003. No Te Alejes De Mí
Chapter Three
d o n o t g o a w a y f r o m m e
❣ HAN SUNHYE ❣
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Subo y bajo mí pierna mientras doy un vistazo al espacioso lugar, estoy sentada esperando que sea mí turno para entrar a la oficina del CEO en HYBE, no tenía la menor idea de para que me habían llamado. Además de que solo me había cruzado un par de veces con el CEO por lo pasillos de la empresa, ya sea cuándo venía a ver las prácticas de mis amigos o simplemente haciendo una leve visita.
— ¿SunHye? —escucho que me llaman, pienso que es mí turno así que me levanto de dónde estaba, giro mí cabeza pero con quién me encuentro es con NamJoon— ¿Qué haces aquí? No nos avisaste que vendrías o bueno, JungKook no nos avisó
— Oh no, en realidad para su mala suerte no eh venido a verles —le digo con burla.
— Ah, rompes mí corazón, Hye
— Bueno, el CEO me ha dicho que debía venir —me mira extrañado y alzo los hombros— no tengo idea de que quiere hablar, pero aquí me tienes
NamJoon iba a decir algo, pero antes de eso una voz nos interrumpió.
— Señorita Han SunHye, es su turno —le asentí en respuesta.
— Tengo que ir —le digo a Nam.
— Vale, también tengo que irme se supone que solo iría al baño. Espero que pases por la sala de ensayos, han pasado dos semanas desde que nos vimos la última vez y creo que a los chicos les haría bien verte, aún más a JungKook —asentí sin comprender muy bien eso último.
— Nos vemos luego —me despedí y comencé a caminar en dirección opuesta a la de él.
O tal vez no.
Una vez que estoy dentro de la —gran— oficina, el CEO me indica sentarme frente a él y eso hago.
— Me alegro que por fin podamos tener una plática cómo se debe, señorita Han —dice con una sonrisa que a mí parecer se ve muy falsa.
— Uh, eso creo. ¿De qué quería hablarme?
— Directo al punto —vuelve a sonreír— bueno si ese caso, ¿JungKook te ha estado ignorando, no es así? —asiento— eso es porque el a elegido
— ¿Elegido? —pregunto confundida.
— Así es, su rendimiento había estado bajando los últimos meses, meses de los cuáles tu tuviste mucho que ver —lo miro sin entender, ¿A dónde quiere llegar con esto?— gracias a qué tú eres una interrupción para su vida como idol tuvo un castigo y ahora tiene que esforzarse el doble que los demás, más horas de práctica igual a menos horas de sueño, ¿Eso te parece justo?
— ¡Claro que no! —me levanté de mí asiento— ¿Cómo puede hacerle eso?
— No, querida —su mirada se oscurece y me dan escalofríos, vaya monstruo— siéntate y déjame continuar —le hago caso— en fin, le dí a elegir. Su novia o su carrera
— No soy su novia —lo interrumpí y me dió una mala mirada.
— Como sea, podría adivinar que fue lo que prefirió
"Su carrera como idol..."
Esas palabras hicieron que mí corazón se estrujara y lo peor de todo es que no sabía el porqué. Creo que una parte de mí tenía la esperanza de que eligiera a su mejor amiga, pero a la vez también pienso que eso sería un pensamiento egoísta de mí parte.
JungKook y los chicos habían pasado por mucho para llegar hasta este punto y estoy feliz por ello, así que supongo sé lo que debo hacer.
— Me está queriendo decir que...
— Que te alejes de él —me interrumpió y yo tragué saliva, algo que se me dificultó— desaparece de su vida... Y no porque lo diga yo, él ya tomó su decisión y lamentablemente, para ti, tú no formas parte de ella
Y lo había entendido perfecto.
Me volví a levantar de mi asiento— De acuerdo, lo haré —solté con el rostro lo más neutro posible, fingiendo que no sentía nada en absoluto por esa terrible "charla"— me alejaré de Jeon JungKook y no voy a interferir más en su carrera. Si eso era todo lo que quería hablar conmigo entonces me retiraré —caminé hacía la puerta y abrí, pero antes de salir me detuve al escucharlo hablar de nuevo.
— Antes de que se vaya, señorita Han —me volteé— le agradezco mucho su cooperación así que por favor tome ésto en muestra de agradecimiento —el hombre que se encontraba a su lado, supongo era su asistente, se acercó hasta mí y me mostró lo que tenía en sus manos.
— ¿Boletos de avión? —solté incrédula— Pff, ahora me está pidiendo que me vaya d país
— Solo serán una pequeñas vacaciones en Italia, deberías estar feliz —Italia— tú mejor amigo no era muy discreto al hablar sobre ti, tiene buenos gustos déjeme decirle
— Eso ya lo sé
— De acuerdo, entonces tómalo —insitó.
— No lo quiero, prefiero no aceptar nada que venga de usted —me doy vuelta y está vez comienzo a caminar por los pasillos.
— ¡Señorita SunHye! —el mismo hombre que se encontraba en la oficina llega hasta mí— por favor acepte la oferta del señor —se inclina al mismo tiempo que intenta entregarme los boletos y niego con la cabeza sin aceptar— se lo suplico, el señor me dijo que si ni intentará volver si tenía los boletos
— ¿Te amenazó? —se quedó callado.
Que monstruo.
Ese CEO sin duda es el monstruo, en todas sus letras.
Solté un suspiro pesado y estiré mí mano para tomar los boletos de avión— está bien
— ¡Muchas gracias, señorita! —hice una mueca ante el seudónimo, no me gustaba para nada pero supongo y tiene que ver con sus trabajo.
— ¿No hay de que? Supongo, me iré ahora —él asintió y seguí caminando.
Caminé y caminé hasta que llegué al lugar que debería estar tratando de evitar, la sala de ensayos. Se escuchaba "Permission To Dance" a todo volúmen por lo que supuse aún seguían practicando. ¿JungKook tendrá que quedarse después de esas prácticas con los demás? La respuesta me tenía agobiada Y más aún porque era mí culpa, mí cuerpo me pedía entrar y saludar o quizá ver por última vez a los chicos, pero mí mente decía totalmente lo contrario. Haciéndole caso a mí mente, me fuí de allí.
Dos días después...
Observé por última vez mí apartamento, estaba vacío y algunos muebles cubiertos con una manta blanca. Tenía todo listo, llevaba mis maletas conmigo.
Salí del lugar y cerré la puerta.
Estaba lista o eso creo, hoy saldría mí vuelo a Italia. Lamentablemente me tendría que ir más pronto de lo que creí, no debí haber aceptado. Después de haber tomado los boletos y salir de agencia, llegué a la conclusión de que probablemente todo había sido tan solo un show para que yo me viera resignada a aceptar la absurda oferta de irme del país. Como lo dijo el monstruo, digo, el CEO; "JungKook no es muy discreto", maldito sea él por hablar de más y también maldito sea mí corazón de pollo que me hacía imposible negarme a algo cuándo se le veía en apuros o terriblemente mal.
Por eso los chicos siempre lograban chantajearme en todo, ugh, que molesto.
SunHye, tenemos que redimirnos.
Si, después de todo comenzaríamos una nueva vida.
No seas dramática, solo será un tiempo y volveremos.
Cierto, no es como si pudiera quedarme a vivir para siempre en Italia, con trabajo sobrevivía aquí en Corea. Pero bueno, es esa maldición de ser un jóven.
Adiós vida en Corea, adiós chicos y adiós al delicioso ramen que preparaba la vecina del otro edificio —como me duele alejarme de eso— y... Adiós, Jeon JungKook.
Dramática.
Seh, esa palabra me define a la perfección.
— SunHye niña —me volteo en su dirección y veo a mí vecina favorita— ¿Te mudas?
— Algo así —me rasco la nuca— en realidad me voy de vacaciones, creo
— ¡¿De verdad?! —asentí— ¡Que bien por ti! Ya era hora de que te tomarás un descanso, aún eres muy chica para tratar de manejar esta vida de adulto
— Supongo que tiene razón —le sonreí levemente.
— ¿Y a dónde te vas?
— Mh, Italia
— ¡¿QUÉ?! ¿Enserio? —pregunta sin poder creerlo y vuelvo a asentir— vaya, no pensé que fueras a salir del país pero igual estoy feliz por ti. Uh, espera aquí, te daré algo antes —se metió corriendo a su casa, esa mujer, tiene cuerpo de grande pero el alma de un niño. Vuelve a salir y la veo con algo entre las manos, oh por favor díganme que es lo que creo que es— sé que te encanta mí esquisto ramen, así que aquí tiene un poco para el camino
Mis ojos se iluminan— ¡Ah! ¡Muchas gracias! Sin duda alguna la voy a extrañar mucho, señora Lim —hago un mohín.
— Claro, me extrañarás a mí y no mí ramen, ¿Cierto? —suelto una risa inocente.
Escucho como un auto suena y me doy cuenta que es mí taxi.
— Uh, me tengo que ir —le digo y ella sonríe triste.
— Te vamos a extrañar mucho por aquí, SunHye
— Yo también lo haré y créame que volveré más pronto de lo que cree —le sonreí— hasta luego
Nos despedimos y terminé subiendo al coche. Miraba las calles de la ciudad mientras estábamos avanzando, saqué mí teléfono y entré a los chats para ver el de JungKook.
Aún no lo había visto y eso por una parte me decepcionaba, y por otra, me tranquilizaba. Creo que lo mejor será que aún no lo vea, porque quizá sospecharía de algo y en mí mente —quiero esperar— que tal vez haría algo al respecto, una llamada, un mensaje o incluso una visita... Aunque la verdad, ya no sé que esperar de su parte.
❣ JEON JUNGKOOK ❣
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Por fin, día que estaba esperando con ansias, vacaciones. Y no, no lo decía con malas intenciones, solo lo deseaba tanto para poder descansar aunque sea unos días. Los chicos estaban de la misma manera que yo, emocionados.
Nos habían dado el permiso de pasar las fiestas con nuestra familia y amigos, algo que no habíamos hecho durando ya tiempo pasado y algo que sin duda cada uno de nosotros necesitaba. Otra noticia más, la empresa nos había dado el permiso de crear nuestras cuentas de instagram, así lo hicimos y al menos podríamos seguir publicando para ARMY.
Eso era fantástico.
Lo que no era fantástico es que SunHye se había desaparecido hace seis malditos meses en los cuales no había sabido nada de ella en absoluto, ¡Ni siquiera los chicos! A excepción de Nam hyung, nos dijo que la última vez que la vió fue en la empresa y que el CEO habló con ella, no entendía nada e incluso intenté preguntando al mismo CEO pero jamás me dijo algo que pudiera ayudarme a encontrarla. Además de que tampoco podía llamarle o mandarle algún mensaje... Me bloqueó, igual que a cada uno de los chicos.
No tenía mí teléfono por lo cuál no pude comunicarme en ningún momento con ella y explicarle un poco lo que pasaba, sé que lo entendería porque es SunHye, mi mejor amiga...
Mí mejor amiga.
Claro.
Dos días después me devolvieron mí celular y allí fue cuando leí el mensaje que Sun me había enviado, lo peor de todo es que parecía una jodida despedida y no sabía el porqué de ello. Los chicos me dijeron que también les mandó algo similar, me ponía los nervios de punta.
Pero hoy por fin iba poder ir a visitarla a su casa, eso era lo primero que haría.
Me despedí de los chicos y me fuí directo a su apartamento, antes de salir me coloqué una gorra junto a un tapabocas negro. Caminé hasta llegar frente al edificio pero antes de entrar decidí preguntar si SunHye se encontraba en casa a una persona que se me hizo conocida.
— ¡Señora Lim! —voltea en mí dirección y yo camino hasta ella, las veces que había venido a la casa de SunHye me topé con la señora Lim y supe que era la vecina de Sun, también tuve el honor de poder probar su delicioso ramen.
— ¡Jovencito! Que bueno es verte por aquí, pensé que ya no volverías por como SunHye no se encontraba aquí —fruncí el ceño.
— SunHye... ¿No está aquí? —pregunto confundido.
— ¡Oh! ¿No lo sabías? —negué— la pequeña Sun se fue de viaje a Italia hace seis meses, pensé que lo sabías como ustedes eran muy cercanos y... —dejé de prestar atención a lo que decía, ¿Qué SunHye que? ¿Italia? Que demonios.
— Yo... Uh, necesito irme —le interrumpí en su discurso.
— De acuerdo —me dió una sonrisa triste, como si supiera lo que pasaba por mí mente.
Volví al auto a paso apresurado tratando de procesar qué era lo que acababa de escuchar y si había sido verdad o todo obra de mí imaginación, esperaba que fuera lo último. Le marqué a los chicos en la llamada grupal.
— Espero que la razón de tú llamada sea buena porque estaba degustando mí comida pacíficamente —se queja YoonGi.
— ¡JungKookie ya nos extraña! —grita Hope.
— ¡No lo grites! —se queja NamJoon.
— ¡Tú tampoco lo hagas! —esta vez lo hace TaeHyung.
— ¡Todos lo están haciendo! —se une a la sesión de gritos JiMin.
— Ninguno lo haga, estúpidos, tengo los audífonos puestos —empieza a dar su discurso SeokJin.
— SunHye se fue —eso logra que todos se queden en silencio.
— ¿Qué dices? —pregunta NamJoon.
— Han SunHye se fue y no nos dijo nada —vuelvo a repetir— por eso nos mandó esos mensajes extraños
Escucho como del otro lado de la línea TaeHyung suelta un suspiro de ¿Alivio?
— Me alegra que haya sido eso y no algo mucho peor de lo que imaginaba —dice.
— ¿Qué dices, Kim TaeHyung? Ni siquiera pienses en lo que creo que piensas —le regaña Jin.
— ¿Pero por qué nos bloqueó? —todos nos quedamos pensando ante la pregunta de YoonGi.
— ¿Habrá pasado algo?
— No tengo ni la menor idea, HoSeok —contesto— pero estoy pensando en hacer algo loco
— ¿Qué piensas?
— ¡NamJoon! Nunca le hagas esa pregunta porque luego la respuesta es simplemente...
Antes de que JiMin siguiera hablando lo interrumpí.
— Iré a Italia...
❣ HAN SUNHYE ❣
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Una semana después...
— SunHye, apresurate o no llegaremos! —grita Amelia y yo corro aún más rápido.
— ¡Voy lo más rápido que puedo! Además no es mi culpa, tú fuiste la que se levantó tarde
— En mí defensa...
— Estabas hablando con Alessandro, si si —la interrumpo sabiendo la excusa que me iba a dar— de igual manera ni sé para que nos apresuramos, ambas sabemos que empezaron sin nosotras
— Dijo Alessandro que aún no llegaban todos, así que no somos las únicas y no quiero ser las últimas. Ahora deja de quejarte y mueve el trasero—ruedo los ojos.
Solo será una reunión de amigos —una de tantas— pero es mí culpa por tener una amiga que es tan sociable y manejable para este tipo de cosas. Si por mí fuera me la viviría encerrada en casa mientras disfruto un bote de helado, de solo pensarlo se me hace agua la boca.
Y justamente frente a mí en letras grandes "Heladería San Carlo'"
— Haré una pequeña parada, puedes adelantarte —sin más, camino hacia el puesto de helados.
— Pero, ¡SunHye! ¡Figlia di tua madre! —me grita en Italiano y yo le levanto el dedo— ¡Mételo por dónde no te entra el sol!
Joder, que perra vergüenza, Amelia.
Sigue caminando, SunHye, no sabemos quién esa loca desquiciada.
Por ir a paso tan apresurado y agachando la mirada tratando de que me vea lo menos posible, choco con alguien.
Inútil.
— Ah... Lo siento —sin levantar la mirada continúo mí camino, pero luego escucho la voz de esa persona.
¿Me lo imaginé o... Me lo imaginé?
Lo repetiste
Lo sé
— SunHye... —me detengo en seco pero aún sin voltear la mirada, pasan unos segundos pero ya no sé escucha nada.
Sabía que me lo había...
Me sorprendo al sentir unos brazos rodear mí cuerpo por detrás mía, justo cuando estoy apunto de pegarle una patada o algo para librarme, observo algo que llama mí atención.
Su brazo.
Oh, mierda.
Reconocería ese brazo tatuado en cualquier parte.
— ¿JungKook? —trago saliva al no recibir respuestas alguna, juro que no tomé nada para estar teniendo alucinaciones, ah, debí irme con Amelia.
— No sabes lo mucho que te estuve buscando, niña tonta —vale, si esto es una alucinación se vé bastante real— ¿No vas a decir nada? Necesito una explicación —me voltea haciendo que lo miré cara a cara.
¡Si es JungKook!
— T-tu —le apunto sorprendida— ¡¿Qué haces aquí?!
— ¿Enserio esa es tú pregunta? —se cruza de brazos— vine por ti. ¿Qué demonios pasó, Sun? ¿Por qué te fuiste sin decir nada?
— Ah...
— ¿Ah? Esa no es la repuesta que yo esperaba, necesito que me expliques —habla seriamente.
— Yo... —abro la boca dispuesta tratar de decirle, pero luego recuerdo— y tú, ¿Por qué no me dijiste que estabas teniendo más horas de trabajo en la empresa? Y por mi culpa —su expresión cambió a una de sorpresa— eres un idiota, debiste haberme dicho
— SunHye...
— Nada de SunHye y no pongas esa cara de perrito abandonado, no voy a caer. Pudiste haber hablado conmigo pata explicarme las cosas y asumir la responsabilidad, yo tenía la culpa de que te estuvieras distrayendo, pude haberme alejado para darte tú espacio y... —me callo abruptamente cuando JungKook me sostiene de los hombros y se inclina un poco en dirección de mi cabeza para quedar a la altura ya que era más baja que él.
— Sabía que dirías eso
— ¿Qué? —frunzo el ceño.
— Sabía que ibas a culparte, SunHye, nada de eso es tú culpa, ¿vale? No soy un robot que siempre estará haciendo lo que la empresa dice, yo también me canso, soy un chico que cumplió su sueño de ser un idol. Pero contigo no me siento así, a tú lado soy solo un chico normal al cuál le encanta pasar tiempo con su mejor amiga y divirtiéndose con ella, no quería que te alejaras como acabas de decir, pero al final resultó peor que eso —siguió mirándome fijamente a cada palabra que decía y yo, yo no sabía que decir— antes de venir hablé con el CEO y le dejé en claro que no podía hacer eso, es mi vida privada con lo que se está metiendo y eso no debe ser así, no tiene ningún derecho de hacer que los que quiero se alejen de mí. Así que por favor no vuelvas aceptar una de sus locuras, antes habla conmigo, prometo que yo también te contaré todo
— Jung...
— Prométemelo
— Yo... Bien, lo prometo —sonrió y sin decir más, nuevamente me atrapó entre sus brazos el cual está vez si correspondí.
— Ahora tenemos que ponernos al tanto de lo que a pasado estos meses —dice separándose.
— En realidad, tengo una reunión ahora mismo
— ¿Una reunión? ¿Trabajas en alguna empresa?
— Ah, no, no. Es una reunión así, de conocidos —JungKook asiente— tendría que haberme ido con Amelia, pero me fue imposibles resistirme a comprar un helado y ahí apareciste tú
— Lo dices como si fuera malo —hace un mohín y río— pero te lo dejaré pasar si pasas la tarde conmigo, compramos helado y de paso me das un recorrido, ¿Qué piensas?
Lo pienso un poco, probablemente después Amelia me matará por haberle dejado sola, pero meh, no me puedo resistir cuando se trata del helado.
— Está bien —mi respuesta le saca una sonrisa y después pasa uno de sus brazos por mis hombros para hacernos caminar— oye, ¿Está bien que estés con el rostro descubierto? —JungKook abre la boca para decir algo al respecto, pero antes de que llegara a articular palabra alguna.
— ¡Es Jeon JungKook de BTS! —grita una chica ganándose la mirada de muchas personas y comienza a correr en nuestra dirección junto a otras chicas que también se dieron cuenta que la chica no metía.
— ¡Hora de correr! —dice Jeon tomando mi mano y jalandome con él.
Sí, creo que esa era la respuesta a mí pregunta, me veía venir.
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Parte extra...
❣ HAN SUNHYE ❣
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Un mes después
Se supone que hoy me encontraría con JungKook, ya que después de haber regresado de Italia con él, se había tomado unas vacaciones para pasar tiempo con su familia. Y hoy me llamó diciendo que nos viéramos para pasar el rato juntos.
Estaba llendo al apartamento de él.
Mientras caminaba iba con la vista en mi teléfono puesto que mi celular no dejaba de sonar por la culpa de las notificaciones que llegaban del grupo que habían creado los chicos y para el colmo no entendía absolutamente nada de lo que hablaban, además de que nadie me da una bendita explicación.
Y es que quiero sospechar, pero no sé me ocurre nada en absoluto. No es mi cumpleaños como para que quieran hacer una fiesta sorpresa, tampoco es el aniversario de algo... ¿Cierto? Joder, soy malísima para recordar fechas.
¿Cómo es que pueden ser tan imbéciles como para hablarlo aquí en el grupo? Yo también estoy en él, ¿Se habrán olvidado o lo hacen a propósito?
Y Jeon tampoco tiene el descaro de decirme algo, vaya amigo.
Ya está, cuando los vea no se van a salvar. Ninguno de ellos, acabaré con ellos como de que me llamo Han SunHye.
Si que lo hizo, si que lo hizo.
Seguí enviando mensajes con la finalidad de que soltaran algo, pero nada, todos me ignoraban. ¿Cómo pueden ser mis amigos? Me voy a vengar. Seguí caminando hasta que por fin llegué a dónde me citó Jeon —será el primero con el que acabe— modo Robocop activado.
Al entrar la chica de recepción me atendió de buena manera, sabía que venía a ver a JungKook puesto que no era la primera vez que estaba aquí —en su departamento— tanto como yo lo invitaba al mío, él lo hacía con el suyo. Subí por el ascensor hasta el piso cinco —de díez— una vez que salí de éste, caminé por el pasillo hasta llegar al frente de su puerta, toqué un par de veces pero nadie abrió. ¿Me está tomando el pelo? ¿O debería entrar así como si nada? Meh, voy a entrar, después de todo el me dió la contraseña por algo, ¿no?
No veo fallas en tú lógica, Sherlock.
Vale, hagamos esto.
Una vez que coloqué la contraseña, la puerta se abrió y pasé cerrandola detrás de mí.
— ¿Por qué todo está oscuro? —murmuré para mí misma, cuando intenté encender las luces éstas no lo hicieron, no me digan que me quieren asustar— Jeon JungKook, si ésto es una jodida broma te juro que no vivirás para contarlo —avancé por el pequeño pasillo que había para llegar a la sala, al llegar a dicho lugar noté en el suelo pétalos de rosa y en medio velas aromáticas— ¿Qué es todo ésto? ¿Vine en un mal momento? —miré un poco más y el rastro de pétalos seguía hasta la terraza.
¿Debería ir? No me digan que estoy interrumpiendo un mal momento y después de esto quedaré traumatizada. Cuando estaba dispuesta darme la vuelta pude notar una nota que estaba sobre la mesa en medio de la sala, "Sal a la terraza, Sunnie" era lo que decía.
Okay, ¿Alguien me explica que está pasando? Todo ésto es muy raro y... No me digan, no, no puede ser.
Pff, ¿En qué piensas, SunHye? Estás loca por creer eso.
Quién sabe, espera lo inesperado.
Comencé a caminar en dirección del patio, a cada paso que daba podía escuchar la melodía de una guitarra. Cuando por fin salí me sorprendió ver todo arreglado, había luces colgando del techo y algunos globos en el suelo, JungKook estaba en medio de todo ésto y cuando me miró no hizo nada más que sonreír.
— "Nal seuchineun geudaeui yeoteun geu moksori
nae ireumeul han beonman deo bulleojuseyo
eoreobeorin noeul arae meomchwo seoissjiman
geudae hyanghae han georeumssik georeogallaeyo
Still with you" —comenzó a cantar al ritmo de la música, yo me quedé en el mismo lugar y con el corazón latiendo al mil por escucharle— "eoduun bang jomyeong hana eopsi iksukhaejimyeon an doeneunde
geuge tto iksukhae najimagi deullineun i eeokeon sori igeorado eopseumyeon na jeongmal muneojil geot gata hamkke usgo hamkke ulgo i dansunhan gamjeongdeuri naegen jeonbuyeossna bwa eonjejjeumilkka dasi geudael majuhandamyeon nuneul bogo malhallaeyo bogo sipeosseoyo" —JungKook se levantó de dónde estaba sentado y aún cantando con la guitarra entre sus mano se acercó a pasó lento— "jeo dari oerowo boyeoseo
bamhaneure hwanhage ulgo issneun geot gataseo eonjenga achimi oneun geol almyeonseodo byeolcheoreom neoui haneure meomulgo sipeosseo harureul geu sunganeul ireohge doel geol arassdamyeon
deo damadwosseul tende eonjejjeumilkka
dasi geudael majuhandamyeon
nuneul bogo malhallaeyo
bogo sipeosseoyo" —se acercó hasta quedar frente a mí sin parar de cantar— "hwangholhaessdeon gieok soge
na hollo chumeul chwodo biga naerijanha
i angaega geothil ttaejjeum jeojeun ballo dallyeogal ge geuttae nal jabajwo nal baraboneun huimihan miso dwipyeone areumdaun borasbicceul geuryeobollaeyo seoro balgeoreumi an majeul sudo issjiman geudaewa hamkke i gireul geotgo sipeoyo
Still with you"
— ¿Qué...?
— Me gustas —soltó de repente, me quedé boquiabierta— y no es necesario que me correspondas ahora, voy a esperar lo que sea necesario para que me respondas. Solo —tomó mis manos entre más suyas— No te alejes de mí eso es lo único que te pido
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Volví, gente bonita 💕
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