Ayuda
-ese maldito me las pagara. Si Aziraphel sufre algún tipo de daño yo... - Crowley estaba lleno de ira, su cordura estaba siendo opacada por el enojo que sentía, tenía que pensar como ayudaría a su ángel, se acababa el tiempo.
Si Metatron lo tenía bajo su completo control, eso quería decir que la segunda venida estaba por comenzar, la tierra estaba en peligro y ahora no tenía a Aziraphel para ayudarlo como cuando detuvieron el Armagedón.
"que se supone que voy a hacer" pensaba, aunque no le gustara admitirlo, el solo no podría con todo y para colmo el ángel a su lado era un completo inútil, los dos solos perderían aun sin siquiera haberlo intentado.
-parece que tienes problemas Crowley
-eh? – el demonio dio media vuelta y para su sorpresa la librería tenía dos invitados – Lord Beelzebub, ¿como...?
-Gabriel aún tiene conexión con alguien en el cielo. – comento el antiguo duque del infierno.
- ¡hola! – saludo Gabriel
- en cuanto le llego la información que el nuevo arcángel supremo estaba organizando un ejército para atacar la tierra, supimos que algo estaba mal y decidimos venir para ver qué pasaba, ¿Cómo es que Aziraphel se prestó para hacer esto?
-él no tiene idea, el día que se fueron Metatron entro y se llevó a Aziraphel para según el conversar un rato, cuando regreso tenía en mente que yo podía regresar al cielo y volver a ser ángel, discutimos y él se fue con el anciano. Después regreso a la librería diciendo que no recordaba nada, entre los dos llegamos a la conclusión que Metatron lo había manipulado, le ofreció un café de almendras, pensamos que algo debió de haber tenido y así fue como pudo conversarlo de irse sin ninguna resistencia.
-oh si, almendras, muy efectiva para manipular a los ángeles. - comento Gabriel sin ningún reparo.
- ¿tú sabes algo de eso amor? -pregunto Beelzebub
-si, bueno, no me enorgullezco de esto, pero, cuando yo era arcángel hubo muchos ángeles queriéndose revelar, justo después de la gran caída - volteo la mirada al demonio – el hecho de que un príncipe del cielo fuera uno de los caídos los alentó a hacer lo mismo, para evitar eso, Metatron y otros arcángeles agregaron una mezcla de almendras en agua bendita, roció a los ángeles que se revelaban y así los convenció de quedarse en donde estaban, aunque después se decía que esos ángeles sufrían efectos secundarios, dolores de cabeza y algo como amnesia.
- ¿y que paso con ellos? – pregunto el demonio pelirrojo ya cansado de lo que el ex arcángel insinuaba
-oh nada especial, desaparecieron.
- ¿desaparecieron?
-eso es lo que comento Metatron, dijo que solo habían desaparecido y bueno, a nadie le pareció extraño así que, el asunto se cerró.
-bola de idiotas
-okey, entonces, que vamos a hacer
Crowley no paraba de caminar de un extremo de la librería al otro, si Gabriel tenía razón, algo malo le pasaría a su ángel, tenía que idear algún plan para que eso no pasara.
-lástima que no existe ningún libro para estos casos- hablo Muriel
- ¿Qué dijiste? - pregunto el pelirrojo parando abruptamente su caminar
-bueno, el señor Aziraphel tiene libros de todo tipo, ayer leí uno que iniciaba con algo sobre una abuela y una explosión.
-oh yo leí ese, es muy bueno – sonrió Gabriel.
- a lo que me refiero es, que, si existiera un libro con datos sobre ángeles o cosas por el estilo, tendríamos algo en lo que basarnos y saber que hacer.
-sí, ok ok puede funcionar, todos busquen un libro que tenga algo de información de ángeles, demonios, cielo, infierno, todo lo que nos pueda servir para acabar con esto.
todos empezaron a buscar en los infinitos estantes de la librería, todos y cada uno de los libros era revisado, desde novelas, hasta libros de magia, pasando por primeras ediciones firmadas por sus autores, a Crowley le sorprendió mucho la cantidad de dedicatorias que están dedicadas a su ángel de parte de todos esos autores.
Después de unas horas ya bastante cansados Gabriel y Beelzebub tuvieron que salir para distraerse un rato, por su lado Muriel se habia entretenido con un libro, asi que se olvido por completo de la busqueda.
-ugh esto es inútil- dijo Crowley, sentado en el piso rodeado de filas de libros. - demonios Aziraphel porque tienes tantos libros. – recargo su cabeza con algo de fuerza en el estante donde se encontraba y un libro cayó sobre de esta. – pero que...
Al verlo con detenimiento pudo notar que este era diferente a todos los demás, era más como una recopilación de notas, cuando empezó a leerlo su corazón empezó a palpitar con demasiada fuerza.
el solo leer las primeras líneas ruborizo surosto, agradecía que no estuviera nadie cerca para que lo viera. Sus ojosempezaron a derramar lagrimas sin control, cada línea, cada párrafo estabaescrito con la hermosa letra de su ángel.
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