louis corría lo más rápido posible, chocando con sus compañeros y evitando pesadas puertas de los salones.

estaba llegando tarde por tercera vez consecutiva en esa semana y la profesora de ciencias biológicas le había dicho que la siguiente vez que llegase tarde lo pagaría lavando todos los instrumentos en el laboratorio.

sabe que no es cierto, por el simple hecho de que la profesora lo adora.

especialmente después de que el omega empezó su pasantía con industrias stark en las oficinas de inglaterra, con la profesora dando una carta de recomendación para el omega.

claro que ella no sabía realmente porque lo habían considerado.

aún así tiene miedo.

abre la pesada puerta del salón y encuentra a los alumnos conversando entre sí.

la clase no ha comenzado y el omega suspira al llegar a su escritorio.

esto evitando las miradas que se lanzan en su dirección.

tose suavemente y sigue su camino a su mesa.

—¿y la profesora? —golpea suavemente el hombro del omega rubio junto a él que se encontraba plácidamente durmiendo.

niall se queja y lo ve con mala actitud.

—no ha llegado. —el omega bosteza. —es extraño, la profesora gillian nunca llega tarde.

louis asiente y siente la azulada mirada de su amigo en su cabello.

el omega a su lado frunce el ceño y ríe.

—ya veo porque ha llegado tarde. —niall toma entre sus dedos una pequeña pieza de concreto del cabello del omega que siente un sonrojo en su rostro.

mierda.

louis sacude su cabello dejando caer unas cuantas piezas pequeñas de concreto en la mesa.

—mierda. —el omega hace una mueca. —tengo que mejorar la máscara. —susurra.

niall ríe fuertemente y niega con la cabeza.

—tienes que dejar de pelear en las mañanas, de esa forma dejarás de llegar tarde. —el omega saca dos barritas de granola de su mochila.

louis sonríe al tener una en sus manos.

se más relaja al saber que los estudiantes a su alrededor están concentrados totalmente en sus propias conversaciones para tomar importancia a lo que estaba hablando con su amigo irlandés.

—no podía dejar que robaran el banco. —mordió de mala gana la barrita frente a él. —las cosas se pusieron feas y me estrellé con una pared de concreto.

el rubio rió y observó con atención el rostro de su amigo buscando otra herida, pero no encontró ninguna.

louis comenzó con su inusual trabajo a los 15 años cuando en una excursión a oscorp fue mordido por una araña diseñada genéticamente.

esta le brindo poderes y blah, blah, blah...

el omega realmente no entra en muchos detalles acerca de lo que sucedió.

solamente sabe que ahora londres no puede sobrevivir sin él.

y él sabe que un gran poder conlleva una gran responsabilidad.

sabe que su vida es complicada, pero relativamente todo esta bien.

después de dos años en su trabajo como el conocido "spiderman" maneja muy bien su vida como superhéroe.

tiene una rigurosa rutina que le ha ayudado a no perder la cabeza.

5:00am, despierta y se prepara para otro día como estudiante —y superhéroe, pero no le gusta mencionarlo porque se escucha petulante—.
justamente a las 7:00am, despierta a las gemelas y a su hermanito, ayudándole a su madre con el desayuno.
de 8:00am a 4:00pm, tiene clases y estudia. realiza sus tareas en sus pequeños recesos.
pasa tiempo con niall, ya que el maldito hijo de perra necesita de atención constante.
eso hasta que a las 6:00pm le da de cenar a sus hermanos y los cuida hasta mandarlos a acostar.
habla con su madre unos cuantos minutos hasta que ella tiene que salir para su turno nocturno.

sus fines de semanas los usa para trabajar en las industrias stark, entrenando y utilizando su laboratorio. claro que es supervisado por charlie, su "tutor" en industrias stark.

a partir de las 9:00pm es un superhéroe, golpea chicos malos, vigila la ciudad y rescata gatos atrapados de los árboles.

eso hasta que son las 3am y se da cuenta que sus columpiadas por la ciudad están llenas de golpes con anuncios publicitarios por el simple hecho de que no puede mantenerse despierto por mas tiempo.

el omega solamente llega a su cama a dormir como si una roca lo hubiese noqueado.

ahora mismo louis recuesta su cabeza en la fría mesa de laboratorio. rogándole a cualquier dios que se encuentre presente, que la profesora no llegue hasta dentro de una hora.

su espalda dolía, sus piernas estaban cansadas y sabía que aún así no podría descansar porque su siguiente clase es al otro lado del instituto.

la puerta se abrió y las voces de sus compañeros se detuvieron abruptamente.

el omega frunció el ceño y levantó la mirada.

su profesora tenía el cabello despeinado, sus tacones estaban en sus manos con uno aparentemente roto, su ropa estaba desaliñada y se notaba que no había tomado su café esa mañana.

louis sintió la mirada de niall en él.

—¿solamente fue detener el robo de un banco? —levantó la ceja.

louis sintió culpa e hizo una mueca.

—hubo una persecución... —el omega vio con asombro a la beta que su rostro se veía pálido como el papel. —tenían bombas.

niall golpeó su frente.

la beta carraspeó.

—fue una mañana difícil. —la profesora comenzó. —spiderman nos salvó nuevamente, pero mi auto ahora se encuentra debajo de grandes bloques de concreto.

louis hizo una mueca.

¡sabía que reconocía ese hermoso chevrolet negro!

—pero gracias a dios estamos vivos. —la beta sonrió y tomó una tiza de su escritorio comenzando a escribir en el pizarrón el tema de la clase.

un grupo de alfas en unas mesas después a la de louis bufaron.

los alfas se veían molestos y al mismo tiempo burlones.

—¡no comprendo como es que ese supuesto superhéroe en mallitas no está entre las rejas! —¡ey! son licras con grafeno, le costó mucho conseguir el grafeno... ¡y las licras son difíciles de cocer! el omega bajo la cabeza evitando la mirada de los alfas. —¡lo único que hace es destrozar la ciudad y afectar a los ciudadanos!

una omega junto a ellos jadeó indignada y negó.

—¡tú no sabes nada! —la omega chillo. —salva a la ciudad día con día. —la omega alegó. —además de que es una gran representación omega.

los demás omegas de la clase asintieron y louis evitó una sonrisa en su rostro.

uno de los alfas negó divertido.

—¡obviamente es un alfa! —el alfa rió y golpeó el hombro de uno de sus compañeros. —¿qué omega podría hacer todo lo que hace ese hombre en mallitas?

louis se mordió la lengua.

el grupo comenzó a alegar entre sí acerca de si spiderman era algo bueno para la ciudad, o si era un alfa o un omega.

el ruido irritó a la profesora que negó con la cabeza y con fuerza golpeó su escritorio con la regla en sus manos.

—spiderman no es el tema de hoy, jovenes. —la beta sonrió. —el tema de hoy es el código genético y expresión genética.

el omega sonrió al conocer a la perfección ese tema.

la clase comenzó y el omega se sintió tranquilo por unos minutos.

aun así frunció el ceño al sentir esa extraña mirada en él.

era una mirada constante y que siempre sentía en esa clase.

el omega siempre se preguntaba quien demonios lo observaba tanto.

¿por qué la siente en pocas clases y en los pasillos?

¿por qué no la sentía amenazadora?

era más que nada una mirada de atención.

no era peligro.

aun así el omega sabía que el que alguien descubriese su secreto significaba peligro.

suspiró y continuó tomando notas de la clase.

louis reconoce que su vida ha sido complicada, pero es su responsabilidad y nunca dejará de proteger a la ciudad.

es su sentido moral o alguna mierda que lo llama a continuar con su labor.

es algo que el omega siempre ha tenido.

desde que era un niño, él quería ser un científico que ayudara a la humanidad con su inteligencia. por lo cual, el omega era el mejor en sus clases de ciencias y matemáticas. el omega era inteligente y con grandes conocimientos gracias a que siempre estuvo rodeado de científicos como sus padres.

el omega siempre fue el mejor de sus clases y ahora solo le quedaba ser el mejor superhéroe que podía ser.

algunos lo considerarán ingenuo.

pero él aun tiene la esperanza de poder tener todo lo que quiere.