Resopló en evidente molestia mientras tiraba su celular en la mesita de noche.

- ¿Crees que todo es como tu dices?

- No me hables así, ya sabes que tengo razón y es lo que te duele.

- Pensé que esa parte había quedado atrás Wonho... ¿Por qué insistes en discutir?

Wonho lo miró serio.

- ¿Soy yo el que insiste en discutir? ¿Se te olvida quien comenzó a gritar histérico?

- ¿Y sabes por qué? Es porque nunca me das la razón.

- ¿Y eso es motivo justificable de tus gritos? Me suena más a capricho...

Hyungwon lo señaló molesto.

- No me digas que soy un caprichoso.

Wonho lo miró fijamente.

- Hyungwon no hagas esto más grande... creo que ya es hora de parar.

- ¡Bien! Si eso es lo que quieres, yo estaré complacido de que dejes de contradecir todo lo que digo... Pero ah, espera... ¿pararemos cuando tu digas? ¿Eso también lo decides tu?

- Si, lo decido yo y se acabó, no quiero escucharte decir una palabra más...

Hyungwon se cruzó de brazos mientras miraba a Wonho salir por la puerta de la habitación.

- O si no ¿Qué?

Wonho se detuvo y lo miró.

- Hyungwon... Es mejor que termines de prepararte, no quiero que pase lo que pasó la última vez cuando teníamos que ir al almuerzo de casa de tu madre, no podemos faltar a otro por algo así, ya sabes lo importante que es para ella vernos y más si es sonrientes.

Hyungwon no dijo nada respecto a eso, exigía la atención de Wonho.

- Te hice una pregunta.

- Hyungwon...

- ¡Responde, maldita sea!

- Cuida tu vocab-

- A la mierda mi vocabulario, joder.

Entonces Wonho caminó directo hacia Hyungwon con una mirada penetrante.

Lo tomó por el pecho con una mano, lo tiró con fuerza sobre la cama y se subió sobre su cuerpo para inmovilizarlo.

Hyungwon se movía intentando safarze del agarre, pero Wonho también estaba deteniendo sus manos con su mano izquierda por encima de su propia cabeza, mientras que con la derecha lo estaba presionando contra la cama empujando su pecho.

Wonho lo miró fijamente a los ojos.

- ¿Por qué lo haces Hyungwon?

Hyungwon al principio no dijo nada pero luego de un largo silencio y su cuerpo aún inmovilizado decidió hablar.

- Sólo... Sólo quiero saber la respuesta.

- ¿Ah si? ¿Eso es lo que quieres?

Hyungwon asintió.

- Estas retrasandonos para el almuerzo con tu madre por algo así... Es mejor que te calmes antes de que te arrepientas.

Entonces Hyungwon lo miró fijamente.

- No me das miedo Wonho.

Wonho soltó una carcajada.

- No puedes ni levantarte de donde estas y haces ese tipo de comentarios... Por favor...

- He dicho que no me das miedo y es la verdad.

Entonces Wonho se acercó a su oído para susurrarle.

- Entonces gracias... esto va a ser más divertido de lo que pensé.

Al separarse lo suficiente, Hyungwon lo miró inexpresivo pero estaba un poco asustado, su corazón comenzó a latir más rápido y todo rastro de molestia se esfumó en segundos.

Sólo Wonho podía tener ese efecto inmediato en él.

Entonces la mano derecha de Wonho viajó al pantalón de Hyungwon quitando su cinturón en segundos.

Hyungwon intentó luchar para quitarse a Wonho de encima, pero no tenía las fuerzas suficientes.

Una batalla comenzó entre ambos, Hyungwon luchaba por safarze mientras Wonho intentaba amarrar a Hyungwon.

Pero inevitablemente Wonho ganó la pelea.

Con las manos de Hyungwon amarradas a la cama, el objetivo de Wonho era mucho más fácil, pues tenía ambas manos libres y lo inmovilizaba solo con su peso.

Hyungwon lo miró asustado.

- ¿Qué vas a hacer?

- Voy a darte tu respuesta.

- ¡Qué no! ¡Quítate de aquí desgraciado!

Wonho lo miró con los ojos entrecerrados.

- ¿Cómo me dijiste? Uf... Eso no se hace Hyungwon...

Entonces Wonho arrancó la camisa de Hyungwon de un tirón, sin importarle haber roto todos los botones.

- ¡Detente!

Wonho negó con la cabeza.

- No, hasta que sepas lo que pasa si no me obedeces.

Las manos de Wonho pasaron desde el abdomen de Hyungwon hasta su cuello para finalmente acercar sus labios al pálido cuello de su esposo.

Lo succionó con fuerza dejando una enorme marca allí.

- ¡Por Dios Wonho, no hagas una tontería!

Wonho hacia caso omiso a sus palabras, eso le pasaba por retarlo.

Wonho fue bajando desde el delicado cuello de Hyungwon hacia su pecho dejando un recorrido de muchas marcas.

Cuando llegó a sus pezones no pudo evitar pasar su lengua con delicadeza para humedecerlos con la finalidad de provocarle severos escalofríos a Hyungwon.

Él se estremeció y justo cuando lo hizo Wonho aprovechó la oportunidad para dejar una pequeña mordida en cada uno haciendo que jadeara con fuerza mientras Wonho sonreía por cumplir su cometido.

Pero no se detuvo por mucho tiempo, continuó dejando más marcas por el abdomen de Hyungwon que se contraía a menudo por la excitante sensación.

Wonho quitó las prendas inferiores de Hyungwon dándose cuenta que su objetivo estaba cumplido.

El cuerpo de Hyungwon pedía a gritos un orgasmo, que obviamente no iba a darle pero que le había servido para divertirse mientras Hyungwon aprendía la lección.

Decidió seguir bajando y dejando marcas mientras Hyungwon se limitaba a jadear.

Cuando llegó a su miembro lo tomó en sus manos y dio un pequeño beso en la punta arrancando un grave gemido de la boca de Hyungwon, pero luego lo soltó y se paró dejando a Hyungwon estupefacto con la situación.

Lo miró con molestia.

- ¿Qué demonios haces?

Wonho rió.

- Estaba dándote la respuesta que querías... esa es mi respuesta, las cosas se hacen cuando yo diga, así que es todo por hoy, te pondré tu ropa de nuevo y nos vamos a casa de tu madre.

Hyungwon lo miró tan molesto que parecía que lo odiaba.

- ¡Eres un-

Wonho lo interrumpió, quería seguir jugando con él.

- ¡Pero...! Si admites que tengo razón... puede que tengas un rico orgasmo en la posición que se te antoje...

Aunque Hyungwon seguía viéndolo molesto, en realidad parecía muy tierno, intentando calmar su respiración mientras su cuerpo exigía algo más.

Resopló con molestia.

- Bien... tu... tu tienes la razón...

Wonho rió por el comentario, era la única manera de poder ganarle a su Hyungwonnie.

- Ese es mi chico... pues ya que lo admites, debo cumplir con mi parte, dime como quieres estar...

Hyungwon le sonrió.

- Sorprendeme sabelotodo.

Entonces Wonho no necesitó nada más para comenzar con su labor.

Quitó su ropa y besó a Hyungwon con intensidad, esa chispa que los caracterizaba aún seguía vibrante a pesar que ya habían pasado dos años desde su segunda vez contrayendo matrimonio.

Wonho giró a Hyungwon con cuidado para dejarlo boca abajo en la cama, aún atado de manos.

- ¿Pero que...? ¿No vas a quitarme esto?

- No, no podría, si lo hago ahora vas a golpearme por hacerte sufrir, así que prefiero hacerlo luego para que me beses por hacerte gozar...

Hyungwon tenía su mejilla pegada a la cama y sus manos juntas atadas enfrente, sus rodillas puestas sobre la cama dándole a Wonho una vista hermosa de su esposo.

- Eres un...

Wonho se recostó sobre la espalda de Hyungwon para llegar a su oído y susurrarle.

- ¿Un qué? No me hagas dejarte así... estoy siendo bueno contigo Hyungwon...

- Dios como te odi- ¡Ah!

Una excelente forma de interrumpir el desprecio de Hyungwon era dándole justamente lo contrario.

La repentina penetración de Wonho le revolvió los pensamientos y jadeaba con fuerza.

Wonho se acercó a su oído nuevamente para susurrarle.

- Tu no me odias Hyungwonnie... Tu me amas... ¿Puedes decírmelo?

- Claro que n- ¡Ah, maldita sea!

Otra repentina embestida lo había dejado sin aliento, ya estaba perdiendo la cordura.

- ¿Qué decías?

Wonho comenzó a acariciar el cuerpo de Hyungwon con su mano izquierda mientras su derecha viajó directo a su miembro y sus labios al delicado cuello.

Hyungwon sentía que no podía hablar, pero Wonho no se movería hasta que Hyungwon le dijera que lo amaba.

Entre jadeos buscó su voz para poder decir algo.

- Yo... Yo t-te a- ¡Ah!

Una embestida mas.

Wonho susurraba mientras seguía besando su cuello.

- No te escuche...

- ¡Te amo, maldita sea, te amo!

Entonces por fin Wonho dejó de torturar a Hyungwon y comenzó a moverse dándole la fricción que anhelaba.

Las manos de Wonho seguían ocupadas en su tarea moviéndose al compás de sus cuerpos mientras Wonho repartía besos por toda la espalda de Hyungwon.

Los suaves gemidos salían de la boca de Hyungwon en más ocasiones de las que pensó.

Una fina capa de sudor comenzaba a cubrir el cuerpo entero de Hyungwon mientras estaba llegando al borde de su orgasmo.

Sin darse cuenta, sus gemidos se convirtieron en gritos y su respiración se volvía más entrecortada.

Sus brazos comenzaban a tener espasmos por estar amarrados pero eso no importaba, lo único que importaba era la corriente que le recorría de arriba a abajo su zona baja gracias al cuerpo de Wonho dentro suyo y también gracias a la atención que la mano de Wonho estaba brindandole a su miembro.

Lo único que pudo escuchar aparte de sus gritos fue la ronca voz de Wonho hablando a su oído en un susurro nuevamente.

- Hazlo ahora cariño... demuestrame en este orgasmo como te hago sentir...

¿Por qué su voz era tan jodidamente sexy cuando estaban haciéndolo?

Sintió los labios de Wonho sobre la parte trasera de su cuello nuevamente y ante toda la atención recibida, su zona baja pareció explotar mientras soltaba un sonoro gemido que era más un grito que otra cosa.

La mano de Wonho se humedeció de aquel caliente líquido y entonces supo que su trabajo estaba hecho, pero el propio orgasmo de Hyungwon desencadenó su propio orgasmo haciendo que Wonho terminara dentro de él sin poder evitarlo.

Ambos suspiraron pesadamente y Wonho se acostó mientras soltaba las manos de Hyungwon quien estaba desplomado sobre la cama.

Entonces Wonho lo tomó entre sus brazos y lo puso sobre su propio cuerpo mientras lo abrazaba y daba besos en su frente.

Hyungwon aún intentaba controlar su respiración mientras estaba acostado en el cuerpo de Wonho como si fuera un bebé.

Wonho acariciaba su cabello y sus brazos para que los calambres abandonaran su cansado cuerpo.

- ¿Duelen mucho?

Hyungwon asintió.

Entonces Wonho tomó las manos de Hyungwon y dejó pequeños besitos repartidos por allí.

- Yo también te amo...

Hyungwon lo miró con una sonrisa.

- Te tardaste demasiado para responder ¿Ya no me amas tanto?

- Oh vamos... No empieces otra discusión...

Hyungwon rió y un conocido sonido se empezó a emitir por un pequeño parlante que estaba en su mesita de noche.

- Al parecer ya no tenemos tiempo para seguir discutiendo...

- Ve, yo limpiaré.

Hyungwon negó con la cabeza.

- Claro que no señor Shin Hoseok... Tu harás ambas

Wonho hizo un puchero.

- ¿Por qué?

- Porque mis manos duelen mucho como para hacer algo hoy...

- Eres un tramposo...

Hyungwon rió y le dio un beso en los labios.

- Te dije que a mi nadie me gana... Pero ayudaré con la limpieza, ve tú, eso es más importante.

Se levantaron de la cama y Wonho se fue rápidamente al cuarto de baño para darse la limpieza necesaria, luego se puso la ropa y salió de la habitación mientras Hyungwon terminaba de limpiar el desastre que habían hecho.

Cuando por fin estuvo todo limpio y ya se había vestido con otra ropa apareció un sonriente Wonho en la habitación, pero esta vez acompañado.

Dos hermosas personitas le aconpañaban riendo a carcajadas por motivos desconocidos.

Los pequeños pasitos lentos y temerosos se escuchaban por toda la habitación y ambos sonrieron enternecidos porque ambos hermanitos estaban dándose un amoroso abrazo inesperado.

- Mira, recién cumplen un año hoy y están abrazandose y no discutiendo por quien se parece a quien, deberías aprender de tus hijos Hyungwon.

Hyungwon lo miró con fingida molestia y dejó aterrizar un suave golpe en el brazo de Wonho debido a que sus brazos seguían adoloridos.

En ese momento el celular de Hyungwon comenzó a vibrar en la mesita de noche y se preocupó al ver el nombre que aparecía en su pantalla.

Miró a Wonho pero él no lo vio porque en ese momento estaba agarrando en brazos a los gemelos, la pequeña con hermosos labios y tiernos ojos a su izquierda y el varoncito risueño de abultadas mejillas a su derecha.

- Hola mamá...

- Hyungwon ¿Dónde demonios están? Tenemos media hora de estar esperándolos con el pastel, la comida y los regalos ¿Por qué no llegan?

Hyungwon no sabía que decirle.

- Eh... Si mamá, lo que pasa que los gemelos estaban dormidos y ya sabes... No me gusta despertarlos...

Wonho se contuvo una carcajada y Hyungwon le miro amenazandole y recordándole que también tenía razón aunque ese no fuera el motivo principal de su retraso.

- Más vale que se apresuren o sino yo misma iré a traerlos de las orejas.

Hyungwon se contuvo la risa.

- Si mamá...

Entonces la mujer cortó la llamada y salieron de la casa para subirse a la camioneta.

Wonho acomodó a los pequeños en sus asientos y luego se fue al lado del conductor y se encontró con Hyungwon intentando encender el auto.

- Hyungwon espera...

Entonces Hyungwon se bajó del auto para ver lo que Wonho tenía que decirle.

En ese momento Wonho atrapó la boca de Hyungwon en un intenso beso y con las manos apretó su trasero para finalmente separarse verlo con una sonrisa.

- Yo conduzco cariño.

Hyungwon lo vio confuso.

- ¿Y era necesario el toqueteo?

Wonho le dio otro beso suave.

- Pues si... Es mi ración temporal para sobrevivir en casa de tu madre sin querer besarte cada 5 minutos.

Y se subió al auto.

Hyungwon se rió de la tontería de Wonho y se subió al auto en el asiento del pasajero aún riendo.

Wonho lo miró serio.

- Hyungwon...

Entonces él también lo miró esperando lo que tenía para decirle.

- Gracias por darme tanto... me has dado lo mejor que tengo en la vida...

Hyungwon sonrió enternecido.

Podría arrepentirse de muchas cosas, pero jamás podría arrepentirse de amar a Hoseok, de perdonarlo y lo más importante, de comenzar de nuevo...

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Espero que les haya gustado este especial.

Y no olviden que en mi perfil pueden encontrar más historias 2won.

Muchas gracias por todo, hasta pronto 😊🖤