Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 2: Chocar

Jungkook se apresuró a bajar del autobús, hoy lamentablemente se retrasó debido a que se quedó dormido, así que casi no alcanzaba transporte, al menos no el que siempre usaba para llegar al trabajo. No fue hasta que su madre lo despertó diciendo que era tarde y que llegaría aún más tarde si no se levantaba, así que eso hizo, sólo esperaba no haberse olvidado de algo, para variar, el día anterior había llovido, por lo que, aún quedaban algunos charcos de agua y una que otra parte de la ciudad mojada, ocasionando también que hiciera bastante frío, apenas tuvo tiempo de ponerse un ligero abrigo y un gorrito, justo ahora acomodandolo para que no se caiga de su cabeza.

Entró al hospital saludando a los demás trabajadores, estando tan distraído que chocó con alguien sin darse cuenta, oh no, su pequeño gorro cayó de su cabeza, justo acababa de acomodarlo para que ahora se cayera, para terminar, su frente dolió debido al impacto del choque, a sus fosas nasales llegó un exquisito aroma, tierra mojada con canela y menta, rara combinación, ¿no? Bueno, menos para Jungkook, para él podría llegar a ser adictivo, el aroma más rico que ha podido oler, ¡Lo jura! A su lobo también le encanta, se vuelve un loquillo con este mismo, como ahora.

¡No lo juzguen! Es algo que simplemente no puede evitar, salió de sus pensamientos cuando sintió algo pesado en su cabeza, dándose cuenta de que aquel alfa le había vuelto a colocar su gorrito, ah, casi chilla de la emoción otra vez, es que se emocionó por esto, y más porque seguramente ahora su prenda tendría aunque sea un poquito de ese olor, impregnado en la misma.

- Gracias - Dijo, y sonrió como siempre lo hace, casi abalanzandose a los brazos del contrario por la emoción, su lobo estando más que de acuerdo con esto.

- Claro, no es nada doctor Jungkook. - Otra vez sonó muy serio y seco, pero estaba bien, para Jungkook estaba bien. Las personas usualmente no suelen ser muy agradables con él.

- ¡Se acordó de mi nombre! - Casi que gritó, o bueno, gritó más bien, aplaudiendo.

De acuerdo, es que no había nadie más alegre que Jungkook, ¿Verdad? Su actitud algunas veces fue catalogada como "rara", a este chico todo le emociona, siempre pensando positivo y con la frente en alto, sin una pizca de pena o vergüenza, agarrando confianza rápidamente, y claro que Taehyung no es la excepción.

Seguramente esa actitud y esa personalidad que tenía no se iba a ir nunca, ¿cierto?

- Sí, eh... cómo podría olvidarlo si parecía un cachorro pequeño estando perdido, claro que digo esto sin intención de faltarle el respeto. - Se sintió nervioso cuando soltó sus palabras, se retracto al segundo de haber hablado y casi se nota la mueca de disgusto que hizo.

- Soltó una pequeña risa, no pensando en lo absoluto en lo que Taehyung dijo. - Lo sé, mi padre dice que parezco un pequeño conejo asustado, seguramente así me veo siempre. - Suspiró al recordar a su padre y su corazón se calentó por hacerlo.

- Por supuesto que sí... lamento mucho haber chocado con usted y haberle tirado su gorro - Jungkook se preguntó si el alfa siempre se dirigía así de reservado con las demás personas también.

- Ah no, no hay ningún problema, no se preocupe Taehyung, también me disculpo yo, iba muy distraído que no me fijé. - Se lamentó, llevando su mano a su nuca, rascándose ahí inconscientemente, estando apenado.

- No se disculpe, está bien. - Hizo una pequeña pausa. - Sabe, debemos ir a cumplir con nuestros labores, así que espero verlo después...

- Claro, obvio que sí, me verá por aquí después. - Ahora empezó a reír un poco más, tampoco quería reírse como usualmente lo hace porque estaban en un hospital y no lo consideraba apto, así que sumándole a esto, se llevó su mano a su boca para cubrir la misma.

- De acuerdo - Susurró. - Nos vemos después doctor Jungkook.

- ¡Hasta luego Taehyung! - Alzó la voz, pero rápidamente se reverenció, arrepintiendose de haber casi gritado.

Siguió con su camino, acomodandose nuevamente su ropa, sobre todo su gorro, casi sin querer tocarlo debido a que allí se encontraba el aroma del alfa de ojos claros. Y...¡Oh no! ¿Es qué acaso hoy era día de mala suerte? ¿O es que de verdad iba muy distraído? Volvió a chocar con alguien minutos después de haber chocado con Taehyung, suspiró pesado, no reconociendo a la persona con la que le ocurrió tal pequeño accidente.

- Lo siento. - Dijo.

- No te preocupes, yo también lo siento. - Alzó la mirada y sonrió.

- Soy Jimin por cierto, Park Jimin. - Extendió su mano, manteniendo su sonrisa.

- Un gusto, yo soy Jeon Jungkook. - Le devolvió la sonrisa, olvidándose rápidamente que habían chocado, ahora lo único que sentía era nuevamente emoción por haber conocido a alguien más, al parecer un alfa también.

- Veo que hace bastante frío allá afuera, y también veo que...eres nuevo... - Lo dijo sonando más como una pregunta, dudando, no había visto antes a este chico.

- Ujum, sí, así es, hace mucho frío afuera, y también soy nuevo, apenas hace un mes comencé a trabajar aquí.

- Ya veo, entonces es por eso que no te ví antes, yo acabo de regresar de mis vacaciones. Pero es bueno tener y conocer gente nueva. - Sonrió más, ocasionando que sus pequeños ojos se volvieran aún más pequeños, casi cerrandolos.

- Bueno, me alegro de saber que hay alguien más que piensa igual que yo. - Sonrió más también. -

Sin darse cuenta estuvieron platicando por unos cuantos minutos más, perdiendo así la noción del tiempo, se supone que fueron a trabajar, ¿No? No pararon hasta que les llamaron la atención, entonces se despidieron y cada uno retomó su camino.

- Entonces...me enteré que discutiste con Jae-beom otra vez... Taehyungie... - Hizo pausas, como preguntando, animando al otro a contarle.

- ¿Te contaron Jimin? ¿En serio? - Volteó, de por sí era "riguroso", e incluso a veces parecía enojado, pero ahora lo parecía más, le molestaban demasiado los chismes y la gente hipócrita, se podía imaginar al imbécil de Jae-beom contándole a Jimin con cara de tonto y haciéndose la víctima.

- Perdón...- Encogió los hombros - Jae-beom me lo contó.

- ¿Entonces qué tengo que contarte yo? ¿No dices que ya te lo contó él? - Suspiró, estaba cansado del alfa de coleta, ¿qué no tenía nada mejor que hacer? ¿Por qué le contaba a Jimin algo que ni lo incluía a él?

- Bueno, sólo me contó que discutieron, pero no me dijo porque...Es...¿Es por lo de siempre? - Suavizó un poco el tono de su voz, no queriendo alterar más a su amigo.

- Sí Park, por lo de siempre, y me tiene harto, ¿Qué busca conmigo?, ¿No puede dejar el pasado atrás y ya? - Tomó asiento en una silla que estaba por ahí, mirando hacia el techo, contando mentalmente hasta diez para controlarse.

- Lo sé, y lo siento por todo, sé que no te gusta hablar de eso, pero no quiero que algún día te llegué a hacer algo. - Se acercó al contrario, dando leves palmadas en sus hombros.

- No lo hará Jimin... no lo dejaré, ya lo hizo una vez, no dejaré que vuelva a pasar. - Susurró, abriendo su corazón de acero con su amigo, suavizando también un poco el tono de su voz.

- Taehyungie...- Y antes de que pudiera decir algo más, su celular sonó.

El de cabello naranja se alejó, atendiendo la llamada a gran velocidad cuando vió el nombre de su esposo.

- Gimie, amor. - Sonrió, Taehyung suspiró sacando su celular, se distraeria un poco en lo que Jimin terminaba la llamada con su amado esposo, como el anaranjado siempre le decía cuando platicaban.

Ellos se conocieron un par de años atrás, justo cuando tenían 18, más bien, Jimin tenía 18, Yoongi tenía 23 para ese entonces, ya pasaron diez años de eso, fue algo que pasó demasiado rápido para ambos. Aún recuerda cuando se casaron, y ahora están en espera de su primer cachorro o cachorra. Y aunque él parecía, o más bien, era alguien de pocas palabras, introvertido, y con un semblante casi siempre serio estaba realmente feliz por su amigo, agradecía sinceramente que Jimin le tuviera paciencia, para él nunca fue fácil relacionarse con gente y menos hacer amigos, también tenía un carácter no tan bonito, al menos a comparación del de su amigo el suyo era... Cuestionable, el de cabello naranja y él eran todo lo contrario, tal vez por eso se llevan tan bien, dicen que los polos opuestos se atraen...¿Será cierto?

De pronto pensó en la posibilidad de tener pareja, recuerda que en la universidad era muy atractivo para los y las omegas, y también para algunos betas. Algo que le sorprendía si era sincero, aunque a veces pensaba que era sólo por su físico, nunca se dió la oportunidad de salir con alguno de ellos, a veces se lo lamenta, pues se cierra mucho a veces con las personas, tal vez ahora también tendría pareja, y, por primera vez, sintió esa necesidad de tenerla, de amar y ser amado, de formar también su familia justo como lo hacen Jimin y Yoongi, de cachorro, aunque no lo parezca, siempre le agrado la idea de tener hijos cuando fuera grande, a esta edad imaginaba ya tener a su pareja, pero en realidad ni siquiera estaba cortejando a alguien.

De repente se acordó del alfa risueño, su aroma le había atraído bastante a él y a su lobo, además de que se lo topa seguido, sonrió levemente cuando recordó como se le había caído su gorrito a causa del pequeño accidente que tuvieron, y recordó también como sonrió en grande cuando se "acordó" de su nombre.

Jimin había terminado la llamada hace unos minutos y solo se dispuso a mirar a su amigo, este mismo estaba perdido en sus pensamientos, a veces estos lo absorben completamente, como justo ahora.

Una idea pasó por su cabeza y sonrió, se acercó lentamente al alfa, para después tocar de manera algo brusca al mismo, sacudiendolo en el camino, empezó a reír a carcajadas cuando cumplió su misión de haber asustado a su amigo, Taehyung dió un brinco cuando Jimin hizo su acción. Refunfuño algo molesto, pero después también río con su amigo, relajándose en el momento.

Después de unos minutos dieron por terminado su pequeño receso, regresaron a su trabajo más tranquilos, Jimin encontrándose por segunda vez con Jungkook, y de paso también con Jae-beom.

- Hey hola. - Saludo a Jungkook y este le devolvió el saludo, a Jae-beom le dió un pequeño asentamiento sin muchas ganas de charlar con él, aún recuerda lo tenso que se puso Kim cuando le mencionó de la pequeña pelea con ese alfa.

- Hola Jimin, es bueno verte de nuevo. - Sonrió.

- Digo lo mismo Jungkook. - Le devolvió la sonrisa, acercándose un poquito más a él.

- Park...- Dijo el otro alfa ignorado, intentando llamar la atención del anaranjado.

- Jae-beom, hola a ti también. - Se volteó mirando al de cabellera larga, mostrándose rígido e incómodo ante su presencia.

- Podemos...¿Podemos hablar a solas? - Preguntó sin notar la presencia de Jungkook, mientras que este sólo estaba en silencio escuchando todo no queriendo interrumpir.

- No, no puedo ahora, estoy con Jungkook, ¿no lo notas aún? - Dijo comenzando a molestarse, no teniendo ganas de hablar con el azabache.

- El alfa se avergonzó cuando notó otra presencia en el lugar, un aroma muy agradable para su olfato y algo dulce. ¿Era un omega? - Estiró la mano recibiendo un ligero apretón en la misma. - Perdona, no te había visto, soy Jae-beom.

- Soy Jeon Jungkook, no te preocupes Jae-beom-ssi. - Sonrió levemente.

- Un gusto conocerte...

- El gusto es mutuo. - Jimin interrumpió antes de que pudieran seguir hablando.

- Yo me retiro, si gustan pueden seguir hablando, por supuesto que sí...Y, ah sí Lim, ahora mismo no puedo hablar porque estoy ocupado. - Recalcó antes de irse, le dió una mala mirada y sonrió cuando Jungkook le miró.

- Eh, ujum, yo...yo también me retiro, espero volver a verte Jae-beom-ssi. - Se despidió dando una pequeña reverencia al otro alfa y este se la devolvió.

- Claro... espero lo mismo Jungkook.

El castaño no se esperaba encontrarse en una situación llena de tensión, él era un alfa tranquilo y pacifico, y su lobo también lo era, le incomodaban situaciones cómo estas en las que podía llegar a reconocer feromonas agrias y tensas por parte de ambos alfas. Aunque bueno, con Jimin se sentía más a gusto, tal vez porque el anaranjado le transmitía más confianza que el otro alfa. Y no importa, conoció a alguien nuevo, tal vez después puedan volverse buenos amigos, Jae-beom parece alguien amigable.

¿Y quién dijo que las apariencias engañan?

Bien, Jimin salió algo molesto del lugar, de pronto iba caminando y se encontró con ese alfa que hace enojar a su amigo y a él también ahora, no sabía porque o para que Lim quería hablar a solas con él, tal vez sólo para recalcar nuevamente lo de Taehyung, no sabe del todo bien lo que pasó entre ellos dos porque a su amigo le resulta algo difícil hablar sobre eso, le contó algunas cosas, -que fueron muchas en realidad- y también le contó que casi lo odia, al principio creía que los problemas de ellos no eran razón para que él fuera descortés con Jae, pero después se dió cuenta de como era el mismo, chismoso de pies a cabeza, y parecía que siempre buscaba molestar o hacer sentir mal a Kim, sabía que a Lim no le caía muy bien por el hecho de ser amigo de Taehyung, es fácil darse cuenta cuando sólo lo busca cuando le conviene.

Por otro lado Jungkook seguía parado al lado del alfa, este estaba pensando en quien sabe que, pero sí pudo darse cuenta de que la relación entre esos dos alfas no era la mejor, parecía que se caían mal, sus feromonas los delataban, y el sólo hecho de que estaban tensos le decía todo, más ese incómodo ambiente terminaba por ser la gota que derramó el vaso.

Después de que Jimin logró relajarse y tranquilizar a su lobo -el cual se había puesto en alerta ante la sola presencia de Jae-beom, porque sí, estaba resentido con ese lobo alfa- siguieron con su camino, al finalizar el pasillo el anaranjado tomó la izquierda y Jungkook le siguió. Platicaron un poco y decidieron almorzar juntos, por eso se dirigieron a la cafetería del hospital y comieron tranquilamente para relajar aún más el ambiente. Jungkook se preguntó que tanto debían esconder esos lobos alfas entre ellos o que había pasado para que se trataran y reaccionaran de esa forma, no se puede olvidar tampoco del trato que se dieron el mismo Jae-beom-ssi y Taehyung-ssi en esa discusión que el mismo presenció. Debía parar de entrometerse en cosas que no eran de su incumbencia y que probablemente debería ignorar por su propio bien, eran personas que recién estaba conociendo y no podía opinar de ellas, o peor aún, confiar del todo, no los conocía realmente y aunque fuera una persona demasiado alegre y sociable sabía que debía tener cuidado también con sus actitudes y con la gente con la que le gustaba amigar - como le llaman coloquialmente ahora - Jimin lo trajo de nuevo y a la realidad y lo agradece bastante porque no quería pasar más tiempo sumergido en sus pensamientos haciendo hipótesis y teorías de vidas y personas que no le imcumbian y que no le debería dar importancia.

- Entonces, Jungkook, perdona por lo de hace un rato, sé que debió ser incómodo para ti presenciar aquello. - Comentó apenado de su comportamiento tan descarado y grosero frente a Jae-beom, observó a Jungkook para esperar una reacción de su parte.

- El castaño sonrió como si nada. - No hay problema, Jimin-ssi, yo sé que hay cosas de las que aún no sé por ser nuevo, y también sé que hay cosas personales que simplemente no se pueden evitar aunque estén otras personas, no quiero ofender, y por eso mismo es que no preguntaré algo al respecto, sin embargo, no tengo idea de lo que pasa con Jae-beom-ssi y usted, pero espero tampoco le ofenda que yo le hable o intente conocerlo un poco más, soy nuevo y soy una persona que le agrada bastante conocer gente y hacer amigos, para mí ha sido una persona agradable el día de hoy y no soy tampoco de los que juzgan a los demás rápido. - Jungkook respondió de la forma más sincera y respetuosa que pudo pensar para hacerle saber al otro sus pensamientos al respecto, la verdad es que pudo decir más pero lo correcto era contenerse, dicen que la curiosidad mató al gato y él no estaba en lo absoluto interesado en crear enemigos o de malos hablar tan pronto, Jimin era un alfa que le cayó bien por el aura que le transmitía y aprecia bastante su amabilidad, pero como ya comentó, él tampoco se privará de conocer a más personas en el tiempo que esté ahí y menos si aún no le conoce.

- Claro, no hay problema por eso, estoy de acuerdo con lo que piensas, el problema es con él, no contigo, y tampoco te pediré que no le hables por malos entendidos entre nosotros. Está bien que quieras conocerlo por ti mismo, mientras tanto tú me has agradado y podemos continuar conociéndonos también. ¿Qué te parece eso? - Preguntó dudosamente, Jimin miró al alfa castaño asentir rápidamente ante su propuesta y él sonrió también por eso.

- Claro, claro, usted y yo podemos seguir conociéndonos, ¿le parece bien platicar de nosotros mientras comemos para conocernos mejor? - Intentó dejar el tema hasta ahí y comenzar con otro, comenzaba a abrumarse por lo anterior y prefirió zanjar el conflicto hasta ahí.

- Ujum, empezaré mejor por platicarte la actividad del hospital y demás para que te acoples mejor. -

Jungkook escuchó atentamente cada una de las cosas que Jimin le recomendó y le platicó sobre el hospital para que su estadía ahí fuese mejor y más cómoda.

Su día terminó por completo cuando llegó a casa y lo primero que hizo fue pegar la cabeza a la almohada y caer profundamente dormido.


Hola, gracias a todas las personas que se han tomado el tiempo de leer la historia, gracias.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro