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22: Civil Invasion

En las profundidades de las montañas aledañas al letrero de Hollywoodland, bajo la enorme casa de la familia Trent, Denny Trent veía con las computadoras con las que vigulaba su ciudad y el mundo bajo el manto de Daybreaker en, irónicamente, las noches. En más de una pantalla de mostraba distintas cadenas de televisión cubriendo el millonesimo ataque a New York y a los Retaliators, salvo que el titular esta vez, era uno que había logrado causar el pánico a nivel mundial ante las transmisiones de un hombre capado de rojo y volando por New York en un feroz combate contra Major Max: ¿El regreso se Superman? ¿Qué le pasó al monstruo del ayer?.

—Esos títulos son un poco sensacionalistas— replicó Kitrina Falcone, alias Catgirl, quien se posaba sobre el sofá sin máscara, viendo con algo de temor las pantallas de Daybreaker —¿no crees?

Más Daybreaker la ignoraba, engullido en las historias que su familia, quienes fueron parte de la Guerra Mundial en ambos bandos, le contaban acerca del monstruo al mando de White Skull y el ejército Nazi; solamente los gritos y regaños del director de A.R.G.U.S Bruce Wayne, con quien compartía una llamada a larga distancia, lograron traerlo de vuelta a Angor, lejos de sus pensamientos.

—¡Niño!— gritó Bruce Wayne, seguido del sonido de disparos al fondo y los quejidos del super agente secreto; Daybreaker sacudió la cabeza y se giro nuevamente hacia la llamada mientras se colocaba el antifaz —¿¡Daybreaker!?

—Hubo un fallo en la señal— mintió —¿Qué dijo, Director Wayne?

El quejido de Wayne al otro lado de la llamada, y la propia mirada algo nerviosa de Kitrina se lo dijeron, era una mentira boba, pero debían continuar.

—Tu padre, sabemos que su familia son descendientes de Bat-Soldier, la mano derecha de Herr Superman— semtencio Bruce Wayne, disparando justo antes de que el rugido de una bestia y el sonido de relámpagos fuera escuchado de fondo —¿No tiene algo útil?

—Solo joyeria, y teorías— murmuró Denny, viendo hacia Kitrina; esta alzó una ceja

—New York. ¡Ahora!— ordenó de golpe Bruce, cortándose la llamada entre el fuerte sonar de disparos

—De haber sabido que me iban de reubicar de Gótica a aquí, no habría sido parte de esto— dijo Kitrina, justo antes de ver como es que Daybreaker la ignoraba, oprimiendo un par de botones en la computadora, justo antes de que una placa del piso, sobre la que estaba el sofá donde estaba sentada Kitrina, bajo de un brinco, viendo como es que una enorme caja fuerte —¡Espera! Si este tipo en realidad es Herr Superman, o alguien de su raza ¿no hará falta algo muy fuerte para matarlo? En Major Comics decían que era vulnerable a la magia.— un par de códigos puestos por Daybreaker en la puerta, y el cerrojo giro pesadamente, revelando, entre cientas de cosas útiles para cualquier situación, una pequeña caja, similar al contenedor de un anillo matrimonial;al abrirla, un fuerte brillo verde baño el rostro de Daybreaker —¿Denny?

—Esperemos que las notas del bisabuelo sirvan— sentenció para si mismo, mientras miraba levemente hacia un lado, como si una inaudible voz le llamara; ya ante la luz del exterior, el brillo de aquel cristal se vio opacado, pero un brillante

—Solo para que los lectores sepan un poquito más de lore— sentenció Kitrina, mientras se acomodaba la máscara de Catgirl —Tú bisabuelo ¿sí era Bat-Soldier?

—Y mi abuelo era Robin Olsen— sentenció de golpe Daybreaker, mientras se daba la vuelta y acciona a un botón en su cinturón, abriendo unas enormes puertas, revelando un enorme jet de muy oscuro color gris —. De ahí lo pelirrojo.

—Mierda...

—Multiverso Rojo - Tierra 710, Squadron City.

—Espero no te moleste, pero voy a tomármelo personal— decía Master Menace, acercandose a pasos pesados mientras una energía ámbar aumentaba gradualmente en sus palmas

Entre un alegre quejido, Master Menace estiro ambos brazos, apuntandole al derribado Hyperion con las palmas y disparando así, su potente energía. Entre un grito de dolor, Hyperion alzó uno de sus brazos para cubrirse de tan potente energía, apenas desviandola con su codo.

Aquella energía lograba quemar al debilitado Hyperion, quien empezaba a deslizarse sobre el suelo ante la potencia de la energía, hasta no poder más; de un fuerte grito, de ambas partes, Master Menace logro hacer que el eterno saliera disparado del edificio, directo a las planicies qué ahora eran un campo de batalla. Habría sido disparado incluso más allá de la muralla de Squadron City, de no ser por la interrupción de Nighthawk, quien sujeto con fuerza el brazo de Master Menace y lo forzó a bajarlo.

—Yo también lo haré, Burbank— confesó Nighthawk, mirándolo con furia e interponiendose entre él y el hueco en el miró qué dejaba la vista del caos total del exterior —, salvamos nuestros mundos, no disfrutamos de crímenes de guerra contra nuestros amigos.

—Tus amigos— corrigió Master Menace, tras apartar su brazo de Nighthawk y avanzando hasta el borde de aquel borde del suelo, viendo el escenario con su capa color mostaza aun hondeante —, además, atacamos a los más grandes héroes de dos mundos ¡Eso es traición ante para los cinefilos, Richmond!

—Yo voy a encargarme de Hyperion, no tú— ordeno Nighthawk, rodeandose de un intenso brillo rosado, antes de salir volando hacia el espacio aéreo sobre la batalla

—Lo menos que podemos hacer en esta situación, es encontrarle el gusto— murmuró Master Menace, mientras preparaba el armamento de su armadura para dispararlo hacia tantos héroes pudiera —, pero allá tú.

Explosiones, tanto energéticas como de los misiles misiles lanzados en combate, era todo lo que se veía sobre Squadron City, la magia de Arcanna en conflicto contra la de Moonglow, estallando en energía y luz de colores verde y celeste, mientras que los drones y aviones en aire eran derribados por Kid Spectrum y LSD, justo antes de todos ser apartado por lo que parecía ser un jet de luz dura a color tornasol, destrozando y apartando héroes y villanos, vehículos y drones, en una búsqueda por Hyperion. En tierra firme, o al menos en el campo más abierto, Blur, 3-D Man y Blue Marvel se encargaban de los drones y soldados; en sus cabezas nadaba la duda, mientras peleaban y trataba de llegar al fondo del quien era su atacante, también estaba la preparación ante quien cuidaba el mundo o quien podría hacerlo si caían este día. Blue Marvel, con los puños cargados en energía, acababa a mano con estos, mientras que 3-D Man se encargaba de hacerlo con energía a distancia, manteniendo la pelea sin bajas humanas, más allá de aquellos quienes sucumbian ante intenciones kamikaces por acabar con los héroes.

—¿¡Hyperion!?— pregunto 3-D Man, mientras disparaba su energía hacia uno de los drones Blue Eagles; terminando por hacerlo estallar

A un lado de 3-D Man, cayó el debilitado Hyperion, causando un alzamiento de humo por la tierra del desierto, y una marcada preocupación en todos quienes lo vieron caer.

—No era mi intención que llegáramos a esto, Marcus— clamó Nighthawk, planeando hasta llegar ahí al terreno de combate en el que héroes y fuerzas armadas combatian

—¿Y cual era si no, Kyle?— pregunto Hyperion, mientras se ponía de pie y adolorido se tomaba por debajo de la capa, en donde había sido herido por el arma de argonita

—¡Nos hiciste débiles!— gritó el caballero obscuro, tomando de su cinturón toda clase de artilugios, lanzandolos hacia Hyperion, no surtiendo efecto la mayoría de estos, y los explosivos, apenas haciéndolo retroceder —, no hicimos más que perder por ellos, incluso a quienes no murieron, como tú a Tsu-Zana, o Zarda a Kamala.

La mirada de Hyperion cambio al instante, si bien aun manifestaba la tristeza de ver en tal posición a su viejo amigo, ahora también se mostraba un poco preocupado del alcance de este "plan".

—¿No morir en una guerra sin sentido te parece debilidad?— pregunto Hyperion, aun avanzando con calma hacia Nighthawk y mientras usaba su visión calorifica para destruir drones a su alrededor —¿Tan perdido estas, mi amigo?

—No tanto tanto...— murmuró mientras se acercaba a Hyperion a pasos veloces

—¡...como tú!

Entre un grito, y un bien acertado golpe a la quijada de Hyperion, Nighthawk sujeto con fuerza el prisma de Doctor Spectrum, creando una onda expansiva de rosado color, mandando a Hyperion a volar sobre el desierto hasta detenerse al chocar con un camión de los Blue Eagles, en el cual se transportaban aún más soldados; todos miraron con dolor y rabia dicho suceso, especialmente cuando un aura multicolor rodeo a Nighthawk y lo llevó hasta los pies de Hyperion, quien lentamente se ponía de pie.

—¿Eso no es...?— pregunto Hyperion, mientras enfocaba y veía el objeto en la mano de Nighthawk, con aires de tristeza

—¿El prisma de Joseph?— murmuró Kid Spectrum, desde los cielos, terminando por ser impactado por un misil tras distraerse

Kid Spectrum cayó al suelo, inconsciente e incluso rebotando en el suelo, justo antes de que Power Princess y Redstone atravesaran un muro de adentro hacia afuera, igual de agitados que todos al exterior.

—Kyle...— susurro Hyperion, negandose a caer en la respuesta que su mente le murmuraba; Nighthawk bajo la mirada hacia el prisma, y la devolvió hacia Hyperion —¿Qué fue lo que hiciste?

—Multiverso Azul - Tierra 8, New York.

Explosiones se energía rojiza eran vistas entre los edificios, cada una distante de la anterior, pero seguida igualmente por el temblar de la tierra y las construcciones a su alrededor, debido a una intensa lucha entre dos fuerzas; la poderosa guerrera humano daxamita Major Max, contra el kryptoniano neofito Hyperius. Los vidrios estallaban a su alrededor, y la gente simplemente corría del caos causado por los villanos, solo para después correr en otra dirección al ver el resultado de la pelea entre ambos. Mientras que, alejandose de las peleas grupales, Major Max e Hyperius intercambiaban golpes qué demolerian por si solos un edificios, ambos equipos, la familia Richards y Kamala, y los Retaliators, se enfrentaban por separados a la alianza entre los Extremists de Angor, y los Redeemers de Tierra 710; poco a poco, la pelea bajó lo que quedaba de la torre de los Retaliators, iba mermando. Únicamente resistian de pie Inercia, Mink y Dreamslayer se mantenían de pie; Tracer yacia unido contra un muro, debido a los hechizos de Silver Sorceress, únicamente refunfuñando y gruñendo en un inútil intento por soltarse del muro, o pedazo de muro del décimo séptimo piso que ahora había caído hasta nivel de la calle; por su lado, Remnamt estaba entre algunos escombros, con trozos por chamuscados y aún humeantes de lo que quedaba de su alfombra; Pinball solo estaba flotando, rodeado de energía platinada, aun inflado mientras gritaba y pataleaba, buscando librarse inútilmente de aquel hechizo.

—Siento que he visto eso en algún lado— murmuró Uni-Orb, con una sonrisa mientras trataba de enfocar con su ya dañado lente a Pinball

—¿¡Aún no están cansados!?— preguntaba Inercia, emergiendo de entre los escombros, cubierta de polvo y perdiendo todo el poder que había absorbido del pequeño misil super sonico que Tin Man le lanzó —¡Vengan! ¡Si un mundo va a morir va a ser el su...!

—Ya me estaba hartando— sentenció Bruce Wayne, tras golpear su nuca con la culata de su ametralladora; su frente sangraba de un costado, y su lento andar manifestaba qué algo en su pierna estaba mal, ya estaba herido —¿Los Lightning Strikes?

—Atienden otras partes del mundo— señaló American Crusader, llegando junto con Purple Rain tras haber puesto a salvo a tantos civiles como pudieron —, al parecer terroristas de Kravia y San Monte están haciendo de las suyas— decía mientras golpeaba su escudo, buscando quitarle el polvo

De un momento a otro, aquel lugar casi vacío, se había llenado con los miembros sin "listos" para seguir con la pelea. American Crusader, Watch, Uni-Orb, Purple Rain, Silver Sorceress y Bruce Wayne.

—Tin Man esta a salvo— sentenció Captain Speed, llegando a máxima velocidad con una estela celeste de relámpagos tras de él; rápidamente corrió, a un paso más normal, hasta llegar para abrazar a su hermana

—Ordene Crusader— pidió Purple Rain, apoyándose en Uni-Orb para no caer ante el cansancio

—Escogieron el día equivocado para venir a molestarme— contestó Silver Sorceress, mostrando furia en un rostro cuyas lágrimas ya secas, habían hecho camino sobre la tierra en su rostro

—¿Ven ese fuego?— les pregunto Bruce, mientras cambiaba el cartucho de su arma y señalaba hacia un lejano humo que se extendía hacia el cielo nublado —¿Qué hay en esa dirección?

—Es donde cayó el Herr Superman dos— informó Watch, mientras mostraba los ojos en blanco y pasaba datos a través de ellos a máxima velocidad —, es Queens, según medios, ahora mismo pelea con Major Max. Los Richards también están bajo ataque.

—Jenna y los chicos— sentenció American Crusader, preocupado por el suceso y blandiendo de manera amenazante su escudo —, ellos deben estar también en aprietos.

—Acabemos con estos payasos y vayamos a apoyar— continuó Uni-Orb, mientras intentaba enfocar su rayo óptico hacia el atrapado Tracer —, apuesto que ni la tienen fácil con ese Superman.

—¿Alguien ha visto a Red Dragon?— pregunto Silver Sorceress, mientras volaba y daba un vistazo a su alrededor, no logrando ver a la mencionada super espía, ni su contrincante

—Ella peleaba con la peliblanca del otro universo— informó Bruce, mientras avanzaba hasta el centro del grupo, viendo fijamente a American Crusader —¿Deberíamos esperarla?

—No. Hay que ir a ayudar a Jenna y los chicos.

—¿Disculpa?— se escucho sobre de ellos, justo tras que hubiera una brillante explosión de llamas, de la cual emergió un recargado Dreamslayer —¿Quién dijo que ya terminamos aquí?

En Queens, o lo que ahora era aquel campo de batalla, Jenna, luchando por ponerse las partes de su traje que alcanzaba de entre los escombros de su departamento, intentaba darle pelea junto con Arachne en contra de Gorgon, quien buscaba darles alcance con sus tres rastas; cada cierto tiempo, su lucha se veía reavivada por la interrupción de uno u otro villano, como Ultragirl, desviandose de su pelea con Widower y Girl Power, o Justice, quien se mantenía alejado de la pelea, confundido sobre que hacer o no, y más aún con el sentimiento de no saber que hacer, pelear a lado de Ultragirl, apoyando a sus compañeros, o ir en contra de estos, y ser un héroe.

—Gorgon. Death Bat, la loca y un tipo en colores pastel— bromeaba Arachne, por no caer en pesimismos; Arachne, entre brincos, lanzaba sus redes hacia tantos podía, logrando bloquear la visión de Justice mientras disparaba bolas de red hacia Gorgon —¿Es un día normal como miembro de los Retaliators?

—No recuerdo que los hallamos nombrado Retaliators— añadió Jenna, saltando con un hidrante en más manos y estrellandolo contra la cabeza de Ultragirl, justo antes de lanzarle una red a los ojos en un intento por cegarla; un brillo dorado entonces quemó lentamente la red, y Ultragirl los miró furiosa —, o Young Retaliators.

Entonces, y antes de que la medio eterna atacara a ambas aracnidas, un montón de tentáculos de luz índigo atacaron a Ultragirl, sometiendola contra el suelo, e incluso haciendo que lo atravesara al el suelo no resistir la presión; en un intento descuidado de ayudar, Justice fue tomado por las piernas y empezado a ser golpeado con todo a su alrededor, internandolo a la fuerza en las alcantarillas y usándolo contra Ultragirl.

—Crusaders esta bien— intervino Nurse, mientras usaba a Justice para golpear a Ultragirl, ambos soltando rabiosos quejidos entre sus mutuos impactos

Entre un grito, Ultragirl se libero del ataque de Nurse, usando su visión calorifica para tratar de acabar con los héroes a su alrededor, siendo distraída por un bastón que fue lanzado con todas las fuerzas de su atacante, golpeando su rostro y permitiendo que, en un ataque en conjunto, los Crusaders y Jenna lograrán contenerla y devolverla a las alcantarillas.

—Lamento la tardanza...— se escucho tras ellos, a lo que el baston regresó hasta la mano de su lanzador, revelando así su aspecto

—¿...un par de manos armadas?— ofreció.

Mostrando su llamativo traje púrpura, Stuntmaster había llegado para ayudar a sus amigos y compañeros, poniendo una vez más a prueba los años de práctica que su entrenamiento en karate, como su padre peleador clandestino, le había preparado. Stuntmaster, el duendecillo de Hunts Point, había venido en apoyo de su ciudad cuando más lo necesitaba.

—¡Te tardaste!— le reclamo con molestia Ladybug, terminando de ponerse la parte final de su traje al finalmente tener un rato libre de ataques constantes

—¿Disculpa?— pregunto falsamente ofendido Stuntmaster, justo antes de sujetar con fuerza sus bastones y lanzarse hacia Gorgon, golpeandolo con patadas y sus bastones, logrando hacer que este retrocediera y fuera reducido por ambas mujeres aracnidas —Tenía un juicio de último momento. Soy el juez de distrito en Hunts Point. Era venir y ayudar, o ir a Washington con la Future Family.

—¿Qué?— pregunto Ladybug, justo antes de oír una lejana explosión entre los edificios, sabiendo que, ni eran los únicos, ni era solo casualidad.

—Washington D.C - Torre Blanca.

La Torre Blanca, el edificio casi de vivida mitología moderna, hogar del presidente de una de las naciones más prolificas de Angor, era azotado por una violenta tormenta. Aquel enorme templo de granito y blanco concreto, lucia entre sus imponentes cuatro torres blancas como es que múltiples agentes de seguridad del gobierno de los estados unidos corrían, altamente armados y posandose en los balcones y bardas del edificio, siendo testigos de una escena digna de una película bélica, y de una película histórica también; pues si no era raro ver a la Future Family en apuros, era la primera vez que un equipo heroico era derrotado en los jardines de tan emblemático lugar.

—No te resulta tedioso, ¿Future?— preguntaba una voz metálica en juego con el sonido de las gotas de lluvia azotando contra el metal en su máscara, y los truenos gritándole al cielo

—¡Damon! ¡Por favor, deten esto!— suplicaba Frank Future, estirandose sobre su familia caída en un vano intento por hacerle frente al dictador de Kravia —¡Esto ha llegado muy lejos!

—Ustedes contra mí, una y otra vez— decía Lord Havok, con una fría sonrisa y mientras su piel metálica resplandecia ante un aura relámpagueante a su alrededor —, y aún con todo ¿sigues llamándome como mi inferior alias universitario?

Regados por los suelos, yacian los derrotados miembros inconscientes de la Future Family; mientras que Golem echaba magma humeante de su boca, ante una paliza brutal, Fireball se posaba sobre una cama de fuego qué sus habilidades crearon para él ante un inminente resultado como lo era enfrentarse contra un Lord Havok en cuyas manos estaba el hacha del fallecido dios del trueno, Wundajin. Finalmente, y curiosamente aún invisible, Ghost Girl permanecía inconsciente y con su sangre, igualmente invisible, saliendole por nariz y ojos. La batalla había sido brutal.

—Cuando pensaba que mi alianza con ese riquillo de Master Menace en el mundo invasor era tan inútil como cada uno de los que vino suplicando mi ayuda— el viento de la lluvia hondeo la capa de Lord Havok, mostrando como es que sujetaba firmemente el mango de la mencionada arma, chispeante y como si, más que Lord Havok usarla, el hacha hubiera elegido al tirano para volver a sus tiempos primigenios de guerra contra otros panteones; Lord Havok sonrió ante la aterrada expresión de Frank Future —, me contó un secreto. Me mostró lo que su equipo de limpieza extraoficial había conseguido luego de un incidente en un tal "Joy Coast".

—¡No mereces llevar esa hacha, Alexei!— reclamó el elástico, estirando sus puños y amenazando con atacar a Lord Havok —¡Todo este teatro, debe detenerse ahora!

—Tienes razón, mi viejo amigo— murmuró Lord Havok, mientras lentamente esbozaba una sonrisa cansada —, esto debe parar ya.

El cielo que había estado soltando una pacífica pero tupida lluvia entonces se volvió violento y dejando caer todo un aguacero en compañía de relámpagos que, los más cercanos, terminaban por desviarse hacia el hacha, siendo absorbidos por esta mientras que los hombres armados disparaban a Lord Havok desde la Torre Blanca, únicamente para verse abatidos por los relámpagos que Lord Havok les mandaba sin siquiera moverse. Ahí fue cuando Frank Future actuó, lanzandose hacia Lord Havok con furia y a todo lo que su cuerpo podía darle, estirandose, y como pudo, Frank envolvió a Lord Havok, atrapandolo con su cuerpo, al menos hasta que el monarca de Kravia rápidamente rompió en carcajadas y gritó al cielo, evocando a un fuerte relámpago qué los impacto a ambos, incluso causando apagones en la Torre Blanca y sus alrededores; una vez este relámpago se fue, un muy flacido y estirado Frank Future cayó al suelo, inútil e imposibilitado para hacer algo ante el dolor y poca utilidad de su condición. Lord Havok soltó una pequeña risotada y, tras alzar el pie para no pisar a Frank, continuó su camino hacia la Torre Blanca.

—Si te hace sentir mejor— murmuró, evitando mirar a Frank Future en el suelo, y avanzando entre las gotas de lluvia y balas por igual, sin que algún esfuerzo del fuego norteamericano pudiera con él o su armadura —, Hyperius y la mascota de Master Menace, bastaran para que esto acabe rápido. Pero primero, lo importante; tú gobierno.

Mientras avanzaba, las balas a su alrededor se detuvieron, quedando levitando a su alrededor, al igual que todo tipo de metales de entre los escombros empezaron a levitar, algunos amenazando con atacar a Lord Havok, mientras que otros empezaban a formar una especie de domo alrededor de la Torre Blanca, a la par que se movían vibrantes al unísono, como si alguna clase de onda magnética o de enjambre se tratara.

—¿Al fin vas a traicionarme?— pregunto al aire Lord Havok, mientras alzaba la mirada y veía con decepción al líder fundador de los Zen Men, flotando con una hondeante capa roja

—No...— se escucho desde los cielos, hasta que se mostró rodeado de ene pedazos de metal de todo tamaño, y un look más amenazante al mostrado en sus intenciones anteriores

—...los traicione a ellos.— Doctor Diehard, se había revelado y a sus espaldas, cubiertos por esquirlas de metal para dejarse descender volando, los Zen Men bajaron tras él.

—Leckter, mi amigo— Lord Havok sujeto con fuerza, y a dos manos, el hacha y miro a Doctor Diehard, mostrándose en gloria como hacia mucho no lo hacía, junto a sus Zen Men; Night Troller, Possum y Wind Rider. Lord Havok respiro hondo y mostró una maliciosa sonrisa en su rostro metálico —, siempre supe que esto terminaría contigo y conmigo. Yo salvando al mundo de los débiles, y tus estúpidas ideologías de una inexistente igualdad entre los meta humanos y los humanos menos evolucionados. Es imposible.

—¿¡No tu eras un meta humano!?— gritó Blue Jay, creciendo de tamaño y revelando su presencia, portando su traje de águila azulada, en cabeza y capa, con mallas blancas y antebrazos dorados —, espero no haber llegado tarde a la fiesta, Doctor.

—Si, soy un meta humano.— confesó, ante un fuerte agarre al hacha de Wundajin. —¿quien tendrá el honor de caer primero ante Lord Havok?

—New York - Queens.

—¿Sabias que mate a quien pudo haber sido tu mami?— se burlaba Death Bat, entre chillidos se murciélago

Alejados de sus compañeros, Widower y ahora también Girl Power, se encargaban de Death Bat, intentando derribarla para así vencerla e ir a ayudar a los demás héroes en lo que fuera que estaba pasando en Angor. Death Bat lanzaba bombas a su paso, destruyendo todo y haciendo que Widower huyera de esta, intentando no ser herido por la una vez loca empresaria; mientras, aunque no la dañaban en realidad, Girl Power huía de estas, y gritaba cada vez que era impactada por estas, preocupando por unos segundos a Widower, hasta que este volvía a caer en cuenta de que ella era incluso más resistente que él.

—Cómo cada vez que me atacas— reclamó Widower, mientras lanzaba bolas de telaraña hacia Death Bat, esta última esquivando las bolas de red hasta que Girl Power tomaba pedazos de escombros y se los lanzaba, causando que Death Bat se alejara del lugar —¡Si! ¡Sé esa historia!— confesó con rabia, viéndose nuevamente en el ya repetitivo combate contra Death Bat, rival de su padre Bug, y ahora rival suyo, al menos hasta que una explosión de un trailer lleno de gasolina los interrumpió, y de entre el fuego emergió Justice —¡Hay maldición!

—¡Detengan esto, por favor!— pidió Justice, volando con rapidez en un intento por atrapar a Widower con ambas manos

—Así que...— retomó Widower, mientras esquivaba los agarres de Justice y a la vez le respondía con telaraña en el rostro, la cual este se quitaba con furia —¿Amigo tuyo?

—Ex aprendiz de Power Princess antes que yo— contestó Girl Power, sujetando su brazo con la mano y lanzandose hacia Justice, empujando con su cuerpo y logrando hacer distancia entre ellos —Enemigo mio ¿creo?

—Kamala— suplicaba Justice, volviendo al nivel del suelo y avanzando lentamente hacia Girl Power y Widower, viendo de reojo a Death Bat, retomando su planeó sobre ellos —, sabes tan bien como yo que esto está yendo muy lejos, sabemos hasta donde podría llegar Susanna. Por favor, rindanse y podremos ir a detener a Nighthawk, Master Menace y ese loco ruso de armadura.

—Espera ¿Nighthawk?— pregunto Girl Power, dando un par de pasos hacia atrás, un tanto confundida

—¡Solicitud denegada!— gritó a sus espaldas Widower, justo antes de lanzarle un pequeño tanque de gas con la llave abierta, envolviendo a Justice en llamas hasta causar una pequeña explosión —¿Qué? Vamos, el tipo pidió que nos rinideramos, y admitiste qué lo reemplazaste ¿Quieres más pruebas de que mentía?

—¿¡De donde sacaste eso!?— reclamó Girl Power, tras girarse a la par que se tallaba los ojos al haber visto de frente aquella explosión

—Del carrito de Hot dogs bajo los escombros— Widower señaló hacia el mencionado, logrando sacerle una sonrisa cansada a Girl Power

Interrumpiendo aquel momento, justo cuando Widower había empezado a limpiarle la tierra a Girl Power, fuertes pasos fueron escuchados, haciendo que ambos se giraran fastidiados hacia Justice, poco antes de ver venir a Death Bat, quien planeo hasta quedar justo sobre de Justice.

—Necesitarán algo más fuerte— señaló Justice, emergiendo de entre el fuego mientras tosía

Sin siquiera tener tiempo, ni para reaccionar, un cegador brillo apareció frente a Girl Power y Widower, envolviendo rápidamente a Justice en una hola de fuego y luz que lo dejó fuera de combate al instante, a la par que Death Bat planeaba alejándose del lugar, evitando dicha explosión.

—¿¡Qué hay de eso!?— gritó Widower entre euforicos, y casi infantiles, saltos; apenas paso esto, se escucho la voz de un conocido, al radio de todos los cercanos al conflicto, con excepción de Girl Power; volando habían llegado en su jet: Daybreaker y Catgirl —Maldita sea, Denny, te debo una.

—Serán dos— añadio Daybreaker, mientras disparaba misiles tratando de derribar a Death Bat en el aire, y balas se los más altos calibres de parte d ellos cañones traseros, manejados por Catgirl, quien disparaba hacia Ultragirl, viendo como es que estas balas caían al suelo como si le lanzaran nada más que pelota de tela, aunque causandole molestias —, iré a ayudar a Major Max con ese tal Hyperius.

—Voy contigo— clamó Widower, sujetando por la cadera a Girl Power y con la intención de llevarsela columpeando; el forcejeo de Girl Power por soltarse rápidamente entró en juego, confundiendolo —Espera... ¿Quién es Hyperius?

—¡Add!— llamó Girl Power, apartando el brazo de Widower de su cadera, con intenso rubor, y tomándolo por la muñeca mientras señalaba hacia el lado contrario, donde oía los quejidos de su madre y hermana —Tú mamá, y tu hermana necesitan nuestra ayuda.

Por unos momentos, y bajo su máscara, Widower se lleno de duda, una duda casi infantil mientras miraba con nerviosismo hacia ambas direcciones, Iman por un lado, peleando a mano contra el equivalente actual a una historia de terror de la guerra mundial, o Jenna, peleando junto a su hermanastra contra un mal similar, pero con una muy notoria diferencia de resistencia en contra. Widower elevó la pierna y golpeó con fuerza el piso, agrientandolo ante la impotencia.

—¡Maldita sea!— gritó. El agarre de Girl Power, en conjunto al noble mirar de la joven de otro Pakistán, hizo que Widower respirar buscando calmarse —, oye, Denny, te confío a Iman hermano...

Ni Widower ni Daybreaker podían verse entre si, pero ambos sabían, que Daybreaker daría su vida por proteger a quienes quería, y a quien lo necesitará. Mientras que el oscuro y joven vigilante asintió en su jet, acelerando para dirigirse a toda potencia hacia Major Max e Hyperius, Widower lanzó su telaraña hacia uno de los edificios y se impulso hacia arriba, empezando a columpearse, justo antes de que Girl Power diera un fuerte brinco, impulsandose hasta llegar a otro punto, y dar un brinco igual, buscando llegar junto con Widower hasta las féminas aracnidas. La mayoría de ciudad había sido evacuada, un método de seguridad establecido por los gobiernos de Angor tras la llegada y fallida conquista eterna de Tartarus, un actuar rápido que permitió que, al más mínimo indicio de un problema que podría escalar, las personas de las ciudades, en este caso New York, se alejaran de sus hogares hasta los refugios en las afueras; gracias a esto, entre la destrucción y ruinas llamenates que dejaba el paso de Major Max e Hyperius, no había ningún cadáver.

—Para. Por favor— pedía "noblemente" Hyperius, desviando con sus antebrazos los golpes cargados de energía de Major Max, en una defensa pobre en comparación al entrenamiento militar de Major Max; sería una pelea injusta para el recientemente ascendido a héroe, de no ser por sus poderes kryptonianos —, si continuas voy a tener que lastimarte.

—¡Deja de actuar como un maldito héroe!— gritó una furiosa Major Max, emergiendo rodeada de su aura de energía cósmica, tirando golpes hacia Hyperius, y logrando así que un par de estos conectaran, logrando hacerlo girar la cabeza con cada uno de estos golpes —¡Vienes con los Extremists! ¡Atacaste a mi hogar y a mi familia!

Ante los reclamos y gritos de Major Max, el corazón de Hyperius dio un brinco; estaba nervioso, y peleaba contra quienes vio de manera caricaturizada en la versión doblaba de Super Retalite Squad en la televisión de su hogar en Marville, y le reclamaban sobre su actuar; a su alrededor, desde que llego, solo habían llamas y destrucción, causado por los héroes a los que atacaban, y su lucha contra los villanos que venían en su compañía. Hyperius estaba conflictuado, y los golpes se Major Max cada vez se sentía más, algo que creyó imposible tan pronto la luz del sol amarillo lo bañó.

—S-Somos los buenos— titubeo Hyperius, alzando la cabeza y tomando a Major Max con ambas manos por la cintura, lanzandola hacia arriba, logrando que atravesara el techo en ruinas del edificio donde peleaban —Soy un héroe, Lord Hav...

—¿Lord Havok te lo dijo?— contesto entre una fingida carcajada Major Max, volando y frenando su avance —Tú heroísmo es tan real como mi pureza daxamita— aquel comentario extraño a Hyperius, siendo seguido por un potente puñetazo de Major Max contra el pecho del capado, logrando hacer que tosiera ante tal impacto, pero no deteniendo los reclamos de Major Max —¡Eres solo un maldito experimento de laboratorio qué los Kravianos se quedaron como premio luego de la Guerra Mundial!

Cada palabra, cada grito, era acompañado por fuertes golpes contra Hyperius, logrando por unos momentos hacerle creer a Major Max que la victoria se asomaba, al menos hasta que Hyperius se sentía desesperado y hacía algo inteligente o inesperado contra ella, como aplaudir con todas sus fuerzas, desconcertandola y mandandola a volar hasta el edificio en la calle de enfrente, o lo que quedaba de ambos.

—¡Eso no es cierto! ¡Me criaron para ser un héroe!— le respondió Hyperius, volando hasta ella y soplando con todas sus fuerzas, logrando hacer que, además de una leve capa de escarcha que cubría a la heroina, esta atravesara el suelo hasta un nivel anterior —¡Tratamos de traer paz a Angor! ¡Y ustedes solo mantienen la rueda de la civilización en conflicto!

Major Max, acostada sobre los escombros no pudo sino empezar a reír de una manera burlona, logrando hacer que Hyperius bufara y la viera con molestia; la rubia, entre escombros y ya con las partes superiores su traje dañadas, solo vio con ironía como es que el supuesto hijo de Herr Superman, el hombre con el que sus abuelos tuvieron pesadillas, titubeaba, dudaba, e incluso parecía más un chico tan tímido, o más, como el había visto crecer junto a la mujer que amaba. Si era la descendencia de Herr Superman, seguramente tendrían oportunidad.

—Mírate nada más, hablas como un novato que acaba de ser apantallado por un maldito discurso de su general... — decía mientras se ponía de pie y, en una acción que confundió y tomó por sorpresa a Hyperius, se arrancó las mangas del traje apenas se puso de pie

—¡...si fueras un héroe no estaríamos peleando!— gritó finalmente, justo antes de golpear la palma de su mano con el puño, dejando a relucir la musculatura en sus brazos

—Susanna, Vance, Nighthawk, Lord Havok— sentenció un furioso Hyperius, aún en el aire, y mientras sus ojos parecían enrojecerse un poco —¡Soy de los buenos! ¡Queremos salvar a Angor!

Hyperius se disparó hacia Major Max antes de que si quiera pudiera procesar que había mencionado a Nighthawk; Hyperius embistio a Major Max, destrozando los pisos restantes de aquel edificio hasta salir hacia la calle tras este, cayendo en una pequeña plaza cuyos arboles, en las jardineras de cada esquina, tenían llamas.

—Esas fueron dos costillas, señora— señaló Hyperius, tras usar su visión de rayos x para ver las heridas de Major Max incluso antes de que esta terminara de rodar en aquella plaza; Hyperius vio con algo de pesar como es que Major Max solo se detuvo al chocar con la fuente al centro de aquella plaza —, no me haga lastimarla más... por favor...

—¡Oye!

—¿¡Olvidaste que tienen a un enfermero!?— desde uno de los edificios más altos, Nurse cayó rodeado de sus tentáculos de luz índigo creando una que otra arma de fuego en la punta y atacando a Hyperius, logrando distraerlo hasta que Nurse amortiguo su caída, usando los tencmgaculos para aplastar a Hyperius e incluso metiendo un par en su boca, impidiendole respirar —¿Se encuentra bien, Señora Virgoletti? Digo, Max.

Nurse corrió hasta Major Max, y mientras sus tentáculos desaparecian, liberando a Hyperius, extendió su mano para ayudarle a ponerse de pie

—Por un momento volví a ver a tu padre— murmuró mientras se ponía de pie con ayuda de Nurse, y miraba con furia hacia Hyperius, quien apenas se ponía de pie; Nurse entonces infló el pecho y sonrió bajo su máscara, con orgullo —, lo tengo bajo control niño, ve con Widower y Ladybug, ellos te necesitan.

—La última vez que les eche un ojo, ellos no peleaban contra el hijo de un nazi— le respondió Nurse, optando nuevamente por una posición de ataque hacia Hyperius

—No, pero sí pelean contra una niña loca y su novio nuevo— contesto Major Max, cargándose con un aura de energía rojiza nuevamente, alistándose para seguir con la pelea; una gota de sudor bajo por su rostro —, además este menciono a Nighthawk, eso significa traición.

—Tienes el poder, pero quedaras exhausta antes de hacerle daño mortal— se escucho en sus comunicadores, haciendo que extrañados miraran a su alrededor

—¿Qué?— se pregunto Hyperius, al haber oído aquello gracias a su super oído

—¿Daybreaker?— pregunto con alegría Nurse, antes se oír llegar el jet del mencionado

—Vinimos en cuanto pude— confesó Daybreaker, disparando hacia Hyperius con sus balas de más alto calibre, logrando entretenerlo —, tenemos algo que podría ayudar.

—Es música para mis oídos— susurro con una sonrisa Nurse, generando nuevamente sus tentáculos

—Catgirl, toma los controles— le ordenó, tras ponerse de pie y saltar hacia la escotilla del jet

—¡Enseguida!— Catgirl, con alegría y emoción en su voz, tomo los controles mientras seleccionaba un par de blancos para misil térmico; Hyperius y Death Bat

Daybreaker salto, viendo mientras caía como es que uno de los misiles era disparado hacia Hyperius, impactandole al momento en una explosión, a la vez que otro misil más se perdía entre los edificios; Daybreaker cayó entre una marina y se deslizó hasta quedar justo frente a Major Max y Nurse.

—¿Algo bueno?— pregunto Major Max, disparando chorros de energía hacia la bola de fuego donde estaba Hyperius, justo antes de verlo emerger de entre las llamas, cubriendose de ambos rayos de energía —¿Algo muy bueno?— insistió, al ver que sus puños no eran suficientes para someterlo

—Tenemos esto...— reveló Daybreaker, sacándose su cinturón un brillante objeto

Aprovechando el movimiento de Hyperius al buscar atraparlos, Daybreaker uso el descuido para hacerme un corte en el pecho a Hyperius, logrando de verdad, por primera vez, dañar al héroe de Marville; con terror se llevó la mano al pecho, viendo como es que la sangre empezaba a manchar el blanco pecho de su traje, sintiendo temor y un increíble dolor ajeno al corte, la simple presencia de aquella navaja de verde incandescente le provocaba aquel dolor.

—¿Q-Qué me hiciste?— pregunto incrédulo, mientras daba varios pasos hacia atrás, intentando entender que pasaba y el por que de su repentino mareo

—Mi bisabuelo trabajaba con tu papi, la llamaba kryptonita— anuncio Daybreaker, mientras maniobraba con la navaja en su mano, y la apuntaba hacia Hyperius —, refine lo que tenia e hice una navaja.

Hyperius, aterrado, miro hacia los tres héroes, y el jet que los sobrevolaba; entonces trago saliva y actuó de manera impredecible para los héroes; mientras que ellos habían previsto su huida, Hyperius gritó y aplaudió con fuerza, separando a los tres héroes y moviéndose a gran velocidad hacia estos; con el simple empujar de su cuerpo contra el de Daybreaker al frenar, Hyperius lastimó y derribo a Daybreaker, mientras que usaba su soplido a todo lo que daba, para empezar a enfriar a Major Max con la esperanza de congelarla; Nurse, al ser el único libre, corrió hasta Hyperius y creo un tentáculo qué se alargo hasta tomar la navaja y hacerle un corte en el muslo a Hyperius, haciendo que este frenara su ataque y se tomara adolorido del muslo.

—¡Te tengo!— gritó Nurse, dando un brinco hacia Hyperius con la navaja en alto, sostenida con sus dos manos

Actuando rápido, Hyperius voló, embistiendo a Nurse y llevandoselo con él, aunque decayendo en el aire ante la radiación que emitía la navaja, logrando que cesara su vuelo, pero sujetando con fuerza a Nurse mientras ambos caían hasta atravesar un tren de metro vacío, y estacionado; ambos entraron al lugar con violencia, especialmente Hyperius al Nurse no dejar de dar pequeños picotazos a su espalda con la navaja.

—No eres tan fuerte cuando te da un ataque anafilactico por joyeria ¿¡Eh!?— pregunto entre una fuerte tos Nurse, aun sujetando la navaja y amenazando con apuñalar a Hyperius

Entre su tambaleo, Nurse quedo expuesto para que a máxima velocidad Hyperius lo tacleara, arrastrandolo por el vagón mientras arrancaba los asientos del mismo, estampandolo con violencia contra el final del vagón, rompiendo incluso, la navaja por la mitad.

—¡Por que no te callas!— gritó Hyperius, claramente pálido y con un aspecto casi enfermo; Hyperius sujeto a Nurse del cuello, y apretó con tanta fuerza pudo para tratar de desmallar a su oponente; pero estaba muy débil para usar tan poca fuerza —¡Por favor, quedate inconsciente! ¡Desmayate, desmayate, desmayate...!

—¡S-Sueltame!— ordenaba desesperado Nurse, luchando por respirar mientras veía en el suelo la mitad de la navaja aún unida al mango

En un momento de desesperación, un tentáculo emergió del brazo de Nurse, tomando aquel mango y clavando con fuerza la navaja contra el ojo de Hyperius; no era profunda, ni tan poco tan larga como para ser letal, pero Hyperius gritó con dolor, aflojando el agarre del cuello de Nurse, a lo que este, con fuerza, poso su mano contra el rostro de Hyperius, presionando el mango y luego golpeando con su otra mano, forzando a que este se internara más en el ojo de Hyperius, quien gritó con dolor hasta que, algo nuevo, pasó. Entre la rabia y su cercana derrota, el único ojo sano de Hyperius se torno carmesí y disparo un chorro de energía calorifica a toda potencia al frente, separándose finalmente de Nurse.

—D-Dios mi ojo...— decía tras haberse tirado al suelo, entre lágrimas y arrancandose con gran dolor y voluntad el mango del rostro, solo para ver una escena horrida.

Frente suyo, ahogandose en su propia sangre mientras se tomaba del cuello y lanzaba todo tipo de insultos, estaba Nurse. A medio pectoral había impactado el láser de Hyperius, siguiendo en línea diagonal hacia arriba entre un camino de tela, sangre y músculos quemados de los cuales emanaba sangre por la franja qué salía por el hombro y quemaba un poco de la garganta; Nurse falleció ahí, con solo la vista de un dañado Hyperius al frente, y un vano pero desesperado intento, pero seguir vivo.

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