Chapter Two

A b l i n d l o v e

❣ JEON JUNGKOOK ❣

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Doy pisadas largas y a paso apresurado mientras trato de no mojarme, la lluvia había comenzado repentinamente. Agradezco que mí Nana allá insistido porqué trajera un paraguas, a veces me sorprendía el sexto sentido que tenía para predecir este tipo de situaciones.

Observo alrededor como algunas personas corren sin un paraguas, los niños chapoteando y jugueteando en las aceras.

Pero hay un lugar en particular que llama mí atención; uno grupo de chicos entrando a un callejón. Logro divisar que están usando el mismo uniforme de mí preparatoria.

¿Debería acercarme?

Creo que deberían estarse dirigiendo a dónde yo en lugar de perder el tiempo haciendo sabe que cosas. Frunzo el ceño, no, eso no es mí problema, ellos pueden cuidarse solos y no tengo porque interesarme en sus asuntos.

Comienzo a caminar nuevamente, pero está vez a paso más lento. Hasta que llego al callejón, sin embargo, no voy a entrar y solo seguiré rectamente.

Eso es lo que me dispongo a hacer.

Pero...

- ¡Eres una inútil! -escucho gritar una voz femenina- las personas como tú solo son un estorbo

- ¿Enserio, SunHye? Solo tenías una simple tarea, retener al profesor y ya. Pero no, tenías que salir con tus cosas de chica buena -ahora es un chico quién habla, me asomo para observar mejor que es lo que está pasando. Una chica está siendo rodeada por un tumulto de jóvenes, pensé que a ésta edad las personas ya maduraban- Te daré un último deseo, ¿Quieres decir algo antes de que te demos una paliza?

La chica se quedó callada mirando al suelo, pero eso no duró mucho cuándo levantó su vista.

- No... No me arrepiento -soltó casi segura, mientras lo miraba fijamente.

- ¿Qué dijiste? -volvió a hablar la chica a la que reconocí había gritado antes.

- Que no me arrepiento... No era correcto lo que estaban haciendo y yo no iba a ser parte de eso. SuRa, mamá estaría decepcionada de ti por tus acciones, ella no habría querido que...

- ¡Cierra la boca! -la chica que tenía cabellera rubia la empujó contra la pared- creo que debemos cerrarte la boca de una vez por todas... Chicos

Pronto, como si ella fuera nada más y nada menos que la mente maestra del grupo, los otros comenzaron a acercarse a la otra chica. Claramente que estaba pensando en intervenir, pero me detuve en seco cuándo la miré sacar un bastón -del cuál ni siquiera me había percatado que tenía- y comenzó a defenderse con el, tratando de hacer que los chicos no se acercarán a ella. Aunque uno de ellos logró quedar lo suficientemente cerca, pero ella lo golpeó en la cabeza dejándolo en el suelo.

- ¡Agh! -gritó tapando el lugar lastimado- maldita ciega, te voy a matar -volvió a levantarse y esta vez ahora sí logró abalanzarse a ella.

Caminé rápidamente hacía su dirección y de un movimiento le quité al chico de encima.

¿Qué se creían eso imbéciles para intimidar a una chica? Además de que ellos ganan en número y ella... Un momento, si escuché bien, creo que el mencionó que era ciega.

Que bajo a caído nuestra generación.

- ¿Estás bien? -le dije ayudando a levantarla.

- Sí, ¿Quién eres? -preguntó directamente mientras fruncía el ceño haciendo que se viera terriblemente adorable, oh y sus ojos, son de un color.

- Yo -en el momento que la ví a los ojos me quedé embelesado, eran muy atrapantes.

- Largo -antes de que pudiera contestar fue un chico el que interrumpió que la siguiera observando, lo miré tomando una posición más seria y dejando detrás de mí a la chica que intimidaba- estamos en un asunto y si no quieres que te demos una paliza a ti también será mejor que te largues mientras estamos siendo amables contigo

De pronto todas las miradas de los presentes se encontraba puestas en mí, eso me dió gracia y no pude evitar reír sarcásticamente.

- ¿Qué te parece tan gracioso? -preguntó y se notaba que ya lo había fastidiado, que fácil a sido.

- Solamente qué... Son unos im-bé-ci-les

- Eres un... -iba a caminar hacia mí, pero la chica lo detuvo.

- Tranquilo, Han -lo miró con brevedad y luego a mí- eres muy valiente al meterte con nosotros... Me gusta -sonrió, me dió un escalofrío, ayuda- vámonos chicos

Todos se miraron entre sí como si no se lo creyeran, pero al final cedieron.

Cuándo la rubia pasó por nuestro lado nos miró, a mí de una forma que no puedo explicar -pero daba miedo, mucho miedo, que eso quede claro- por otro lado, a la chica de ojos lindos -no digan nada, ¿Okey? En mí defensa no sé su nombre- la miró con repulsión y eso me hizo rodar los ojos, más aún cuando chocó su hombro con el de ella.

Suelto un suspiro pesado.

Y nuevamente veo a la chica que está detrás mío.

- Ya se fueron -le digo y ella asiente.

- Gracias, te debo una -sonríe levemente.

- Ah... No, no. No me pareció bien lo que ellos estaban haciendo y tenía que intervenir de alguna manera, no me iba a quedar de brazos cruzados -de pronto ella se agacha y empieza a buscar algo torpemente- uh, ¿Qué pasa?

- Mí bastón -y allí comprendo. Camino a dónde está el objeto que busca y lo tomo para proceder a pasárselo- gracias

- Tú... Eres... -aclaro mí garganta sin animarme a pregúntale directamente, no, eso sería muy descortés de mi parte y así no me crió mí Nana.

- ¿Ciega? -me termina la frase de firma repentina- sí, soy ciega

- Lamento preguntar, solo tenía curiosidad y no quiero que me mal entiendas

- No te preocupes, entiendo y no hay problema -otra vez me sonrió y yo... Yo me derretía- ah... Cierto, debo irme, ya estoy llegando tarde al instituto

Antes de que pudiera comenzar a caminar la detuve hablando.

- Puedo acompañarte

- Si lo dices porque soy ciega, te aclaro que no es necesario. Conozco el camino de memoria y no me es necesario verlo para llegar a mi destino, así que rechazo cortésmente tu propuesta

- ¡No! Digo... No lo quería decir de esa manera, es solo que tienes el mismo uniforme que yo y pensé que podríamos ir juntos -me rasco la nuca sin saber más que decir.

- Oh... ¿De qué año eres?

- Soy nuevo, acabo de transferirme

- Entiendo, pues déjame decirte que tú coreano es muy bueno

- Eso es porque soy coreano, solo que viví por un tiempo en Estados Unidos -explico.

- Aaah, ahora tiene más sentido

Nos quedamos en silencio y yo comenzaba a desesperarme por no haber recibido una respuesta.

- ¿Te fuiste? -pregunta.

- N-no

- Bien, entonces vayamos juntos -comienzo a asentir repetidas veces, son solo simples movimiento que me salen de manera involuntaria y ni siquiera sé porqué.

Me acomodo a su lado y comenzamos a caminar. Lo mejor de todo fue que en ningún momento parecían ser una situación incomoda, al contrario de eso, íbamos charlando y contando cosas de nosotros para conocernos mejor.

Se llamaba SunHye, hasta su nombre era hermoso como ella.

Ese fue nuestro primer encuentro.

❣ HAN SUNHYE ❣

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Había pasado un mes desde que había conocido a JungKook, se había vuelto un amigo cercano para mí -en realidad- era mí único amigo. A nadie le gustaba estar cerca de la chica ciega porque podría "contagiarlos", tan tontos eran como para creer semejante estupidez o solo lo decían para molestar. Pero sí, ese era mí día a día.

Con mí amigo más íntimo ahora nos encontramos en la cafetería del instituto mientras saboreamos nuestras deliciosas chucherías.

- Vamos, Sun. Dame un poco -seguía insistiendo, negué- no seas mala~

- No. Te dije que escogieras algo que querías porque luego yo no te iba a dar, Jeon. Siempre que te doy algo a probar me terminas quitando todo y con mí natilla nadie se mete, tú lo sabes más que nadie, ahora ponte a comer tu nutella

- Eres mala Han SunHye, esto me quema y me lástima

Rodé los ojos.

Sigo comiendo mí natilla tratando de no prestar mucha atención a sus quejas, pero me detengo cuando siento algo frío en mí mejilla derecha y después escucho carcajadas por parte de Kook.

- Jeon JungKook, más vale que no hayas hecho lo que creo que hiciste -digo en un tono alto tratando de sonar lo más autoritaria posible, aunque dejo de pensar que funcionó una vez que escucho una risa bajita de su parte- quítame eso de la cara ahora mismo, jovencito

- Soy mayor que tú, no me trates como un niño -se queja.

Dato interesante e importante; a JungKook no le gusta que lo traten como un niño. Y eso para mí es luz verde para que lo haga, él siempre me molesta así que yo se la devuelvo como la persona justa que soy.

- Jovencito dije -afirmé y escucho como suelta un bufido- quítame esta cosa viscosa y más te vale que no la esparzas más por mí cara

- Valeee, gruñona -le saco la lengua y me quedo esperando a que limpie mí cara, lo haría yo pero prefiero evitar la fatiga, ¿Saben?

No sé cuándo tiempo pasa y sigo de la misma manera, no eh notado ningún cambio. No me digan que JungKook aprovechó para irse mientras yo me quedo aquí esperando como estúpida.

Desventajas de no tener vista...

¡Me las pagará!

- Jeon Jung.... -cierro la boca en el mismo instante que siento algo golpear mí mejilla, lo que me hace desconcertar es que la textura no se siente como papel o algo para limpiarme, sino... Es algo mucho más suave.

- Listo -me dice de repente.

- ¿Qué...? ¿Qué fue lo que hiciste exactamente?

- Limpiar tú mejilla

- Pero... Tú sabes a lo que me refiero

- Uh, sí te digo me vas a golpear -fruncí el ceño- en mí defensa, no iba a desperdiciar mí nutella de esa manera

- ¿Acaso tú...? -lo único que escucho en respuesta es una risa- ¡Jeon JungKook! -comienzo a buscarlo moviendo mis manos torpemente a mí alrededor y cuando lo encuentro, lo jalo hacía mí y comienzo a pegarle levemente en el cuerpo.

- ¡Yah! Me haces cosquillas -se queja.

- Eres un cochino -continúo con lo mío.

- No me arrepiento de nada, sabes rico. Creo que encontré algo mejor a la nutella -dice.

- ¡Cállate! -en su lugar vuelve a soltar una carcajada.

- Aww, estás toda roja. Pareces una fresa -me pellizca las mejillas y me quejo- una fresa muy linda

No me da tiempo de responder algo porque escucho que alguien carraspea la garganta. JungKook aún no me suelta y yo hago el intento de que lo haga, solo falta que sea algún profesor y haya escuchado todo. Que maldito vergüenza.

- Miren que lindos, la parejita feliz -mí cuerpo se tensa al escuchar la voz de mí hermana- apenas pasan unos días y ya andas de casanova, hermanita

No digo nada, el día iba bien y no tengo ganas de pelear con mi hermana, esperaré a que diga lo que tenga que decir. Sin embargo, escucho a JungKook bufar con molestia y en ese momento me suelta.

Vale, eso ya no es una buena señal.

- ¿Te habían dicho que eres molesta? -dice- no, no me respondas. Sé perfectamente cuál es la respuesta a mí pregunta, me disculpo por eso, fue tonto preguntar algo tan claro

- ¿Por qué te molestas tanto? Todos aquí sabemos que te juntas con SunHye solo por pena -vuelve a hablar, SuRa, ahora sí estoy decidida a intervenir pero JungKook vuelve a hablar.

- ¿Y tú qué sabes eh? Eso ni tú te lo crees, pero lo dices porque estás celosa

¿Pero qué está diciendo? ¿Ya se volvió loco en su totalidad?

Vuelvo a buscarlo y cuando doy con su camisa lo jalo levemente para que deje de hablar, en su lugar de un movimiento atrapa mí mano con la suya.

- Estás celosa de no poder ser ni la mitad de buena persona que es SunHye -sigue hablando- por eso la tratas de esa manera, para hacerla sentir inferior y te desespera que no puedes hacer eso. Sun, siempre acepta lo que dices con tal de no pelear contigo, pero yo no, no voy a dejar que sigas intimidando a Han SunHye... A la chica que me gusta

Me comienza a jalar para que caminemos alejados de allí. Solo lo sigo sin decir nada y aún tratando de procesar qué fue todo lo que pasó hace un momento atrás.

¿JungKook dijo eso porqué estaba enfadado?

- Vamos a sentarnos aquí y hablemos, no, necesito que me escuches en realidad -ni siquiera había sentido en qué momento llegamos, otra vez me jaló e hizo que me sentará en lo que sentí era el césped.

- ¿Dónde estamos?

- Es un lugar secreto que encontré, por las veces que vine me dí cuenta de que nadie lo conoce, así que podemos hablar tranquilamente y sin interrupciones

- Espera, ¿Ya has venido otras veces y no me habías invitado? -digo gravemente ofendida- nunca te creí capaz de algo así, Jeon JungKook, mí corazón se ha roto

No dice nada.

Y al contrario de eso, siento como toma mis manos.

- SunHye...

- ¿Uh?

- Lo que dije hace un momento no es mentira, sé lo que estás pensando y no es así. Me gustas, desde la primera vez que te ví a los ojos quedé encantado con ellos -al mismo tiempo que explica, mí corazón empieza a latir fuertemente- no solo eso, también tú manera de ser con todos, eres la persona más amable que pude haber conocido alguna vez que incluso me hizo pensar si eras real. A lo que quiero llegar es que... Estoy enamorado de ti, Sun

Trago saliva sin saber que responder, no me lo esperaba para nada. Cuándo me decido a hablar, escucho el sonido de mí teléfono sonar.

- Es tú mamá -habla JungKook y yo asiento, me pasa el teléfono.

Recuerdo que hace un momento él tomó mis manos acción que en ningún momento detuvo. Me solté de una de sus manos y cuando estuve apunto de soltarme la otra, JungKook no me deja.

- Solo necesitas una mano -murmura a lo que supongo eso significa que ya contestó la llamada.

Solo asiento y tomo la llamada.

- ¿Hola?

- SunHye, ¿Estás en tú descanso, cierto?

- Ujum

- ¡Te tengo una sorpresa! -grita desde el otro lado con euforia, por inercia alejo el teléfono de mí oído.

- Mamá -le reprocho- ¿Ahora también quieres dejarme sorda?

- ¡Han SunHye! Que te eh dicho de bromear acerca de eso -me regaña y sonrío.

- Vale, lo siento, mamá -de repente siento como JungKook comienza a juguetear con mí mano- ¿Sobre que querías hablar? ¿Y cuál es la sorpresa?

- ¡Oh sí! -vuelve a gritar con entusiasmo- adivina

- Mh -lo pienso un poco, ¿Qué podría hacer que mí madre (la persona más feliz del mundo) esté brincando de alegría?

- Se acabó tú tiempo... ¡Te conseguí una cirugía!

- Ni siquiera me avisaste que tenía tiem... Espera, ¿Qué acabas de decir? -sin darme cuenta me había soltado del agarre de JungKook.

- ¡Lo que acabas de escuchar! SunHye, la cirugía podría devolver tú vista -su voz se empezó a cortar y yo a mí también me empezaron a escurrir las lágrimas.

- Eh, SunHye -escucho la voz de Kook- ¿Estás bien? ¿Por qué de pronto estás llorando? -niego con la cabeza, siento sus tibias manos en mí cara- Sunnie, ¿Qué pasó?

Sin poder responder a su pregunta solo me lancé a abrazarlo para que no se preocupará, me correspondió al instante.

Pasaron unos minutos más hasta que pude explicarle porque me había puesto así, claramente me felicitó y me dió ánimos para hacer la cirugía, pude notar en su voz que también estaba feliz por la noticia. Ah y también estaba mamá, había escuchado a JungKook cuando habló y empezó a hacer preguntas sobre él y como nos habíamos conocido, le empezamos a contar -obviamente omitimos la parte dónde era intimidada- tampoco hicieron falta las partes dónde mí madre empezó a contarle cosas vergonzosas.

Tuve que colgar con la excusa de que no tenía mucha señal y todo el show. ¿Por qué las madres se pasan de información? Mí madre siempre lo hacía el doble al resto de las demás, imaginen cuánto es eso.

- ¿Así que... Comer lodo eh? ¿Era una dieta especial o algo así? -se burla, ugh, Jeon no ayudaba mucho.

- Cállate, era una niña

- Tenías doce -ataca.

- ¿Qué nunca has comido lodo? Me gustaba jugar a la repostera -me cruzo de brazos- deja de hablar de eso o te golpearé

- Buenoooo... Entonces, ¿Qué tal sí me das una respuesta?

- ¿Repuesta a qué?

- Ya sabes, a lo que te dije... -niego con la cabeza haciendo como que no recuerdo de que hablaba- ¡Yah! Han SunHye eres mala, me refiero a lo de que me gustas

- Ahhh, eso

- ¿Y bien...? -sonrío maliciosa.

- Te daré una respuesta... Ya que salga de mí operación y pueda verte

- ¡Sun! ¿Por qué eres así? Siento que se me va a salir el corazón de los nervios y todavía me dices eso, ¿Quieres matarme no es así? Ah, yo pensé que me amabas -dramatiza.

- Pero que dramático eres, Jeon

- Así me quieres -no contesto- oh, ¿No me quieres?

- Obvio que sí te quiero, tonto

- Ah, eso me quita un pezo de encima. Bueno, ya que me harás esperar tendré que confirmarme con esto -no entiendo muy bien que quiso decir.

- ¿Con qué...? -JungKook deja un beso en la comisura de mis labios.

- Mira nada más, Fresita Han a vuelto -se burla y se suelta a reír.

- ¡Yah! Deja de reírte -otra vez comienzo a golpearlo, sin lastimarlo claro.

❣ JEON JUNGKOOK ❣

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Toco el timbre repetidas veces, mientras espero que me abran la puerta al mismo tiempo que muevo mí pie con inquietud. Hace unos minutos que la madre de Sun me había llamado diciéndome que SunHye no había querido salir de su habitación y eso me preocupó.

Hoy es la cirugía de ojos para SunHye.

La puerta se abre frente a mí y la señora Han suelta un suspiro de alivio, que ni siquiera sé yo porque es.

- Que bueno que llegas, se encerró en su habitación y no quiere abrirme -niega- habla con ella, sé que sí lo haces podrás convencerla

¿Quién? ¿Yo? Si usted que es su madre no pudo, ¿Qué cosa haría yo?

Solo asiento.

La señora Han me da el pase para entrar y yo lo hago, al instante me dirijo a la habitación de Sun. Ya había venido varias veces por lo cuál me sabía el camino de memoria.

Una vez que llego a su puerta toco pero nadie contesta.

- ¿SunHye? -otra vez no recibo respuesta de su parte- soy yo, JungKook

- Vete, quiero estar sola

Suelto un suspiro de alivio al escuchar su voz.

- Sabes que no me iré, Sunnie. Abre la puerta y hablemos, ¿vale? Sabes que siempre te escucho

Otra vez no recibo respuesta alguna y cuando estoy decidido a volver a hablar. Escucho el seguro de la puerta, lo tomo como una señal de que puedo pasar pero de igual manera le aviso.

- Voy a entrar -giro la perilla y asomo la cabeza, no veo a SunHye por ningún lado pero lo que si captan mis ojos es una montaña de sábanas sobre la cama, me acerco a esta y me siento la borde- si vamos a hablar necesito verte a la cara

- No, podemos hablar así, no necesitas verme -se remueve.

Lo pienso un poco.

- Tienes razón, no es necesario pero yo quiero verte

- La respuesta es un rotundo no

- ¿Por qué lo dices? -se queda en silencio- ah ya entiendo, Fresita Han salió de su escondite, ¿no?

- ¡Cállate! -chilla y yo me río- ugh, te odio

- Me amas~ -canto- vale, pongámonos serios, ¿Por qué no quieres salir?

SunHye saca su cabeza poco a poco de las sábanas, oh Dios, ¿Quieres que me dé un ataque al corazón por tanta ternura?

- Yo... -comienza a hablar- tengo miedo

- Miedo -repito y asiente- ¿Miedo de qué?

- ¿Qué tal sí la cirugía no sale bien? No me había puesto a pensar en eso hasta hoy, hay muchos factores en contra y tengo miedo de que solo me esté dando falsas esperanzas y que al final no pueda recuperar mí... -la interrumpo en medio de su discurso lleno de negatividad mientras tomo su rostro entre mis manos y hago que nuestras narices rozen, comienzo a jugar con estás provocando encuentros.

- Deja de hablar así, SunHye. No es momento de que te pongas a pensar en cosas que no sabes si podrían suceder

- Tampoco sabemos si la cirugía saldrá bien -niego con la cabeza.

- Te voy a besar si sigues con eso -no responde nada y sonrío al notar su mejillas rojas- me gustas mucho, Fresita Han

Su siguiente movimiento me toma desprevenido, porque con tan solo acercarse un poco más. Chocó sus labios con los míos, lo cuál correspondí con mucho gusto.

- Tú también me gustas mucho, JungKook

- Pensé que esperaríamos hasta después de la cirugía para que tú me dieras tú respuesta

Se encoge de hombros- No pude contenerme

Y esta vez fuí yo quien se encargo de juntar nuevamente nuestros labios.

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Parte extra...

❣ HAN SUNHYE ❣

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Camino junto a JungKook tomados de la mano, hoy conocería a su abuela. ¿Estaba nerviosa? Claro que sí, digo, cualquier persona se pone nerviosa cuando conoce a la familia de tú novio.

Cierto, otra buena noticia que tengo es que gracias a la cirugía pude recuperar mí vista. Estoy tan feliz de que todo vaya bien.

- Uh, estoy tan emocionado por esto

- Tú estás emocionado, mientras que yo me estoy muriendo de nervios -suelto con una mezcla de burla, aunque no mentía para nada.

- No tienes nada de que preocuparte, sé que te va a adorar tanto como yo lo hice la primera vez que te vi. A Nana le encantan los cachorros y tú pareces uno

- ¿Me estás diciendo animal? -lo miró con el ceño fruncido.

- No -niega- estoy diciendo que pareces un cachorro, un cachorro muy tierno al cuál quiero mimar todo el tiempo -sonríe- ¡Llegamos! -anuncia una vez que estamos en la puerta de su casa y abre ésta.

- ¡Por fin! Ya pensaba que no llegarían -aparece una mujer mayor- ¡Oh Dios mío! -y no sé cómo hizo, pero en un abrir y cerrar de ojos ya la tenía frente a mí- eres muy linda

- Uh, yo, gracias -le sonrío y ella me corresponde de la misma manera.

- Ven, ven. Eh preparado una comida especial para éste momento -me jala con ella y yo solo me dejo ir, olvidando que estaba junto a JungKook.

- ¡Yah! Nana, espera no te la lleves

- Shh, tú puedes pasar todo el tiempo con ella si quieres. Ahora es mí turno para conocerla -le dice- y espero que hayas limpiado tu habitación y no tengas ese cochinero de siempre

- ¡Nana! -le reprocha de vuelta y yo río.

- ¿JungKook, tiene sucia su habitación? -le pregunto.

- Uff, si supieras tal vez ni querrías salir con él -me dice e inevitablemente suelto una carcajada- un día encontré sus bóxers arriba del abanico que tiene el techo, ¿Puedes creerlo? ¿Cómo llegó eso allí?

- ¡Ah! -JungKook llega a nuestro lado y me separa de su Nana- olvidé que primero le mostraría la casa a SunHye, iré a darle un recorrido -me comienza jalar para caminar junto a él.

- ¡No eres bueno para inventar excusas! -grita la mujer.

- ¡Lo sé! -le responde de vuelta Kook, solo me dedico a verle con diversión, su abuela me cayó totalmente bien es casi igual a mí madre, ¿Me pregunto si así se verá ella en unos años más?

Salgo de mis pensamientos en el momento que JungKook me vuelve a jalar más sorpresivamente y me pegará contra la pared.

- ¿No ibas a darme un recorrido por tú casa?

- Nop, solo quería que estuviéramos solos para poder besarte. Mientras éste con Nana no tendré oportunidad para hacerlo -y sin dejarme responder pegó sus labios a los míos.

Así estuvimos un breve momento hasta que una tercera voz nos interrumpió.

- Los pillé

- ¡Nana! -se queja JungKook al mismo tiempo que se separa de mí y patalea como un niño pequeño.

- Que Nana ni que nada, la jovencita vino a conocerme. Ya tendrán tiempo para hacer eso en otro momento, por ahora la pasaremos bien y le mostraré a SunHye el álbum de cuando eras un lindo bebito

- Pero...

- Nada de peros

JungKook arrugó la nariz y terminó asintiendo. Su abuela lo miraba burlesca, algo me dice que lo hace para molestarlo y eso me da gracia, así que tal vez deba ayudarle un poco.

- ¿Entonces me gustaría contarme anécdotas sobre el pequeño Kook? -la mirada de mí novio rápidamente llega a mí y me mira con los ojos entrecerrados.

- ¡Oh por supuesto! -su abuela se engancha de mí brazo al mismo tiempo de que nos ponemos a caminar y comienza a contarme sobre lo que le pedí.

- ¡Han SunHye, me voy a vengar!

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...

¿Qué? ¿Cómo que escribí más de 4000
palabras para éste cap?

OMG! Cómo que tenía mucha
inspiración 🤔

En fin, sigan comentando y
votando para más capítulos <33

I love you 💜

- Bea