Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo # 3: Primer contacto.


Desde ese día la vida de Loki cambio por completo. Ahora sufría de espasmo en el estomago cuando se retrasaba demasiado en comer algún alimento, sufría de labios secos a falta de hidratación, e incluso dolores fuertes de cabeza por forzar su vista en la noche para leer y obligarse a no dormir cuando su organismo se lo pedía.

Thor le aconsejo un cambio de rutina, pero el que alguna vez fue un dios se negaba a aceptar un cuerpo tan débil.

Habían transcurrido un mes en aquel mundo y Thor se había acostumbrado a la sombra corrediza del dios por la casa, a penas y cruzaban palabras por lo que acepto salir todos los días en pequeñas misiones junto con los vengadores.

A Loki se le hacía estúpido el trabajo que había tomado su hermano en ese reino como justiciero y en vez de perder su tiempo en romances pasajeros o amigos ineptos lo administraba en una idea sobre un portal que pudiera sacarlo de aquel lugar. Si llegaba donde sus aliados -ahora enemigos- estaba seguro que lograría llegar a un acuerdo con ellos, pero para eso necesitaba de mucha inteligencia y sobre todo, materiales. La inteligencia la tenia, e incluso ya tenía una posible teoría de cómo realizarlo, solo necesitaba los componentes necesarios para llevar a la realidad aquella idea y era más que obvio que estos no crecían de los arboles.

Suspiro cansado y camino a la cocina, ese cuerpo se deterioraba muy rápido si no consumía alimentos en un plazo de tiempo menor a doce horas, al abrir la nevera se hayo con jarras de agua y... Nada.

Camino a las vitrinas y sorpresa: no tenían alimentos.

Su estomago volvió a gruñir demandante de algo comestible y recordó el comentario de Thor sobre abastecer la cocina, lo cual incluía una larga lista sobre el mesón con los alimentos necesarios a comprar, una tarjeta de crédito falsificada por su amiguísimo Tony Stark -obvio que la cuenta tenía un límite millonario, así que escatimar gastos no estaba en su vocabulario- y una nota donde explicaba donde debía ir a buscar lo antes mencionado y la clave de dicha tarjeta.

Él se había negado de inmediato a realizar esa tarea, lo que menos quería era tener contacto con esos humanos y Thor solo le sonrió diciendo que no lo obligaría si no quería, pero que astuto había sido el rubio... Prácticamente lo dejo a merced de su apetito.

Bufo por lo bajo y lanzo una serie de groserías en contra del mayor, cuando lo volviera a ver le haría saber que no estaba para ese tipo de cosas. Se arreglo un poco para salir del lugar con una camisa blanca algo ceñida a su pecho, unos pantalones de vestir en negro y un sobretodo europeo del mismo color. Observo por largo rato los zapatos que tenia y a la final opto por unos formales y brillantes. Se peino un poco el cabello frente al espejo y se dio cuenta de que debía hacerse un corte, por más que le gustara llevarlo largo aquello le quitaba mucho tiempo en cuidados y ese tiempo podría administrarlo en otras cosas más productivas, mientras abría la puerta de su apartamento con aquella idea en la cabeza leyó su nueva identificación.

"Thomas Hiddleston"
*¿De dónde sacaron un nombre tan sofisticado?*

Al abrir la puerta se topo con unos hermosos ojos claros -podría decir casi felinos- que le miraban con atención, la puerta que estaba frente a su departamento se hallaba abierta y una chica de piel bronceada y cabello castaño le miraba con sus penetrantes ojos azules, otra chica de similar aspecto salió detrás de ella y ambas le sonrieron cosa que él ni siquiera devolvió, solo alzo una de sus cejas, se dio vuelta para cerrar su puerta haciendo en cuenta que aquellas chicas no existían y se marcho poco despues.

Las mujeres quedaron sorprendidas pero no por eso estáticas, caminaron hacia donde estaba y antes de que él creyera que venían al ascensor entraron al apartamento que quedaba al lado del suyo.

Ignoro aquello y le prestó atención al aparato que aun no terminaba de llegar pero entonces la melodía volvió a sonar en su mente, en sus recuerdos. Pero lo que lo dejo helado fue el cabello que podía ver desde su balcón cada noche. Era una mujer de cuerpo delgado y frágil, con un cabello bailarín hermoso.

¿Alguna de esas mujeres era su ángel flautista?

El ascensor llego y nuevamente vio correr a la castaña por el pasillo, pero esta vez si venía a donde él estaba esperando con impaciencia el ascensor, las puertas del mismo se abrieron y ambos entraron en silencio. Mientras bajaban podían escuchar la respiración del otro y solo eso bastaba para incomodar a dios.

—Disculpa ¿Desde cuándo te has mudado al edificio? —la muchacha tenía una voz suave.

—Dudo que eso sea de importancia para ti mortal —ella soltó una risita suave ocasionando que Loki se girara a verla— ¿Qué te ha causado tanta risa?

—¿Siempre le dices eso a las personas?

—¿Decirles que? —no comprendía el punto de la chica.

—Mortal... —la frase salió sin malas intenciones de sus labios pero Loki sintió un frío recorrerle la espalda.

—No soy de este lugar, donde vivo es normal... —no quería que ella lo tachara por loco por lo que prefirió callar y dejar incompleta aquella frase.

—Oh ya veo —el aparato se detuvo y con rapidez abrió sus puertas— Bueno señor mortal es un placer haber conocido a mi vecino de al lado. Soy Alexa para lo que necesites y mi hermana, la otra chica que estaba conmigo es Alma, vive al frente de ti... —se quedo pensativa y con una suave sonrisa termino aquella presentación— Con ella no cuentes, le molesto que la ignoraras.

—¿Vives al lado? —su tono de sorpresa fue captado por la chica,esa mujer que tenia al frente era algo especial, era dulce, hermosa y tocaba como los ángeles. Su hermana no le interesaba y si no le dirigía la palabra aquello no le importaba en realidad.

—Si.

Ella le sonrió y comenzó a caminar pero luego se detuvo y se giro para observarlo.

—¿A dónde iras? —la chica parecía querer pasar en alto su expresión cortante, como si le agradara ser rechazada por él— Pensaba ir al supermercado que esta a unas cuadras de acá.

Loki se negó a responder aunque su destino fuera el mismo, ella le miro y comprendió que no lograría sacarle otra palabra al moreno, cruzo a su derecha cuando llegaron a la salida y él miro el camino que daba al garaje y se pregunto si sería malo ir caminando al lugar donde ella le dijo— Pensándolo bien, no conozco mucho estos lugares.

La alcanzo en un trote suave y ella asintió aceptando su presencia, a pesar de su mal trato ella no se inmutaba, por primera vez veía en alguien una mirada calidad y carente de desconfianza. Aquello lo hacía meditar en si valía la pena conocer a esa humana.

—¿Y qué tal Londres? —él le miro sin comprender mucho— Vi tu identificación en el ascensor y dice que eres británico. ¿Cómo es Londres?

—¿Te gusta invadir el espacio privado de los demás? —Loki guardo aquellas identificaciones en unos de los bolsillos de su sobretodo y ella observo al frente algo sonrojada.

—Siempre me dicen lo mismo —admitió en un tono sutil.

—Eso me gusta —el descaro con que lo pronuncio le provoco pulsaciones a la chica.

—¿Y cómo es?

Loki lo medito un rato, muchas veces cuando venía de excursión a la tierra visito aquel agradable lugar y podría decir que de todo lo que conocía en ese mundo era lo que más le había gustado, la elegancia de las estructuras, las calles hermosas y alumbradas, e incluso el acento que muchas veces imito en su mundo. Cierto, él no era de Londres, era de otro mundo donde el hielo consumía la vida en un respiro, observo al frente evitando la mirada curiosa de la chica y lo recordó, fue criado por Asgardianos pero él no era unos de ellos, no era ni dios, ni mortal.

—Solo quiero que sepas que no me interesa hacer ninguna amistad con nadie en este lugar —ella suspiro y admitió que era su culpa por ser tan curiosa.

—Comprendo, tampoco soy de aquí y por eso creí que si conocía a alguien más podría sentirme menos sola —hizo un esfuerzo por no llorar.

Loki la miro y se sintió algo identificado con ella, siempre que la veía desde el balcón podía notar cierta nostalgia en su modo de tocar, se trago el orgullo insano que tenía sobre su lengua y susurro.

—Es mágico.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro