Narrador Jobal:

A la mañana siguiente, me desperté temprano, como de costumbre, mi esposo estaba exhausto por ayer y decidí dejarlo dormir un rato más; me di un baño y me paseé por los pasillos que me llevaran a la habitación de Padmé y Fernanda. Pero cuando toqué la puerta de su cuarto, no oí respuesta, volví a tocar la puerta y de nuevo no hubo respuesta.

Jobal: - Padmé, querida....ya es tarde, tienes que ir conmigo al pueblo - llamé después de abrir la puerta, pero vi que las dos camas estaban hechas como si nunca hubieran sido usadas - ¿Padmé, cielo, estás aquí? - pregunté algo alarmada, Padmé jamás desaparece y mucho menos, se va sin avisar a ningún lado; busqué en el baño, en el balcón, nada....no había rastro de ella - Fuerza...esto no puede estar pasando...no otra vez.

Paolo: - Buenos días, majestad....¿se le ofrece algo? - me preguntó uno de los guardias más fieles del palacio, él ha estado trabajando para la familia real desde hace años ya y puedo ver, la expresión de cariño que él pone, cada vez que está con Padmé, pero Padmé debe casarse con alguien de la realeza; lamentablemente así son las reglas y no podemos cambiarlas. 

Jobal: - Paolo...¡qué bueno que te veo! - me acerqué ansiosa, no sabía que pasaría si resultaba que habían secuestrado a mi hija y a la única que me queda - ¿Has visto a Padmé en el castillo? - hizo cara de confusión, pero tratando de recordar si en algún momento la había visto. 

Paolo: - No, majestad, llegué desde temprano al palacio y no he visto a la princesa....mucho menos una anomalía - dijo seguro, pero estoy segura de que ya empezó a notar mi angustia - majestad, ¿sucedió algo con la princesa? - su cara también empezó a ponerse tensa, a lo que me imagino que está pensando lo mismo que yo. 

Jobal: - Capitán, necesito que registren todo el palacio - le pedí con seriedad, lo cual lo puso más serio comprendiendo de lo que estamos por vivir - nadie sale y/o entra del palacio, hasta que no aparezca la princesa, ¿quedó claro, capitán? - le exigí con un tono de firmeza y dureza, no quería dar ni un sólo motivo de duda en mi petición; la seguridad de mi hija está en riesgo y no puede haber ninguna equivocación. 

Paolo: - Más que claro, su majestad, descuide nadie saldrá de aquí hasta que la princesa aparezca....buscaremos hasta en los lugares más recónditos de este lugar - hizo una reverencia, pero antes de que se fuera lo detuve. 

Jobal: - Haga lo que sea necesario, capitán, si es necesario desarmar este palacio desde sus cimientos...que así sea, pero quiero a mi hija sana y salva - le pedí con un tono de autoridad, para que tuviera en cuenta las consecuencias. 

Paolo: - Tiene mi palabra, my lady....la princesa, estará enfrente de ustedes más pronto de lo que piensa - con eso, se retiró y yo, mientras me dirigí a los lugares que sé donde ella podría estar; pasó una hora y Padmé seguía sin aparecer, lo cual sólo significaba una cosa....Padmé, mi hija estaba secuestrada y posiblemente, esté bajo las manos de esos miserables.

Jobal: - ¡Ruwee, querido! - llamé a mi esposo muy asustada, pero tratando de mantener la calma, a pesar de ser madre, también era reina y debía mantenerme en mi posición - Hay un grave problema. 

Ruwee: - ¿Qué sucede, reina mía? Conozco tu cara y sé cuando estás muy alarmada, a pesar de tu máscara de fortaleza - me dijo acercándose, dejando todos sus pendientes a un lado....eso, es lo que más amo de mi esposo; a pesar de ser un rey y de cuidar sus responsabilidades de mantener y cuidar a todo un planeta, pero también pone en primer lugar sus obligaciones como padre de familia, mucho más desde lo que le pasó a Sola. 

Jobal: - Cariño, Padmé no aparece desde la mañana - cuando le dije eso, su cara se puso tensa y llena de miedo, así como cuando yo descubrí que no estaba en su habitación - ya puse a todos los guardias del palacio a buscarla, nadie puede entrar y salir del palacio hasta que ella aparezca. 

Ruwee: - Me temo que eso no será suficiente - me dijo serio, comenzando a dar vueltas por el salón - ¿desde a qué horas es que no está en el palacio? - me preguntó preocupado, sabiendo lo que esto podría significar. 

Jobal: - Yo la fui a buscar desde hace una hora y desde entonces, hemos estado buscando algún rastro, Ruwee, ¿qué vamos a hacer si la secuestraron? No quiero que le pase lo mismo que a nuestra primera hija - le dije angustiada y sobre todo, no quería quedarme sola igual que la última vez, las noches en que Ruwee ni nadie, podían alejarme de mi soledad. 

Ruwee: - Si fue hace tanto, entonces alguien ya se la pudo haber llevado lejos - respiré con espanto, cubriendo mi boca con mis manos - tenemos que.... - justo antes de que pudiera terminar su frase, sonó mi comunicador y cuando lo respondí, salió la imagen de mi hija y suspiré con alivio de saber que estaba bien. 

Jobal: - ¡Padmé! ¡Oh por la Fuerza, Padmé, no vuelvas a hacer eso! ¿Dónde estás? Nos tuviste muy preocupados - dije entre aliviada, pero molesta porque ella nunca es así. 

Padmé: - Lamento no haberles avisado antes, madre - dijo disculpándose, pero tratando de ser cortés y seria, como siempre le he enseñado - pero tuve que empezar de una vez mi retiro, no pude avisarles porque necesitaba alejarme para pensar en lo que había pasado - dijo seria, tratando de mostrar debilidad, aunque sé que ella es joven y yo, también me puse así cuando empezó la cacería de los jedis. 

Ruwee: - Por lo menos, nos avisaste ahora....pero hija, comprende que no nos gustan este tipo de sorpresas....tu madre y yo, ya no estamos para tantas emociones - comentó más tranquilo, pero podía sentir la presión en sus ojos - por favor, para cuando quieras salir, por favor avísanos aunque vayas a donde vayas, necesito saber que estás bien; por la Fuerza, estuvimos a punto de mandar a toda la guardia real, para buscarte y..... - pero lo interrumpió Padmé.

Padmé: - Lo sé, padre, lamento mucho lo que sucedió, pero necesitaba salir lo más pronto posible y descuiden, Fernanda está conmigo, no habrá problema con la seguridad - dijo sonriendo, pero segura de lo que hace - de verdad, es sólo que necesitaba tomar un respiro, tengo que acostumbrarme a lo que voy a representar y sobre todo, a nuestra misión para mantener a la galaxia a salvo - a pesar de haber tomado una decisión muy rauda, sé que ella no deja a un lado sus responsabilidades - voy a tomar el mes que me corresponde, para después tomar las últimas semanas de preparación, para la coronación.

Ruwee: - De acuerdo hija, lamento nuestro ataque de pánico, pero eres nuestro tesoro más grande, no me gustaría perder el único regalo que nos queda - la cara de Padmé, pasó de una sonrisa tranquila a una de desilusión - no quiero recordarte lo que.... - lo volvió a interrumpirte.

Padmé: - Papá, ya lo sé, no tienes que recordarme lo que pasó con Sola....ya no soy una niña, debo aprender a hacer mis decisiones sola - dijo molesta - entiendo que le tienen ira (y miedo), a los jedis, pero yo ya sé cómo cuidarme y estamos en el lugar más resguardado del planeta, nadie me va a encontrar - suspiró con cansancio, terminando su frase.

Jobal: - Está bien, Padmé, al menos sabemos que ya estás en tu retiro....descansa bien, te veremos en otoño - terminé la llamada, sin antes ver regresar la sonrisa de mi hija - vaya, todo un escándalo para nada - dije sentándome en una de las sillas - hubiera sido más fácil, si nos hubiera escrito una nota, al menos, así sabría que estaba bien y no.

Ruwee: - Pues lamentablemente, pasó y pues no podemos evitar que ella tome sus decisiones; pero lástima que se fue, porque quería que ella me revisara algo importante - su tono de voz, me hizo levantar la cara y levanté una ceja, mientras lo seguía con la mirada hasta la mesa y me levantó unos sobres - ¿sabes lo que significa esto? - se abrieron mis ojos por la sorpresa, pero comencé a sonreír al tener una idea de lo que podían ser.

Jobal: - ¿Ya llegaron? - pregunté emocionada y él, asintió con la cabeza - ¡Oh Fuerza, esto la hará muy feliz! - me puse de pie, para ver las cartas de petición.

Ruwee: - Pero aún no sé a cuál elegir, hay varias propuestas interesantes; sin embargo, conozco algunos detalles de aquéllos que no me gustarían para nuestra hija - la simple idea, de que muy pronto mi princesa, se convertiría en una reina formal, me daba mucha alegría y tristeza, porque ya no estaríamos nosotros para protegerla; sino que, ahora ella tendría que enfrentarse a la realidad por ella misma.

Jobal: - Pues, para eso me tienes a mí, querido - le dije sonriendo y me acerqué a su lado - mira, vamos a analizar cada una de las propuestas, luego vemos los pros y contras de elegir al candidato y si nos convence alguno, lo llamamos para conocerlo.....además, tenemos un mes, qué mal podría pasar.

Ruwee: - Es cierto, por eso te tengo como mi reina - me dio un beso en la mano - muy bien...candidato uno....Scipio.

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Narrador Palpatine:

Mis planes en Courusant, están saliendo tal cual lo planeado, el Senado está dictando a nuestro favor, sin siquiera tener idea de lo que están haciendo, es concederme todos los poderes a mí y sólo a mí; la democracia, es un absoluto y patético sistema de gobierno, jamás hay orden, nunca se llegan a acuerdos y además, no tiene visión para salir adelante y mucho menos, para terminar con lo que yo quiero. Por eso, me puse a trabajar por mis propios medios, usando como herramienta a los reyes de Naboo, tomando como excusa la muerte de su "queridísima hija mayor", para convencerlos de que los jedis son una amenaza, por supuesto, borrando toda evidencia de que los sith existen.

Palpatine: - Esa porquería del amor, me ha sido muy útil últimamente, como la gente es capaz de hacer lo que sea por amor...puedo manipularlos a mi antojo - reí sardónicamente, mientras veía por la ventana - cada vez más, los jedis están desapareciendo y eso, me dará entrada directa al poder y así, poder convertirme primero en Supremo Canciller y después, en Emperador absoluto de la galaxia.

Ventress: - My lord, tengo noticias de Naboo, nuestro espía....confirmó que la princesa desapareció, pero que ahora resulta que está de retiro - me comentó mi asesina.

Palpatine: - ¡Argg! Esa princesa, es mucho más difícil de encontrar así como al Elegido, los dos son una plaga que necesita ser destruida....pero no puedo concentrarme en capturarlos y en manipular al Senado, al mismo tiempo; ninguno de mis espías inútiles, ha sido capaz de averiguar donde se encuentran cualquiera de los dos, es como si alguien los estuviera escondiendo de mí.

Ventress: - Mi informante, me asegura que el retiro de la princesa, fue escogido en secreto por los reyes y la misma princesa, pero al parecer acordaron no comentar a nadie la ubicación del mismo, para "evitar" que los jedis las encontraran...pero nadie sabe por seguro si eso fue verdad - tomó aire, mientras yo me volteaba hacia la ventana de mi guarida - pero sí tenemos por seguro algo, my lord.

Palpatine: - ¿Y qué es eso, asesina? - preguntó desinteresado, pero cualquier cosa es mejor que nada.

Ventress: - Hace unas horas, el rey recibió las cartas de propuesta de varios contendientes, de diversos planetas....al parecer, hay muchas personas interesadas en tener influencias con los reyes de Naboo y más, cuando se trata de la belleza misteriosa de la princesa - a pesar de ser nada importante, eso llamó mi atención, sacando una ligera sonrisa en mi boca.

Palpatine: - Interesante....podemos usar eso a nuestro favor, si logramos convencer a los reyes de aceptar la propuesta de nuestro aliado, podremos obtener más información de la que necesitamos; sobre todo, cuando se establezca una comunicación directa entre la princesa y él, podremos tener por seguro, que la princesa no podrá irse de ahí por mucho tiempo y sólo así, podré manipularla a mi gusto, para convencerla de que los jedis son un peligro - dije con astucia.

Ventress: - ¿Y si la princesa no acepta? - preguntó interesada, pero sabía bien lo que le esperaba a su alteza, si es que no correspondía a nuestras peticiones.

Palpatine: - Entonces, tú serás la encargada de terminar con su vida, Ventress....en cuanto la princesa se convierta en reina, te asegurarás de que la nueva reina....sufra un accidente fatal - reí con cinismo, amo cuando mis planes toman un curso nuevo hacia mi favor - para cuando la gente se dé cuenta, de quiénes fueron los que mataron en realidad a las dos herederas al trono - di una pausa dramática - ya será demasiado tarde, porque en ese entonces, yo seré quien rija a la galaxia y podré dominar a los medios de comunicación a mi favor; para volver hacerles creer, que los jedis fueron los responsables por segunda ocasión.

Ventress: - El régimen de los sith, volverá my lord y sólo nosotros, tendremos el control de las cosas - dijo seria, pero me gustaba la forma en la que sonaba su confirmación.

Palpatine: - Exacto - volví a la ventana y se me ocurrió una idea - prepara mi nave, tengo que hacer una visita a casa - terminé con una risa malévola, por estar seguro de que todo esto, saldría bajo lo predicho; sin embargo, la amenaza de los jedis seguía en pie, ahora más que se encuentran reestablecidos en toda la galaxia....pero, eso no durará mucho, tarde o temprano, ellos saldrán a la luz y sólo así, podré acabar con ellos de una vez por todas.

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Narrador Padmé:

Dejamos pasar las horas, después de la llamada que les hice a mis padres, para hacerles creer que estaba en el País de los Lagos y no con un grupo de jedis prófugos; no me gusta mentirles a mis padres, pero por el bien de los niños y de mi planeta, debía hacerlo, aún si me convertía en traidora de la galaxia, yo estaba dispuesta a sacrificar mi lugar en el trono, con tal de salvar vidas inocentes. Además de que tengo otras razones por las cuales hacerlo, en primera, mi mejor amiga, Fernanda, era parte importante del grupo de los jedis; según lo que me dijo Anakin, Fer era la encargada de hacer que los sith, no supieran dónde se encontraban, ellos podrán ser poderosos, pero no más poderosos que la misma Fuerza. En segunda, están los pequeños jedi, que son muy inquietos, pero demasiado inteligentes a la vez, que por ellos vale la pena hacer el intento de salvarlos y por último....

Anakin: - ¿Padmé? - me sacó de mis pensamientos, el hombre que conocí en la feria, resulta ahora que es el enemigo mortal de mis padres y...y....¡UN SEGUNDO! ¿Cómo por qué diablos, me estoy preocupando de que mis padres se enteren de que él es un jedi? Para empezar, ellos ni siquiera saben que me lo encontré en la feria, ni siquiera tienen idea de las tácticas de cambio de papeles entre Fer y yo. ¿Cómo es que de la noche a la mañana, me interese por su bienestar?, pero no sólo por las razones que dije anteriormente, sino por algo más personal...NO LO ENTIENDO - ¿Padmé, estás ahí? - me llamó por segunda ocasión.

Padmé: - Eh...sí, ¿qué pasa? - pregunté tratando de calmar mis nervios, es como si su voz pudiera romper mis muros y dejarme a su merced.

Anakin: - Podría hacerte la misma pregunta....desde hace rato, te estoy llamando porque ya obscureció y que ya estamos listos para partir al retiro donde nos vamos a esconder - me dijo serio, pero su altura lo hacía verse más imponente, de por sí su bravado no ayudaba a eliminar su puesto de liderazgo.

Padmé: - Lo siento, estaba pensando en cómo nos íbamos a acomodar, sí hay varias habitaciones, pero con la cantidad de niños que tenemos....me temo que vamos a tener que compartir habitaciones.

Anakin: - Eso no es problema, los niños y yo, trajimos nuestra mochila de dormir - me comentó relajado, con una sonrisa corta, la cual me hacía temblar sin que me diera cuenta.

Padmé: - Oh, no es eso, para adultos hay tres habitaciones por la terraza - le comenté algo sonrojada, sólo espero que no se me note mucho - sobre todo yo creo que Fernanda, estaría feliz de dormir con los niños o en una habitación diferente, por lo general dormimos en mi cuarto - cuando vi su cara de confusión, me espanté de pensar lo que pasaba por su mente - NO en ese sentido, Anakin, tenemos nuestras propias camas - cuando vi que su rostro se relajaba, comenzando a reírse, comprendí que sólo era una broma.

Anakin: - Jajaja - le pegué en brazo derecho, para hacerle entender que me había ofendido; pero en mi interior sabía, que yo no podía enojarme por mucho tiempo con él.

Padmé: - No es gracioso, Anakin - le dije volteando hacia la pared, para hacerle entender que era enserio, bueno....algo así; pero nunca esperé que de repente, sus manos me tomaran de los brazos y me voltearan con Fuerza.

Anakin: - ¿Tú crees que todo se trata de ti, verdad Padmé? - me cuestionó en tono serio y pude sentirlo, por la forma tan profunda en la que me miraba - ¿Acaso crees que hago estos comentarios porque me gusta molestarte nada más? - a pesar de lo serio de su voz, podía escuchar una cierta picardía de su parte....entonces, si él va a jugar de esta forma, BIEN, dos podemos jugar el mismo juego.

Padmé: - Pues....no me has dado otra explicación, por la cual te divierta hacerme esto - le comenté igual, lo que hizo que su agarre fuera menos fuerte, sino más sutil.

Anakin: - ¿Por qué te importa tanto, lo que yo diga u opine de ti? - su pregunta me sorprendió, que ni siquiera yo tenía la respuesta a ella - Dime....¿acaso sientes una especie de conexión que te haga sentir importante con mis comentarios?

Padmé: - Tú fuiste el que comenzó con esta guerra Anakin...y no me refiero a lo de la persecución de los jedis - le dije seriamente, haciendo que no me interrumpiera - sino a nosotros.

Anakin: - Yo no recuerdo haberte pedido que vinieras a salvarnos, princesa....teníamos todo bajo control - reí con descaro, todavía que vengo a ayudarlo, ahora se queja de mi presencia, sin embargo, ninguno de los dos, se había dado cuenta de la cercanía en la que nos encontrábamos.

Padmé: - Ja, sí seguro, de no ser por mí, Skywalker.....en este momento, tal vez no se estarían encaminando a una casa llena de lujos....sino que estarían cómodamente viviendo en las celdas más protegidas del palacio...ya que no se si te acuerdes, que yo fui la que impidió que esa carta llegara a manos de mi padre - su sonrisa se borró y sus ojos, se volvieron serios y con algo de furia.

Anakin: - Ahora me lo vas a restringir en la cara cada vez que puedas - su rostro oprimido y sus ojos, me hicieron sentir, sabiendo que era su trabajo tratar de mantener a salvo a su gente, pero no le iba a dar el gusto de darle la razón.

Padmé: - Pues tú iniciaste - justo antes de seguir, se escuchó que alguien tocó la pared.

Fernanda: - Si ya terminaron, par de tórtolos, tenemos que partir ahora, antes de que la guardia real, empiece a pasar por aquí - el verla ahí, pensando en lo que pudo escuchar, nos puso rojos a ambos. Cuando salimos del refugio, Fernanda cerró la puerta  y no sé cómo fue, pero la puerta se convirtió en pared y ya no había rastro de nada; a pesar de la noche y los riesgos de andar a estas horas, llegamos a los botes y Anakin, convenció a los remeros de llevarnos a Varykino, aún no puede entender cómo le hizo, pero en media hora....logramos llegar al retiro real, sin ningún problema - hiciste que no recordaran nada, ¿verdad?

Anakin: - Por supuesto, no creas que soy tan tonto como para dejarlo ir sin que se olvide de nosotros - le guiñó el ojo y ambos rieron.

Padmé: - Muy bien, yo creo que podemos distribuir a los niños en sus habitaciones - ella, asintió y ambas, fuimos acomodando a los padawans, tuvieron que acomodarse de dos en dos; pero no hubo mayor problema.

Fernanda: - Muy bien, Padmé tú ya tienes tu cuarto, yo voy a estar del otro lado y Anakin, va a estar en el otro cuarto de la terraza - me dieron nervios de sólo pensar, en que lo voy a tener en frente de mi cuarto - es para mantener precaución, por si alguien intenta entrar, es necesario que hagamos guardia por ambos lados (además de que eso les servirá para conocerse mejor) ahora, hay que descansar, mañana hay que planear lo que vamos a hacer con estos jóvenes.