Peter se sentó en la caja de ventilación, arriba de un edificio en Midtown. Lo había logrado, finalmente había sacado a los hombres de Fisk de las calles.

Era seguro que Daredevil le iba a agradecer por eso. Solo esperaba que no haya muchas flores en la fiesta.

Era broma.

Ahora solo debía atrapar a los que trabajaron con él. Lo que quedaba de sus hombres. Además de ese tal Merodeador.

El celular de Peter sonó.

— ¡Parker, ¿dónde estas?! — dijo Otto Octavius, tras el teléfono — ¡El comité llegará pronto! ¡Tenemos que revisar el equipo!

— ¡Estoy a unas calles! — dijo la araña, mientras se levantaba y empezaba a balancearse — ¡Casi llego!

— ¡Buf! ¡Tendré que hacerlo solo! — dijo, colgando la llamada.

— ¡No lo hagas! ¡No es seguro! — le respondió, pero ya había colgado — Me gusta el entusiasmo del Doc... pero a veces se mete en problemas. Mejor llego antes de que se lastime.

Peter fue con prisas al laboratorio. El castaño había sentido como le estuvo fallando a su maestro los últimos días, debido a su actividad como héroe.

Ya había pasado más de un mes desde la muerte de su padre y, aún así, no había logrado un equilibrio en su vida.

El héroe aterrizó en el techo del lugar, se quitó su traje y se puso su ropa que escondía ahí. Trato de arreglarse la bata lo mejor que pudo y entró al laboratorio lo más rápido que pudo.

— ¡Lo siento! — dijo Peter, entrando rápidamente — Me atrase...

Peter vio al científico conectado a varios cables, probando la prótesis en la que habian estado trabajando.

La prótesis funcionaba casi a la perfección.

Otto lo vio y decidió ignorar el hecho de la recién llegada del joven.

— Empezó sin mi... — dijo Peter.

— La directora del comité llegará pronto — le dijo Octavius — Esta bien, Parker. Yo inventé este equipo. Creo que puedo manejarlo.

En ese momento, un cosquilleo en la cabeza del castaño hizo que volteara a ver una cabina con varios botones.

Esta cabina empezó a sacar chispas, además de prender las luces rojas de amenaza de incendio del lugar.

— Eo amortiguador... — dijo Peter, corriendo y tratando de desconectar los cables de la máquina que sacaba chispas — Oh no... ¡¿Deberíamos abortar?!

— Aún no... — dijo Otto, tratando de quitarse el chaleco donde había conectado los cables.

Peter fue a la computadora, para tratar de apagar el sistema, pero empezó a salir fuego de ahí. Esto provocó que el doctor Octavius empezará a electrocutarse.

— ¡Resista! — le dijo Peter, mientras corría hacia un botón rojo.

Este botón funcionaba para apagar todo el equipo eléctrico del lugar.

Peter logró presionarlo y le salvó la vida a Octavius, quien cayó cansado al suelo.

El castaño fue hacia el preocupado, ayudándolo a levantarse.

— ¡Doctor Octavius! ¿Esta bien? — le preguntó el joven.

— Un inconveniente, pero casi... — le dijo mientras le sonreía.

En ese momento, llegaron las personas del comité, quienes vieron el desastre ni bien entraron al lugar.

— ¿Están todos bien? — preguntó la directora del comité.

— No, yo-yo me equivoqué... — trato de decir Peter, pero fue interrumpido.

— Los... amm... los niveles de energía superaron las expectativas — interrumpió Octavius — Desde cierto punto de vista, es un desarrollo muy positivo.

— No huele nada positivo — dijo, seriamente.

— Lo sé, la siguiente fase...

— No nos adelantemos.... — dijo, mientras trataba de respirar por el humo — ¿Podemos discutir esto en otro lado?

— Deberías tomarte el resto del día, Peter — le dijo Otto a su amigo.

— Pero... — dijo el castaño.

— Hablaremos después...

Otto camino, junto con los del comité, a su oficina.

Todo eso fue un fiasco. Si Peter hubiera estado ahí para hacer las comprobaciones, nada de esto hubiera ocurrido.

El castaño se sentía mal, pero ya no podía hacer nada más. Peter Parker había vuelto a perder.

Solo salió del laboratorio y se puso su traje para ir a patrullar y para despejar su mente.

— ¡Hola Peter! — saludo MJ, luego de que lo llamara — ¿Estas libre?

— Tienes suerte — dijo el castaño, mientras envolvía a un ladrón en telaraña — Justo ahora no hago nada.

— Me siento ignorado — dijo el ladrón, de cabeza.

— Tu cállate — le dijo Peter, tapando la boca del tipo con sus redes y yéndose de ahí — ¿Necesitas algo, MJ?

— Nada en específico — le dijo la pelirroja — Me preguntaba si podíamos ir a comer, ya sabes...

— Oh, ¿quieres.... salir? — preguntó el castaño, algo nervioso.

— ¿No puedes?

— ¡No! ¡Claro que puedo! — le dijo Peter — Puedo salir contigo ahora, si quieres...

— ¡Bien! — le dijo Mary Jane — Te veo cerca de la ESU.

— Sí, ahí nos vemos... — le dijo el Hombre Araña, colgando la llamada.

Una cita con Mary Jane Watson. Eso no lo consigue cualquiera.

Peter decidió ir al apartamento. Se cambió por unas ropas que no estén arrugadas y trato de peinarse lo más que pudo. Además, puso su traje en una mochila, por si algo sucedía.

Mientras buscaba buenos zapatos, el castaño encontró algo oculto entre su ropa.

El contenedor de nanopartículas.

Dentro de este contenedor con el logo de su traje, estaba miles de nanopartículas que formaban el traje de Iron Spider.

Este recipiente fue dañado en la batalla contra Thanos, pero parecía que podía arreglarlo. Peter decidió guardarlo también en su mochila, ya que luego de la cita con MJ, iría al laboratorio, para intentar repararlo.

***

— ¡Peter! — saludó MJ al ver a su amigo — Veo que llegas temprano.

— Espero dejar de llegar tarde a cualquier lugar — bromeo el castaño — ¿Cómo estás?

— Muy bien — dijo la pelirroja, viendo la universidad — Investigo un poco sobre mi futuro...

— ¿Futuro? — preguntó el castaño.

— Así es... — le respondió Mary Jane — El próximo año terminamos la escuela y... es momento de ir pensando en la universidad.

Peter lo había olvidado. Se encontraban en onceavo grado. El doceavo era el último y tendrían que ir a la universidad. El castaño no había pensado aún a donde iría a estudiar, pero viendo su situación económica, la ESU es una opción.

— ¿Qué vas a estudiar, Peter? — le pregunto MJ.

— Ciencias, bioquímica — dijo Peter.

— Wow, sí que lo tienes decidido — le dijo entre risas.

— Desde hace mucho tiempo — le sonrió — ¿Tu ya sabes que estudiar?

— No te burles, ¿sí?

— Jamás.

— Estoy entre periodismo o actuación.

Peter se le quedó mirando. Eran carreras completamente distintas.

— Vaya, si que... no pensé que quisieras ser actriz — dijo el castaño.

— También lo dijo Felicia cuando se lo dije — respondió la pelirroja — Pero siempre me encantó como los actores expresaban emociones en las películas, además de contar historias lejos de la imaginación colectiva.

— Te entiendo... — le dijo Peter, aunque realmente no lo hacía — ¿Y periodismo?

— Bueno, soy amante de la justicia — le dijo MJ, empezando a caminar — Ya sabes, revelar lo escondido, atrapar a los malos... como lo que hacen los súper.

— Ambas carreras son fuertes candidatos — dijo Peter — Aún tienes un año para pensarlo.

— Sí, aunque últimamente el tiempo pasa volando — dijo, mirando al cielo — ¿Quieres ir a comer?

— Sí — le respondió el castaño. Dos tostadas no eran desayuno.

Peter y Mary Jane siguieron su cita, yendo a comer y paseando por las calles de Nueva York, hablando de su vida y sobre el blip.

Cerca de las seis de la tarde, MJ se despidió de Peter y se subió a un bus, que la llevó a su apartamento.

— Araña, soy Yuri — dijo la capitana, luego de llamarlo.

— ¿Ya está Fisk en Ryker? — pregunto Peter.

— No esta en Ryker — le respondió — Nuestro amigo califica para tratamiento VIP.

— ¡¿Raft?!

— Sí.

— Ah, se unirá a Scorpion, Electro y los demás... — dijo Peter, sonriendo — Fisk estará honrado, tendrá compañía.

— Hiciste un gran trabajo, araña — dijo, despidiéndose — Gracias por eso.

Luego de despedirse, el castaño recordó sobre el recipiente y decidió llamar a Octavius, para saber si seguía en el laboratorio.

— ¡Doctor! — saludo Peter al llamar — ¿Qué tal estuvo la visita del comité? Lamento haberlo arruinado.

— En absoluto, Peter — le respondió — Solo están nerviosos ante el inminente triunfo. Ya se calmarán, siempre lo hacen.

— ¿Quiere que regrese a limpiar el laboratorio? — le pregunto el castaño.

— No, no. Voy a salir a cenar de todas formas. Lo retomaremos mañana — le respondio Otto, mientras colgaba la llamada — Un pequeño descanso y volveremos a crear el futuro.

— Ojalá pudiera embotellar y vender el optimismo de ese hombre — se dijo Peter a si mismo — Parece que dejo el laboratorio... hora de trabajar en el traje, en privado.

Peter llegó al laboratorio y se aseguró que estuviera vacío. Luego, fue a su oficina que Octavius le había hecho para él.

Encima de la mesa, puso el recipiente, junto a su traje, para comparar la tecnología.

El aparato tenía una gran rasgadura que había afectado el mecanismo de apertura. Peter podía repararlo, aunque le tomaría algo de tiempo.

Los minutos pasaron y ya casi era de noche.

— ¿Parker? — saludo Octavius al entrar a la oficina.

Peter entró en desesperación. Así que se paró enfrente del traje y del recipiente, escondiendo torpemente su secreto.

— ¡Doctor Octavius! Yo, eh... — trató de evitar que el científico viera lo que tenía detrás — ¿Qué tiene ahí?

— Es China — respondió Otto refiriéndose a su comida y acercándose a su amigo — De haber sabido que estarías... ¿en qué trabajas?

— Ah, es solo un proyecto...

Otto se acercó y vio el traje del Hombre Araña.

— Claro... — dijo, mirando a los ojos s Peter — Eres tu...

— Yo-yo no... no sé...

— Ay, por favor — lo interrumpió — Parker, es obvio.

— Permítame explicarle... — le dijo Peter.

— Me lo hubieras dicho antes.

— Quise hacerlo... — dijo — Pero tenía miedo de que si se sabia, mi familia corriera peligro...

— Ah... sí... — dijo Otto — Yo supongo que si diseñas su equipo, también serás un objetivo.

— ¿Qué? — dijo Peter, no entendiendo al inicio, pero comprendiendolo después — Digo... ¡Sí!

— Tranquilo — le dijo Octavius, poniendo su mano en su hombro — Tu secreto esta a salvo.

— Gracias, doctor...

— Bueno... — dijo, retirándose — Te dejaré solo...

Peter se dio la vuelta y decidió seguir con si traje. El héroe estaba feliz de tener un nuevo aliado. Esta situación de que varios sepan su identidad lo tenía confundido.

Por un lado, le era favorable, pero por otro, no. Su padre fue el mayor ejemplo de eso.

El héroe siguió reparando el recipiente. No le faltaba mucho para tener listo, pero decidió dejarlo hasta ahí. Era momento de salir a patrullar como el Hombre Araña.

Mientras detenía a unos criminales, el héroe recibió una llamada.

— ¿Hola? — preguntó el castaño.

— Peter, soy Martín Li — dijo el señor tras el teléfono — Solo quería decirte que necesitamos más tiempo para preparar la fiesta de May... creo que el pastel está atascado en el tráfico.

— Oh, por supuesto — le dijo Peter, recordando la fiesta que había acordado — Solo avísame cuando puedas e iré.

— Genial — le respondio — Hablamos después.

Peter colgó la llamada y siguió envolviendo a los malos en telaraña.

Ese era su trabajo, ya que era el héroe de la ciudad de Nueva York.

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Buenas, gracias por leer el capítulo ^^.

Espero que les haya gustado y que lo sigan apoyando dándole a la estrellita :)

Nos vemos en un próximo capítulo!!

Publicado el 31/08/20

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"La revisión de la subvención fue un desastre, sí, pero quizás sea la inspiración que necesitaba. Ya no podemos solo cumplir con las expectativas del comité: debemos superarlas."