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In covered


One Shot 30.


      La música de fondo relajante sonaba de aquella radio pequeña del Agente, llenando de una significativa paz que era un tanto extraña cuando eres el asistente de uno de los científicos de mecha corta más importantes de todo el gobierno.

      El llenar informes no era una tarea tan agraciada para Stone, pero hoy despertó con cierto gusto para hacer cualquier cosa con el mejor animo que le resultaba. Así era siempre teniendo a su Doctor a lado, pero por ahora, solo le tocaba esperar que termine su reunión privada para mejorar más su día, y eso, estaba apunto de ser así.

—¡STONE! — grito su jefe de un solo portazo, entrando a su laboratorio, viendo como su aura revelaba que todos sus chacras estaban revueltos a la par, dando le así una energía negativa mucha más densa de la que este tan mal encarado personaje poseía.

      El pobre Agente brinca de su asiento, dejando lo que estaba haciendo para levantarse de inmediato y atender a su mayor.

—¿Si, Doctor? — pregunto, alisándose su traje con sus manos.

      El Doctor dio un bufido de enojo, sentándose con total estrés —¡¿Puedes creerlo?!...Solo....¡¿Puede creer tan aberrante blasfemia que dijo el maldito Doctor Rotten?! — apretó sus reposabrazos con enojo acumulado.

—Heeee...sea lo que sea Doctor, estaré siempre a su favor — sonrió con cariño —pero creo que necesito un paco más de contexto — pidió amablemente.


Flashback.


      La reunión fue con toda calma, llegando ser aburrida para Robotnik, dicho hombre estaba entre la poca multitud de científicos, coroneles e importantes papeles de distintos departamentos. Ivo tan solo se disponía de vez en cuando escuchar al hombre del escenario, con sus manos cruzadas con aire de desinterés.

      Para cuándo todo termina algunos funcionarios se fueron, pero Robotnik decide quedarse hasta el final. Si se iba, al menos tendrá la satisfacción de corregir en la cara del director de aquella monótona y tediosa reunión en las que se dio cuenta de algunas faltas (insignificantes, pero algo era algo. Teniendo algo para que molestar al otro). Justo cuando Robotnik se endereza mejor con la intención de caminar hacia el sujeto es cuando se pone interesante la situación al ver a una de la científicas del establecimiento se acercarse a Robotnik.

—Oh, Doctor, su última investigación sobre aquel ataque terrorista fue tan ingenioso — halago la chica con vibras de completa admiración —Es usted alguien tan sagaz — dice ya con un aliento enamoradizo.

—Pues, claro que lo fue, y por supuesto que lo soy— afirma este con su completa presunción al cielo. Ya había escuchado por mucho tiempo a un idiota hablar, le agrado que su entorno cambiara drásticamente a él por un momento. Ya decía él que algo raro se sentía...pues no estaba en su compañía Stone como para recordarle lo genial que es (aunque él ya lo sabe, es estimulante escucharlo de bocas ajenas)

      Todo comienza a llamar un poco más la atención cuando aquel hombre que dirigió la corta reunión se bajo del podio, viene con disgusto como su interés romántico estaba admirando el trabajo pasado de uno de lo más importantes trabajadores de G.U.M, y que ciertamente no era de su gusto empático, ni social. Se acerca a ellos con ganas de querer llevarse a su amiga de ahí para que dejara de adular aquel ser egocéntrico... pero algo le pico más en las palabras de la joven.

—Usted es tan implacable. Creo que incluso puede hacer lo que sea sin esforzarse mucho ¿No? — sigue con su adulación cuesta arriba, quedando más y más encantada.

      Antes de que Robotnik respondiera a eso, una tercera voz lo interrumpe.

—Por favor...¿Robotnik el mejor? Vamos — exclamó como si de un mal chiste le estuvieran contando.

—¿Disculpe?.... — intervino Ivo ahora con una mueca de desagrado —Admito a veces no leer bien las líneas emocionales de los humanos, pero ahora mismo incluso me repugna el aroma a ludibrio en sus imprecaciones — frunce el ceño, parándose recto en su postura, manteniendo el mismo nivel que el otro —¿De dónde viene tal acusación sarcástica? — gruñó con enfado.

—Doctor...todos sabes que usted con solo apretar un botón puede hacer cinco trabajos a la vez....pero todo gracias a su tecnología — habla Rotten con una sonrisa galardonada.

—¿Quieres saber que más hacen mis creaciones con solo una serie de comandos? — pregunto retóricamente con un gesto de odio, amenazando en pulsar el mando de seguir con sus insolencias.

      El joven se ríe de lado —Si tanto está seguro....demuestre lo — pide sonriente, caminando hacia su amiga para llevársela de los hombros —Haga cualquier trabajo sin ayuda de sus juguetitos Doctor....y le daré mi visto bueno...por ahora....solo lo veo como un pobre vegete que necesita ayuda siempre para sus tareas— termino de hablar, llevándose consigo a la mujer que quedó con ganas de seguir en su casual entrevista.

      La copa que cargaba Robotnik no aguanto más la presión, partiendo de en mil pedazos en la mano de Robotnik, protegido por sus guantes.


Fin del Flashback.



—Ese engreído sin éxito alego que YO no seria nada sin mi tecnología; menospreciándolas llamándolas "juguetitos" GGGRR —gruño apretando sus puños, presionando los botones de sus guantes, apareciendo muchos de sus badniks, salieron de sus puestos de descanso, apuntando a todo de forma amenazadora, Stone se asusta, solo para volverse a colocar donde estaban.

      El Agente se cubre la cabeza, no queriéndose llevar un buen golpe por parte de las creaciones de su jefe.

—Señor....no le haga caso — propuso con una sonrisa de lado, acercándose al otro a sus espaldas con un poco más de seguridad al detallar como Robotnik cerraba los ojos fuertemente, frotándose el entre cejo —Usted sabe que no tiene por qué dejarse influenciar por esos comentarios poco acertados — siguió hablando, tocando su hombro con cierto cuidado, haciéndole saber al Doctor que seguía ahí para él.

—¡Por eso nos encomendé una tarea en particular! — respondió a las millas Ivo, sujetando con cierta fuerza la muñeca de Stone que estaba cerca de él.

      El Agente se da un ligero sobre salto, retorciéndose ligeramente por la presión ejercida.

—¿De...de que habla, Señor? — pregunto con aires de extrañeza.

      Robotnik tan solo le da la espalda a su segundón, encaminando se hacía su consola, presionando con cierta gracia los botones correspondientes.

      Una imagen revela ante los ojos de ambos un par de estadísticas y cálculos de los mismos, siendo todo las acciones y los activos que incrementan con un negocio que no contaba con mucha información al parecer.

—Esto, mi querido secuaz, — miro con acelero al nombrado — es un tráfico de armas. Se dice que son de Brasil, pero no hay mucha información al respecto. Solo se sabe que se mueven entre el manto de la noche, y un despistado cúmulo de carne no supo ser disimulado — sonrió con verdadero cinismo —así que tú y yo lo detendremos ~ — acortó la distancia entre su empleado y él, haciendo que el Agente se le pusiera los pelos de punta —sin tecnología, — se retiro los guantes de control, arrojándolos a otra parte en el suelo —sin los badniks, — siguió aproximándose al moreno, el cual ya estaba contra una pared como era de costumbre a veces —y...sin... errores ~ — gruñó maquiavélico, el Agente traga saliva con nerviosismo —No pienso tolerar ni un solo gramo de irresponsabilidad, ineptitud e incompetencia — poso la palma de sus manos desnudas en la pared, dejando sin huida al pobre agente tembloroso —Así que será mejor que este su energía al ciento por ciento, si es que no quiere una enorme y gigantesca carta de despido el su expediente, Agentecito —se inclina sin poder dejar ni siquiera poder dejar respirar bien a Stone, quien por un momento olvido hacerlo, esto debía ser muy importante para el doctor...de lo contrario, no estaría en la escalas de sus al tope. Acercó su mano adiestrada al cuello del Agente, por un momento se maldijo por el echo de carga corbata, queriendo sentir un poco más del tacto de la mano de Robotnik en él —¿Me doy a entender...Stone? — cuestionó, apretando consideradamente el cuello de su empleado.

—P-Por...por supuesto, Señor — exhalo Stone.

—Bien...ahora ve por mis guantes y guárdalos. Solo porque en esta ocasión no usaremos tecnología, no significa que vamos comportaremos como animales— lo soltó con agresividad, haciendo que Lee sintiera como volvía a sentir aire fresco correr por su nariz y piel...claro que, por las extraño que parezca, también extrañando la cierta cercanía de este, haciendo todo eso a un lado para obedecer la orden de su Señor—¡No me voy depauperar y dejar infravalorar por un par de menciones sin base! — dijo decidido, señalando con su dedo índice a su compañero —¡Así que nada de errores, ni inconvenientes, y pendiente a todo...voy a explicar el plan!... pero será a la antigüita — aclaro con algo de fastidio —Un mapa, pizarra, lápiz y...máximo esfuerzo — narro con seriedad.

      Y fue así como ambos ya estaban embarcados en las profundidades de esta misión. Puede que no sea una de las más importantes que hayan hecho, inclusive puede que no sea una de las más peligrosas, y más difíciles, pero algo si era cierto, sin tecnología...era tener una gran desventajas al estar fuera de la zona de confort de ambos.

      La noche llego en un parpadeo para los señores, todo gracias a que se tomaron su tiempo en su plan maestro, claro que para llegar a dónde estaban pasaron un par de gritos, regaños y frustraciones por parte de Robotnik en el camino de cambiar cinco veces su plan.

—Ok... último repaso — señaló con su vara a la pizarra —entraremos al establecimiento como un par de clientes en busca de matar su aburrimiento, y sus neuronas con alcohol. Después, haremos un poco de ambiente mientras localizamos de manera manual y con supervisión la zona para identificar al sospechoso. Recuerda...lo conocen como el Mosco — enseño por décima vez la imagen del hombre —una vez visto nos quedaremos al pendiente de él, para encontrar el momento indicado y luego capturarlo a como venga lugar...¿Alguna pregunta? — cuestionó precavidamente, y Stone iba a levantar la mano para señalar una observación que tuvo. Robotnik entre fastidiado y molesto tan solo lo ignoro —Bueno, ya que no hay nada más que aportar....¡Manos a la obra!

      Stone se estremece, esto será tan diferente a lo habitual.

      Ambos se arreglan para la ocasión. La palabra "arreglarse" siempre había tenido un sinónimo de vestirse bien, decente, o educadamente, más que nada dependiendo de que tan atildado sea la ocasión, y el lugar...sin embargo, ahora, era literalmente desaliñarse, por así decirlo.

      Stone cambio su traje negro por una camisa casual blanca con una sudadera de cremallera abierta, pantalones de mezclilla y unos zapatos deportivos. El Doctor se dispuso en arreglarse con una camisa de azul oscuro para ponerse encima una chaqueta de cuero negra, pantalones y zapatos del mismo color. Sabe bien que irían a un lugar donde los gérmenes abundan por montón, así que decidió en cambiar sus guantes avanzados (por su parte del trato), a unos de cuero negro relucientes.

—Todo listo para proceder, Señor — señaló Stone, listo para partir.

     Robotnik dio una ligera inhalada para a asentir con seriedad y subirse ambos en el auto de Stone, siendo este mucho más discreto que el laboratorio móvil. El camino fue callado, y sin gran parte que pudieran agregar para el labor.

     El reloj del científico marcaba las diez con treinta. Era muy temprano como para que algo importante pareciera referente a su objetivo, pero no por eso esperarían y bajarán la guardia al momento de entrar.

     Las puertas de la entrada se abren en su bienvenida, siendo esto un completo tumulto descomunal. El lugar estaba lleno de individuos, todos insignificantes para Robotnik.

—Ok, Stone...que la operación comience — avisa este al oído del otro.

—Diez cuatro, Doctor — asiente este para avanzar a la otra fase del plan,..."entrar en ambiente".

     Doctor y Agente se adentraron más en el local. El par tenía un par de pensamientos un poco confusos.

     En el lado de Stone no recuerda la última vez que entre a una discoteca a beber. No era su ambiente, pero si que se ha divertido en una que otra ocasión, así que, no estaba del todo desequilibrado con relación a los lugares así. Robotnik por otro lado...se sentía como estar en un laberinto, a oscuras, y sin piernas con que caminar. Le repugnaba cada parte del sitio. El acumulamiento de personas, el calor en el aire, los olores corporales mezclados con el licor y los perfumes baratos, la suciedad, las luces, TODO. Ivo hizo un gran esfuerzo para contener las ganas de vomitar. Definitivamente esto no era su estilo...el pensar que pudo nada más enviar a uno de sus badniks a esperar sigilosamente al sospechoso y traerlo a él en un abrir y cerrar de ojos lo llenaba de melancolía, pero por eso es que estaba ahí ¿No? Para demostrar que no necesitaba de sus artilugios todo el tiempo porque el se podía hacer valer de si mismo...o eso estaba queriendo demostrar, si a caso y muy en el fundo...creerse lo él mismo.

     La pareja de adultos se aproximaron a la barra de bebidas, penosos por partes iguales, sin saber ahora como seguir disimulado.

—¿Que les sirvo? — interrumpió un hombre con cara de pocos amigos. Sosteniendo un vaso de vidrio que limpiaba con un trapo.

—¿Paseé su tasca una minuta donde alguna consumición no conlleve del desmedido porcentaje del uso del etanol?

     La cara del hombre era todo un poema de la confusión —...¡¿Qué?! — cuestionó la paradójica pregunta de Robotnik.

—¿Tiene algo sin alcohol? — tradujo Stone las palabras del Doctor como era de costumbre.

—Bebidas energizante, agua y refresco — contesta de mala gana el ser.

—Bhag...esas cosas con contenido artificial no hacen más que elevar la presión arterial — rezongo Ivo.

     Stone se alarma un poco cuando escucha al hombre corpulento gruñir del disgusto.

—Doctor~... — comienza susurra en el oído del otro —No creo que debamos molestar a los otros...ya sabe...para no llamar la atención — explica este con algo de suavidad, pues no quiere comprometer el trabajo de hoy, y esta más que claro que sin tecnología será algo más complejo de realizar.

     Robotnik medita un poco el ambiente, resoplando en respuesta.

—Bieeeennn — contesto con desdén —...deme una vaso con agua — pidió simplón.

     El bartender con un gesto de fastidio espero ahora por la respuesta de Lee.

—Oh...una bebida energética para mí, por favor.

     El hombre vuelve a suspirar del fastidio. Dándoles la media vuelta para ir por sus bebidas.

—Par de maricas — murmuró el tipo al tener que servir los vasos más gallina de todos sus años de trabajo.

     Mientras el hombre hacia su trabajo, el par también estaban en ello...

—Señor...todavía nada a la vista por los momentos — afirmó Stone mirando a los lados con disimulado.

—Relájate, Stone...está clase de tratos siempre ocurren cuando la noche está al tope de su trayecto.

     El bartender dejo sus bebidas que fueron bien pagadas. Consumiendo las de golpe. Robotnik no era alguien que acostumbraba a beber licor, y menos hoy que debía de mantener su mente más activa que nunca.

     Pasaron las horas y cada vez llegaban más personas. Ivo se sentía sofocado, no estaba del todo bien ahora, pero al menos el manto de la noche, con la música y oscuridad quiso dar el siguiente paso.

—Separemos — ordeno de repente. Stone casi se cae de su asiento.

—¿Está seguro de eso, jefe? — pregunto el moreno con algo de recelo.

—El sitio se está aglomerado de especímenes inútiles para nosotros — alzo sus cejas en disgusto —Yo ire a la zona V.I.P, tu pasa por los baños. Si algo ilegal se llega a dar esas son las dos primeras zonas nos avisamos.

     Dio la orden sin más. Asintiendo el Agente sereno para aproximarse a donde había sido enviado.

     El entorno en si mismo era un caos, o al menos eso pensaba la mente de Robotnik. El libertinaje del lugar, el consumo de sustancias tanto legales como no, y los impulsos por los resultados de los fármacos, el tabaco y el alcohol hacían que Robotnik se sintiera perdido, e incómodo. De solo pensar que sus badniks podrían hacer esto es un santiamén hacia que su enojo creciera más, no le daría el lujo a ese mal nacido de llamarle débil.

     Se acercó a la zona más pretenciosa como había dicho, el morbo no descendía ni siquiera ahí.

     Parejas de todos los sexos restregaban su desenfrenado gusto carnal por el contacto labial. Besándose y manoseándose en los lugares más oscuros de la zona - No lo suficientemente oscuros - objeto Ivo en su cabeza.

     Se adentro un poco más allá de lo que la cinta permitía con su sigilo, las luces neón resplandecían toda la habitación, con tonalidades sensuales que llamaba la atención de los espectadores, los mobiliarios despampanantes con la que se apoyaban y dejaban sus consumos los presentes tenían la particularidad de ser de un tamaño mucho más altos de lo que realmente deberían de ser.

     Robotnik padeció de su dificultoso inconveniente experimental emocional, sintiéndose algo pequeño con aquellas mesas y asientos de alta estatura, usadas por individuos con una falta notoria de neuronas y sobriedad en esos instantes, pero nada sospechoso, y todos los que lo rodeaban no se parecía al Mosco, solo personas devorándose la cara con un fervor como si su vidas dependieran de ellos, junto con los demás que inhalaban cosas por sus narices.

—Que desapacible — expreso su disgusto el científico, sacudiendo su chaqueta de cuero para dar la media vuelta e irse.

*ACHUU*

     Un estornudo resonó por toda la pequeña área. Uno de los adictos que estaban tuvo la maravillosa idea de meterse polvo de Ángel y caspa del Diablo al mismo tiempo, no hizo más que irritar su pobre nariz adolorida, estornudando furiosamente hasta llegar al punto de derramar algo de sangre, todo bien hasta aquí se podría decir, pero no contaba que aquel acto sucedió literalmente en una mesa alta, cayendo residuos de ambas drogas directo a la cara de Ivo, adentrándose rápidamente a su sistema.

     Este en su desesperación se frota la nariz, inhalando el poco aire limpio que ya no quedaba. Su órgano olfatorio sufrió de las peores irritaciones que ha experimentado. Quiso estornudar, pero no lo logro, recibiendo aquel sentimiento frustrante de no poder sacar el aire adulterado de sus fosas nasales, con una molestia más que doloroso.

     Salió con los mil demonios en su cabeza, dirigiéndose al baño con la intención de retirar lo que sea que tuviera en la cara. Entro como alma que se la lleva el diablo, chocando abruptamente con alguien que salió del cuarto de servicio.

—¡Maldita, excusa de ser-!...oh...solo eres tú — se calmó hasta soltar toda su ira con Stone quien había olvidado que había mandado al baño.

—¡Doctor! — exclamó el joven preocupado que noto la alteración de Robotnik. Sin embargo, su preocupación excedió a escalones ásperos apenas detallo como en el rostro del Doctor, justo encima de su bigote había residuos casi inexistente pero si visibles de alguna especie de partículas de color blanquecino —¡¿Está bien?! ¡¿Se encuentra bien?! — pregunto preocupado, tomando al Doctor de sus hombros, acción que tomo al Doctor por sorpresa, se estaba sintiendo...diferente.

     Robotnik no contesto, apartando al otro de un solo manotazo para dirigirse a los lavamanos.

—¡Ah! — rezongo el Doctor harto, quitándose los guantes para lavarse la cara con más comodidad —¡¿Nada aún?! — hablo entre dientes, echándose con ayuda de sus manos el agua a la cara.

—No, Señor — fue todo lo que contesto Stone, con una comunicación entre preocupado y decaído.

     El Doctor levanta la cara, mirando su reflejo en aquel baño en deplorables condiciones. Los primeros mechones de su cabello descendían por su frente, con algo de humedad al igual que su bigote, enojando todavía más al científico al arruinar su estilo. Se peina como puede, arreglándose lo mejor posible.

     Stone se acerca al Doctor, detallando como sus pupilas estaban considerablemente dilatadas, sus ojos parecían negros ahora. Lee traga grueso, si tiene que adivinar...diría que el Doctor estaba en una de las etapas del inicio de sentirse drogado.

—...¿Algún comportamiento sospechoso? — murmuró el Doctor con discreción, colocándose sus guantes luego de haberse secado.

—No, Doctor — responde algo entristecido.

     Ivo gruñe. Sentándose un poco entre los fregaderos, meditando la situación actual. No pasó ni cinco segundos cuando el Doctor empezó a sentirse raro. Paso de estar pensando a sentir que sus dedos se volvían serpientes, y un hormigueo sin igual el su rostro, miro a Stone, y por alguna razon estaba cambiando de colores, paso de tener su tono moreno a un color blanco, pasando azul, y luego morado.

—¿Doctor...Se EnCu-EnTrA-bIeN? — ahora escuchaba al Agente, como si una mezcla de estática y saturación estaba en su habla.

     ¿Que le pasaba?

     Robotnik pierde algunos segundos al intentar regresar, volviendo en si apenas froto sus ojos con la desesperación de regresar a la realidad.

—Stone....— comienza Ivo algo asustado y avergonzado —creo que estoy sufriendo alguna ralea de adormecimiento o viaje por alguna variante de narcóticos — argumento el hombre con los ojos algo rojos, empezando a ponerse un tanto llorosos para pasar su mano y hacer como si estuviera bien otra vez.

—Ay, Señor — suspiro preocupado —No podemos seguir así...por favor, abortemos esta misión; podemos seguir en otra ocasión, pero usted estando en esta condición no — imploro el joven —¿Cómo fue que llegó en este estado, por cierto?

—¡El como, no importa! — rezongo —¡Y el detener esto tan solo haría darle la razón a ese desperdicio de oxígeno! — contradijo más molesto.

     Stone no hace más que hacer lo que mejor hace, quedarse callado y preocuparse por su jefe en silencio.

—Solo...ahg~ — resoplo entre un suspiro, volviéndose a frotar los ojos, sintiendo un pequeño mareo nauseabundo —continuemos — fue su única orden.

     El Agente asiente con su ligera burbuja de angustia en su pecho, no teniendo más que seguir a ciegas al Doc.

     Salen del cuarto de baño y.... wouuu~

     Los colores vivos y neón de las paredes parecían que hablaban con Robotnik, señalando cosas y resaltando como un par de rotuladores en las caras de los demás. El Doctor parpadea un par de veces, frotando sus globos oculares otra vez, queriendo despejar su mente, pero no sirvió de nada.

—¿Doctor...? — escucho a la lejanía al Agente, a pesar de tenerlo literalmente al frente de él —¿Está seguro de que se siente bien? — hablo Lee, Ivo lo mira con detenimiento, detallando como en el rostro del más bajo se dibujan garabatos, dibujos de café, símbolos de cariño, junto con la palabra adulador junto a su lado, apuntando hacia él, con la asignatura de "Fan #1"

     El ritmo cardíaco del médico se eleva, su presión arterial aumenta, sus pupilas están dilatadas, siente que sus oídos se tasan por un momento. En definitiva no le haya el sentido de perder la conciencia es digno de relajación, estuvo a segundos de un ataque de pánico, hasta que...

     Su sospechoso sale de la oscuridad, acercándose a un hombre para hablar en su oído algo que Robotnik no podía escuchar.

     Abre sus ojos de la impresión, Stone lo nota, mirando exactamente a dónde estaba posando su mirada el Doc, este al igual que Robotnik se sorprende, ya lo localizaron....pero no estaban del todo seguro en seguir exactamente como lo habían planeado con el Doctor así de intoxicado.

     Robotnik ve como el sujeto tenía la intención de salir al entregarle un sobre al otro. Mirando de un lado a otro, vigilando que nadie husmee.

     La hiperactividad de Robotnik hizo que tomara a Stone del cuello de la camisa, obligándolo a salir del establecimiento de golpe en la parta trasera, justo en un callejón, Robotnik mira sobre su hombro y ve que el tipo de apoco se acerca a ellos sin levantar sospechas de nadie mas que de ellos.

     Empuja a Stone algo más alejada de la puerta, pegando se a él con el propósito de estar más ocultos.

—El intercambio no debería de ser ahora, sino dentro de un par de horas. No podemos arrestarlo sin las pruebas en la mano — gruñó a la cara de Stone quien lo aprisionaba con su cuerpo y la pared —quedaría impune.

—Debe de salir de aquí antes que se de cuenta de-

     La puerta estaba siendo abierta, no estaban seguros si se trataba de él u otro individuo, pero el asomarse le costaría toda la misión de hoy.

—¿Doc, que hacemos? — susurro preocupado Stone.

     Ellos dos solos, en un lugar a oscuras podría parecerse sospechoso como raro, pero podría ser peligroso. La mente de Robotnik empezó a entrecortarse, pasando por su mente cientos y cientos de acontecimientos e ideas que podrían ayudarlos o por otro lado, perjudicarlos.

     Miro a Stone que seguía sujetándolos de los hombros, empujándolo más fuerte a la pared, sintiendo la presión entre su cuerpo, la ropa y sus guantes que crujían.

     Los alucinógenos que hacían que la cabeza de Robotnik dar vueltas le hizo chocar con un ingenio con el que su mente sobria nunca pudo de alguna manera procesarlo, garabateando en la cara de Stone su posible solución

     Empujó aún más fuerte a Stone contra la pared, teniendo las pisadas del sospechoso sobre él que estaba a nada de ellos. El Doctor se pegó más a su Agente, sin posibilidad de moverse, haciendo que el joven se estremeciera.

     Se pero a su odio para informarle a Stone lo que ocurriría, siendo esto un:

—Espero que sea de mente abierta, Agente — fue todo lo que pronunció paro tomar las solapas del Agente y zampar su boca contra la suya en un beso fuerte y forzado.

     El impacto de Stone fue tanto que sus ojos casi se salen de sus orbitas. Si no fuera porque el Doctor lo tenía bien sujeto se fuera caído. No supo exactamente que hacer, tan solo escuchar los pasos que se acercan más a ellos lo obligó a cerrar los ojos, posando sus manos temblorosas en el pecho de Robotnik como alguna especie de acaricia, sus piernas temblaban, flaqueando tanto que pensó que no podría con su propio peso. Esto no era posible...

     En un punto el Doctor se pegó más a su Agente, haciendo que se le escapara un gemido involuntario a Stone por la presión de sus entrepiernas.

     Ambos se dan cuenta que el Mosco los paso por un lado, ignorando por completo el hecho de que una pareja solo hacía de las suyas en un sitio oscuro, despegando la mirada a ambos al no querer ver eso.

     Doctor y Agente se separan con un fuerte tronido de sus labios, escapándole a ambos un suspiro de alivio al volver a respirar. El primero en recuperar la conciencia del asunto fue Robotnik, quien sin esperar más se separó de Stone, mirando con cuidado al comienzo del callejón para detallar que tuvo su objetivo.

—Vamos, Stone, no podemos perderlo — ordeno, ignorando por completo el echo de que Stone estaba todavía en una perfecta combinación entre trance y shock.

     Robotnik...lo...ha...besado...

     ¿Que clase de sueño estaba teniendo ahora mismo como para no querer despertar?

—¡Stone, reacciona. Perdemos contacto visual! — hablo alterado el más alto, saliendo de su escondite para dirigirse a pie detrás del traficante.

     El moreno al fin de mover de un lado a otro su cabeza sigue a su jefe, quedando todavía inquieto por lo acontecido pero...tratando de ignorarlo, así como lo hace su jefe ahora.

     Pasaron de estar en un callejón a un parque desolado. A la lejanía se podía ver cómo el hombre se encontraba con otro más, saludándose para sentarse en un banco y hablar, posiblemente planificando algo, pero no estaban lo suficientemente cerca como para escucharlos.

     Se quedaron detrás de unos arbustos, Robotnik mirando cómo puede a los hombres con un par de binoculares, y Stone atrás, procesando todo todavía, con su cara más roja que un tomate.

     Pasaron un par de minutos en silencio que se hicieron eternos para los dos, hasta que uno decidió romper aquella tortura.

—Me absoluto contigo, Agente... — dijo Ivo sin mirar a Stone, con su mirada puesta al frente.

     Este en respuesta tartamudea un poco antes de responder.

—N-No...no se preocupe, Señor — sonríe este, nervioso y algo temeroso por alguna razón —Sé que...lo hizo por el bien de la misión....¿No? — sus mejillas se colocaron aún más.

—En efecto...— deja atrás los binoculares para aclarar un poco los ojos, su alucinógeno todavía no lo dejaba en paz —Paseando por aquel deplorable lugar, pude analizar que todo comportamiento inapropiado, no sé porque, pero que de alguna manera esta normalizado por los demás, haciendo que terceros que estén presente hagan lo más posible en evitar la mirada hacia esas personas con comportamientos ninfómanos,...por eso fue lo único que se me ocurrió — aclaro de todas formas el mayor de ambos —Así que espero que lo entiendas antes de formar una epístola al departamento de recursos humanos.

     Stone se ríe, obviamente estaba bromeando. No existe recursos humanos en un lugar donde a veces la corrupción y la avaricia reina, además...nada ni nadie podría hacer que despidan a Robotnik, después de todo, es más fácil reemplazar a un Agente que el mismísimo Doctor Robotnik.

—No se preocupe Doctor...está...bien — hablo casi en un suspiro, dejando en claro que ambos estaban bien.

     La embrollo que ambos sentían se dispersó, dejando ahora su concentración en lo que verdaderamente importa ahora.

     Los sujetos se alejan más, obligándo a nuestros compañeros tener que seguirlos.

     Su sigilo era prioridad, pero no era el fuerte de Robotnik en su estado. Volvió a marearse, viendo casi pajaritos en su alrededor.

     Stone se preocupa, ayudando al mayor a estabilizarse, apoyando al Doctor a un árbol, mientras pasaba su momentáneo mareo.

—Doctor...¿Cómo se siente? — pregunta Stone con inquietud —¿Cuantos dedos ves? — cuestionó, mostrando dos de sus dedos para verificar la visión de su jefe.

Robotnik con la mirada confusa mira con esfuerzo a Stone....viendo ¿Dos?...¿Tres? No, no...cuatro de ellos ahora mismo.

—Aaahhh~....¿...Ocho? — respondió más con duda que seguro.

Stone mira sus extremidades con recelo, observando de nuevo a Ivo.

—Oh, Dios... — suspira el pobre hombre.

     Pasos resuenan cerca de ellos. Sus sospechosos se acercan. Correr ahora a la vista es una alerta segura, y no tan hábiles al ahora poseer a un Doctor con los sentidos por la mitad. Solo algo podría ser útil.

—Doctor, entonces esta seguro que nuestra última táctica fue única y exclusivamente para ayudarnos a ser sigilosos ¿No?

—Pues claro que lo fue, idiota — reafirma algo irritado.

—Bien, porque volverá a pasar — advierte

—¿Que diablos-?

     No dio tiempo ni siquiera para tomar algo de aire para el Doctor, sintiendo como Stone empujaba los hombros de Ivo hacia el árbol, tomándolo del cuello para plantarle un beso sin más. El que ahora estaba estupefacto era Robotnik, pegando sus manos al árbol de los nervios, su mal viaje volvió a invadir su prodigio cabeza, llevándolo a una expedición adormecedora por su cuerpo, tomando de apoco la cintura del Agente para mejor disimulo, perdiéndose en el viaje que aquel adormecedor le daba.

     Jurarían ambos que en algún punto...olvidaron por completo que estaban fingiendo.

     Está...segunda actuación fue mucha más convincente que la anterior. Moviendo sus bocas como si de verdad esto es algo que ya hubiera hecho, algo que en realidad no es así.

     "Ew...vayan a un hotel" escucharon los Agentes en cubierto, abriendo ambos los ojos y mirar en dirección al tipo que ahora estaba acompañado, ambos cargando un par de bolsos en sus hombros.

—¿Armamento sospechoso? — pregunto Stone, bajando los brazos de Ivo que apenas ahora se daba cuenta que no lo había soltando.

—Armamento sospechoso — afirmo serio el doctor. Escuchando ambos sacar el seguro de sus armas.

     Teniendo a los líderes del tráfico, junto con las pruebas a la mano, perfecto momento para arremeter contra ellos.

     Fue de cierto sentido fácil. Querían detenerlos de una manera amistosa el Agente, pero Robotnik aún en su mundo caótico en la cabeza apunto directo a sus tobillos.

     Bueno...que importaba era que todo salió a pedir de boca. No exactamente como lo planeaban, pero algo salió.

    Robotnik tuvo su propósito y humilló a él bastardo de Rotten como quiso, sin objeción alguna.

—¡En tu fisionomía, borrico! — encaro aquel bobalicón que osó en desafiar su intelecto y audacia.

     Rotten no hizo más que gruñir y aceptar que...el Doctor si podía hacer algo con sus manos a demás de crear.

    El hombre se fue de las mil sonrisas diabólicas.

—Él es taaaan impresionante ¿No es así?~ — anhelo con aire de admiración la chica de antes, haciendo que Rotten rodará los ojos del disgusto.

    Dejando ahora Stone. Con los pensamientos revueltos y el corazón a la mano cada que recuerda lo sucedido, meditando una y otra vez las escenas en su cabeza, sentado en su silla, perdido en sus voces mentales. Escucha la puerta del laboratorio abrirse, mirando de reojo a su jefe, quien le da una mirada directa, este se estremece, esperando alguna orden o insulto que ahora tendría Ivo para él.

—Esto....nunca....paso — aclaro con cierto rubor el su cara.

—A-Ah claro, Señor. Lo que usted diga — sonrió nervioso el Agente.

—Bien...porque quiero...que quede claro...que yo estaba alucinado, así que "situaciones desesperadas, requieren de medidas desesperadas" — dijo aquel refrán. Se inclino el más alto a Stone, atrapando lo en su asiento, soportando se con su mano adiestrada en el espaldar del asiento —¿Lo ah entendido...Agente? — advirtió el Doctor con un tono amenazador.

—S-si, si, si. Claro, Doctor. No tiene que repetirme lo, si — asiente varias veces el pobre joven.

—Bien~ — gruñe cerca de su cara, frunciendo el ceño, para alejarse y seguir como si nada hubiera pasado.

    Stone siente que respira nuevamente, casi desmayándose, por un momento se sintió vivir aquel...acontecimiento tan ameno que adorara eternamente en silencio.

    El Doctor se da la media vuelta, retirándose del cuarto para perderse en los oscuros pasillos del laboratorio...esbozando una pequeña pero sutil sonrisa para él y solo para él, siendo bien escondida por su pronunciado bigote.











Luego de un tiempo siento que pude hacer un mejor trabajo, pero últimamente mis ánimos no son los mejores, pero con cada paso que damos siempre sera con la mejor intención de mejorar, espero que en el siguiente sea mejor, pero bueno, nos veremos a la próxima, bye bye~

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