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Enredados en una farsa pt. 2

Memories in stardust

—¿Ustedes...? —Jungkook contuvo el picor de sus manos—. ¿Son algo?

—Somos novios —respondió Taehyung, trémulo—, salimos desde hace casi un año.

—¿Es eso cierto, Yoongi? —preguntó Jungkook.

El mencionado permaneció callado, ni siquiera se inmutó, todo el peso de sus emociones recayó en esa silla negra y su mirada permaneció lejos de todo, en algún punto vacío de la habitación.

Jungkook quiso gritarle a ambos por toda la farsa que fue que le engaño perfecto para él, sus sentimientos, cada momento e incluso el beso... ¿Qué eran? Una mentira quizás, un juego donde Jungkook fue el objeto de burlas de esta pareja. Así era como se sentía.

—Espero que estés contento, Taehyung —susurró Yoongi—. Ya vete.

—Necesitamos hablar... —rogó Taehyung, con un pequeño gemido suplicante al final de su oración—. Tienes tanto que explicarme, no puedes dejar este problema así...

Yoongi negó con la cabeza, giró en la silla y recargó los codos en el escritorio para luego esconder el rostro entre sus manos, Hoseok se acercó silenciosamente y pasó una mano por su espalda.

—Taehyung, por favor, déjanos —pidió Yoongi.

—¡No! ¿Por qué? ¿Por qué yo me voy y él se queda? Esto... —Taehyung comenzó a hiperventilar, aunque esas respiraciones angustiantes solo fueron perceptibles para Jungkook quien estaba más cerca—. Esto es ridículo, ni siquiera tiene sentido, yo no debería ser quien se vaya... ¡Íbamos a arreglarlo! ¡Me pediste que viniera para que arregláramos las cosas! ¡¿Por qué me haces esto?!

Yoongi negó con la cabeza sin ver.

Y en ese momento Jungkook tuvo ese impulso de idiotez de hacer algo.

—¿Piensas que es maduro de tu parte lo que estás haciendo? —preguntó, tan agresivo como Yoongi lo fue con él hace unos momentos—. Te quejas de mí, pero eres peor que yo en esto. No sé qué maldito problema tengan entre ustedes dos, ni siquiera me corresponden, ¿pero sabes lo mucho que Taehyung debe estar sufriendo por ti? Nunca lo veo contigo, todo el tiempo está en la calle intentando sentirse menos solo y tú siempre estás encerrado en el estudio haciendo tantas cosas innecesarias cuando podrías estar aquí con él, ¡¿y de repente te cierras y dices que no quieres hablar después de la manera en la que acabas de acusarlo sin entender nada de lo que te quería decir?!

—Jungkook, no es necesario... —interrumpió Taehyung, sus ojos verdes se volvieron cristalinos.

Esa mirada rota despertó algo en Jungkook, una especie de impotencia que poseía por naturaleza. Apartó a Taehyung y se acercó hasta donde Yoongi estaba sentado.

—Taehyung se siente inseguro por si no lo habías notado y es horrible para él venir a la residencia a intentar poner las cosas en orden y que lo reciba otra persona en la habitación, ¿no piensas ni un segundo en sus inseguridades? Está bien, Taehyung no reaccionó de la manera correcta, ¡pero al menos deberías intentar escucharlo! Las parejas deben arreglar sus problemas juntos, no gritarse cosas hirientes solo para... solo para hacer sentir mal al otro, eso... eso.. es... —gimió frustrado—. ¡Es estúpido e inmaduro, Yoongi! El día que tu pareja se vaya de la residencia completamente, ¡espero que te des cuenta de que tuviste la oportunidad de arreglarlo y no quisiste! A la próxima no hagas que la gente pierda su tiempo y actúa como un verdadero adulto. ¡Tienes que darle su lugar a tu pareja!

Yoongi alzó la mirada hacia Jungkook, el menor había presionado un interruptor en su interior, eso era obvio, y ahora los ojos de uno de los dueños de la habitación destilaban una ira verdadera que había sido contenida durante la discusión.

—Disculpa, pero ¿quién carajos crees que eres para...?

Hoseok tomó a Yoongi del hombro y le dio un apretón ligero.

—Jungkook, Yoongi necesita un respiro, por favor... no queremos desatar una pelea que no llevará a ningún lado, ¿de acuerdo? —sugirió.

—Descuida —contestó Jungkook—. Taehyung y yo ya no tenemos nada que hacer aquí hasta que a Min Yoongi le den ganas de hablar, mientras tanto, puede irse a la mierda.

Tras el vómito verbal, Jungkook tomó la mano de Taehyung y salió de ahí, siendo perseguido por las maldiciones de Yoongi y la preocupación de Hoseok, cosa que no le importó, fue hasta el ascensor y una vez dentro intentó controlar su respiración frenética.

Taehyung tuvo miedo de interponerse en el pequeño ataque de su amigo, bueno, no sabía si el menor aún lo veía como a uno después de todo lo revelado, pero aún necesitaba actuar con cautela. Luego de que su adrenalina se terminó, se sintió muy pequeño encerrado en esas cuatro paredes de acero junto a Jungkook, quien definitivamente no estaba feliz.

¿Quién era Jungkook? Tenía una corazonada.

Taehyung pensó que Jungkook podía ser ese amigo del que Jimin habló hace mucho tiempo. Sonaba absurdo, pero todo encajaba a la perfección, Jimin no dejaría entrar a nadie a su vida como estaba dejando entrar a Jungkook según los rumores.

—¿Quién eres? —le preguntó en un susurro sin recibir respuesta, continuó—: ¿Eres el amigo de la infancia de Jimin?

Sintió que la respiración del contrario se detuvo y eso fue una gran señal.

—Métete en tus propios asuntos —masculló Jungkook.

Mierda.

Esa reacción lo decía todo, porque si no lo fuera lo habría negado y ya, sencillo.

El ascensor se detuvo y Jungkook comenzó a avanzar sin dejar que Taehyung le siguiera el paso, pero este fue terco como siempre y empezó a correr a sus espaldas.

—¡Jungkook! ¡Espera! ¡Tienes que escucharme! —gimió frustrado—. Eres su amigo, ¡¿verdad?! ¡Eres el chico de su infancia!

—¡Taehyung, deja de seguirme! —ordenó Jungkook sin detener la aceleración de sus pasos—. Te hice un maldito favor allá adentro al defenderte, pero quiero que tú también te vayas a la mierda, porque yo ya terminé con ustedes, ¿bien?

La relación de Taehyung seguro que ya estaba en la basura, así que dio vuelta a la página en un pestañeo porque todavía existían cosas que podía rescatar y esta era una de ellas, Jimin, su prioridad.

—¡Jungkook, no puedes irte!

—¡Me mentiste!

—¡Sí, pero...! ¡Jungkook!

El pelinegro se detuvo de golpe, giró para encarar a Taehyung y lo primero que hizo tras ello fue propinarle un buen puñetazo en la mejilla que lo hizo perder el equilibrio y casi tropezar con sus pies.

—J-Jungkook... —jadeó desconcertado.

La conmoción lo obligó a retroceder, alzó la mirada vidriosa y encontró el cuerpo tenso de Jungkook frente a él, nunca se había visto tan intimidante.

—¡¿CÓMO PUEDES SER TAN INCONSCIENTE?! ¡Me mentiste, Taehyung! ¡Tenías novio y nunca lo dijiste! Ni siquiera cuando... Maldición, ¿Yoongi siquiera lo sabe? ¿sabe que te besé? ¿sabe lo que pasó ese día?

Taehyung sostuvo su mejilla con la mirada baja mientras negaba con la cabeza.

Ya no podía ser una situación aún más frustrante para ambos.

—No fue mi intención, ¿sí? Te lo iba a confesar de todas formas, a ti y a él... —se excusó.

—Sabías lo que hacías —interrumpió Jungkook, sus manos subieron hasta su cabellera oscura y tiró de su propio cabello con angustia—. Estaba tan frustrado porque Jimin me quería sacar de su vida y tú estabas ahí, así que pensé que como te sentías un poco atraído hacia mí y yo me la estaba pasando bien contigo... ¡Maldición! No sé qué demonios pasaba por mi cabeza... no sabía que tenías novio y que me estabas... ¿usando?

—Sí, ¿y qué? Tú también me usabas para sacarte a Jimin de la cabeza, y lo siento, todo el coqueteo... sí, sí, era intencional. Todos hemos hecho eso alguna vez en nuestras vida y no importa, ¿de acuerdo? —lo cortó Taehyung, quien seguía ahí, presionando su mejilla magullada—. Ahora, lo principal, eres el compañero de habitación de Jimin, ¿por qué no lo dijiste antes? Joder.

—Tienes novio, Taehyung... ¿Viste lo que pasó allá adentro? No creo que estemos en la misma página.

Jungkook iba de un lado a otro como un conferencista inexperto, Taehyung negaba con la cabeza mientras lo escuchaba y en cuanto a su rostro no es que fuera indiferente, pero definitivamente no tenía cara de estar pensando en el mismo problema y eso solo era otro factor incomprensible para el estrés de Jungkook.

—Nada de eso importa ahora porque tú eres el amigo de la infancia de Jimin... ¡Eres lo que tanto buscaba!

Ahí estaba la mente de Taehyung, ¿por qué iba a detenerse a discutir sobre lo que acababa de revelarse de su relación amorosa cuando eso ya no podía solucionarse en este momento? Hace apenas unas semanas había pensado tanto en el muchacho de los rumores y en la anécdota de su mejor amigo, buscar al chico con mirada de mil estrellas era buscar una aguja en un pajar y él había sido un suertudo bendecido por el destino.

¡Solo iba a concentrarse en eso!

—¡Taehyung, pon la maldita cabeza en esto! ¡¿Entiendes por qué estoy enojado?! ¡Esto no se va a resolver de la noche a la mañana!

—Jungkook, si tú y yo trabajamos en esto y hacemos que Jimin...

Jungkook se acercó a Taehyung, lo tomó por los hombros y sacudió su cuerpo con frustración al ver que este no tenía intención de discutir lo que el pelinegro estaba diciendo.

—¡Mierda, Taehyung! ¡Me engañaste! ¿Entiendes o necesito golpearte de nuevo? Creí que todo estaba bien entre nosotros, ¿de acuerdo? Creí muchas cosas y te defendí porque soy un imbécil, ¿puedes hacerme sentir que valió la pena? ¿puedes hacer al menos eso?

Taehyung sacudió la cabeza y se deshizo del agarre en sus hombros, golpeando las manos de Jungkook con ambos brazos.

—¡Mi relación está colgando de un puto hilo, Jungkook! —gritó—. Vi que Yoongi te odiaba y aproveché la oportunidad, por eso salí contigo, me hice cercano a ti, se lo conté todo para ver si podía sacarle alguna reacción que me hiciera sentir que me quería y luego...

—A él no le importó —concluyó Jungkook, negando con la cabeza—. Eres una mierda.

—Quizás tienes razón —admitió Taehyung—. Pero eso no significa que no seas importante para mí... y para Jimin, porque tú... eres ese amigo, ¿verdad?

Jungkook se recargó en el barandal de la jardinera más cercana, sentía náuseas.

—No entiendo qué está pasando... —susurró con la voz temblorosa—. Esto es tan... ¿Pensabas decirme la verdad o solo me seguirías utilizando para sacarle celos al imbécil de tu novio?

—Te enteraste de que yo era su mejor amigo, pero no me dijiste nada porque tenías miedo de que te mandara a la mierda como a todas las demás personas que intentan acercarse a Jimin, ¿verdad? Bien, también sentí eso, no quería arruinar nuestra dinámica.

—Ya está arruinada, Taehyung...

—Juro que te lo iba a confesar todo en la carrera, ¿de acuerdo? Lo siento por las mentiras, no lo mereces, nadie lo merece y si hay una manera de enmendar mis errores... tal vez estaría bien que vinieras a la carrera y me dejaras mostrarte todo, Yoongi dijo que tenías curiosidad y supongo que es porque quieres salvar a Jimin, ¿verdad? Puedo ayudarte si tú... si tú me perdonas y juntos haremos que Jimin recapacite, lo haremos entrar en razón y...

—Te cuesta procesarlo, ¿no es así? —preguntó Jungkook, alzando el rostro de nuevo—. Quieres que hablemos de Jimin porque lo que acaba de pasar allá adentro, cuando Yoongi te despidió de la habitación... te arruinó.

—Sí —confesó Taehyung sin darle más vueltas al asunto—. ¿Sabes en qué estoy pensando? En subirme a mi puta motocicleta y conducir a toda velocidad hasta la fiesta más cercana para beber durante horas y que me de un coma etílico... pero concentrarme en esto me ayuda mucho a callar esas ideas intrusivas...

Ese era el mecanismo de defensa de Taehyung, si Yoongi se encerraba en la música y evadía el diálogo, Taehyung hacía lo mismo de las maneras más nocivas.

No era una mala persona según Jimin, Taehyung solo era un tipo pérdido que cada vez arruinaba más su vida para poder sentir algo y no quería esto, por más que él mismo se colocara en situaciones así de difíciles, no era intencional, estos impulsos eran involuntarios.

—No tienes que hacerlo —respondió Jungkook y mantuvo la mirada fija en los arbustos que mecía el viento—, no tienes que ser como él y desviarte de los problemas como si no existieran, puedes pensar en ellos, ponerte triste y llorar hasta sentir vergüenza de ti mismo porque al menos eso te ayudará a aceptar lo que acaba de suceder, tarde o temprano vas a reflexionar y comprender con la mente fría por qué pasaron las cosas y cómo puedes mejorarlas.

Ambos permanecieron en silencio, Taehyung repitiendo las palabras de Jungkook en su mente y este último intentando calmarse mientras admiraba el pequeño marco de naturaleza que adornaba el estacionamiento de la residencia.

—Lo siento —susurró Taehyung, al final el sonido de su respiración se convirtió en llanto—. Perdón por mentirte... estaba aterrado... y-yo solo... quería su atención, Ojitos... pensé que sería fácil y jodí todo...

Su voz se rompió antes de poder seguir hablando y los sollozos se convirtieron en el ruido melancólico de un mocoso de cinco años que acababa de tener la mayor caída de su vida. Jungkook estiró un brazo y permitió que Taehyung refugiara su tristeza en su hombro.

—Estoy molesto —admitió con la voz más calmada—. Hay muchas cosas que merecen una explicación —acarició la cabellera azul del contrario mientras lo sentía asentir con la cabeza—. No más mentiras como estas, ¿me escuchas? A la primera que me hagas sentir engañado y que no seas honesto conmigo se acabó y lo mismo va para mí, si te oculto algo tan importante como mi pasado con tu mejor amigo o el hecho de que ya sabía quién eras, cosas así de grandes, entonces tampoco tendré derecho a llamarme tu amigo.

—E-Está bien... —contestó Taehyung con la voz entrecortada.

Siguió sollozando, su cuerpo delgado se agitó en pequeñas convulsiones y gemidos dolorosos que poco a poco eran más fáciles de contener. Tras algunos minutos finalmente se separó, mostrando su rostro rojo e hinchado.

—¿E-Entonces me... perdonas? —dudó, secándose las lágrimas con el dorso de la mano, aún entre hipidos.

—Vas a tener que ganártelo —respondió Jungkook, con una sonrisa burlona para calmar el sufrimiento de su amigo—. Tengo muchas dudas y eres la persona perfecta para responderlas.

—Tonto...

—No me insultes porque puedo golpearte.

—Imbécil, ninguna otra persona me había dado un golpe como ese, ni siquiera en mis peleas callejeras —contestó, fingiendo enojo.

—Un placer —Jungkook medio hizo una reverencia juguetona—. Aunque lo siento por eso...

Taehyung acarició su mejilla enrojecida con un tacto cuidadoso, su mirada se perdió en Jungkook por algunos momentos sin verlo, solo pensando.

—Me lo merecía —concluyó.

Jungkook estiró ambos brazos y volvió a atraerlo hacia su cuerpo.

—¿Qué sigue? —preguntó Jungkook—. ¿Cuál es el siguiente paso de tu maravilloso plan, Gucci Rider?

—No tengo un plan —admitió Taehyung, un poco apenado—. Pero sé lo que tenemos que hacer y el primer paso es ir a esa carrera el jueves de la próxima semana.

—¿Es tan importante...?

—Sí, Jungkook, demasiado, a esa carrera irán personas muy importantes, tienes que conocerlas para que comprendas lo que está pasando al otro lado del río —explicó Taehyung—. Nombres, estructuras, jerarquías... No tienes idea de lo importante que es que empieces por esto antes de intentar comprender a Jimin, ¿bien?

—Perfecto, estoy dentro del plan —Jungkook palmeó la espalda de Taehyung—. ¡Hagámoslo!

Taehyung estaba lejos de sentirse bien, pero esto era suficiente para seguir respirando y mantener los pies en la tierra.

Jungkook era su amigo y esperanza. Esta era su manera de disculparse por su insuficiencia y tal vez cuando la culpa cesara podría cambiar, no permitiría que la oportunidad de devolverle todos los favores a Jimin se le fuera de las manos.

Ya no.

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Al fin pude subir este capítulo, no tienen idea de la cantidad de veces que lo reescribí, fue toda una travesía que pensé que jamás terminaría, incluso me quedó muchísimo más largo de lo normal y por eso decidí dividirlo.

Es difícil hacer escenas que involucren a más de dos personajes interactuando al mismo tiempo, pensé cautelosamente en cada diálogo, las decisiones de Jungkook al final del capítulo podían cambiar la perspectiva que tienen de él y eso me presionó demasiado al igual que el comportamiento de Taehyung y sus mentiras.

Este capítulo muestra caras muy distintas por parte de los personajes y también nos enseña otra faceta de Jungkook, ¿cómo cambiará su nivel de confianza en los demás a partir de aquí?

Espero que me comenten sus opiniones respecto a los personajes y que me digan, ¿qué harían si estuvieran en la posición de estos? 

Créditos de los nuevos separadores a Yooniesvibrator. ❤️

—KMDPrincess.



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