Ansu Fati

Las listas de los seleccionados para ir al mundial de Qatar están al caer, estoy un poco nervioso y ansioso por verlas. Deseo y espero estar en esa lista de convocados. Hace tiempo que no juego con la selección y quiero volver a jugar con España. Van con pies de plomo conmigo, no quieren ir muy rápido no vaya a ser que vuela a lesionarme.

- Ansu, ¿en qué piensas? - me pregunta Gavi y yo lo miro.

- En el mundial - confieso y él sonríe. - ¿Por qué sonríes?

- Hoy ponen las listas.

- ¿Hoy?

- Sí, si mal no recuerdo a las doce y media del mediodía.

- No creo que esté en la lista - confieso, él chasquea la lengua.

- ¿Eres tonto o te lo haces? Claro que vas a estar.

- Gavi, no me mientas.

- Ansu, eres muy bueno, y el míster te quiere en la selección.

- Ya no sé sabe ni a quién quiere el míster - respondo rodando los ojos.

- Ya verás como estás dentro.

Asiento no muy convencido y termino de atarme las botas. Gavi me mira y se ríe, a él muy capullo no le gustan atarse las botas, dice que así se siente más cómodo. Una manía rara la verdad.

Hoy toca entrenamiento en el gimnasio, porque los partidos previos de antes del mundial lo hemos acabado.

En el gimnasio estoy un poco desconectado de todo y de todos, ya que la mayoría de mis compañeros están hablando sobre el mundial, que si ya han salido las convocatorias de algunos países, y todo ese rollo.

- La convocatoria de España - anuncia Xavi.

- ¿Ya la han puesto? - pregunta Pedri.

- Acaba de salir hace escasamente cinco minutos - responde Xavi - Venga va que os la digo.

Siento como unas mariposillas en el estómago, tengo una mezcla de sensaciones raras en el cuerpo. Por un lado pienso que es imposible que vaya a ir, pero por el otro lado tampoco quiero perder la esperanza. Y una parte de mi, espera que este en esa lista de jugadores.

- Dilo ya que a Ansu le va a dar un parraque - dice Gavi y yo le doy un golpe en la cabeza.

- Venga allá voy - dice sacando su móvil -  Los convocados son Sergio Busquets, Pedri, Eric García, Ferran, Gavi y Ansu.

Abro mis ojos impactado mientras que todos mi compañeros se ponen de pie y aplauden.

- ¿De verdad?

- Míralo por ti mismo - me dice Xavi entregandome su móvil.

Veo el video en el que Luis Enrique va nombrando los nombres y cuando anuncia el mío siento una alegría inmensa. Voy al mundial, a mi primer mundial.

- Te lo he dicho antes, tonto - me dice Gavi.

- ¿Tú sabías algo?

- ¿Yo? Pues claro que no.

- Gavi, no mientras.

- Bueno vale, puede que supiera algo pero solo algo - dice levantando su dedo y yo rio.

Al llegar a casa toda mi familia se ha encargado de darme la enhorabuena y decirme algunas palabras bonitas. Y ahora me encuentro yendo hacia la cafetería para ver a la persona que me tiene loco.

Entro por la cafetería y saludo a un par de personas que hay sentadas en las mesas mientras toman un café y miran o ya sea un periódico o el móvil.

- Preciosa - digo llamando su atención.

- Que raro tú por aquí - bromea sacandome la lengua.

- Verdad, no pasaba por aquí desde hace por lo menos un año - le sigo la broma y reímos.

- Pues entonces no me conoces - dice ella guiñandome un ojo.

- Créeme que te conozco muy bien, me han hablado mucho de ti bonita - digo riendo.

- Me he enterado que te han cogido para ir al mundial, enhorabuena nene, te lo mereces muchísimo - dice sonriendo.

- Gracias, preciosa. Ahora cuando salgas vamos a ir a comer y lo celebramos. ¿Te parece bien?

- Me parece bien.

Nada más que Zulema ha acabado de trabajar, nos hemos venido a comer a un restaurante que nos gusta a los dos, conocimos este restaurante por Ferran que nos trajo una vez aquí. Es un bar de comida mexicana, tailandesa, china, ósea comida internacional.

La miro mientras ella mira la carta de la comida, cuando está concentrada haciendo algo se muerde el labio inferior muy sutilmente y eso es una cosa que siempre hace.

- Deja de mirarme, me vas a desgastar. - dice sonrojandose.

- No es culpa mía de que seas muy guapa.

- Pero si es culpa tuya ponerme nerviosa.

- Me gusta ponerte nerviosa.

- Pues a mi no.

- Que sepas que no voy a dejar de hacerlo.

- Tampoco pretendo que lo hagas - dice sonriendo.

- Vamos a hacernos una foto - propongo cogiendo mi móvil y entrando en la cámara.

Cuando acabamos de echarnos la foto, la miro y sonrío. Salimos muy bien los dos, ella sale sacando la lengua mientras sonríe y yo salgo sonriendo mientras miro a cámara.

- ¿Qué estás haciendo?

- La voy a poner de fondo de pantalla - le digo y ella abre los ojos - Mira.

- Me encanta tu nuevo fondo de pantalla.

Llevamos todo el día juntos, después de ir a comer hemos ido al cine a ver una película que han puesto hace poco en la cartelera y que a Zulema le hacia ilusión verla.

- Vamos a jugar a los bolos - propongo y ella me mira alzando las cejas.

- No sé jugar a los bolos.

- Es muy fácil y si no pues yo te enseño.

- ¿Tengo delante de mi a un esperto en jugar a los bolos?

- Podría ser - respondo riendo.

El primero en lanzar la primera bola soy yo, al lanzar caen cuatro. Zulema se acerca a coger la bola y después me mira.

- Ayúdame porfa. - me pide.

Me coloco detras suya, pegando mi pecho a su espalda, pongo mi mano donde esta la suya y le ayudo a sujetar la bola. Le doy un pequeño beso en el cuello y se pone nerviosa.

- Ahora tira.

Caen todos los bolos que quedaban y ella sonríe mirándome.

- Hacemos buen tandem - me dice.

- Y que lo digas, nena.

- ¿Vamos a dar un paseo por la playa?

- ¿Ahora?

- Si, quiero ir a ver el atardecer desde allí.

- Pues venga vamos.

Hemos llegado a la playa y como ya mismo empieza a anochecer, hemos comprado una pizza por el camino para comernosla sentados en la arena mientras vemos la puesta de sol.

- Zulema.

- Dime, Ansu.

- Se mi novia. - susurro a centímetros de su boca.

- Soy tu novia. - dice para acto seguido besarme.

El día de hoy no puede ser mejor, me anuncian que me voy a Qatar y Zulema acepta ser mi novia.