Una Paz a Precio de Sangre
-En los Pinos-
Gustavo: *Termina de sellar y firmar documentos junto con Luis Echeverría*.
Luis: *Entregándole otro documento* Aquí está el mensaje que el senado emitirá en un par de horas.
Gustavo: Muy bien.
Luis: Y este *saca otro documento* es un borrador del comunicado oficial de presidencia, la junta con la prensa es hoy a medio día.
Gustavo: Aquí tiene que quedar claro que con todo esto el problema se resuelve de raíz.
Luis: Sí.
Gustavo: Hay que reiterar que el gobierno garantiza plenamente la paz durante los juegos olímpicos.
Luis: A nivel extraoficial estamos informando que hubo una respuesta militar por la amenaza de asalto a la torre de relaciones exteriores, y para contener un tiroteo entre grupos de estudiantes.
Gustavo: *Con un semblante serio* ¿Se ha informado de esto al general García Barragán?
Luis: Yo creo que la comunicación con el general debería de venir directamente de usted.
Gustavo: Ok *voltea con el embajador de Estados Unidos* esa es la respuesta que van a seguir ustedes.
Embajador: Para este primer reporte solo tenemos que aclarar que los primeros disparos vinieron de los estudiantes.
Embajador: También vamos a tener que mencionar a los francotiradores.
Gustavo/Luis: *Lo voltean a ver medio inconformes*.
Embajador: No es necesario especificar para quién operaban, sino que hayan disparado contra el ejército, eso sirve para dispersar cualquier idea que el gobierno de los Estados Unidos pueda tener.
Luis: De acuerdo.
Embajador: Entonces, la única cosa que me falta *revisa sus documentos* es número de fallecidos y heridos *los voltea a ver* ¿hay un estimado oficial?
Luis: Todavía es incierto.
Embajador: Es un reporte preliminar, todos los números son tentativos.
Gustavo: *Viendo a Luis* No más de 30, ¿verdad Luis?
Embajador: *Le toma la palabra* 25 *lo apunta* ok, pues con esto señores estoy listo *se pone de pie*.
AUTOR: Lo peor es que ese dato sí lo dieron a conocer así.
Embajador: ¿Y cuál es la reacción del CNH ante todo esto?
Luis: *Despidiéndolo* El CNH ahora está inoperante, quizá haya alguna protesta aislada pero no serán más un problema.
Gustavo: *Despidiéndose* Y no se te olvide mencionar en tu reporte, que las olimpiadas se llevan a cabo, sin cambio.
Embajador: Ya los contactaré con los ejecutivos, usted no se preocupe señor presidente *se despide y se retira*.
Gustavo: *Se vuelve a sentar* ¿Va a reaccionar el CNH?
Luis: *Sentándose* No, se va a mantener presencia policiaca y militar en la ciudad durante unos días, y... iremos reduciendo los estragos gradualmente, ya me he puesto de acuerdo con el general Corona del Rosal y el procurador.
Gustavo: ¿Hasta cuándo?
Luis: Un par de días más, hasta que las cosas se acomoden para el 12 de octubre, y ya no va a haber rastro.
Gustavo: Hay que estar atentos con Corona del Rosal, y tenerlo bien controlado, está muy confundido con todo esto y no va a saber cómo reaccionar.
Luis: No se preocupe, yo me encargo de él *guarda su notario junto con sus otros documentos*.
Gustavo: *Se pone cómodo sobre su silla con su espalda hasta atrás* Yo... no sé, debí haber tenido entre unos... 15 o 16 años, cuando me surgió por primera vez la idea de querer ser presidente.
AUTOR: Creo que todos hemos querido ser presidente alguna vez.
Luis: *Lo voltea a ver con atención*.
Gustavo: Y en su momento, cuando me tocaba, también hice mi lucha por llegar hasta aquí; pero, nunca me olvidé de lo que era importante, nunca dejé de hacer mi trabajo así como nunca le di la espalda a mi jefe *cruza los brazos y se acomoda sobre la mesa* porque sin esa lealtad mínima, no habría proyecto ni nada hacia donde mirar *lo voltea a ver* no es fácil ser presidente Luis *voltea la mirada* todas esas decisiones, todo ese esfuerzo por sacar adelante al país cuando las cosas se ponen de veras duras, te das cuenta de que estás sólo, por eso es importante saber reconocer la lealtad y premiarlo.
AUTOR: Creo que lo tengo que reconocer, ser presidente tiene que ser un trabajo muy... difícil, y más cuando se trata de un país tan grande como lo es México; tener que sacarlo adelante, atender todas las cuestiones, dirigir un gabinete, liderar con los problemas sociales, tener un control en la economía y recursos del país, y muchas otras cosas más; es un trabajo que yo ahora a mis 22 años de vida simplemente no podría hacerlo, yo no podría cargar con el peso de toda una nación en los hombros ni tampoco ninguno de los que estamos aquí presentes; una tarea tan grande como esa solo puede estar a las manos de muy... contadas personas, pero en verdad que muy pocas. Lo que sí no estoy de acuerdo es que compensen con el cargo por resolver un problema a base de muerte.
-En las oficinas de la DFS-
Fernando: *Recibe una llamada mientras trabaja* ¿Sí?
Secretaria: Es su novia general.
Fernando: Ah, dile que pase por favor *cuelga el teléfono, se pone de pie y se echa un trago para estar con la mente más tranquila, pasa a recibirla*.
Su amante: *Entra a su oficina* Con permiso.
Fernando: ¿Y esa sorpresa? *la saluda con un beso* siéntate, ¿quieres tomar algo *va a su almacén*.
Su amante: *Viéndolo* ¿Fuiste tú?
Fernando: *Hace una pausa, deja lo que está haciendo y la voltea a ver* Mmm... a ver Elena, ahorita todo el mundo está confundido y...
Elena: *Insistiéndole* Solo dime, ¿lo hiciste?
Fernando: *Se le acerca* Lo que pasó fue una acción de descontrol... ocasionada por el CNH...
Elena: *Exasperándose* No, a mí no me insultes con esas pendejadas que se están publicando Fernando, te conozco muy bien, a mí no me puedes mentir *viéndolo a los ojos* ¿fuiste tú o no parte de eso?
Fernando: *Tomando algo de autoridad y hasta huevos* Si tanto me conoces, ¿por qué vienes aquí a que te responda eso?
Elena: *Volteando la mirada* Mmm... porque necesitaba oírlo de ti.
Fernando: *Algo molesto* ¿Para qué?
Elena: *Soltando algunas lágrimas* No lo sé *lo mira*.
Fernando: *Viéndola de frente* Tienes razón Elena, tú sabes quien soy yo, y sabes lo que hago, siempre lo has sabido, así que no vengas ahora a señalarme... a escandalizarte... a darte golpes de pecho; tú me conociste así, y así me metiste en tu cama, así te enamoraste de mí *apuntándole con el dedo* que ni se te ocurra juzgarme porque tú y yo somos exactamente lo mismo.
Elena: *Algo destrozada* Tienes razón, somos lo mismo, ijih... *se da la vuelta soltando algunas lágrimas para luego pasar a irse*.
Fernando: *La ve retirarse con su convicción aún mantenida, pero sin poder evitar tener una expresión de angustia por la situación*.
-Al día siguiente-
Loid: *Se presenta ante la oficina de Luis Echeverría* Señor secretario.
Luis: *Viéndolo desde su escritorio* Loid, muchacho *se pone de pie* me enteré de tu acción heroica acabando con los comunistas y su líder Desmond el día de ayer *le da unas palmaditas en el hombro y regresa a su escritorio* gobernación te concederá un título y una premiación por tu servicio a la patria *comienza a llenar una hoja*.
Loid: Será mi último servicio en la agencia, señor secretario.
Luis: *Detiene su pluma y lentamente lo voltea a ver* ¿Qué dijiste?
Loid: *Se acerca a su escritorio* Hubo ciertas cosas que no me comentó durante la redada y aquellas... no muy gratas detenciones en la ciudad de Tlatelolco.
Luis: *Lo mira con un test molesto* ¿Acaso me estás recriminando acciones que te comprometen también a ti en ellas?
Loid: No, pero tiene mucha razón señor secretario *volteando la mirada* mis servicios en la agencia, así como también mi entrega a su gobierno han sido tan bastos que no tengo derecho a declarar que tengo las manos limpias, pero... *volteándolo a ver* por mínimo puedo refutar que no las tengo manchadas de sangre inocente como su partido.
Luis: *Se pone de pie molesto*.
Loid: *Tratando de evitar una pelea* No se moleste, sabe que no tiene caso.
Luis: *Se queda quieto escuchándolo*.
Loid: Solo seré directo y claro, renuncio a la agencia de espionaje nacional *viéndolo directamente* no me importa lo que me haga.
Luis: *Lo mira también directamente* Esto no consta de lo que yo te haré, o te hará alguien más, sino de lo que vendrá sobre ti después de esto; tu identidad será revelada al ojo público, al menos aquí en Distrito Federal, y tus acciones de operación en defensa y protección del gobierno pasarán a ser cargos penales delictivos, si te encuentran serás procesado ante los mismos, ¿en serio te quieres arriesgar a una posible condena de 100 años de cárcel?
Loid: Este proceso penal tengo entendido que solo aplica en los estados que se cometió.
Luis: Pero siendo ese el caso solo facilitarías la lista de estados en los que las autoridades te podrían buscar.
Loid: ¿Tú los mandarás a buscarme?
Luis: *Cruza los brazos volviéndose a sentar* No, pero... tampoco haré nada al respecto para que no te encuentren, si lo hacen allá tú *lo mira de frente* pero no me compadeceré de ti cuando estés delante del tribunal en una corte estatal o federal.
Loid: No se preocupe por eso señor secretario, yo sé cuidarme las espaldas *le da la espalda* y más aún, sé cuidar a mi familia; desde aquí le digo que no cometa la bajeza de tocarme mediante ellas, porque yo sabré como cobrarle factura de ello *lo voltea a ver*.
Luis: *Lo mira de forma retadora y metiendo su mano en un cajón*.
Loid: *Viendo venir lo que hace* Y deje esa pistola, no tengo intención de agarrarme a tiros con usted *mira su otra mano* y tampoco contacte a sus hombres para que cubran el área, no habrá mal que de mí venga mientras usted respete mi renuncia.
Luis: *La suelta y lo mira aún serio y sin decir nada*.
Loid: Así que... *pone su carta de renuncia sobre la mesa* dejémoslo por la paz, tiene de su lado aún a Makima, Denji, Power e incluso Aki, no crea que pierde su futuro en la silla por descontar de un efectivo como yo. Ellos cuatro me complementan bastante bien, y más ahora Denji que se ganó fama de descuartizador con esa motosierra, ahora lo apodan el hombre motosierra.
Luis: *Toma la carta de renuncia sin decir nada*.
Loid: Le deseo suerte en su carrera por la presidencia señor, con permiso *se retira de la oficina sin problema ni peligro detrás de este*.
Luis: *En su mente aún guardando silencio* -Nada... nada ni nadie detendrá mi camino por la presidencia de la república-.
-En el cuartel de la agencia de espionaje-
Makima: *Con Loid en las oficinas* ¿Te irás?
Loid: No puedo continuar más con esto.
Makima: Te necesitaremos, ahora que sabemos el tipo de ser humano para el que trabajamos nos harías mucha falta para detenerlo en su trayecto a la grande.
Loid: Pueden contar conmigo para reconocimiento e información, pero yo... quiero dedicar el resto de mi vida a mi familia, quiero estar para ellos y alejarlos de otro posible altercado como el que vivimos ayer en Tlatelolco, no las quiero exponer de nuevo.
Himeno: *Viéndolo* Te entiendo perfectamente.
Denji: Yo no.
Makima: *Lo voltea a ver seria*.
Denji: Lo siento.
Makima: *Mira a Loid* Está bien, después de todo, ahora eres padre y mereces tener una vida al lado de tu esposa y tu hija.
Loid: Quizá no es lo que yo hubiese querido a primera instancia, pero... fuero las circunstancias las que me llevaron hasta estas dos mujeres que ahora le han dado sabor y sentido a mi vida.
Power/Kobeni/Himeno: *Sonríen ante tal declaración*.
Makima: Si te vas... dinos a dónde para poder tenerte en contacto y saber en dónde encontrarte.
Loid: No puedo decirles a dónde voy, desde ahora mi vida será un secreto entre los 31 estados y el Distrito Federal; mi familia y yo nos iremos a donde no nos puedan encontrar, y de paso, viviremos una vida feliz en la que solamente podamos estar para nosotros y entre nosotros.
Todos: *Lo miran con un aire de preocupación y tristeza*.
Loid: Hasta pronto chicos, fue agradable pasar parte de mi vida con ustedes, también son mi familia.
Todos: *Se acercan a él y le dan un abrazo grupal*.
Loid: Gracias, gracias, los extrañaré.
-Loid termina sus despedidas, recoge sus cosas y sale de las oficinas-
Loid: *Afuera dirigiéndose hacia su esposa y su hija*.
Yor: Amor.
Anya: Papi.
Loid: *Las toma a ambas y camina junto a ellas* Nos iremos de aquí, buscaremos una nueva vida y nos restableceremos en una nueva ciudad, un nuevo estado y un nuevo futuro.
Yor: *Viéndolo* ¿A dónde iremos Loid?
Loid: Ya se me ocurrirá algo, por ahora solo procuremos en estar juntos, ¿ok?
Yor: *Le sonríe* Sí, claro.
Anya: *Lo abraza* Papi... cuando crezca les daré su merecido a los que nos hicieron esto.
Loid: *La mira* No digas eso Anya, cuando crezcas serás una mujer trabajadora y responsable, por favor *toma su manita* por lo que más quieras nunca en tu vida te metas en la política.
Anya: *Viéndolo* ¿Eh?
Loid: Prométemelo.
Anya: *Le sonríe* Lo prometo.
Loid: Esa es mi niña *continúa su camino con ellas*.
Anya: *En su mente* -Mi papi es un gran mentiroso, y ahora... yo también lo acabo de ser-.
-De nuevo en las oficinas de los agentes-
Denji: ¿Y ahora qué vamos a hacer?
Makima: Nuestros deberes, nada más que eso.
Kobeni: ¿En serio seguiremos trabajando para este chango, y luego para este... mata estudiantes?
Makima: No sean idiotas, trabajaremos bajo la fachada de apoyo al gobierno, para que estos mismos nos sigan apoyando públicamente hablando *voltea con los demás* pero... desde ahora fijamos un rumbo distinto, apoyaremos las causas populares, trabajaremos para ayudar y resguardar a la gente y no al gobierno, pero nuestro mayor... nuestro mayor objetivo desde ahora, será derrocar a Luis Echeverría, y lo haremos sin importar lo que se nos cruce.
Denji: ¿Qué nos dice de los comunistas?
Makima: Los comunistas ya no existen Denji, acabamos con todos, incluso los disque infiltrados en la plaza de las tres culturas; ahora nuestro único y mayor enemigo es este gobierno.
Power: ¿No apoyamos la república?
Makima: Esta ya no es una república, luego de lo acontecido el día de ayer, esto ahora se ha convertido en una oligarquía compuesta por el control de unos cuantos individuos que están llevando al país a su antojo con matanzas y represión, no lo podemos seguir permitiendo.
Aki: ¿Y quienes se supone que vamos a ser con esta nueva postura?, ¿traicionaremos al gobierno?
Makima: No será una traición ya que ellos traicionaron sus ideales revolucionarios con los que llegaron al poder, por eso, no tenemos nosotros porqué respetar su nueva ola de ideales, por nuestro bien y por el de todo México, nuestra seguridad está en la gente.
Himeno: Así es.
Denji: Estoy de acuerdo.
Kobeni: Acabemos con Echeverría.
Power: Y démoselo de comer al chango.
Aki: Yo la respeto mucho señorita Makima, pero... ¿está segura de esto?
Makima: *Lo voltea a ver* Si tú no lo estás tienes todo el derecho a irte Aki, Loid ya se fue, ¿quieres hacerle segunda?, eres libre.
Aki: *Se queda callado*.
Makima: *Sin quitarle la mirada* ¿Mmm?
Aki: No señorita.
Makima: Muy bien *voltea nuevamente con los demás* haremos lo siguiente.
-Llega el día "12 de octubre" (diez días después de la masacre) y se llevan a cabo los juegos olímpicos en completa paz y estabilidad según lo prometido en ciudad universitaria; parte de ello gracias a que mataron a la mayoría de manifestantes, arrestaron a los líderes y les metieron un susto permanente a los que sobrevivieron-
Gustavo: *Desde el palco presidencial* Declaro formalmente inauguradas, las olimpiadas de México 68, aquí en Ciudad de México y en esta su ciudad universitaria, este 12 de octubre del año de 1968.
-La multitud y los invitados de diferentes naciones comienzan a aplaudir y ovacionar mientras el espectáculo con la antorcha y las llamas de apertura de los juegos se hacen presentes, también Díaz Ordaz es recibido por algunos abucheos y reclamos por parte de los estudiantes-
-Las llamas de parte de la antorcha son encendidas y las olimpiadas inician exitosamente; durante el inicio y la conmemoración como tal, los estudiantes hacen volar un enorme papalote en forma de paloma negra sobre el palco presidencial, y lo desplazan hacia el estadio universitario representando lo que el gobierno hizo para obtener esa dichosa paz para las olimpiadas-
Los estudiantes: *Voltean a verlo y se echan a llorar recordando lo ocurrido*.
-Un año después, día 1 de septiembre de 1969, informe presidencial-
https://youtu.be/IAb2exqejA8
-Llega el día 1 de diciembre de 1970, día del inicio del sexenio de Luis Echeverría Álvarez-
Luis: *Hablando desde el pódium* Llego a la presidencia de la república sin resentimientos, ambiciones ilegitimas o deseos de satisfacer intereses personales o de grupo, creo en la doctrina de la revolución mexicana y me he formado en la disciplina de la función pública, pienso, que el dirigente está obligado más que nadie a desempeñar con toda integridad su tarea, sin manchar jamás su investidura con el abuso del poder o la claudicación de sus principios.
Makima: *Al lado de Kishibe viendo desde los asientos* Ahí tienes a tu nuevo presidente, un hombre justo y honrado que jamás se mancha ni se ha manchado las manos de sangre, el cambio a Gustavo Díaz Ordaz que todos necesitábamos *lo dice todo con sarcasmo*.
Kishibe: Este inmundo e infeliz parasito no ocupará la silla mucho tiempo *señala a su compañero de al lado* mi compañero y yo ya tenemos un plan puesto en marcha para su caída.
Makima: *Lo voltea a ver* ¿Eh?, encantada, ¿cuál es su nombre?
¿?: No le puedo confiar mi identidad en este momento, señorita Makima, pero llámeme por ni nombre clave, dígame Bonfire.
Makima: Señor Bonfire, un gusto.
¿?: Igualmente *lo dice manteniendo un semblante serio*.
Makima: *Manteniendo su mirada al frente para no llamar la atención* ¿Y cuál es el plan?
Kishibe: Nuestro plan...
¿?: El plan, es juntar y reunir al equipo táctico más efectivo para desplazarlo entre las líneas y movimientos que desempeñará el ahora presidente en turno, entre ellos, aquellos que tienen que ver con protestas y movimientos estudiantiles, lo llevaremos al punto de desenmascararlo ante el ojo público y su gobierno caiga con él y todo su partido.
Makima: ¿Y tiene listo dicho equipo?
¿?: Aún no, pero está en proceso.
Makima: ¿Por quienes?
¿?: Por las chicas mejor capacitadas para este trabajo...
-50 años después en la actualidad-
https://youtu.be/CulturaUNAM
(Link del video: &list=LL&index=13&ab_channel=CulturaUNAM)
-FIN-
(Hemos llegado al final de esta historia muchachos, y antes de irme como tal y darle un cierre definitivo con todas las referencias, anécdotas, mensajes e historia para rememorar los acontecimientos de aquella fecha, quisiera dejar este último video que retrata lo último que le tocó por vivir a Gustavo Díaz Ordaz luego de la matanza, los juegos olímpicos y sus últimos años de vida antes de morir y ser juzgado por la historia y por todos los mexicanos, LO QUE VAN A VER A CONTINUACIÓN LOS SORPRENDERÁ Y HASTA LOS PONDRÁ DE MALAS AL VER SEMEJANTE BAJEZA DE SER HUMANO AL CONTAR LO QUE FUE HACER LO QUE HIZO)
https://youtu.be/sFIne8m118g
AUTOR: México no fue el mismo antes y después de Tlatelolco, y no lo fue, en parte muy importante, debido a Tlatelolco.
(No olviden dejar su voto, comentar y compartir, gracias y UN SALUDO CHICOS ;V)
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