con asco su plato de comida.

-Imagina que es un enorme filete de salmón con una ensalada de verduras mixtas. – añadió Lyna comiendo una papa – Después de todo no sabe tan mal y vamos a acompañar este manjar con una lata de soda.

-De acuerdo, igual tengo hambre. – respondió James comiendo sus papas – Muero de hambre y en esta situación debemos comer todo lo que nos de energía.

-Hay también galletas saladas y maní. – dijo la chica acercándole unas cajas – El maní está un poco rancio pero no sabe tan mal y las galletas están duras y secas. Pero prefiero comer esto a comer lagartijas o escorpiones.

-¡Qué asco! – exclamó el soldado comiendo una galleta – No tienen mal sabor, y como tú, prefiero comer esto que las alimañas. De hecho he pensado en salir de la casa para revisar la zona. – dijo antes de darle otro mordisco a su galleta – La tormenta parece haberse extinguido y si ya no queremos comer cosas rancias o a punto de descomponerse, debemos buscar la manera de alejarnos de aquí para encontrar un sitio más seguro y dónde nos sirvan manjares.

-¡No estamos en una zona VIP! – Se rió Lyna – Estamos en la taiga Rusa, toda la gente que vive aquí son personas humildes, campesinos, pescadores y cazadores – Respondió la chica mirando embelesada la cara de Bucky.

-¡De acuerdo! – Rió James – Al menos que nos sirvan comida más fresca – Comentó ocultando sus verdaderas intenciones – Como sea, voy a salir un rato y trataré de despejar la zona, abrir un camino y revisaré el mapa. Debe haber un pueblo seguro por aquí.

-Tungur no está muy lejos de aquí – Comentó Lyna – Tengo un mapa en mi mochila, el cual marcaba el sitio exacto de la zona dónde nos recibirían – Dijo levantándose de su asiento y hurgando sus cosas - ¡Aquí está! – Exclamó extendiendo el papel a las manos del hombre.

Bucky tomó el mapa y lo revisó atentamente. Lyna no se equivocaba, Tungur estaba cerca, sólo debían tomar otro camino para regresar, ya que él había dado un rodeo, alejándose. El pueblo en el que estaban se trataba de un pequeño poblado de campesinos, ahora fantasma debido a que Ekaterina se empeñaba en usar humanos para sus pruebas biológicas. Aunque primero necesitaba despejar el camino y limpiarlo de nieve.

-Podemos ir a Tungur – Comentó Bucky – Daremos un rodeo – Dijo señalando un punto en el mapa – Y ahí podrás comunicarte con tu familia, para que te rescaten.

-¿Tú vendrás conmigo? – Preguntó Lyna - ¡Puedes venir conmigo a Nueva York! Yo ahí tengo mi departamento y podría trabajar en el hospital para niños con cáncer, dónde mi padre es el director. Es un hospital de beneficencia, igual te podría ayudar a conseguir un empleo – Comentó la mujer – Podrás tener una vida normal, alejado de todo esto, ¿qué dices?

James la miró enternecido a los ojos, ¡todo sonaba tan bien! Una vida perfecta al lado de la mujer perfecta, sin nadie que lo obligara a hacer cosas que él no deseaba, lejos de todo ese infierno, lejos del mal. ¿Acaso él no tenía derecho a ser feliz? ¿Acaso no podría él enmendar sus errores? ¿Acaso no existía una segunda oportunidad para él? La respuesta era más que obvia, ¡no! Él ya estaba condenado, no por él, sino por los demás. Él no podría reintegrarse a una sociedad, porque sería señalado. Él ya estaba marcado y sus acciones hablaban por sí solas. Aunque pidiera perdón, quizá se lo negaran, aunque prometiera cambiar, incluso si les demostraba esos cambios; ¡jamás lo perdonarían y nunca le darían esa anhelada oportunidad!

-Creo que debo salir ahora – Exclamó el hombre sin decir nada respecto a lo que Lyna había comentado.

-¡Está bien! – Dijo Lyna quien terminaba de recoger los restos de comida - ¡No te tardes! – Exclamó al tiempo que depositaba un beso en los labios de James.

Bucky salió, no sin antes colocarse uno de los abrigos ridículos que había encontrado. La prenda entorpecía sus movimientos, pero hacía demasiado frío como para no salir cubierto. Abrió la puerta y un montón de nieve entró en la casa la cual llegó hasta sus rodillas. Lyna contempló la escena y se rió a carcajadas, ¡parecía de película!

-¡Necesito algo para quitar toda esta maldita nieve de la entrada! – Bufó el soldado - ¡Estamos sepultados!

-Creí ver un par de palas detrás de la puerta de la cocina – Comentó la chica señalando el sitio.

James caminó hasta allá y ahí las vio recargadas contra la pared, tomó una y regresó a la entrada para comenzar a remover esos enormes montículos de nieve. Era posible que eso le tomara varias horas pues no tenía un equipo apropiado y parecía que en ese sitio, la gente se las había arreglado de una forma más rudimentaria.

-¡Te ayudaré! – Dijo Lyna tomando la otra pala – Tengo una esperanza y si trabajamos en equipo, ¡pronto nos iremos de aquí a comenzar una nueva vida!

**********

Thor fue el último en entrar a la sala y se dejó caer en un sillón junto a Hawkeye, mientras tomaba un puñado de galletas y las comía descaradamente ante la mirada severa de Steve. Tony se levantó de su silla y tomó la palabra en la reunión, ya que todos estaban esperando que esta comenzara.

-Ahora que estamos aquí reunidos – Comentó Stark – Quiero llamar al doctor Banner, ya que él tiene una noticia importante que comunicarnos.

-Efectivamente – Exclamó Bruce levantándose de su asiento y llegando junto a Tony – Después de cinco días de arduo trabajo, sin comer bien y sin dormir lo necesario. Estamos orgullosos de anunciarles que hemos terminado los trajes con los cuales atacaremos la base de HYDRA en Siberia.

-¡Perfecto! – Dijo Hawkeye con emoción – Ya quiero ver mi traje y usarlo, ¡seguro se adaptará a mi sensual cuerpo y levantará mis glúteos! – Comentó golpeando su trasero.

-¿Aquí nadie puede ser serio? – Preguntó Steve frunciendo aún más el ceño - ¿Qué no tienes respeto por el señor Bramson? – Exclamó Steve - ¡No es un juego! La vida de muchas personas está en peligro. Debemos acudir en su ayuda cuanto antes y también debemos frenar la locura de la doctora Ekaterina.

-¡Yo digo que el viejito tiene razón! – Comentó Thor – Nos hemos mantenido al margen hasta el momento, no queremos levantar sospechas por parte del enemigo. Y parece que la naturaleza se puso de nuestro lado, la tormenta ha cedido, aunque todo este cubierto de nieve...

-¡Ese no será impedimento! – Dijo Iron Man – Tenemos ya todo listo, sólo debemos ¿armar un plan? ¿Cierto, Steve? Tú eres el experto en planes de ataque y esta situación nos obliga a seguir órdenes. Los virus son cosa seria y no queremos un caos mundial.

-Y en manos de esa loca – comentó Bruce – Puede desatarse el apocalipsis.

-¿Podríamos convertirnos en zombies? – Preguntó Clint Barton – Esa duda siempre ha estado en mi cabeza.

-Conociendo a esa mujer – Intervino el Doctor Bramson – Es muy posible que así sea, no sabemos a qué ha estado jugando y no tenemos idea de las mutaciones que ha causado en los virus. Así que su teoría, agente Barton, puede llegar a ser realidad. Pero ustedes impedirán que eso suceda – Finalizó el doctor.

-¿Qué es lo que haremos, Steve? – Preguntó Thor mirando al Capitán - ¡Usted ordene!

Steve meditó unos momentos, debía pensar en algo que HYDRA no esperaba. Estaban ajenos a sus planes y parecían tranquilos. ¡Era momento de un ataque sorpresa! Aunque habían estudiado muy poco la zona debido a esa tormenta que se había desatado. Pero el dron había mandado muchas fotografías de la zona y demasiada información, ya que JARVIS se había encargado de monitorearlo y manipularlo. De esta manera conocían los puntos débiles de la fortaleza de Ekaterina Záitseva.

-Ellos no esperan que nosotros ataquemos, solamente están esperando que el ejército ruso junto a las Naciones Unidas los ataquen. – exclamó Steve – Los Vengadores quedamos fuera del juego, al menos para esta cabeza de HYDRA. La Doctora Záitseva es una mujer muy confiada, lo he podido notar. – comentó Steve.

-¡Se siente la reina del universo! – intervino Tony – Ella cree que puede manipular a todos, pero Záitseva siempre ha sido manipulada. Entonces ¿qué es lo que haremos?

-Tú lo has dicho, Stark. – dijo Rogers – Vamos a manipularla, ¿cómo? Tenemos lo que ella quiere y hará lo que nosotros le ordenemos a cambio de su ¿cómo lo llama?

-¡Tesoro! – exclamó Barton - ¡Mi tesoro!

-Así caerá Ekaterina Záitseva, seducida por los encantos de su tesoro. – exclamó Steve con un sonrisa malévola.

-Pero no debemos confiarnos tanto. – intervino Thor – Tiene un ejército bien armado, virus y su fortaleza parece impenetrable. Debemos andar con cuidado de cualquier manera.

-Thor tiene razón. – dijo Banner – Debemos atacar sí, pero con cautela y ocultos por las sombras.

-Así es. – exclamó Steve – Es por eso que Hulk y Thor serán los primeros en aparecer, para despejar la zona y abrirnos el paso a nosotros y así, todos juntos, entrar en la fortaleza.

-¡Bien dicho, capi! – exclamó Stark – Entonces, ¡manos a la obra!

Steve se puso de pie e inmediatamente JARVIS mostró un mapa de la zona. Todos los Avengers escucharon con atención las indicaciones del Capitán. Si hacían las cosas tal cual se estaban planeando, la misión no fracasaría y ellos saldrían victoriosos. Pero, si daban un paso en falso, todo se vendría abajo y tal como Bruce lo dijo, se desataría un apocalipsis.

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¡Wow! Esto se pone intenso, por un lado los Vengadores planean atacar cuanto antes la base de HYDRA en Siberia y por el otro, Bucky parece que ha decidido qué hacer con Lyna, ¿ustedes creen que ellos dos puedan ser felices juntos? ¿O sólo se trata de un espejismo? Nos acercamos al final de esta historia, así que no se pierdan los últimos capítulos. Espero sus comentarios, votos y reacciones y gracias por leer. ¡Hasta mañana!

#MaryCruz