Darth Vader y Padme Amidala
Nota: Este pedido no tiene contenido para adultos, fue un pedido bastante específico, más bien un relato triste, con un final agridulce. Lo escribí y tomé extractos de la novela ''el retorno del jedi'' para escribirlo, espero les guste, nunca había escrito sobre Darth Vader, fue todo un desafío hacerlo, pero finalmente pude hacerlo jeje, y aquí esta este pedido específico de una tragedia.
En la orilla de un lago, en una galaxia muy muy lejana.
Una madre y su pequeño hijo estaban sentados frente al lago, el niño miraba atentamente a su madre, mientras ella comenzaba a relatar sus historias.
- ¿Me contarás nuevamente la tragedia de Darth Plagueis el sabio?- preguntó el pequeño niño y su madre sonrió, acariciando sus cabellos.
- Ya has escuchado muchas veces la tragedia de Darth Plagueis ¿Pero alguna vez has escuchado la leyenda contada por los ancianos en Naboo?- preguntó la mujer y el niño la observó con curiosidad.
- Nunca he escuchado historias de Naboo mami ¿Podrías contarme una?- preguntó el niño recostándose sobre las piernas de su madre.
La mujer cerró los ojos, sonriendo con nostalgia al recordar la historia, luego dio una sonrisa leve y comenzó a relatar.
- Es una antigua leyenda, cuenta que una vez había una joven y hermosa reina, la más sabia y valiente de todas las reinas de Naboo, la más bondadosa y la más comprometida con su pueblo- comenzó a relatar la mujer- Incluso su pueblo intentó cambiar la constitución para extender su reinado.
- ¿Lograron hacerlo mami?- preguntó el niño interesado
- No, pero ella siguió luchando por su pueblo y por la paz en toda la galaxia, un día la joven se enamoró de un apuesto y valiente jedi, se casaron en secreto en Naboo y su amor fue más grande que toda la galaxia- dijo la mujer sonriendo al ver los ojos curiosos de su joven hijo.
- ¿Qué ocurrió con ellos mami?- preguntó el niño sentándose en las piernas de su madre, mientras jugaba con los largos cabellos castaños de la mujer.
- La joven murió de tristeza- dijo la mujer observando la mirada de su hijo entristecerse ante la historia- y el destino del joven siempre fue incierto, algunos dicen que murió con el resto de los caballeros jedi en el comienzo del imperio, otros dicen que huyo, y otros, los más sabios, dicen que un destino mucho más oscuro fue él que lo atrapó- dijo la mujer con tristeza.
- ¿Es una historia triste mami?- preguntó el niño confundido
- A veces las historias más tristes y dolorosas, también pueden tener un buen final- dijo la mujer sonriendo.
Mustafar, algunos años atrás.
Aún podía recordar el aroma de su cabello, aún podía recordar cada centímetro de su piel bajo sus manos, aún podía recordar la belleza de su mirada y la calidez de su sonrisa. Aún podía recordar su mirada desesperada, sus suaves súplicas.
- Te amo Anakin- había gritado- Solo necesito tu amor- había dicho pero el ya no era Anakin, él era Lord Vader, y creyó que podía salvarla, aunque eso solo lo haya conducido a perderla.
- Mentirosa- había gritado, estrangulándola hasta que ella cayó completamente inconsciente, luego él había luchado con su maestro, su hermano, y él lo había abandonado mutilado y quemándose en los ardientes ríos de lava de Mustafar.
Fue encontrado por su nuevo maestro, y puesto en aquel traje, en aquella prisión, que lo condenaría a vivir en sufrimiento por el resto de su vida. Pero ningún dolor, podía compararse al dolor de saber que él la había matado, de saber que él había acabado con la vida de su amada, que él la había llevado a su muerte, aun cuando todo lo había hecho para salvarla.
Había construido un castillo en aquel lugar desolado, solo para recordar el lugar en donde la había perdido, solo para crear aquella máquina que había fracasado, él quería traerla de vuelta a la vida, pero lo que se le había prometido era falso, él no había podido salvarla. Y ahora estaba destinado a vivir sus días en completa agonía, ahora solo el poder importaba.
Estaba de pie en medio de su palacio en Mustafar, estaba solo, no quería a nadie a su lado, solo la agonía en la que todos los días se refugiaba para poder recordarla, sus bellas palabras, las noches de anhelo en que se perdían en los brazos uno del otro, luego de meses separados, los amaneceres que los encontraban juntos, soñando con el futuro, soñando con irse lejos y vivir esa vida pacífica que tanto habían soñado, cuando ya nadie los necesitara. Pero eso nunca había podido realizarse.
- Estoy aquí- susurró una voz tan conocida para él, abrió los ojos en agonía, solo para encontrarla en frente de él, tan hermosa como la recordaba, tan hermosa como siempre lo había sido, pero él sabía que ella estaba muerta- Lo estoy- sonrió con nostalgia- Pero estoy aquí- sonrió abrazando a la figura del hombre frente a ella que había caído de rodillas.
¿Quién habría imaginado que podrían ver al gran Lord Vader, de rodillas frente al fantasma de su esposa? Seguramente nadie en toda la galaxia lo hubiera imaginado.
- Padme, lo siento tanto, yo- dijo Darth Vader, sintiendo como Padme comenzaba a retirar la máscara de su cabeza- Padme yo, no soy el que recuerdas- dijo Darth Vader, temeroso de que ella viera en lo que se había convertido, temeroso de que ella viera al monstruo detrás de esa máscara, no moriría si solo se separaba de esa máscara por unos minutos, pero no le molestaba hacerlo si podía verla a ella una vez más.
Padme retiró la máscara, observando al hombre detrás de ella, su rostro magullado y cicatrizado, convertido en algo apenas humano.
Y Vader la ve a ella, su mismo rostro, sus mismos cabellos rizados, pero triste, ella ya no sonreía, ella estaba muerta, él la había matado.
- No fuiste tú- dijo Padme besando su frente- No fuiste tú quien lo hizo- sonrió el fantasma de Padme acariciando el rostro de su esposo
- ¿Qué? Yo, lo recuerdo, yo, en Mustafar- comenzó a decir Vader con dolor, él lo había hecho, él la había matado, él había acabado con la vida del ser que más amaba en el mundo.
- Fue él quien lo hizo, fue el quien robo mi energía vital, fue él quien me mató- sonrió Padme y Vader comprendió, Lord Sidious lo había engañado, él había acabado con la vida de Padme porque era una amenaza, él lo había engañado por tantos años.
- Debes cuidar de nuestros hijos ahora, debes salvarlo del emperador- dijo Padme observando con una sonrisa a Vader.
- Luke, el emperador lo quiere a su lado, el muchacho es fuerte- comenzó a decir Vader, hasta que comprendió las palabras de su esposa- ¿Hijos?
- Leia- susurró Padme y Darth Vader comprendió, pero también recordó todo el horror que había hecho vivir a Leia, había ayudado a destruir su planeta natal, la había torturado y había congelado a su novio en carbonita.
- Solo tú puedes salvarlos, Ani- sonrió Padme besando cortamente sus labios para luego desaparecer de la misma forma en que llegó.
Vader rápidamente se puso su máscara nuevamente, observando con nostalgia el lugar donde minutos antes su amada esposa había estado, y pronto otra presencia apareció allí.
- Tal como dijiste, te convertiste en algo mucho más poderoso de lo que pude imaginar- dijo Darth Vader observando a Obi- Wan Kenobi observándolo con ¿tristeza? ¿decepción? ¿esperanza?
- ¿Por qué no haces lo que ella te pidió? ¿Por qué sigues buscando el poder?- preguntó Obi- Wan.
- ¿Quieres saber la horrible verdad?- preguntó Darth Vader- Esta es la primera vez que puedo verla nuevamente, ni siquiera en mis sueños podía ver su sonrisa, solo la observaba tristemente, en cada sueño en cada pesadilla- murmuró el sonido de su respiración irregular haciendo eco en el desolado palacio- Solo sé que es la única persona que siempre ame, los jedi la alejaron de mí, yo la aleje de mí , tú la alejaste de mí y ni todo el poder en la galaxia, pudo llenar el vacio que ella dejó- dijo Darth Vader y Obi- Wan le tendió una mano, aquella mano que no le tendió en Mustafar, aquella mano que debería haberle dado cuando él estaba sufriendo, envuelto en llamas en Mustafar.
- Ahora hay dos personas que debes proteger, mi aprendiz- dijo Obi- Wan con una sonrisa- Sé qué harás lo correcto- dijo Obi- Wan ayudando a Lord Vader a ponerse de pie, sonriendo con esperanza para luego desaparecer de la misma forma en que lo había hecho Padme.
Tiempo después en la estrella de la muerte.
Lord Vader lo hizo, cuando llegó el momento, vio el sufrimiento en el rostro de su hijo, y supo que la única forma de salvarlo era matando al emperador y muriendo con él.
Luke lo había ayudado a llegar hasta la nave, pero él estaba muriendo, Lord Vader observaba la muerte y la destrucción en todo el lugar, su hijo debía irse.
- Ayudame a quitarme esta máscara Luke- dice Lord Vader, no, Anakin Skywalker en tono bajo
- Pero morirás
- Nada puede detener eso ahora, solo déjame mirarte con mis ojos una vez- pidió Anakin
A Luke le tomó un momento hacerlo y pudo notar como el sonido irregular del respirador de Vader se detiene.
Anakin ve ahora el rostro de su hijo: un rostro apuesto, arrugado por la preocupación y, sí, lleva sus propias cicatrices de batalla.
Pero, por fin Anakin lo ve, no como un jedi, o un guerrero, o una amenaza, o una equivocación, sino como su hijo... y el hijo de Padmé.
Anakin sonríe. No con una sonrisa como la del Emperador o con una mueca demente como la de Darth Maul. Ni siquiera es la sonrisa burlona que Anakin podría haber dado a Ahsoka en aquellos días como jedi. Es una sonrisa de verdad.
La sonrisa que sólo Padmé vio.
—Ahora... vete, hijo mío —dice Anakin con dificultad—. Déjame.
—No. Tú vendrás conmigo. ¡No puedo abandonarte aquí! ¡Tengo quesalvarte!
—Ya lo hiciste, Luke. Tú tenías razón. Tenías razón acerca de mí. Dile atu hermana... que tenías razón.
Así fue como Anakin murió, en la nave de su hijo al interior de la estrella de la muerte.
Luke había aterrizado el transbodador, a pesar de estar agotado, construyó una pira funeraria para su padre. Lo vio consumirse en las llamas, y lo vio desaparecer, la fuerza estaba en equilibrio ahora, al final de todo, el elegido lo había logrado, Anakin Skywalker había traído el equilibrio a la fuerza.
Cuando Anakin se hizo uno con la fuerza, una presencia estaba allí, su misma sonrisa, su misma mirada, y él ya no era un monstruo detrás de una máscara negra, ahora el volvía a ser Anakin Skywalker, volvía a ser el jedi que fue muños años atrás.
En medio de la celebración por la caída del imperio, Luke se reencontró con su hermana y también con el resto de sus amigos, Luke abrazó a Leia, ambos celebrando la caída del imperio, y de pronto una presencia, no, no solo una ambos hermanos observaban con lágrimas en los ojos, como su padre y su madre estaban allí, tomados de la mano observándolos con orgullo, Luke sonrió, sonrió a su padre que lo había logrado, y sonrió al ver al maestro Yoda y a Obi- Wan al lado de ellos.
Por fin la fuerza estaba en equilibrio, por fin la paz había llegado a la galaxia, y por fin su padre y su madre, podían ser felices en un lugar más allá de la vida.
En la orilla de un lago en una galaxia muy muy lejana.
- Él joven y la reina volvieron a estar juntos mami- sonrió el niño observando su reflejo en el agua- ¿Cómo conoces esta historia mami? ¿Has estado en Naboo? ¿Conociste a la reina?
- Ellos fueron mis padres, Ben- dijo la princesa Leia, recordando la triste historia de sus padres, que solo había conocido muchos años después luego de leer sobre su padre Anakin Skywalker, luego de averiguar por toda la galaxia, como había sido la triste historia de Anakin y Padme.
El niño sonrió, cuando el fuera un jedi, sería el jedi más fuerte de todos como su abuelo Anakin Sywalker, como su maestro Luke Skywalker.... El destinó nunca pudo saber, que un destino tan oscuro como el de Anakin Skywalker era lo que la fuerza tenía destinado para el pequeño Ben Solo.
La historia de un amor tan grande que fue capaz de destruir la galaxia, pero también tan fuerte como para salvarla, se repetiría nuevamente.
Bueno, este es el capítulo, esta historia no solo tendrá contenido para adultos, también tendrá historias de amor o tragedias, siéntanse libres de pedir historias sobre las parejas que deseen, ya tengo varios pedidos y los iré actualizando de a poco, pero iré anotando todo lo que pidan jeje.
En si, este capítulo me gusto escribirlo, porque amo el final del libro del retorno del jedi, la adaptación ''Beware of the power of the dark side'', siento que debía poner ese extracto (lo que esta en cursiva en la historia) de la muerte de Vader, textual, porque es simplemente emocionante.
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