Narrador omnisciente

Ambos se encuentran abrazados ahí en el baño, se escuchan los leves sollozos de la chica, y que ella se encuentre en ropa interior no parece importarle a ninguno de los dos, de parte de ella no hay pena alguna, puede ser libre delante de él, pues ante sus ojos se siente a gusto. Él conoce cada centímetro de su piel así como ella de él.

—Perdóname por no haber llegado antes—habla él después de unos minutos en silencio, y después besa la cabeza de la chica.

—Sabes que no es tú culpa, lo que acaba de pasar es solo mi culpa Justin, de nadie más—dijo Destiny y después se separó del chico suspirando.

—¡No es tu culpa! Todo es culpa del idiota que intentó ponerte sus manos encima, joder, ¡quiero partirle la cara!

Justin se maldijo por haber pensado que ella estaba con Zack haciendo quien sabe que cosas y nombrarla zorra en su mente, y deseó haber venido hasta ésta habitación unas horas antes.

Él se quitó la chaqueta negra y se la puso a ella, por supuesto le queda bastante grande y eso es perfecto pues le cubre lo justo, cierra la bragueta y así ella queda cubierta.

—Gracias—susurra ella y le da una tímida sonrisa, entonces el piensa que la chica se ve muy diferente a todas las veces pasadas que la ha visto, luce bastante vulnerable.

—Debes saber que esto no es tu culpa, Destiny tú más que nadie debe saber que existen muchas personas malas en éste mundo, más en el entorno donde vivimos nosotros—le dijo y ella asintió después se cubrió su rostro con sus pequeñas y frías manos, y Justin dedujo que había comenzado a llorar, la abrazó con más fuerza.

—¡Justin! Es que esto es mi culpa, soy una idiota, debí de haber tratado con más fuerza alejarme de él, quitar sus sucias manos de mi cuerpo, él...—lloró más y él la abrazó más.

—Ya basta, hay que agradecer que esto no paso a mayores. Todo estara bien bonita—dijo y cerró sus ojos, después besó su mejilla.

—¡No se trata de eso! Él puso sus asquerosas manos en mi, sus labios en mi piel, su aliento en mis oídios y es la misma asquerosa sensación, la maldita historia se estaba repitiendo Justin—admitió perdida mirando a la nada, Justin se separó de ella de golpe.

—¿Qué historia, Destiny? ¿De qué estás hablando?—preguntó alarmado.

—¡Destiny!—gritó kath interrumpiendo la charla.

—Esto no se va a quedar así preciosa, necesito respuestas—comentó Justin y salió del baño en busca de Kath pues se supone que debe de traer la ropa.

Destiny suspiro y se apoyo en el lavabo.

—le traje este cambio de ropa y este suéter—dijo Kath entregándole el conjunto en las manos a Justin.

—Está bien, gracias—murmuró el chico deseando que ella se fuera.

—Justin, probablemente quieres que me vaya pero necesito saber como está ella—susurró Kath.

—Estará bien, está conmigo, quiero llevarmela a casa, así que quiero que se cambie lo antes posible, por favor dejanos a solas—murmuró Justin con autoridad y la chica a regañadientes aceptó, salió de la habitación cerrando la puerta.

—¿Cómo que quieres llevarme a casa?—preguntó Destiny saliendo del baño.

—Toma, Kath te ha traído este conjunto, pontelo—ordenó Justin entregandole el cambio de ropa, ignorando el anterior comentario de la chica.

Destiny tomó el conjunto en sus manos, se quitó la chaqueta de Justin y después comenzó a vestirse.

—Ten tu chaqueta Justin, hace frío afuera, ni siquiera se por que hay personas en la piscina allá afuera.

—Gente loca—dijo Justin y se puso su Chaqueta—me gusta como te mirabas con mi Chaqueta puesta—comentó abrazando a Destiny por la espalda, ella hizo una pequeña y tímida sonrisa. Lo que acaba de pasar hace una hora con el otro chico a hecho que la actitud de Destiny cambié de alguna manera pues eso le ha recordado cosas de su oscuro pasado.

—Justin quiero que respondas algo—dijo la chica dandose la vuelta—¿A que te referías cuando dijiste que me llevarías a casa?

—A que te llevaré a casa—respondió él simplemente.

—Lo se, con mi padre. Pero no quiero ir allí, quiero ir a mi departamento.

—me refiero a que te llevare a casa, a mi casa. Dormiras conmigo esta noche, bonita—dijo él y la tomó de la mano.

Y lo que estaba pasando aquí, es que es la primera vez que se toman de la mano, la primera vez que salen de una habitación tomados de la mano mientras todas las personas que se encuentran en el lugar los miran.

Bajaron las escaleras y todas las miradas se posaban en ellos.

—Dime que no se enteraron de lo que paso arriba—susurró Destiny en el oído de Justin mientras caminaban entre la gente.

—todos se enteraron que hubo algo allá arriba, pero no supieron exactamente que, probablemente miran a cada chica que baja las escaleras para saber quien de todas es a la que le paso algo, no te preocupes ellos no tienen ni la menor idea.

—Esta bien—murmuró Destiny y le dió un beso rapído en la mejilla a Justin, se sentía tan agradecida de que él estuviese a su lado en estos momentos.

Continuaron caminando fue ahí donde Destiny recordó que venía con sus dos  amigos. Trevor y Carlos.

—¡Destiny!—gritaron los dos chicos al unísono.

—Hey, yo conozco a esos tipos—dijo Justin frunciendo el ceño, acordándose de aquel día en las carreras.

—¿Está todo bien, amor?—preguntó Trevor sin tener idea alguna de lo que paso arriba.

¿por qué le dice "Amor"? Pensó Justin.

—No se preocupen, lo que haya pasado ésta noche se los contaré otro día. Trev, tú tienes las llaves de mi auto, pueden regresarse en el, iré con Justin—dijo Destiny, y sus dos amigos pensaron mal al instante.

Fue ahí donde Justin se sintió triunfador, pues él ignora el hecho de que los dos amigos de Destiny son homosexuales y además son pareja.

—Que te diviertas—murmuró Trevor feliz y eso le pareció extraño a Justin.

Destiny sonrió sin ganas, después abrazó a sus amigos y les dió un beso en la mejilla a cada uno.

—Vamos—murmuró Justin y siguieron caminando. Ya estaban por llegar al auto de Justin pero una voz chillona se los impidió.

—¡Justin!—gritó Amara con entusiasmo, después miró que él se encontraba a lado de una chica y su sangre comenzó a hervir. Más furia se adhirió a su ser cuando vio de quien se trataba, Destiny. Pensó con coraje.

—Amara, no es buen momento—trató de decirle Justin pero la chica seguía insistiendo.

—La verdad es que no tengo con quien regresarme y me duele la cabeza.

Justin suspiro y pensó que no podía dejar a la chica de esa manera abandonada, si, probablemente Destiny sea más importante en estos momentos pero Amara fue la que estuvo ahí cuando la castaña y él habían peleado.

—Haré una llamada—espetó Justin y comenzó a teclear unos números en su teléfono, a los segundos recibió respuesta—Hey, Ryan, después te explico lo que pasa, solo te diré que tengo que irme, Amara se regresara contigo.

Al escuchar eso Amara hizo una revienta y juro que Destiny pagaría por irse con su hombre.

—le diré a lilza que pase por ustedes—finalizó la llamada Justin—Amara, irás con Ryan, espero que tu dolor de cabeza disminuya—y con eso Justin y Destiny siguieron caminando directo al bonito auto de Justin.

La castaña se subió en el copiloto y cerró los ojos recargándose en la ventana de la puerta. Después Justin subió al piloto y comenzó a manejar.

—iremos a mi casa, como ya había dicho antes ¿esta bien?—preguntó Justin y Destiny asintió.

—No me gusta que le hables a Amara, sé que no tengo ningun derecho acerca de decidir sobre tus amistades o parejas o lo que sea, pero ella me da mala espina—murmuró Destiny no muy decidida.

—Ella no es mi pareja mucho menos mi amiga... ella es como....

—Tu zorra personal—murmuró simplemente la castaña.

—No quiero hablar de eso Destiny—dijo el ojos miel en un tono de advertencia y bastante serio—Pero te aseguro que no es mala persona.

—Como sea—dijo ella bufando y volvió a cerrar sus ojos—gracias.

—Gracias... ¿por qué?—preguntó Justin.

—Por todo—susurró ella.

—no tienes que agradecer nada—y esas palabras se las llevo el viento haciendo que quedaran en silencio y él chico siguió conduciendo por la carretera.

Llegaron al departamento de Justin, estacionó el auto y bajaron, la chica ya se encontraba dormida entonces él no quiso despertarla y la tomo en brazos, entraron al departamento y él camino con ella en brazos hacia la recamara  de arriba, cuando llegó la acostó en la cama y después él fue a tomar una ducha con agua helada, no le importaba que el clima fuera gélido en estos momentos, solo quería agua fresca, entonces se puso a pensar en lo raro y amargo que había sido el día de hoy, se imaginó otras manos recorriendo la piel de la preciosa castaña sin la aprobación de ella y eso hizo que su sangre hirviera del coraje. Maldita sea, murmuró y siguió duchandose.

Cuando el ojos miel salió de la ducha se encontró a Destiny con una camiseta de él puesta cubriéndole hasta los muslos y sus ojos cerrados pero de alguna manera él se imaginó que la castaña se encontraba despierta.

—¿Estás despierta?—preguntó Justin mientras se ponía un boxer.

—No—contestó ella y soltó una risita.

Después Justin caminó hacía la cama y se acostó a un lado de ella, la abrazó y ella se acomodó muy bien en su pecho aspirando su maravilloso olor a jabón y menta.

—El olor a fresas era mi olor favorita—murmuró ella perdida en sus pensamientos mientras se acomodada más hacía el pecho de él.

—¿Y ahora?—preguntó él.

—Desde que te conocí mi olor favorito es el tuyo, cuando sales de la ducha hueles muy fresco, es como una mezcla de menta y a jabón y cuando sales a cualquier lugar se combina  con tu perfume y es algo...—se quedó callada la castaña sorprendiendose por sus propias palabras pero estaba siendo honesta, amaba el olor de Justin, siempre olía muy bien.

El soltó una risa y después preguntó.

—¿Por qué dices esto, Destiny?—dijo con el ceño fruncido—Gracias, me gusta como huele tu cabello.

—gracias—dijo ella y lo abrazó más.

Ambos quedaron dormidos abrazados y bastante cómodos el uno con el otro, y lo extraño aquí es que ninguno sabe que es lo que puede pasar al siguiente día respecto ellos, es decir ¿las cosas volveran a ser como antes? Ambos se han dicho en el pasado cosas que no deseaban realmente decir. Pero de igual manera hirientes.

—¡Agh! ¡Quita tus asquerosas manos de mi! ¡No lograrás hacerme nada! ¡Agh!—los gritos imparables de la castaña hicieron que el chico ojimiel se despertará en medio de la madrugada.

—Hey, Dest... basta—susurró adormilado pero la chica seguía metida en su sueño, o más bien pesadilla. Entonces él tuvo que gritar para despertarla—¡Destiny Basta!—dijo sacudiéndola y por fin la chica despertó.

—¿Justin? Oh mi Dios, tuve una pesadilla—murmuró y pasó su mano por su frente quitando gotas de sudor.—Fue tan real.

—Tranquila, no pasa nada, estoy aquí contigo y mientras este contigo nada malo te podrá pasar—susurró Justin con palabras desde su corazón y se sorprendió por lo que acababa de decir. Pero sus palabras parecieron funcionar pues la chica se tiró a sus brazos y se recosto en su pecho, pero después imágenes de su pesadilla y de lo ocurrido en la mansión de Zack la atacaron vilmente.

—Justin el estaba tocando mis piernas él se deshizo de mi ropa, él besó mi cuello, él...—el corazón de la chica no dejaba de latir con una intensidad, y esque no se trata solo de lo que paso hoy si no de lo que le recordó de su pasado.

—Tranquila ¡Destiny! Debes de tranquilizarte preciosa—dijo él, desesperado.

Ella asintió y después preguntó.

—¿Dónde está mi celular? Tienes mucho  tiempo con el.

El confundido respondió.

—¿Tú celular? Debe estár en el pantalón que me acabo de quitar ¿lo necesitas ahora?—preguntó extrañado. ¿después de todo para de estar aterrorizada y pregunta por su celular?

—No, mañana en la mañana me lo das. Buenas noches—murmuró y esas palabras se perdieron en esa oscura noche mientras ambos de nuevo se acostaban e intentaban dormirse—necesito que me abraces—susurró ella y el chico obedeció.

JUSTIN PDV

Desperté por los rayos de luz solar que apuntan directo en mi rostro, recordé que dormí con Dest y me giré en busca de ella pero al girarme me di cuenta que no se encuentra a mi lado, entonces me alarmé ¿a dónde se ha ido? Y es que ya no dudo ni un poco que en un descuido se haya ido de mi casa, ella es así, siempre se va sin avisar, tomo mi celuar y después salgo de mi habitación, bajo las escaleras mientras reviso si tengo algún mensaje de ella pero en mi bandeja de entrada no hay nada, tampoco en ninguna red social.

Camino hacia la cocina y me encuentro con la mejor vista que he tenido en mucho, mucho tiempo, Destiny con mi camiseta la cual ya he mencionado que le llega a medios muslo o incluso más arriba y eso se mira malditamente sexy, ella está cocinando y me sorprendo por eso ¿ella sabe cocinar? No lo vi venir, sus caderas hacen una vaivén mientras tararea una  canción y eso hace que la camisa suba más de lo normal haciendo que en cada meneo se mire más de su perfecta piel.

Dejé mi celular en la mesa y en silencio me acerqué a ella, rodee su cintura con mis brazos mientras me coloqué por atrás y le doy un beso en su mejilla, ella pega un salto del susto pero después sonríe.

—Hola bonita—susurró en su oído de manera lenta, ella sigue meneando sus caderas y continua cantando una canción que no reconozco, su trasero esta pegado a mi entrepierna y eso hace que yo reaccione pues ese movimiento ya me está exitando.

—Buenos días Conejito—dice sonriente, había olvidado que ella me llamaba de esa manera y una sonrisa creció en mis labios.

—Si continuas bailando de esa manera no pediré disculpas a la hora de ponerte en cuatro—susurré en su oído y después le pegué una nalgada, me aleje de ella guiñandole un ojo y ella por primera vez se sonrojo. ¿Podemos tomarle una fotografía? ¡Destiny se ha sonrojado!

Coloqué dos platos, dos vasos y la jarra de jugo en la mesa, después llegó Destiny con el desayuno y lo sirvió.

—Espero que te guste, soy un asco cuando se trata de cocinar—dijo tímida. Frunzo el ceño pues noto su actitud como nunca antes había estado.

—apuesto a que no esta tan mala—dije animandola y ella sonrió.

Probé la comida con lentitud, después mastique bien, Dios mío.

—¿Qué pasa? ¿Te gustó?—dijo esperanzada.

—Si—mentí, la verdad es que es uno de los platillas con el sabor más crudo y malo que he probado en mucho tiempo, pero mi bonita nunca lo sabrá.

—¡Qué bueno! A mi no me gusto, ¿quieres lo que me iba a comer?—murmuró ella feliz, me alegre por su humor pero me dió asco de solo pensar en comer más de lo que acabo de comer.

—No bonita, ya estoy lleno—actúe y ella pareció creerlo.

Dejamos en el lavaplatos los trates sucios y después nos dirigimos a las escaleras para ir a mi habitación.

—las damas primero—dije, y la verdad es que quiero tener una muy buena vista de su trasero mientras sube las escaleras.

—como sea—dijo ella y subió las escaleras, ahora se de que color es su ropa interior y eso me hace feliz.

Cuando llegamos a mi habitación ella hablo.

—Y  dime ¿todavía es bonito mi trasero?—dijo mientras se quitaba mi camiseta.

—¿qué?—pregunté con el ceño fruncido.

—oh vamos conejito, te conozco. "Las damas primero" ¿en serio?—dijo ella soltando una carcajada.

Entonces me pregunté ¿como lo supo?

—¿Por qué te quitas la camisa?—pregunté.

—iré a darme una ducha, no quiero ser un desastre. Es un nuevo día Justin, ya sabes—murmuró simplemente y camino hacia el baño.

Me mordí el labio antes de preguntar lo siguiente.

—y... ¿yo me puedo duchar contigo?—entonces pensé en lo estupido que había sonado eso, el día de ayer ella estaba sufriendo por alguien que intentó tocarla y ahora yo le pedía esto.

—Siempre—suspiró.—tu siempre puedes Justin—susurró y entró al cuarto de baño, fui tras ella y entré también, Dios mió. He extrañado tanto su cuerpo desnudo, pero también se que extrañaba algo más que su cuerpo, la extrañaba a ella, conmigo.

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No se si se han dado cuenta, pero, en cada capítulo pongo una canción que le queda a la situación, así que disfrútenlo. 💕

Gracias por leer, votar y comentar, me ayudas mucho haciendo eso💕

Nos vemos en el siguiente capítulo.

Valewow❤