Pronto actualizaré de los pedidos, pero ya me inspiré para otro Anidala cortito jejejeje por supuesto en base a una canción, así que lo comparto con ustedes como siempre.

Padme observaba a su esposo dormir a su lado. Estaban en Naboo y él estaba de permiso por haber sufrido una herida en combate. Padme odiaba cada herida en su cuerpo, odiaba el miedo que sentía de perderlo. Deseaba que él no tuviera que arriesgarse así.

Sin embargo Anakin, se sentía casi agradecido de ser herido en combate, eso significaba que podría descansar, y estar cerca de su amada esposa secreta.

Padme acariciaba sus cabellos semi- largos, y notó que el estaba teniendo pesadillas, ocurría a menudo, y ella lo calmaba cada vez que estaba cerca.

Lo abrazó apegando su pecho desnudo a la fuerte espalda de su esposo y comenzó a hablar a su oído, una promesa, una que ella cumpliría.

Ella prometió que cuando la oscuridad quisiera arrastrarlo, ella estaría allí para evitarlo. No importaba que tan lejos estuviera, ella siempre iría a por él. 

Ella le mencionaba que estaba a su lado, que las  sombras de la guerra se irían, que estaba a salvo ahora, que ella jamás dejaría que su alma se rompiera.

Padme observaba a Anakin comenzar a  calmarse poco a poco, pero aún las pesadillas estaban allí, siempre lo estaban. A pesar de ser el jedi más poderoso de todos, la fuerza de un hombre era fugaz, a veces la guerra los destruía, ella sabía que eso era lo que estaba pasando con su esposo. Todos sus escudos se estaban rompiendo, consumiéndose, pero ella no dejaría que él se consumiera en esa oscuridad.

Ella sabía que Anakin era fuerte y poderoso en la batalla, pero emocionalmente él siempre huía de las sombras del pasado, muchas veces se aislaba ocultando su dolor del mundo, pero ella jamás lo dejaría solo, mientras lo sentía temblar en sus brazos por sus pesadillas, ella le prometía que jamás lo dejaría, que siempre estaría allí, que la mañana pronto llegaría y alejaría las pesadillas, que alejaría todos los fantasmas, que ella lo cuidaría.

Lo sintió comenzar a calmarse poco a poco. Ella cumpliría su promesa, siempre lo cuidaría. Siempre estaría con él. Ambos tenían una vida por separado. Pero también ambos se amaban y estaban casados. Siempre estarían el uno para el otro.

Anakin despertó y se dió vuelta observando a Padme sonreírle.

- Lamento haberte despertado- dijo Anakin algo avergonzado, abrazándola contra su pecho. Aquellas visiones en su mente luego de las pesadillas aún atormentándolo.

- Siempre estaré para ti- susurró ella besándolo cortamente- Nunca dejaré que la oscuridad te consuma. 

Él la observó sin comprender pero la abrazó. En sus brazos no había oscuridad, en sus brazos había paz. En sus brazos el se sentía en armonía con la fuerza. En sus brazos él era feliz.

Y cuando la guerra terminó, ella cumplió su promesa, nunca permitió que él fuera arrastrado por la oscuridad.