Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

14.- He's alive IV

Quizás hacerme amiga de Gi-un no sería mala idea. Pensé para mí.

Pese a que 456 no estuviese satisfecho con mi votación, no dudó en incluirme a su grupo. Un grupo conformado por dos sujetos más, quienes también votaron a favor de seguir el juego. El único en votar en contra fue 456, quien no dudó, nuevamente en tratar de persuadir a sus compañeros que, para la próxima votación, la decisión fuera una X y no un círculo.

Estar en la misma habitación común junto a In-ho era bastante incómodo. Pensé que mi corazón se vería ablandado por su presencia; que me acercaría a él y trataría de convencerlo de volver donde su madre y hermano; donde él realmente pertenecía. Pero él, parecía no inmutarse. Aunque bien, no sabía con precisión qué podría estar pensando.

No era el mismo sujeto que conocí hace años atrás, cuando nos vimos por primera vez en aquella cafetería que nos ofrecía un sinfín de productos; no era el mismo que se acercó a hablarme cuando me senté desdichada por haber perdido mi trabajo en aquel almacén de accesorios para mascotas; No era mismo que me hizo reír aquella noche, como si ya nos hubiésemos conocido de muchos años atrás.

No, el ya no era mismo sujeto con el que contraería matrimonio. Definitivamente no era el mismo.

Su cuerpo yacía sobre un peldaño de los camarotes que nos proporcionaron como cama. Su mirada estaba fija en nosotros. Su semblante serio y calculador analizaba la situación, mostrándose tranquilo también. Le miré de reojo mientras me servía el desayuno que nos dieron esa mañana antes de comenzar a participar del siguiente juego. Él no tocó su plato por un buen rato.

-¿Qué juego viene ahora, Gi-hun? - Le preguntó Jeong- Bae. Quien parecía ser un ya conocido del jugador 456. Le miramos expectantes ante lo que Gi-un nos diría. Pero él mantuvo silencio por un momento antes de hablar.

-Dalgona. - Mencionó Gi-hun con voz queda. arqueé una ceja y reí con diversión. Los demás me miraron confundidos. Mis reacciones tenían vida propia desde que In-ho apareció a último momento, por lo que aquella risita fue más ceñida a los nervios que sentía en el momento.

-Perdon, es sólo que... yo jugaba Dalgona con mi abuela y siempre me ganaba. -Fruncí mis labios incómoda, tratando de desviar la atención hacia mi reacción. -Siempre perdía.

Debía admitir mi derrota frente a aquella anciana que tenía por años experiencias en juegos coreanos. Dalgona era una de aquella, donde realmente desplegaba su capacidad de concentración y astucia. De ser el siguiente juego, estaba jodida.

Gi-hun explicó que había ciertas figuras, tales como un triángulo, un círculo, cuadrado, y un paraguas. Nos decidimos por elegir el triángulo puesto que era más fácil seguir las líneas y mucho más corto. Al menos eso esperaba; que fuera así de simple como lo mencionaba Gi-un respecto a elegir el triángulo.

-Quien se atrevería a elegir el paraguas, ¿no? -Soltó una risita divertida el jugador 388. Gi-un miró hacia el suelo, rascando tras su nuca, avergonzado.

-Sería bueno que conformemos el grupo siempre y que no nos separemos hasta poder ganar los juegos, ¿no? - Propuso Joung -Bae. Asentimos ante su sugerencia. Al menos, ya estaba unida a un grupo y no tendría que buscar uno por mi cuenta. Ser sociable no se me daba si era con personas que nunca vi en mi vida.

-Me interesaría ser parte de su grupo también. -Dijo de repente una voz suave y gentil. Volteé por inercia, aunque mis sentidos ya sabían de quien se trataba. In-ho estaba justo detrás de nosotros con una sonrisa amable y amplia, esperando la respuesta del grupo.

Su mirada viajo por cada uno de nosotros, para finalmente posarse en mi anatomía. Temblé, no por emoción, sino por miedo a descubrir su nueva identidad. Las palabras dichas por ju-ho en el hospital resonar en mi oído, como si él mismo estuviese a mi lado susurrándome cada una de ellas.

-Claro que te puedes unir. -Le dijo Joung - Bae motivado. - Mientras más seamos, mejor.

-Así es. Es mejor mantenernos unidos y fuertes. -Apoyó Gi-hun. Le miré extrañada pues, no había mencionado palabra alguna sino sólo para decirnos de qué trataría el siguiente juego.

Los chicos fueron gentil al explicarle a in-ho que en dalgona debía elegir el triángulo. Él asentía dando a entender que seguiría las instrucciones. Miré atenta a su anatomía; se veía tan normal como todos nosotros. No parecía ser un líder o un guardia. Estaba muy lejos de ser alguien como ellos. Su sonrisa y su manera de expresarse con los demás hizo figurar a in-ho como un jugador motivado y seguro de sus pasos. Aquello hizo que nuestro grupo lo integrara sin siquiera dudar pues, pasado los minutos incluso ya se reía con los demás.

-Propongo algo. -Dijo el jugador 388, alegre y entusiasta. -Ya que formamos un grupo sería bueno que nos dijéramos nuestros nombres. Yo conozco el de ustedes, pero ustedes no el mío, ni el del jugador número uno. Mi nombre es Dae-ho.

Hizo una reverencia a modo de saludo.

-El mío es Joung-Bae. -Se presentó el ya amigo de Gi-hun. -Bueno, eso ya lo saben. Creo.

Mi mirada se desvió hacia los participantes que esperaban los juegos comenzaran a funcionar. No quería ser participe de la presentación. Nunca fue de mi agrado exponerme a los demás. Menos con personas que no conocía.

-¿Y tú, como te llamas? -Me preguntó Gi-hun. Todos me miraron fijo esperando mi respuesta. Más In-ho parecía prestar mucha mas atención no solo a mi anatomía, sino a lo que iba a decir.

-_____________ Lee. -Dije apenas, recordando el cambio de nombre que tuve que hacer a causa de que ju-ho no me encontrase. In-ho sonrió divertido. -Y tú, jugador número uno. ¿Cómo te llamas? -Le fulminé con la mirada, esperando su respuesta. El no tuvo problema en dar un nombre falso e incluso el significado del nombre que coincidía con su número identificador.

-Me llamo Young-il. -Dijo orgulloso. Mentiroso, pensé, casi al borde de desmantelar su mentira frente a todos. Pero me contuve.

-Un gusto Young-Il. -Le dijo Gi-hun. -Estoy seguro de que formaremos un buen equipo. Debemos salir de aquí con vida. -Animó al equipo que bien, logró motivarse aún más con las palabras de Gi-hun.

La faceta de in-ho comenzaba a irritarme de una manera descomunal. Del tiempo que estuvimos reunidos, su conducta era casi perfecta. Hasta que comenzó a contar el por qué se unió al juego. La historia contenía deudas y una familia a quien mantener. Mi sangre hervía por cada palabra y mentira señalada. Hasta que logró dar con aquel punto que retenía mi ira.

-Deseo salir de aquí para poder ir a ver a mi mujer. Sé que ella me necesita y meterme aquí, fue un error. -Dijo con descaro. -Pero voté a favor para darle una oportunidad a esto. Y a ti, Gi-hun. Dices que fuiste parte del juego. Me interesa saber tu historia.

Molesta me levante de mi puesto y camine lejos del grupo. Lejos de In-Ho. No sabía a donde iría, pero en algún lugar tendría que mantenerme antes de pensar siquiera en explotar. No iba a hacer las cosas mal ahora que había encontrado al traidor de mi comprometido. No, esto lo quería hacer a su manera. En base a mentiras.

Pedí al guardia ir al baño. Pero éste no me dejó. Lancé un par de improperios que bien había guardado por mucho tiempo, y me senté en un rincón lejos de todos, tratando de poner en practica las clases de meditación que tomé hace un tiempo atrás. Cerré los ojos y respiré esperando desaparecer de aquel lugar por un momento.

Alejé mis pensamientos catastróficos, aquellos que me decían que moriría allí esperando una respuesta; Aquellos que me decían que In-ho volvería con nosotros, porque la verdad, es que no veía esa posibilidad.

Alejé incluso la voz de Jun-oh cuando me confesó la verdad respecto a su hermano. Pero no así la voz de In-ho que se escuchó a mi lado, muy de cerca en un susurro.

Abrí los ojos apenas, respirando hondo para no entrar en caos. Él se encontraba sentado a mi lado.

-Eres un vil mentiroso. -Gruñí entre dientes, furiosa. El impulso por golpear su rostro me tentaba. Él sonrió nuevamente, como si todo se tratara de algo divertido. -¿Cuánto crees que te durará tu jueguito, uhm?

-Todo lo que me permita el juego. -Respondió sereno. -Tu no eras parte del juego, sino aquel borracho de la estación...

-¿Cómo lo sabes? -Le cuestione. -Acaso tu... -Enmudecí ante la idea de que In-ho también vigilaba a sus participantes desde antes. Sentí como un valde de agua fría se derramó por mi cuerpo, creyendo que quizás, él si nos vigiló junto a su madre y hermano durante los años que él desapareció. Volví a respirar, esta vez con pesadez, como si con sólo respirar mi cuerpo ya comenzaba a sentirse agotado. -Si es así, entonces espero que hayas vigilado el estado emocional de tu madre y hermano, in-ho.

-____________ Lee. -Dijo, haciendo hincapié en mi nombre falso. -Después de todo no somos diferentes...

-Por algo nos íbamos a casar. -Refuté hirviendo en rabia. Su rostro se seguía mostrando ligero y tranquilo. - Pero tú lo arruinaste todo. Ju-ho me lo contó todo. -El rostro de In-ho por fin cambió. Yo sonreí gustosa. Estaba entendiendo su juego.

-¿Jun-oh?

-¿creíste que no sobreviviría a tu ataque? -Le cuestioné burlona. Su ceño se frunció, al parecer molesto. - jun-oh sobrevivió y no tuvo problemas en confesar lo que vio. -Sus ojos se abrieron a la par, esta vez mostrando sorpresa. -Claro, sólo a mí. ¿Y sabes qué?, preferí guardar silencio y venir yo misma a ver estos putos juegos antes de realizar cualquier denuncia.

-Ju-ho... -Repitió. Miró hacia el cielo raso del lugar. Un tono de añoranza pude percibir en su tono de voz. -Pudo haber sido un buen líder...

Reí burlona.

-¡Ju-ho tiene mucha más ética que tú! -Gruñí. -Estoy segura de que él no me hubiese dejado con toda la parafernalia que significa organizar una boda.

-Cuida tus palabras, _____________. -Me advirtió entre dientes, furioso. Al parecer había tocado la fibra. Miró a su alrededor, cerciorándose de que nadie nos lograra escuchar. Pero estábamos demasiado lejos para que alguien escuchara nuestra pequeña riña. -Si lo dejé vivo, fue justamente porque sabía que él te comentaría sobre mi paradero.

-¿Qué?

Antes de seguir hablando, los guardias nos pidieron formarnos para avanzar en el siguiente juego. In-ho me dio un ultimo vistazo antes de reunirse con Gi-un y el resto del equipo. Mis palabras se atoraron en mi garganta queriendo así gritarle a todo el mundo quien era realmente Young-il.

-¿No vienes? -Me preguntó el Dae-ho. Asentí atontada. Un calor sofocante comenzó a subir por mi cuerpo hasta el punto de hacerme tambalear. Las manos del joven sujetaron mi brazo, demostrando preocupación. -¿Te sientes bien?

Lo miré, queriendo llorar. Pero me limité a contener mis lágrimas.

-No, pero...descuida. -Me repuse como pude. Me erguí con dignidad, respiré profundo y le regalé una sonrisa muy bien fingida. -El juego apenas empieza. Debo estar bien para lo que se viene.

-Sabía que debes pertenecer a nuestro grupo, ____________ Lee. -Dijo el muchacho con una sonrisa amplia en su rostro.

Le sonreí devuelta.

El juego entre In-ho y yo, pensé. Claramente recién empezaba.







✖️✖️✖️✖️✖️✖️✖️✖️✖️✖️

Uf, la verdad es que he tenido bloqueos de escritor. Espero este OS les guste. Está en suspenso por el momento porque sí, tendrá mas parte. Quizas sea un mini libro en un OS jeje. Pero he estado ideando otras historias que salgan de lo comun.

Hacia mucho tiempo estaba fuera de la escritura y volver, ha sido un desafío.

Gracias por sus estrellitas. Espero igual puedan comentar qué tal va lo que escribo y si gustan, dejar ideas - inserte icono de corazon-

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro