harry suspiró y se ocultó detrás de la puerta de su casillero en cuanto vio que el omega se dirigía hacia su dirección.

el alfa no comprendía como un omega podía ser tan perfecto.

como sus ojos azules podían brillar tanto.

como su cabello castaño se podía ver tan suave.

como su rostro podía verse como si hubiese sido creado especialmente para ser denominado como hermoso.

—¿sigues espiando a tomlinson? —liam abrió el casillero junto a él y rió.

el alfa sintió sus mejillas rojas y sus manos comenzar a sudar.

—¡y-yo no lo espió! —el alfa aclaró con la voz entrecortada. volvió a buscar con la mirada al omega que conversaba alegremente con su amigo. —s-solo me gusta verlo.

liam levantó una ceja.

—deberías acercarte. —el alfa habló con tranquilidad. —conversar con él. ya te conoce, no te va a matar.

el alfa negó y escondió su cabeza en su casillero.

—¡lo he intentado! ¡o bueno casi! —el alfa exclama un poco exasperado. —siempre desaparece, —el alfa dice confundido. —en la escuela siempre está con su amigo, en los recesos desaparece y al terminar clases nunca lo he visto.

liam ríe.

—omega ocupado. —el alfa tomó su libro de química. —creía que ya le habías comenzado a hablar... quiero decir los dos son los mejores de la clase y además desde que comenzaste tu pasantía en oscorp tienen algo en común.

el alfa rizado negó.

—él trabaja en industrias stark... ya sabes con químicos y matemáticas. —el alfa rió. —yo soy más un conocedor de química orgánica y biología. —el alfa recordó que mañana habría una reunión importante a la que debía de ir. —quisiera poder hablar con él... conocerlo mejor.

liam bajo los hombros y vio a su amigo con pena.

—algún día lo lograrás, hermano. —el alfa le dio una palmada en el hombro. —así podrás enseñarle lo que sabes de biología, si tú me entiendes. —el alfa le guiñó un ojo y rió.

harry sintió sus mejillas rojas y bajo la cabeza.

louis es un omega especial.

es increíble.

es inteligente, amable y hermoso... es tan divertido que sus comentarios ocasionales en clase lo pueden llegar a hacer carcajear y con una sola mirada puede perder la fuerza de sus piernas.

louis es perfecto.

louis es la definición de lo que más desea en su vida.

quiere conocerlo mejor y que el omega lo deje ver lo que en realidad es.

no puede negar que se siente nervioso en cuanto la mirada del omega esta sobre de él.

es un alfa tímido.

demasiado tímido.

sus únicos amigos son zayn y liam.

siempre se ha considerado callado y bastante nervioso.

hablar en público lo hace sudar y el pensamiento de hablarle a louis lo hace temblar por el simple hecho de que no tiene idea de cómo lograría que un omega tan maravilloso como él le dirigiese la mirada.

louis es louis.

solamente por eso maravilla a harry.

el alfa suspira y baja la mirada.

liam ríe y comienza a contarle una extraña historia acerca de cómo su gato intento comerse al pez de su hermana.

eso hasta que un estruendo interrumpe la conversación de ambos amigos.

los alumnos en el pasillo se quedan en silencio y los nervios se ponen de puntas en cuanto el sonido se produjo.

un segundo estruendo se escucha y con este se ve como al final del pasillo una de las pesadas puertas del baño del instituto golpea contra la pared del final del pasillo.

¿qué demonios?

gritos comienzan.

una gran cantidad de estudiantes corren hacia su dirección y liam con fuerza lo jalo del brazo intentando sacar a harry de su trance.

huyen del gigantesco lagarto que rugía sin control hacia los estudiantes.

el gigantesco monstruo rugía y rasgaba las paredes y casilleros.

rugía un nombre.

—¡louis tomlinson! —sus rugidos eran fuertes y sus dientes se veían afilados.

¡louis!

el alfa se detuvo al final del pasillo sin que los demás estudiantes prestaran mucha atención ya que estos corrían despavoridos por su vida.

el alfa buscó entre los estudiantes intentando encontrar la cabecita castaña.

no lo veía entre los estudiantes hasta que lo encontró a mitad de pasillo con su amigo.

el omega se veía confundido y consternado.

louis vio a niall y lo empujó fuera de donde estaban.

louis alejaba a niall de donde se encontraban, empujándolo hacia los estudiantes y el omega corrió dentro de uno de los auditorios de la escuela.

harry veía con preocupación como el lagarto empezó a correr hacia el auditorio donde se encontraba el omega.

harry sintió como su alfa se agitaba y le gritaba por correr hacia louis.

sintió un gruñido en su pecho y con determinación corrió hacia la vitrina de trofeos.

en esta vio una gran cantidad de trofeos por baseball y festejo al encontrar ese estúpido bate que le perteneció a algún imbécil que gano un campeonato o lo que sea.

justo ahora el alfa pensaba que esa podría ser su arma.

¡su arma contra un lagarto gigante!

¡el bate estúpido contra el lagarto mutante!

el alfa claramente no estaba pensando y lo único que podía pensar era en proteger al omega.

el alfa abrió el gran auditorio y vio algo que no podía creer.

louis estaba luchando contra ese lagarto, entre los asientos, por el pasillo y hacia el escenario donde el lagarto lo había lanzado con fuerza.

sus golpes eran fuertes y sus movimientos rápidos.

dos brazaletes en sus manos lanzaban telarañas por las cuales se impulsaba para poder alejarse o patear al monstruo con fuerza.

eso hasta que el omega vio hacia la puerta al sentir ese aroma a lavanda y romero.

su atención se dirigió hacia harry que se había escondido detrás de una fila de sillas que había en el lugar.

el alfa lo vio impresionado y louis perdió la concentración ganándose un golpe fuerte haciendo que su cuerpo rompiese una puerta que dirigía hacia un armario.

—¡¿qué pasa tomlinson?! —el lagarto gruñó. —¡me darás lo que necesito o no!

el lagarto parecía estar absorto en su pelea con louis. como si estuviese drogado.

sus movimientos eran erráticos y sin control.

salvajes.

el lagarto gruñía sin control y sus garras rompían el piso debajo de él.

¿quién era?

¿qué quería de louis?

el omega le lanzó un zapato desde el armario donde se encontraba.

—¡no tengo idea de quien demonios eres! —el omega saltó del armario.

aterrizó de cuclillas en una zona elevada del escenario donde se encontraban.

el característico traje rojo con azul estaba en su cuerpo y la máscara cubría su rostro.

y con sus telarañas intentó atrapar al lagarto que luchaba contra ellas y las lograba romper.

el omega pensó por unos segundos y con puntería lanzó unas cuantas telarañas hacia los pesados reflectores de luz en el techo golpeando con fuerza al lagarto que se tiró al suelo con fuerza y que acto seguido se arrastró en cuatro patas hacia el omega.

louis saltó hacia su espalda y lo intentó domar con sus telarañas.

lo jalaba hacia él intentando someter al extraño ser que se rehusaba a calmarse.

—¡¿podemos hablar de esto?! ¡no tengo idea de que demonios quieres!

el ser lo atrapó y con sus afiladas garras lo desprendió de su espalda y lo lanzó hacia el suelo.

el lagarto rugió fuerte y louis tapó su boca con sus telarañas en cuanto sus afilados dientes se acercaban hacia él. —¡perdón, no hablo lagarto mutante!

el lagarto tomó el cuello del omega con una de sus pesadas manos.

harry veía como el ser ahorcaba a louis.

sin pensarlo el alfa corrió hacia ellos y con fuerza golpeó al lagarto gigante con el bate en su cabeza.

el lagarto soltó al omega con sorpresa y vio al alfa que rápidamente se apartó del monstruo que le gruñó con enojo.

el alfa cayó al suelo y louis lo vio con sorpresa.

el omega frunció el ceño al ver como el lagarto intentaba acercarse al alfa frente a él.

louis se levantó con rapidez y comenzó a cubrir al monstruo con sus telarañas.

lo intentaba pegar al suelo, pero las garras del lagarto eran afiladas y el omega veía como sus telarañas comenzaban a terminarse.

con determinación se puso sobre el cuerpo del lagarto y tomó su cola, enredándola entre sus propias piernas y haciendo al monstruo caer al suelo.

este con salvajismo rasgó el abdomen del omega.

su rasgadura fue intensa provocando que el omega cayese al suelo por un segundo, pero intentaba continuar con su trabajo.

aun así el lagarto lo atrapó en sus brazos y comenzó a enterrar sus garras en el cuello del omega que gritó de dolor.

el sonido de patrullas llamó la atención del lagarto que soltó al omega y corrió hacia la oscuridad.

harry vio con preocupación al superhéroe en el suelo y tomó su cuerpo con delicadeza.

—¡louis! —su mirada era de preocupación y veía las heridas del omega.

—¿harry? —el omega susurró. —tienes que irte de aquí.

el sonido de los oficiales corriendo alertaban que estaban cerca del auditorio.

—no te puedo dejar aquí. —el alfa tomó al omega entre sus brazos que se quejó del dolor. —te llevare a un hospital.

louis negó y se quitó la máscara.

—nadie puede saber que soy y-yo. —el omega susurró. —¡por favor llévame a otra parte o déjame!

el alfa frunció el ceño y comenzó a correr hacia una de las salidas del auditorio.

—te llevare a mi casa... te curaré las heridas, pero necesito que nos lleves tú... —el alfa hizo una mueca. —con tus telarañas y así.

louis rió y asintió.

el omega se levantó y volvió a poner su máscara en su rostro.

—p-puedo columpiarme. —el omega rió y comenzó a buscar un edificio al cual saltar. —s-solo me gusta el drama. —el omega rió y se enderezó ignorando ese horrible dolor en sus entrañas.

el alfa negó.

el omega puso su mano en la cintura del alfa y lo cargó en sus brazos.

sin previo aviso el omega se jalo con sus telarañas y saltaron hacia el edificio.

—¡ah! —el alfa gritaba y tapaba sus ojos. se abrazó con fuerza al cuello del omega que reía. —¡ni siquiera sabes dónde está mi casa!

el omega negó.

—¿no recuerdas que una vez hicimos un trabajo en las primeras semanas? —el omega habló fuerte para que el alfa pudiera escucharlo. —sé dónde está tu casa.

harry gritó nuevamente al ver hacia abajo encontrando una gran distancia entre el suelo y ellos.

—¡mierda, louis! —el alfa se abrazó al omega. —por favor, n-no me dejes morir.

el omega rió.

—calma, harry. —el omega negó. —nunca te soltaría.

el alfa sintió sus mejillas sonrojarse y sus latidos aumentar.

suspiró y se escondió en el cuello del omega.

se sentía extrañamente seguro entre los brazos del chico más bajo que él.

sus piernas largas estaban alrededor de su cintura y sus brazos abrazaban sus cuello con fuerza, pero al mismo tiempo con cuidado de no tocar sus heridas.

sintió tranquilidad al llegar al ya no sentir la brisa fuerte en su rostro.

un suave toque en su espalda lo hizo reaccionar.

—estamos en nuestro destino. —el omega sonrió.

el alfa vio que estaban en la escalera de emergencias de su departamento.

vivía solamente con su madre y su gata dusty.

ahora mismo su madre se encontraba en un viaje se negocios, por lo cual por mientras solo eran él y dusty.

con sus brazos temblando comenzó a abrir la ventana.

no logró abrirla porque la ventana estaba atascada y sus mejillas se cubrieron de un rojo fuerte que el omega considero adorable.

el omega sin problema abrió la ventana con uno de sus brazos.

—creo que la súper fuerza es impresionante. —el alfa tartamudeó.

el omega bajo los hombros.

—privilegios de las arañas mutantes.

el alfa rió.

entraron a su departamento con rapidez.

el alfa tomó la mano del omega con su corazón al cien y lo dirigió hacia su habitación.

—l-lamento que nos hayas tenido que traer aquí por tus telarañas. —el alfa habló bajo. —debes estar sintiendo mucho dolor.

el omega se recostó en la cama e hizo un quejido.

—me han golpeado el trasero peor, no te preocupes.

el alfa negó y se acercó al omega con un kit de primeros auxilios que tenía en la parte de arriba de su armario.

se sentó junto al omega en su cama.

recargo con cuidado al omega en la pared contra su cama.

su traje estaba roto y su respiración se escuchaba entrecortada.

—te quitaré la máscara. —el alfa susurró.

—ya no puedo esconderlo más tiempo... —el omega bromeó.

el alfa sonrió tímido y con cuidado quito la máscara del rostro del omega.

sintió dolor en su corazón al ver su rostro.

estaba golpeado y con un pequeño corte en el puente de su nariz. su labio sangraba y sus pómulos perfectos tenían golpes.

el alfa sintió su corazón retorcerse.

—lo lamento, louis...

el omega negó.

—estaré bien... —el omega susurró. —siempre me levanto.

harry sonrió y con cuidado acarició la mejilla de louis con una compresa con agua para limpiar su rostro.

—claro, spiderman.