Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

20. Divorcio

Narra John

15 de Abril de 1981. Nueva York, Estados Unidos.

Han pasado ya 2 meses desde el día en que Paul y yo viajamos a Liverpool, no puedo creer que el tiempo pasara tan rápido.

El avión en el que estamos ya está en cielos estadounidenses, faltan unos minutos para que podamos encontrarnos con nuestros respectivos abogados, y al rededor de una hora para volver a ver a Linda y a Yoko.

Giré la cabeza para ver a McCartney, está tomado de mi mano y mueve el pie con desesperación, sé que quisiera no volver a ver a Linda, y tiene miedo de ella. Paul se percató de mi mirada y la devolvió.

—¿A ti no te asusta ver a Yoko de nuevo?—negué y dejé pasar la conversación.

Será incómodo, sí, pero mi ex-esposa no dirá nada al respecto, sabía perfectamente que esto pasaría y no lo mencionó, no tiene por qué hacerlo ahora. Creo que en eso es en lo que difieren Yoko y Linda; Puedo asegurar que la rubia por lo menos le reclamó a Paul una vez, y no se mostró tan comprensiva como Ono. Quién diría que una de sus más grandes cualidades se convertiría en una dosis de confianza para reunirme con Paul.

Bajamos del avión en un silencio terrible, no había palabras que decir, sólo hacían falta nuestras firmas para que todo esto termine, sólo eso y llegar a un acuerdo con ambas mujeres para poder ver a nuestros hijos, como siempre siento que Paul es el que peor va a pasar este proceso.

Cuando llegamos al interior del aeropuerto, nos encontramos con nuestros abogados, Edward Smith, que era un viejo amigo de Paul, pero bien podría aparentar ser su padre, y Arthur Jones, él era unos cuantos años más joven que yo me daría sus servicios.

Los cuatro fuimos a tomar un café, ahí Edward y Arthur nos platicaron lo que había pasado los últimos dos meses. La situación no es complicada, las dos mujeres ya aceptaron firmar, pero Linda se ha negado hasta ahora a dejar que Paul visite a sus hijos, y por eso es más necesario todavía que ella hable con él. A este paso, los nervios de McCartney acabarán destrozados en la noche por tanto estrés.

Faltaban 20 minutos para nuestra cita en el consulado británico de Manhattan, así que pagamos la cuenta y nos dirigimos al número 845 de Third Avenue.

El edificio era muy bonito a decir verdad, sonreí al escuchar a toda la gente hablar con un acento igual al mío, pero la sonrisa se fue de mi rostro cuando vi a Yoko y a Linda frente a nosotros, suspiré, la asiática se acercaba a mí lentamente, cualquier mujer me hubiera golpeado, ella sólo me lanzó una mirada llena de decepción y algo de esperanza.

—Recapacita, John. Sean te necesita— murmuró para que sólo yo pudiera escucharla.

—Lo visitaré, Yoko. Sean es parte de mí, lo amo, pero también amo a Paul, eso ya lo sabías.

Con esas palabras maté la poca esperanza que le quedaba de nuestro matrimonio. Arthur se acercó a mí para indicarme que debía entrar a firmar el documento que invalidaba mi matrimonio con Yoko, asentí y miré a Paul, me miró y sonrió desganado, estaba detrás de Edward, evitando lo que tendrá que afrontar en unos minutos.

Narra Paul.

—El juez pidió 5 minutos, Sr. McCartney.—dijo Edward, afirmé con la cabeza y él se retiró

Una mano tocó mi hombro detrás de mí, era Linda, había dejado atrás a su hermano.

—¿De verdad quieres hacer esto?—su voz sonaba tranquila, pero sabía que ella no lo estaba.

—Lin...tú sabes cuanto te quiero, pero...

—Pero John es más importante.—Tragué saliva.

—Lo amo, Linda. No puedo hacer nada al respecto. Pensé que lo entendías.

—Jamás pensé que llegaría a tanto, Paul.

—Lo siento.—bajé la cabeza—sólo quiero ver a mis hijos.

—Mary está muy asustada por tu ausencia, y Heather y Stella no dejan de preguntar por ti al igual que James a la hora de dormir. No estoy de acuerdo, pero ellos te necesitan a su lado.

Sonreí y Edward nos llamó para entrar a   la oficina del Juez, Linda tomó la mano de su hermano todo el tiempo, John limpió su rostro. No quería lastimarla ni hacerla llorar, pero no sabía que hacer para evitarlo.

Después de que el juez nos diera un documento que explicaba las obligaciones que debíamos cumplir y los derechos que perderíamos y de que Smith y Eastman revisaran cada clausula, Linda y yo firmamos.

Después de 12 años, era libre otra vez.









Es un capítulo muuuy corto, pero no quería quedarme sin publicar en estos días de fiesta.

¿Cómo les fue a mis lectoras mexicanas? Espero que la hayan pasado igual de bien que yo. En mi casa la fiesta se puso buena, estábamos todos a las 4 AM escuchando a Juan Gabriel :'v



Michelle_McCartney03 A esta foto me refería 😏😂. Ver a Yoko desnuda después de esta hermosura no fue agradable :v








Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro