21
Narra Zulema.
- Zulema, ¿vienes conmigo al parque? - me pregunta Diego.
- Claro que si pequeño, espera que me pongo algo y nos vamos.
- Genial tita - dice el pequeño dándome un beso en el moflete y yo sonrío.
- No es nada, cariño mío.
En unos cinco minutos ya andamos dirección al parque. Cerca del barrio en el que vivimos hay un parque, no es muy grande pero para los niños está muy bien. Además, de que es muy tranquilo y se puede pasear agusto.
- Tita, voy a ir a subirme a los columpios.
- Vale, Diego con mucho cuidado.
- Si - dice gritando mientras se va corriendo.
Me quedo mirándolo sentada en uno de los bancos de madera y después cuando lo veo hablando y jugando con otros niños y niñas, saco mi móvil y me pongo a ver cosas.
Me pongo a ver las opciones a carreras o módulos que hay para estudiar. Cada vez tengo más claro que quiero estudiar algo, pero estoy indecisa. No me decanto por nada en concreto y no sé que hacer.
- Tita, ¿hoy vamos a estar con el tito Ansu? - me pregunta Diego mientras que abre su botella de agua.
- No lo sé, cielo.
- Yo quiero verlo.
- Pues hablaremos con él luego.
- Guay.
Naira no está en casa, ha ido a arreglar unos papeles que no podía arreglar aquí en Barcelona y ha tenido que ir hasta Madrid. Y yo estoy cuidando a Diego.
- Diego, vámonos a casa que tenemos que preparar la comida. - digo y el pequeño viene corriendo hacia a mí.
- Vale vámonos.
Le doy una ducha nada más llegar a casa porque viene hasta arriba de arena.
- ¿Qué quieres comer Diego?
- Hamburguesa, pizza, patatas.
- Diego, no puedes comer todo eso. Sólo una cosa.
- Pero yo quiero todo eso - dice haciendo un puchero.
- Pues va a ser un poco imposible. Elige una y esta noche otra.
- Mm, hamburguesa. - dice relamiendose y yo me río. Es calcado a su madre.
- Pues vamos a hacerlas, que van a salir riquísimas.
Comemos mientras vemos un partido repetido que le encanta verlo. Esta viendo un Barcelona vs PSG, de hace ya unos años. Estaba hasta Messi en el equipo baulgrana.
- Mira mira, Zule. Gooool - grita.
- Diego, pero no grites.
- Es que sino no tiene emoción. - se alza de hombros - Umm, la hamburguesa está rica rica.
- Como te gusta eh.
- Me encanta.
Estamos tumbados en el sofá viendo una película concretamente Cars, cuando el timbre suena.
- Tita, yo voy a abrir.
- Diego, antes de abrir pregunta quién es.
- Vale.
Se acerca a la puerta y pregunta quién es, cuando la persona que espera detrás de la puerta imagino que le responde la abre.
- Tito Ansu - grita.
Me pongo de pie y me giro encontrándome a Ansu y Diego abrazados. Ansu alza su cabeza y me guiña un ojo mientras ríe.
- Preciosa mía - dice para luego besarme.
- Para precioso tú.
- Ansu vamos a jugar al fútbol - dice Diego corriendo a buscar una pelota.
Ansu se ríe y asiente. Ponen la pelota en medio y a un lado se pone uno y al otro lado el otro. Yo me quedo sentada en el suelo viendo como los dos se divierten.
- Vamos tita Zule juega tú también.
- No que yo soy malisima.
- Venga vamos princesa - anima Ansu.
- Pero no vale reírse de mí.
Los dos niegan con la cabeza y yo me levanto resoplando. Diego me pasa la pelota y yo remato con tan mala suerte que acabo cayendo al suelo.
Ansu y Diego empiezan a reírse.
- no os riais - me quejo desde el suelo.
Los dos se acercan a mi aún riéndose y se sientan a mi lado.
Ansu le dice algo a Diego en el oído, que no soy capaz de escuchar.
Los dos asienten y de un momento a otro los tengo a los dos haciéndome cosquillas y yo no puedo parar de reír.
- Parar ya que me voy a hacer pis.
- Uy entonces ya paramos - dice Diego - Haber si vas a mearte en la ropa interior como un niño pequeño. - pone una cara de asco y los tres reímos.
- ¿Nos sentamos y vemos una película mientras comemos palomitas? - pregunto.
- Si la de los futbolistas. - dice Diego.
- ¿Los futbolisimos? - pregunta Ansu.
- Si, si esa.
- ¿Otra vez? - pregunto un poco cansada de ver las mismas películas.
- Otra vez, que nunca la he visto con Ansu.
- Bueno ir poniéndola que voy a hacer palomitas.
Cuando llego de vuelta al salón con el bol de palomitas miro a Diego y a Ansu enternecida. La imagen que veo es preciosa. Diego, con su cabecita apoyada en el pecho de Ansu y este acariciandole el pelo mientras ambos miran atentos la película.
Me siento a un lado de ellos y Ansu pone la mano libre en mi pierna aunque la va quitando a ratos para cojer palomitas.
Miro de vez en cuando a Ansu y a Diego. Y me encanta ver a Ansu así. Mi cabeza empieza a maquinar y pienso en sí algún día llegaré a tener hijos y si Ansu será el padre de esos hijos. Por mi parte, estaría encantada.
- Hora de ir duchandose pequeño Diego. - digo mirando la hora.
- Ansu, ¿me duchas?
- Claro, prepara las cosas.
- Voy haciendo la comida. - indico.
- Pizza, pizza. - grita Diego.
- Ansu, ¿tú quieres pizza?
- Sí, una pizza para los tres esta bien.
- Vale.
Cuando Ansu termina de duchar a Diego aparecen los dos por la cocina, Diego se sienta en uno de los banquillos a mirar el tiempo que le queda a la pizza. Y Ansu me abraza por detrás.
- Guapa - susurra y se me eriza la piel.
Me giro quedando enfrente de él y besa mis labios.
- Ugggg que asco - se queja Diego.
- ¿Asco? Ay, cuando tú seas mayor Diego.
- No le voy a dar a nadie besos en la boca.
Ansu y yo nos miramos y nos reímos.
- Ya tendrás tiempo de hacerlo.
Sacamos la pizza y la cortamos, cogemos algunas bebidas y nos ponemos a comer mientras Diego y Ansu están "peleando" por ver que película ponen ahora.
- Coco - dice Diego.
- No que es triste, Spiderman.
- No, Batman.
- Thor.
- Si vais a seguir así pongo lo que yo quiera - aviso y los dos niegan.
- Terminator - gritan los dos a la vez.
Sobre las doce o así los ojos se me empiezan a cerrar y me quedo completamente dormida en el pecho de Ansu.
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