En el ala médica, todos los héroes finalmente se habían reunido.

Mejor dicho, los héroes que quedaban se habían reunido.

Todos enfrente de la cama donde se encontraba un moribundo Capa.

Shuri estaba insertando una especie de máquina en la cabeza de Tyrone. Era una extraña tecnología de Wakanda.

— ¿Qué hará esa cosa? — preguntó Reed.

— Despertar su cerebro, tonto — dijo Shuri, encendiendo la máquina.

Reed miró a Ben, algo ofendido.

Le sorprendía lo grande que esa niña tenía su boca.

— Esa "cosa" permitirá enviar una pequeña onda eléctrica a cada neurotransmisor de su cerebro, lo que activará sus neuronas — explicó la wakandiana — Pero, será de golpe. Les recomiendo retroceder un poco...

— ¿Por qué? — preguntó Quill.

Shuri presionó un botón, provocando que una de las luces de la máquina cambiara de amarillo a blanco...

Y provocando que Capa soltara un grito.

Este se levantó y fue directo hacia Star Lord, dándole un puñetazo en la cara.

Rocket comenzó a reírse, mientras los demás iban tras Capa y trataban de calmarlo.

Lo agarraron y trataron de sentarlo en la camilla.

Gritaba y se movía, bruscamente, hasta que comenzó a calmarse un poco.

— Se los dije... — dijo Shuri — No solemos usar esta cosa antigua.

— G-Gracias por el aviso... — se quejó Quill, levantándose del suelo.

— Un niño te dio un puñetazo — le dijo Rocket.

— Cállate...

Capa se sentó en la cama y comenzó a respirar, agitadamente.

Se agarró la cabeza y cerró los ojos, tratando de recordar todo lo que había ocurrido.

— ¿Tyrone...? — dijo Peter, acercándose a él — Tyrone, ¿estás bien?

— ¿H-Hombre Araña...? — jadeó — ¿Q-Qué pasó...? ¿Qué sucede...?

— Te sobreesforzaste — le contestó Reed — Casi mueres.

— ¿De verdad...?

— Sí, así es — dijo Peter — Tuvimos que traer a gente de Wakanda para curarte...

— Vaya... no puedo creerlo... — exclamó Capa, confundido — ¿Cuánto pasó?

— Unas cuantas horas — dijo Reed — ¿Ya te sientes mejor?

— Hay que darle un poco de tiempo — dijo el castaño.

— No tenemos tiempo — dijo Mr. Fantástico.

— Oye...

— No, tiene razón... — dijo Tyrone, poniéndose de pie con dificultad.

Peter lo ayudó a mantenerse de pie, evitando que se caiga al suelo.

— ¿Dónde la quieres? — preguntó Capa.

— Mi laboratorio — respondió Reed.

Algunos héroes comenzaron a caminar hasta llegar al laboratorio de Reed Richards.

Era un lugar enorme, lleno de máquinas que Peter no sabía para que servían.

Si estuvieran en otro tipo de situación, estaría sumamente emocionado de todo lo que veía.

Reed Richards presionó unos botones y, una zona del laboratorio, se rodeó de unas paredes transparentes.

— ¿Qué? — preguntó Peter — ¿Qué haces?

— Capa, ¿puedes teletransportarte? — preguntó Reed.

— S-Sí... creo que sí... — dijo Capa.

— Bien... entra allí y deja al simbionte dentro — dijo — Luego regresa..

— ¿No es muy arriesgado? — preguntó Ms. Marvel.

Reed volteó y la miró seriamente, haciendo temblar a la joven heroína.

— D-Disculpe... — dijo Kamala.

— ¿Puedes o no? — dijo Reed.

— Creo que sí... — dijo Capa — Aquí voy...

— Ten cuidado — le dijo Peter.

— Lo tendré...

Capa cerró los ojos, para después abrirlos y mostrar como estos soltaban un gran brillo blanco.

Soltó un quejido y se teletransportó.

Entró dentro de la "cúpula" y abrió sus túnicas.

Se volvió a concentrar... y se escuchó un gran rugido dentro de esa dimensión.

Tyrone soltó un grito y liberó al simbionte dentro de esa zona del laboratorio.

El héroe cayó al suelo, exhausto.

Levantó la vista y vio a su pareja. Vio a Daga simbionte.

Ella volteó y le gruñó, alargando sus garras y preparándose para atacar a Capa.

— ¡Capa, sal de ahí! — dijo Reed.

Cerró los ojos volvió a teletransportarse, evitando el ataque de la Daga Carnage.

La simbionte saltó hacia los demás héroes e intentó atacarlos, pero no podía romper las paredes transparentes.

Capa cayó al suelo, cansado y sudando, pero consciente.

— M-Maldición — dijo Capa, cerrando los ojos.

A él no le gustaba tener que ver a Daga de esa forma.

Ver como usaban su cuerpo como si fuera una máquina de matar.

— Muy bien... llegó el momento de trabajar... — dijo Reed, sentándose en su mesa — La cura no va a hacerse sola...

Rocket Raccoon y Shuri se acercaron con Reed y lo empezaron a ayudar en la creación de algún tipo de "cura".

Daga simbionte activaba sus aspas y comenzaba a lanzarlas hasta las paredes, buscando romper cada una de ellas.

Peter ayudó a Capa a levantarse y a retirarlo de la habitación...

Pero...

"¿Ya te vas, cariño?"

Una voz los hizo voltear.

Todos los que se encontraban en la habitación voltearon y vieron de donde provenía la voz.

Vieron como Daga se encontraba pegada en el techo, mientras giraba la cabeza en 180 grados.

Pero, la voz que tenía... no era la misma voz de Daga...

Era la voz de Cletus Kasady.

— Tienes un bonito laboratorio, Richards... — dijo Cletus, riendo.

— ¿Q-Qué está pasando...? — preguntó Capa.

— No lo sé... — respondió el castaño.

Kasady comenzó a reírse con más intensidad.

— No es cierto... — dijo Rocket.

— Mente colmena... — dijo Reed — Esto es malo...

— ¡Tardaron mucho en darse cuenta! — dijo Cletus — ¡Y vaya que tardaron! ¡¿Tienen idea de cuánto quise reírme cuando vi tu cara, Peter?!

— ¿Qué...? — preguntó Peter.

— ¡Cuando creías que tu estúpido plan estaba funcionando! — continuó Cletus, riéndose.

— P-Pero, sí... sí funcionó...

— ¡Oh! ¡Claro que funcionó! ¡Yo dejé que funcionara! — dijo Kasady — ¡Es muy difícil tener una conversación privada con todos esos yo allá afuera....!

— Y te quedarás con las ganas — dijo Reed, presionando un botón.

Esta acción eliminó, por completo, el sonido de dentro del lugar donde se encontraba el simbionte.

Se podía ver como este movía sus labios, pero nadie lo escuchaba.

— Eso es malo — dijo Rocket — Muy malo...

— E-Espera, ¿dijo mente colmena? — preguntó Capa — ¿E-Eso que significa?

— Significa que la situación es peor de lo que creíamos — dijo Reed — Cletus no solo puede ver, sentir y controlar a todos los simbiontes... sino, también puede ver todos sus recuerdos.

— ¡¿Qué?! — expresó Peter — ¡¿A qué te refieres con todos?!

— Cuando dice "todos" es todos — aclaró Rocket — Hasta la más mínima parte de su mente.

— Si el controla a todas esas cosas... — dijo Capa — ¡Bastaría con solo eliminarlo a él, ¿verdad?!

— ¡¿Acaso estás prestando atención?! — se quejó el mapache — ¡Él los controla! ¡Por eso no salen de la ciudad! ¡Sin rojito líder, todas las demás cosas serán como animales salvajes!

— No se contendrían — dijo Reed — Saldrían de la ciudad y se dispersarían por todo el mundo.

— Significa que... — decía Peter.

— ¡Maldita sea! — gritó Reed, estresado — ¡¿De qué diablos servirá crear una cura?!

— N-No lo entiendo... — expresó Capa, confundido.

— Con los componente que tenemos, apenas y nos alcanzará para dos frascos — dijo Rocket — Uno será para probarlo con la señorita rabiosa y... el otro, pensábamos usarlo para Carnage.

— Pero no servirá de nada... — concluyó Mr. Fantástico — Si se lo damos... provocaremos el fin del universo...

— No solo del nuestro... — advirtió Strange, hablándoles desde su mente.

Esto sorprendió al castaño.

Era igual a cuando habían estado fuera del tiempo y del espacio.

— ¿A qué te refieres? — preguntó Rocket.

— Si los simbiontes logran encontrar a Wanda... obtendrán el Darkhold — explicó el hechicero.

— ¿Qué es el Darkhold? — preguntó Reed.

— Un libro de hechizos... uno capaz de abrir puertas a otros universo — dijo — Con el poder mágico de Wanda, irían a otras realidades.

— Infestarían otros mundos — continuó Richards — Y no se detendría hasta destruir todo el multiverso...

— A lo que quiero llegar... es que, si vamos a hacer algo, tenemos que hacerlo y bien — dijo Strange — Toda la existencia misma depende de nosotros... y si fallamos...

— Sería el fin de todo... — dijo Peter — Este tipo es un verdadero peligro...

— Esto es imposible... — murmuró Reed — ¡¿Cómo demonios salvaremos al multiverso de estas cosas si apenas podremos deshacernos de dos?!

— Podemos concentrarnos en eso después — dijo el joven de Queens — Ahora, tienen que centrarse en crearla.

— ¡No! ¡Tú ya no dirás que debemos o no hacer! — le reclamó Reed — ¡¿Tengo que recordarte que pasó la última vez que nos dijiste que hacer?! ¡Murió Johnny!

— ¡No fue mi intención...!

— ¡Pero ocurrió! ¡Tu tonto plan provocó la muerte de varios de nosotros! — expresó — ¡Yo dije que no debíamos de escucharte! ¡Nunca debimos de hacerlo!

— L-Lo siento, no quise...

— ¡Lárgate! — dijo — Deja a los científicos de verdad trabajar...

Peter lo miró fijamente por unos segundos... y luego, ayudó a Capa a levantarse.

Comenzando a retirarse de allí.

Aunque le fastidiara, lo que decía Reed era verdad. 

Su plan llevó a la muerte de Johnny Storm, un miembro de los Cuatro Fantásticos.

Además de la muerte de varios de los Guardianes.

Y de la muerte de Eddie...

No tenía derecho de mirarlos a la cara después de todo lo ocurrido.

— Ja, yo le hubiera disparado en la cara — dijo Rocket, volteando a ver a sus compañeros — ¿Y bien? ¿Cuál es el plan, supergenios?

— Yo no... no lo sé... — dijo Reed, sobándose los ojos — ¿Enviarlos a la Dimensión Negativa?

— Ese es un estúpido plan.

— No escucho propuestas...

— ¡Yo tengo una! — dijo Shuri, insertando algo en la computadora de Reed.

— ¿Qué haces?

— Llevó observando la ciudad desde hace un tiempo — explicó — Analizando y registrando las cosas que ocurren..

— ¿Espiando? — preguntó Rocket.

— Suena mal cuando lo dices así... — dijo Shuri — Y encontré... algo interesante...

Luego de terminar de teclear, se abrieron varias grabaciones de cámaras de seguridad.

Mostraban una calle normal, con personas transitando.

— Guau, que gran video — expresó el mapache — Después me lo pasas para ponérmelo a la hora de dormir.

— ¡Espera un segundo, mapache!

— ¡¿Cómo me llamaste?!

Entonces, en la grabación de la cámara de seguridad, se pudo ver como el suelo de la calle se destruía por completo y... como una bestia enorme salía de allí, aterrorizando a las personas.

Esto sorprendió a los otros dos héroes presentes.

— ¡¿Eso es...?! — decía Reed.

— Se parece mucho a esas cosas que están allá afuera... — dijo la wakandiana.

— ¿De cuándo es?

— De hace unos días... parece que esa cosa salió de la nada, antes de que Carnage atacara — explicó.

— ¿Y dónde está?

— Fue destruido.

— ¿Por quién?

— Te sorprenderás...

Avanzó la grabación varios minutos... hasta uno en particular.

Uno donde se podía ver al Hombre Araña y a una especie de simbionte, parecido a Venom, salir del mis hoyo que había creado el simbionte enorme.

Kasady veía la grabación de seguridad desde donde estaba.

Y esto hacía que su sonrisa aumentara más y más...

De alguna forma... 

Estaba feliz de lo que ellos estaban descubriendo.

***

Peter ayudó a Capa a volver a su camilla, para que pudiera descansar.

Este se recostó en la camilla y suspiró, cansado.

— Hombre Araña... — murmuró Tyrone — ¿Qué fue lo que ocurrió?

El castaño miró a héroe durante unos segundos, tratando de pensar en lo que le iba a decir.

— B-Buscábamos traerte de vuelta y... buscábamos una forma de traer a los Guardianes — le dijo Peter — Yo ideé un plan para poder lograrlo, pero... varios de ellos...

— Oh...

— La Antorcha Humana fue uno... creo que eso les afectó mucho...

— Lo siento mucho...

— No fue tu culpa.

— Sí lo fue... — dijo Capa — Si no me hubiera sobreesforzado... ellos...

— Hiciste lo que creías correcto...

— Y por eso murieron... — dijo — Si no hubiera terminado en cama, la situación hubiera sido distinta...

Peter agachó la cabeza.

Era duro tener que aceptarlo, pero tenía razón. Si no se hubiera arriesgado a ese punto y no hubiera quedado inconsciente...

Tal vez nadie hubiera muerto.

Pero ya no tenía sentido pensar en eso.

Debían de centrarse en una forma de poder eliminar a todos los simbiontes de la ciudad.

O, por lo menos, los listos debían de hacerlo.

Peter se despidió de Capa y se dio la vuelta, retirándose de esa habitación.

Caminó por los pasillos hasta llegar a la gran sala donde estaban los héroes reunidos.

Estos hablaban entre sí, tratando de darse ánimos o bromeando de algunas cosas.

Como siempre, Electro estaba apartado de todos ellos.

Ignorante de todo lo que estos decían.

El castaño pensó en ir a hablar con él, pero sus dos amigos le llamaron.

Así que, fue con ellos.

— ¿Cómo está todo? — preguntó Miles.

— Tienes tu cara de: "Todo esto es mi culpa y no puedo evitar sentirme responsable" — añadió Felicia.

— ¿De verdad tengo una cara así? — preguntó Peter.

— Sí, siempre lo muestras en este tipo de situaciones.

Peter sonrió levemente y se sentó al costado de Felicia, suspirando.

Estaba cansado mentalmente.

— La situación es mucho peor de lo que pensábamos... — dijo Peter — Con lo que tenemos, solo nos alcanzaría para poder crear dos soluciones...

— ¡¿Sólo dos?! — dijo Miles, sorprendido — Pero... son millones...

— Sí... eso es lo malo...

— ¿Algún plan? — preguntó Felicia.

— No... nada todavía... — respondió — De hecho, me echaron del laboratorio...

— Hasta aquí se escuchó sus gritos.

— Ni siquiera, lo que sería nuestra esperanza, funcionará...

El joven se quitó su máscara y se sobó los ojos, tratando de controlar todo su estrés.

Felicia y Miles se miraron un momento.

— Oye, no es momento para rendirse — dijo el moreno — Debe haber...

— Pero, ¿cuál? — le interrumpió — Ni siquiera Eddie pudo contra Kasady... y si nos enfrentamos a él, nos convertirá en esas cosas...

— B-Bueno... tal vez...

— Tu mismo lo dijiste — habló Felicia — Las mentes más inteligentes están buscando una solución a este problema...

Peter volvió a suspirar.

Nadie estaba completamente seguro de que ellos podrían solucionar este problema.

Todo parecía seguir yendo para mal.

Strange perdía cada vez más fuerza, mientras los simbiontes intentaban entrar al edificio.

Tenían el tiempo en su contra...

— ¿Puedo hablar con él? — preguntó alguien.

Los tres levantaron la vista y vieron a Reed Richards, enfrente de ellos.

Black Cat y el joven Morales asintieron y se retiraron de allí.

Peter seguía decaído, viendo como Reed se sentaba a su costado.

Y también suspiraba.

Ambos se quedaron callados por un momento.

No decía nada.

— Así que... Eddie Brock... — decía Reed, suspirando — ¿Era tu amigo?

— S-Sí... desde hace mucho tiempo... — le respondió.

— ¿Y trató de matarte?

— Sí... yo... alguien murió por mi culpa... — dijo — Y... bueno, él me odió por eso...

— Claro... Peter, ¿puedo llamarte Peter? — preguntó el científico — Dime, ¿eso fue... lo único que pasó por tu culpa...?

— No... — respondió — Realmente, muchas cosas malas ocurrieron porque... yo estaba allí...

— Vaya héroe...

— Sí... hubo veces que me preguntaba si era el héroe... o el villano...

— Pero, te entiendo...

El joven de Queens volteó y lo miró, extrañado.

— Yo también cometí errores — le dijo Reed.

— ¿Usted? — preguntó Peter — Pero, si es Mr. Fantástico.

— Eso no impide que me haya equivocado — le dijo.

Reed volteó y señaló a sus compañeros de equipo.

— Fue por mi culpa que Ben, Sue y... Johnny... por mi obtuvieron sus poderes.

— ¿Enserio?

— Sí... tuve una idea loca y... me arriesgué más de la cuenta — le explicó — Y ya viste como quedaron...

— L-Lo lamento...

— No hay día que no me sienta culpable por lo que les hice — dijo — Entiendo muy bien lo que se siente cargar con una culpa.

Peter agachó la cabeza.

— Desde aquél día, evito tomar riesgos... — dijo Reed — No quería que nada volviera a salir mal...

— Lamento lo que le ocurrió a Johnny... — le dijo Peter — Si te hubiera escuchado...

— No hubiéramos obtenido los componentes — interrumpió — Como científico, debo estar obligado a tomar riesgos en todo lo que hago... y esos riesgos, pueden llevar a resultados no esperados.

— Pero...

— El sacrificio de Johnny no fue en vano... o, por lo menos, no permitiré que así sea... — le dijo Mr- Fantástico — Ahora mismo... estamos uniendo los componentes que tenemos para crear algo que elimine al V-252...

— Pero, con tan poco...

— También vimos algunas grabaciones... te enfrentaste contra un simbionte gigante — dijo — Y alguien te acompañaba...

— Era mi amigo, Harry... también murió...

— Lo vi... y lo lamento... — le expresó — A tu edad, y viendo todo lo que hiciste como el Hombre Araña, no puedo imaginarme por lo que has pasado...

— Sí...

— Tienes suerte de haber tenido a tus amigos... — dijo — Porque conozco a personas... que no tuvieron la misma suerte...

Peter sonrió ante eso.

Aún no podía creer lo afortunado que era en ese apartado.

— Hay algunas cosas que debo decirte — dijo Reed — La primera es sobre tu amigo, Eddie Brock.

— ¿Eddie?

— Sí, estuve revisando las cámaras de los drones y... encontré su cuerpo... 

— Oh...

— Pero, esa es la cosa, estaba su cuerpo muerto... no se transformó en una de esas cosas.

— ¿Qué? Eso no tiene sentido...

— También revisé las imágenes de tu pelea — continuó — Recibiste un rasguño en tu mejilla... y tampoco de convertiste...

— Sí, también me sorprendió...

— Ustedes dos portaron el simbionte con anterioridad, ¿verdad?

— Sí... — le respondió — ¿tendrá algo que ver?

— Eso quiero revisar — dijo Reed, sacando una jeringa — ¿Puedo...?

El castaño asintió y dejó que la aguja entrara en su cuerpo, siendo su sangre succionada por la jeringa.

— Analizaré tu sangre y le haré pruebas — dijo el científico — Puede que esto nos sea de mucha ayuda.

— Claro...

— Y también... tu amigo Harry, cuando luchó junto a ti, llevaba un simbionte — dijo — ¿Qué era esa cosa?

— El simbionte Anti-Venom — le respondió — Era un simbionte capaz de... de eliminar a otros...

— ¡¿Qué?! ¡¿Enserio?! — dijo Reed — Pero, esa cosa nos serviría para acabar con Carnage.

— No, mientras más elimina, también se desintegra — explicó el castaño — Además, absorbía toda la energía del usuario... era muy peligroso.

— Entonces... ¿ya no queda nada del "Anti-Venom"?

— No, nada de...

"No olvides la información de donde está eso..."

— ¡Espera, sí! — dijo Peter, levantándose — ¡Si queda algo!

— ¡¿El qué?!

— ¡Su información! — le dijo — ¡Habían computadoras en ese lugar! ¡Debe de haber información sobre como funcionaba! ¡Algo como...!

— ¿Datos para poder eliminar a los simbiontes? — dijo Reed — El problema es que no poseemos ningún simbionte.

— ¿No podemos usar a Daga?

— Ese simbionte está conectado a Kasady — dijo — Si lo usamos, este podría controlarlo y sería nuestro fin...

— Rayos...

— Pero, con los datos... podría facilitarnos aún más la creación de alguna cura...

— ¿Enserio?

— Sí... esa información me es indispensable ahora.

— ¡Bien! — dijo el héroe — Yo iré a recuperarla.

— No, sería peligroso ir solo — dijo Reed — Iré contigo.

— Te necesitan para continuar con la creación de la cura, ¿no? — dijo el castaño — Además, yo sé donde queda exactamente. No tendré problemas en ir allá.

— No me gusta mucho, pero...

— Confía en mí — dijo Peter — Strange puede crear un portal y traerme de vuelta.

Reed lo miró fijamente, dudoso de lo que decía...

Pero, esa extraña emoción que tenía el joven de Queens...

De alguna forma, le recordaba un poco a Johnny Storm.

— Bien, pero no olvides que tendrás que entrar rápido — dijo el científico.

— ¡De acuerdo! 

Seguían sin saber como iban a solucionar todo el problema de la ciudad infestada de simbiontes.

Pero...

Cualquier avance en esta pesadilla contaba. 

Debían de salvar a toda la existencia...

Y no perder la esperanza que les quedaba.

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Chicos!

Espero les haya gustado mucho este capítulo ^^.

La trama va avanzando poco a poco, mientras nos acercamos a la conclusión de todo.

Hasta el próximo capítulo!

Publicado el 13/06/21