Capítulo 28: Los pasos del corazón - Paso 3: Tu amor
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Estaba por cumplirse un año, desde que Gokú y Milk habían empezado sus estudios en la Universidad Deportiva Dragón. Casi un año, desde que Gokú había decidido luchar como admirador de Milk por su amor, pues su amistad ya la tenía y está cada día se fortalecía más, así como los sentimientos de ambos, aunque el joven de cabello alborotado aún no lo supiera.
En un aula de artes marciales:
Tres jóvenes platicaban mientras esperaban la llegada de sus demás compañeros y de su maestro de artes marciales.
Entonces a pesar, de que ya no es alumno de la universidad, el sigue asistiendo solo para seguir cortejándola, decía Krilín sorprendido.
Sí, respondió con pesar Gokú.
Era de esperarse, ¿No?, ya que es muy persistente como tú, agrego sonriendo Vegueta, mientras el joven de cabello alborotado, se tornaba preocupado. Pero no hay porque sentir temor, Milk siempre es clara con él, solo puede brindarle su amistad, sin embargo, al ella seguir libre, pues la esperanza de él y de sus otros fans pues....
Ya no sigas Vegueta, que el saber que alguien podría quitármela, hace que mi corazón duela, pronunció Gokú.
Pero Kakaroto, como dices esas cosas, yo pensé que tú....
Yo pienso convertir en su amor, pero estoy consciente que no será tan sencillo como lo pensé, contestaba el joven de cabello alborotado, al tiempo que la pelinegra ingresaba al aula, bajo la mirada de sus compañeros que estaban dentro.
¡Hola chicos! dijo Milk, al llegar frente al joven de cabello alborotado y sus amigos.
¡Hola Milk! expresaron Vegueta y Krilín.
¡Hola muñequita! pronunció Gokú, mirándola dulcemente.
Voy por mi botella de agua, dijo el calvo.
Y yo voy a ver si me envió algún mensaje mi Bulma, expreso el joven cabello de flama.
¿Pasa algo?, pronunció Milk.
¿Hoy también te espero Hit en la entrada?, expreso en tono celoso Gokú.
Sí, respondió la pelinegra con pesar, haciendo una pausa para agregar: Es muy insistente, aunque tal vez solo haya sido hasta hoy su insistencia.
¿Por qué dices eso?, dijo el apuesto joven intrigado.
Le dije algo, que de seguro hizo que pierda ya la esperanza conmigo, contesto la pelinegra con calma, mientras caminaba hacia una banca de madera.
¿Qué le dijiste?, respondió intrigado Gokú.
No seas curioso, ello es algo entre Hit y yo, dijo Milk, con una cálida sonrisa.
Pero Milk, soy tu amigo, además tu admirador,...., agregaba el joven, haciendo que la pelinegra lo mire con ternura.
Tal vez te lo diga algún día, pero hoy no, acoto la pelinegra con calma.
Otro secreto que no podré saber, no es justo muñequita, decía Gokú lamentándose.
¿Secreto?, expreso la joven.
Sí, ni siquiera recuerdo lo que te hice para que durante el tiempo que estudiamos juntos en la preparatoria me detestes y ahora un nuevo secreto, respondió el joven de cabello alborotado lamentándose.
No es que me hayas hecho algo, me prometiste algo, que es distinto, ya te lo he dicho, contesto Milk.
¿Pero qué?, dijo Gokú.
Ya te dije que no te lo diré, tú debes recordarlo, pronunció la pelinegra con calidez.
Bien, respondió el joven de cabello alborotado con dulzura, haciendo una pausa para añadir: ¿Hoy no te reunirías con tus amigas?
No, ¿por qué?, contesto la pelinegra con calma, mientras sacaba sus muñequeras del bolsillo de su gi para colocárselas.
Permíteme, pronunció Gokú, tomando las muñequeras, para segundos después colocárselas a la joven.
¡Gracias! aunque no era necesario, yo podía colocármelas, dijo Milk, tratando de no mostrar su nerviosismo.
Lo sé, pero quise hacerlo, respondió con calidez el apuesto joven, haciendo una pausa para agregar: ¿Vamos por la tarde al cine?
¿Al cine?, contesto la pelinegra.
Sí, hay una película muy buena en cartelera, me lo comento Krilín....
En tanto:
Un joven cabello de flama platicaba con su novia por celular.
Que puedo decirte linda, que ya no sepas, todo sigue igual entre ellos, a pesar de eso, él sigue firme en su propósito, dijo Vegueta.
¡Qué bien! por un momento pensé que ya se había resignado a solo ser su amigo, escucho.
Pues no, a pesar de ser tan bien bastante popular en la universidad, el solo sigue teniendo ojos para ella, y sigue firme en su idea de convertirse en su novio, agrego el joven cabello de flama, al tiempo que vio ingresar a su maestro al aula. ¡Disculpa linda! Debo colgar, el maestro acaba de ingresar al aula....
Bien Vegui, nos vemos más tarde cariño, escucho.
Luego de ello, el joven cabello de flama entro al aula y se acercó a sus amigos para escuchar lo que su profesor les decía.
Horas después:
Paso por ti, decía Gokú, acercándose a la pelinegra para depositar un beso en su mejilla.
No es necesario, nos encontramos allá, respondió Milk, con la mayor calma que pudo.
Bien, como digas muñequita, contesto el apuesto joven con calma, tras alejarse de la joven, bajo la mirada de sus compañeros de aula.
Nos vemos, expreso la pelinegra, antes de echar a correr hacia la salida del aula.
¿Saldrás con ella hoy?, escucho el joven de cabello alborotado.
Sí, iremos a ver la película que me comentaste, respondió el joven de cabello alborotado, mirando al calvo.
Por la tarde: "Casa Son"
Tras alistarse para su cita con la pelinegra, el joven de cabello alborotado salía de su habitación con una sonrisa radiante.
¿A dónde va mi niño hermoso?, pronunció Gine, que se encontraba en el pasillo.
Voy al cine mamá, dijo Gokú, con una cálida sonrisa.
¿Saldrás con la niña que te gusta?, agrego Raditz, que también se encontraba en el pasillo.
¡Raditz!, contesto el joven de cabello alborotado, un tanto apenado.
Pero si no he dicho nada malo, nuestros padres saben que tu bella amiguita te tiene encandilado, ¿no es así mamá?, dijo el joven de cabellera larga sonriendo.
Si hijo, pero tampoco seas tan directo, agrego Gine sonriendo.
Gokú solo sonrió y luego continuó su camino, mientras pensaba: Hasta mi familia ya sabe que te amo, bueno, tú también lo sabes, pero no me quieres aún aceptar mis sentimientos; pero nada me hará retroceder, yo voy a seguir adelante, demostrándote día a día lo mucho que me interesas, lo mucho que te amo, por ello antes de ir al lugar que acordamos iré por un presente para ti.
Casa Ox:
Ya regreso papito, decía Milk.
Bien mi niña, disfruta de tu cita, pronunció el señor Ox.
Yo no voy a ninguna cita padre, contesto nerviosa la pelinegra.
Claro hija, claro, de igual manera disfruta de tu salida, expreso el gigantesco hombre sonriendo, mientras pensaba: Hija, no soy ningún despistado para no notar que no saldrás con tus amigas, sino con algún muchacho, sino no te hubieras puesto aún más linda que de costumbre.
¿Por qué papá piensa que tendré una cita?, si solo es una salida de amigos, además ni le mencione que saldría solo con un amigo, pensaba Milk, mientras salía de su casa.
En tanto:
Cuatro jóvenes se encontraban en una nevería comiendo unos helados mientras platicaban.
¿Qué les parece mi idea?, decía una peliazul sonriendo.
Excelente amiga, respondió una rubia de cabello corto.
Es buena linda, pero algo arriesgada, ¿no?, pronunció un joven cabello de flama.
Estoy de acuerdo contigo amigo, dijo un calvo.
Tal vez sea un poco arriesgada, pero quien no arriesga, no gana ¿no?, además esos dos necesitan un empujoncito, y que mejor que nosotros se los demos, acoto Bulma.
Sí, estoy de acuerdo, además no tendrían por qué sospechar que les estamos tendiendo una trampa para que dejen salir sus sentimientos, ¿no?, porque después de todo será un juego, expreso Dieciocho.
Así es, dijo la peliazul.
¿Y para cuándo sería?, pronunció Vegueta.
Lo antes posible, ¿no?, es más yo pongo la casa de playa de mi familia a disposición para nuestro viajecito de relax de fin de semana, respondió Bulma.
Siendo así, yo me ocupo de buscar todo lo necesario para el jueguito, decía emocionada Dieciocho.
Bueno, entonces nosotros tendremos que encargarnos de invitar a Gokú y Milk, ¿verdad?, expreso Krilín.
Solo a Gokú cariño, a Milk, déjanosla a nosotras, dijo la rubia, mientras la peliazul asentía.
Podemos ir en nuestros autos, también ¿no?, agrego Vegueta.
Sí es una buena idea, ¿pero quién llevara a Gokú y Milk?, pronunció Bulma.
Nosotros linda, Krilín llevara lo que necesitemos para nuestra estancia, respondió el joven cabello de flama.
Entonces que el viajecito sea este fin de semana, expreso Dieciocho.
Sí, estoy de acuerdo, dijo Krilín, mientras la otra pareja asentía.
Afueras de un cine:
Un jovencito de cabello alborotado, que vestía un traje sport, y que llevaba en una de sus manos una rosa roja y un pequeño osito de peluche, se encontraba parado en la entrada de un cine esperando la llegada de la niña que amaba, cuando de repente la vio llegar, vestida con ropa sport, y zapatillas, su cabello lo llevaba casi suelto, solo era recogido una parte de este por un brochecito plateado en forma de mariposa, que combinaba perfectamente con el diseño del polo que había elegido para combinar con su pantalón jeens.
¡Hola! dijo Milk, al llegar frente al joven de cabello alborotado.
¡Hola muñequita bella! contesto Gokú, haciendo una pausa para agregar mientras le mostraba la rosa y el osito de peluche: Son para ti.
¿Para mí?, pronunció un tanto ruborizada la joven.
Sí, contesto el joven de cabello alborotado, entregándole los presentes.
No era necesario, no es una cita, solo una salida de amigos, expreso Milk, mientras bajaba la mirada, y sus mejillas se teñían de carmín.
Para mí es una cita, una cita con la niña que amo, dijo el apuesto joven.
¡Go...!
Expresaba la pelinegra, pero no pudo acabar de hablar, pues el apuesto muchacho la silencio colocando dos dedos de sus manos sobre sus labios.
Ya compre boletos, la función ya va a empezar, ¡vamos dentro! agrego Gokú, tomando la mano de la joven, quién dejándose llevar por sus sentimientos, no evito ello.
El par de pelinegros entraron al cine, al estar dentro Gokú le pidió a Milk que la esperara allí, pues iría a comprar algunas cosas para que comieran mientras veían la película.
No debo mostrar mi nerviosismo, no debo hacerlo, pensaba Milk, mientras esperaba la llegada del joven de cabello alborotado.
Ya estoy aquí, decía Gokú, mientras le entregaba un refresco y sándwich a la pelinegra.
¡Gracias! pronunció la joven.
La película dio inició el par de jóvenes miraban la película aparentemente muy concentrados, al tiempo que consumían los productos que uno de ellos había comprado para que comieran.
De repente la pelinegra sintió una mano sobre su hombro, ella quiso retirar la misma, pero no llego a cumplir su propósito, pues sintió unos labios sobre su rostro.
¡Gracias por estar aquí conmigo! escucho.
¡No tienes que agradecer nada! Somos amigos, dijo Milk, retirando con delicadeza la mano del jovencito de su hombro.
¿En verdad crees eso?, contesto Gokú.
¿Qué?, pronunció Milk.
Yo creo que somos más que eso, dijo el apuesto joven.
La pelinegra iba a responderle, pero los presentes en el lugar empezaron a mostrar sus quejas debido a la bulla que estaban haciendo.
Luego seguimos hablando, dijo Gokú, en voz baja, tras retirar la mano del hombro de la pelinegra.
1 hora después:
Las personas presentes en la sala de cine salían de esta, entre ellos los pelinegros.
Milk, tenemos que hablar, dijo Gokú, tomando la mano de la pelinegra.
Lo sé, pero este no es un buen lugar para hacerlo, respondió la joven con seriedad.
Bien, hablemos fuera, contesto el joven de cabello alborotado, mientras caminaba con la pelinegra hacia la salida del lugar.
Minutos después:
Gokú....
Milk, no es un secreto para ti, lo mucho que me gustas, tampoco es un secreto para ti, saber que llevo mucho tiempo tratando de conquistarte, es más hasta creí que tú habías aceptado que te corteje,..., decía el apuesto joven.
Así es, he aceptado tus cortejos, pero ello no significa que estos me incomoden, pronunció la pelinegra.
¿Te incomodo mi comportamiento en el cine?, expreso el apuesto joven.
Me sentí extraña, es la primera vez que alguien se atreve a colocar su brazo sobre mi hombro...., decía Milk.
Entonces fui el primero que hice ello, contesto Gokú con alegría.
Sí, respondió la pelinegra.
Milk, ya que has aceptado mis cortejos, ¿podrías decirme que es lo que debo evitar hacer para que no arruine mi avance contigo?, dijo el apuesto joven con calidez.
No puedo decírtelo, ello es algo que tú debes descubrir, además no es que lo que hayas hecho me haya molestado, sino me incomodo, pues como te dije es la primera vez que un chico coloca su brazo sobre mi hombro, al menos un chico joven, pues otra cosas es hacer esto de niños....., respondía la pelinegra, mientras el joven de cabello alborotado la miraba embelesado.
No sabes lo feliz que me hace tu respuesta, pues ello significa que voy bien contigo, que puedo convertirme en tu amor, pronunció Gokú.
No lo sé, tal vez, dijo Milk con calma, mientras una bella sonrisa se plasmaba en su rostro, al tiempo que añadía: Ya debo volver a casa.
¿Te llevo?, respondió el joven de cabello alborotado.
Bien, pronunció la joven.
Nota:
Aquí les dejo una nueva actualización de "Step by Step", espero y la misma llegue hacer de su agrado.
¡Gracias de antemano por cada visto, voto y comentario!
Si Dios me lo permite tendrán una nueva actualización la próxima semana (Lunes, Miércoles o Viernes)
Con mucho cariño.
PrincesaLirio.
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