El Caballero de la Luna
— ¡Hannah! — gritó un oficial de policía.
Este azotó la puerta de su apartamento y entró dentro.
Allí, estaba su esposa, junto a su pequeña hija.
Estas lo miraron, sorprendidas de la apariencia que tenía el oficial.
Se veía aterrado.
— ¿Qué sucede, cariño? — dijo su esposa.
Ella no se dio cuenta de la cantidad de sangre que empapaba la ropa de su esposo.
— ¡Tenemos que quedarnos aquí! — dijo — ¡Nadie saldrá afuera!
— N-Nos estás asustando...
— ¡Podrían llegar... esas cosas...! — continuaba diciendo — ¡Oh, Dios! ¡¿Dónde está Cole?!
— Él está dándole un baño al bebé, ¿por qué...?
Pero el oficial no escuchó.
Corrió hasta el baño y abrió la puerta, ignorando los gruñidos que se escuchaban al otro lado de la puerta.
Al entrar, no pudo evitar soltar un grito desgarrador.
Su hijo y su bebé estaban tirados en el baño, muertos... mientras uno de los simbionte comenzaba a comerse sus tripas.
El bebé comenzó a convulsionar, mientras la masa rojiza envolvía su cuerpo.
La esposa del oficial caminó hasta allí y vio la escena, gritando de desesperación.
El bebé abrió los ojos y saltó en dirección del padre, mordiéndole el brazo.
El niño también comenzó a convertirse en esas cosas. El otro simbionte que se encontraba allí pudo sentir a la esposa y a la pequeña.
Soltó un poderoso rugido y dio un gran salto.
Todo ese apartamento comenzó a llenarse de sangre.
En el tejado de ese mismo edificio, una túnica apareció en un abrir y cerrar de ojos.
Cayeron al suelo los tres chicos.
Peter, Cindy y Tyrone.
Capa estaba muy cansado. Habían intentado alejarse lo más posible de Times Square y de los simbiontes, pero no había sido posible.
Esas cosas, rápidamente, habían logrado seguir por todo el distrito, asesinando a diestra y siniestra.
Solo había pasado una hora desde que todo comenzó...
Parecía ser que, al final del día, todo Nueva York iba a ser controlada por Carnage.
— ¡Maldita sea! — maldijo Capa, golpeando el piso.
— Tranquilo, Tyrone... — dijo Cindy, acercándose a él.
— ¡No me pidas que esté tranquilo! — dijo — ¡Esa cosa mató a Tandy! ¡Está matando a todo el mundo!
Peter comenzó a mirar las calles de la ciudad.
Su ciudad.
Veía a los simbiontes correr por todos lados, atrapando a las personas y asesinándolas sin compasión.
Sin darles oportunidad.
— Maldición... — murmuró el castaño — Esto es muy malo...
— Necesitamos un plan — dijo Moon — No podemos seguir huyendo.
— Tenemos que asegurarnos que nuestros amigos estén bien... — dijo Peter — Edith... ¿Edith?
Trató de comunicarse con su IA, pero no respondía. Solo escuchaba una interferencia.
¿El daño que había hecho Carnage a su traje había sido tan grande?
Sin Edith, no podía comunicarse con sus amigos.
— Y... estamos incomunicados... — dijo el castaño — Esto es horrible...
— Tenemos que buscar un lugar seguro... — dijo Cindy.
— Lo sé, lo sé... — dijo Peter, mirando sus manos.
No podía disparar telaraña y no estaba seguro si Silk podría llevarlos a los dos cargados.
Entonces, la puerta del tejado comenzó a ser golpeada.
Esto sorprendió a los tres héroes.
— Están aquí... — dijo Moon.
Las personas muertas, convertidas en simbiontes lograron destruir la puerta de madera y los observaron fijamente.
— ¡¿Cómo saben que estábamos aquí?! — preguntó Capa.
— Tienen un sexto sentido... — respondió Peter — Tienen la capacidad de sentir dónde hay seres vivos...
— Eso no es justo... — dijo Cindy.
Dos simbiontes gritaron y saltaron hasta ellos.
Peter saltó y le dio un puñetazo a uno de ellos, mientras Moon logró patear al otro.
Aún así, los demás simbiontes comenzaron a acercarse hacia ellos.
Era todos los que vivían en ese lugar.
Eran demasiados.
Peter arrancó una caja de ventilación y la estrelló contra uno de ellos.
Cindy comenzó a golpearlos, evitando que le hiciera algún daño.
Su Sentido Arácnido le daba esa ventaja.
Pero, Capa no podía defenderse. No tenía muchas fuerzas, ni siquiera para volar.
Los simbiontes no tardaron en darse cuenta y en comenzar a ir tras él.
El castaño saltó y empujó a uno de las bestias que intentaron atacar a Tyrone.
— ¡Tenemos que irnos! — dijo Peter.
— N-No puede ser... — dijo Capa, mientras caía de rodillas.
Realmente estaba débil, pero tenían que salir de allí.
Capa saltó hasta sus compañeros y los cubrió, siendo teletransportados de allí.
Por desgracia, la teletrasportación solo los llevó unos metros al costado, comenzó a caer hasta el suelo de las calles.
Cindy no perdió el tiempo y disparó varias telarañas, tomando a Capa y a Peter con sus manos.
Trató de mantener el equilibrio, pero terminaron estrellándose contra una pared y cayendo sobre un escalera de incendios.
— Eso pudo salir mucho mejor... — dijo Cindy, sentándose.
— ¡¿Cómo rayos vamos a resolver esto?! — preguntó Capa — ¡Si esas cosas nos tocan, estaremos perdidos!
— Trato de pensar en algo... — dijo Peter.
Pero, no podía pensar en otra cosa que la seguridad de sus amigos.
Realmente estaba preocupado. Esa era una maldición y bendición suya.
No sabía si lo habían llevado al penthouse o si estaban en casa de Miles.
Y cualquiera de esos lugares podría estar siendo atacado por Kasady...
Entonces, Silk intentó abrir la ventana, pero su Sentido Arácnido se activó.
— Creo que no tendremos tiempo para pensar... — dijo Moon, empujándolos.
Los tres cayeron hasta el callejón, viendo como la ventana era destruida y varios simbiontes salían de allí.
Cindy se levantó y disparó todas sus telarañas a esas cosas, tratando de mantenerlas atrapadas.
Pero la fuerza que poseían destruía sus redes sin problemas.
El castaño agarró un contenedor de basura y se los tiró a varias de esas cosas, haciendo que cayeran al suelo.
Esto les dio una oportunidad para huir a las calles.
Pero, al hacerlo, vieron como un montón de simbiontes los estaban esperando, gruñendo.
Estaban rodeados.
— Acérquense a mí... — dijo Capa.
— ¡No, espera! — dijo Cindy — ¡Casi no tienes energía!
— ¡¿Tienes una mejor idea?!
Capa los volvió a rodear con su túnica y volvieron a ser teletransportados.
Pero, esta vez, entraron dentro del edificio que tenían al costado, en el tercer piso.
Tyrone cayó al suelo, cansado.
Parecía que sufría cada vez que realizaba el teletransporte.
Peter se acercó a él y lo ayudó a levantarse, pero el Sentido Arácnido de Cindy se volvió a activar.
— ¡¿Tan rápido?! — se quejó la chica.
— ¡Vamos! — gritó Peter.
Comenzaron a correr lo mejor que pudieron hasta la puerta de ese apartamento, terminando en el pasillo.
Allí, escucharon como los simbiontes comenzaba a subir por las escaleras.
El castaño se dirigió a una ventana que había y la abrió, viendo como esas cosas comenzaban a trepar por las paredes.
Levantó la vista y vio el atardecer de la ciudad...
La luz naranja permitía ver perfectamente la destrucción de la ciudad y las explosiones que habían.
Además, los gritos desesperados de las personas hacían ver toda esa situación como una auténtica pesadilla.
El héroe volteó y vio a Cindy, creando una pared de telaraña.
Estaba comenzando a sudar.
Comenzaba a usar demasiada telaraña orgánica y eso empezaba a cansarla.
— ¡Tenemos que saltar! — le dijo el castaño.
— Chicos, ustedes pueden huir... — les dijo Capa, cansado — Y-Yo me quedaré a distraerlos...
— ¡¿Estás loco?! — le dijo Moon, acercándose a él — ¡No te dejaremos atrás!
— Cindy tiene razón — continuó Peter — Huiremos los tres.
— Ahora mismo... soy un estorbo... — expresó Capa.
El ruido de las redes comenzando a ser destruidas llamó la atención de los tres héroes.
— ¡No tenemos tiempo para esto! — dijo Peter, levantándolo y caminando hasta la ventana.
Los simbiontes que estaban trepando estaban muy cerca de ellos.
El Hombre Araña puso a Capa en su espalda y Silk tomó a Peter entre sus brazos.
Así, saltaron y comenzaron a caer.
Los simbiontes intentaron agarrarlos, pero no pudieron.
Cindy disparó sus redes y comenzaron a intentar balancearse por los edificios.
El equilibrio que tenía no era el ideal y le costaba el doble intentar mantenerse bien.
Eso la cansaba mucho más.
Peter giró la visto y vio el penthouse.
Había un montón de simbiontes escalando por el exterior e invadiendo todos los pisos.
— ¡Cindy! — dijo Peter.
— ¡Lo sé! — le dijo — ¡Intentó llegar allí!
No estaban tan lejos...
Pero, de un momento para el otro, las telarañas de Cindy dejaron de salir de sus dedos.
Esto la sorprendió. Nunca le había pasado.
Los tres empezaron a caer, hasta estrellarse contra un vehículo.
Se levantaron lo mejor que pudieron, pero Capa y SIlk se veían cansados.
— Tengo sed... — dijo Moon, intentando levantarse.
El sonido de los simbiontes comenzando a acercarse lo alertó.
Al castaño aún le quedaba una pata mecánica de su traje, pero sabía que no iba a ser suficiente para la cantidad de simbiontes que se acercaban.
Se dieron la vuelta y comenzaron a caminar, intentando huir de allí, pero del otro lado también empezaron a llegar muchos simbiontes.
Aunque, no iban tras ellos...
Estaban persiguiendo una especie de camioneta sin techo.
El castaño pudo notar que la camioneta era conducida por una persona en un traje completamente blanco.
La persona que conducía se detuvo enfrente de ellos.
— ¡Suban! — gritó.
Los tres héroes no dudaron y se sentaron detrás de él.
Pisó el acelerador y comenzó a conducir lo más rápido que pudo, cruzando un callejón.
Los simbiontes los seguían.
Y mientras más seguían avanzando, más simbiontes eran los que lo seguían.
— ¡Maldita sea! — gritó el tipo encapuchado.
— ¡¿Quién es él?! — preguntó Moon.
— ¡No es momento de preguntas, niña! — dijo el tipo, girando su vehículo y comenzando a esquivar varios vehículos destruidos.
Cindy se dio la vuelta y apuntó a los simbiontes con sus dedos, disparando varias bolas de telaraña.
Pero, al hacerlo, esto provocó que comenzara a dolerle.
— ¡¿Estás bien?! — preguntó Peter.
— ¡No sé que me pasa...! — le respondió.
— ¡Estas cosas no pararán de seguirnos...! — dijo el conductor — ¡Tenemos que soltar algún peso muerto!
— ¡¿Qué?! ¡Ni hablar! — dijo Peter — ¡No dejaremos a nadie atrás!
— Sí, sabía que lo dirías...
El tipo encapuchado de blanco se paró encima de su asiento.
— ¡Prepárense para saltar! — dijo.
— ¡¿Saltar?! — repitió Capa.
— ¡Ahora!
No lo pensaron mucho y le hicieron caso.
Saltaron, mientras el vehículo perdía velocidad y se estrellaba contra los simbiontes.
El conductor sacó un aparato de su cinturón y presionó el botón, provocando que el vehículo estalle.
La onda expansiva hizo volar a los cuatro héroes y a los simbiontes.
— Estás loco, ¿sabías? — dijo Moon.
— ¡No pierdan el tiempo! — dijo el sujeto, agarrando una tapa de alcantarilla.
Todos entraron allí, intentando perder el rastro de los simbiontes, los cuales pasaron de largo y no se dieron cuenta que estaban bajo sus pies.
Finalmente, tuvieron un momento para respirar.
Respirar el agua del desagüe no era lo ideal, pero nada más tenían.
Cindy y Capa eran los más cansado, pero Peter seguía bien. Algo adolorido, pero mejor que ellos.
La telaraña orgánica tenía la ventaja de no tener que recargarse por cartuchos, pero esto hacía que la persona se dehidratara por esto.
— Moon Knight... — dijo el encapuchado — Ese es mi nombre.
— ¿Moon Knight? — preguntó Peter.
— Yo escuché de él... —dijo Capa, tratando de ponere de pie — Creí que eras un mito...
Moon Knight lo miró fijamente y simplemente se dio la vuelta.
— Debemos quedarnos por aquí. Fuera de la vista — dijo el héroe de la luna — Y para su suerte, nadie conoce estos laberintos como yo...
— Gracias por tu ayuda... — dijo Peter — Soy...
— Lo sé — le interrumpió, comenzando a caminar — Vamos...
— C-Claro... — dijo el arácnido.
Este miró a sus amigos y se quedaron quietos en su sitio.
Moon Knight volteó y los miró.
— ¿Qué están esperando? ¿Una invitación? — preguntó.
— No dirigíamos al edificio...
— No querrás ir allí — dijo — Está infestado de esas cosas.
— ¿Qué? — dijo Peter — No... recién estaban llegando...
— En tan solo minutos, logran asesinar e infectar a todos los habitantes de cualquier edificio — explicó Moon Knight — Estoy seguro que debiste ser testigo de eso...
— Un poco...
— Entonces, ¿a dónde vamos? — preguntó Silk.
— Tenemos que buscar un escondite — respondió — Tengo algunos recursos. Mañana pensaremos en un plan para conseguir más...
— Wow, oye... — dijo el castaño — No estamos hablando del fin del mundo.
Entonces, el héroe blanco paró.
— Has visto lo de esas cosas, ¿no? — preguntó — ¿Y dices que el mundo no se va a acabar?
— Debe haber una forma de detenerlos — le dijo Peter — Yo pude detener a Venom una vez... seguro tendrá otro tipo de debilidad...
— ¿Venom? ¿Salvar al mundo de esas cosas? — expresó Moon Knight — El mundo ya no se puede salvar...
— Espera... — dijo — ¿De verdad crees eso?
— No es una creencia... — dijo el héroe — Es un hecho... Nos mantendremos escondidos por un tiempo hasta que esas cosas comiencen a ir por otras zonas del mundo...
— ¿Y si no se van? — preguntó Silk.
— Entonces, viviremos nuestros últimos días bajo tierra... — respondió el caballero de la luna — Hay peores destinos que eso...
— Si solo te escondes, ¿por qué nos salvaste? — preguntó el joven de Queens.
— Necesito un equipo para sobrevivir... — le respondió — Sus habilidades pueden serme útiles a la hora de buscar comida...
— ¿No estás siendo extremadamente negativo? — preguntó Peter — Solo ha pasado un par de horas....
— Y se han apoderado de la mitad de la ciudad.
— ¿Qué dijiste?
— Veo que no estás actualizado...
— Eso es imposible...
— Chicos... — dijo Silk, sintiendo como su cabeza empezaba a vibrar.
Cerca de ellos, el sonido de unos animales comenzó a sonarse.
Eran ratas.
Muchas ratas comenzando a acercarse hacia ellos.
— Debe ser una broma... — dijo Moon Knight.
Este comenzó a correr, mientras lo demás lo seguían.
Peter volteó y vio a la ratas.
Estaban cubiertas del simbionte.
— ¡No es cierto! — gritó Peter, mientras cargaba a Capa.
— ¡Deshazte de él! — le gritó Moon Knight.
— ¡No haré eso!
— ¡Idiota!
Moon Knight sacó una especie de granada y la lanzó al techo, provocando que este explote y comenzara a derrumbarse enfrente de las ratas Carnage.
Esto les permitió escapar de ellos.
— ¡Maldito estúpido! — gritó Moon knight — ¡No tengo armas infinitas! ¡Debiste tirarlo!
— No sé quien diablos eres, pero por un momento pensé que eras un héroe — le dijo Peter — ¿Quién diablos dejaría a alguien atrás?
— Alguien que no es un idiota... — dijo — Tal vez fue una mala idea salvarlos de esas cosas.
En ese momento, en la interfaz del Iron-Spider, se pudo divisar una llamada.
Miles lo estaba llamando.
Pero, al intentar contestar, la llamada se cortó debido a los múltiples fallos del traje.
— No puede ser... — dijo el castaño.
— ¿Qué pasó? — preguntó Cindy.
— Miles me llamó... lo que significa que está vivo — le respondió — Si no están en el penthouse, tal vez estén en Harlem.
— Creo que Harlem aún no ha sido asediado por esas cosas — dijo Moon Knight.
— Tienes que llevarnos hacia allá — le pidió Peter — Debemos ir por nuestros amigos.
— ¿Estás bromeando? — preguntó — Dije que aún no ha sido asediada... pronto lo estará.
— Por favor, debo asegurarme de que estén bien — le dijo — Y después, pensar en una forma de salvar al mundo.
— Otra vez con eso... — dijo — Sé inteligente. Hay que mantenernos unidos y tratar de sobrevivir lo mejor que podamos... sin ningún tipo de contratiempo.
Dijo, señalando a Capa.
— Tengo la responsabilidad de intentarlo... — le dijo — Mi tío me dijo que un gran poder, conllevaba una gran responsabilidad...
— ¿A sí? — dijo, dándose la vuelta — Pues tu tío era un idiota.
— ¡Oye! — le gritó — ¡Él era un gran hombre!
— Lo que digas... — expresó — Si vas a seguir con tu juego de querer ser un héroe, puedes irte y morir buscando a tus amigos...
— Tú dijiste que conoces estos túneles... — dijo Cindy — Podrías llevarnos hasta Harlem por aquí.
— ¿Estás loca? — preguntó — No arriesgaré mi vida por unas personas que tal vez estén muertas...
— Necesitamos tu ayuda...
Peter lo pensó un momento...
Y se le ocurrió algo.
— Anya Corazón es una de mis amigas — dijo Peter — Ella tiene unas gafas con tecnología Stark.
— ¿Stark? — preguntó — ¿Por qué tendría...?
— Si nos ayudas a llegar a Harlem, te daré esas gafas — dijo el castaño — Con el satélite de Tony, podrías encontrar suministros fácilmente.
— Eso es verdad...
— ¿Qué dices?
Moon Knight lo pensó un poco antes de decir nada.
— ¿Si sabes que, cuando lleguemos, esas cosas ya habrán invadido Harlem?
— Dos de mis amigos son superhéroes — dijo Peter — Confío en que podrán mantenerse a salvo...
Ambos se miraron fijamente.
— Si algo sale mal... los dejaré solos — dijo Moon Knight — Y una vez que obtenga esas gafas... también los dejaré. No voy a unirme a ese viaje suicida...
— Bien... — dijo Peter.
Moon Knight comenzó a caminar, mientras los demás se quedaron quietos.
— ¿Estás seguro de confiar en él? — preguntó Cindy.
— No... pero no tenemos más opciones...
— ¿Y sí le darás las gafas?
— No...
El joven de Queens ayudó a pararse a Capa y comenzaron a caminar, siguiendo a Moon Knight por las alcantarillas de la ciudad.
Encontrar a sus amigos era la primera parte del plan... pero, la verdad...
Era el único plan que tenía.
No sabían cómo podrían detener esta invasión...
Realmente, si no encontraban una forma de salvarlos a todos...
Sería el fin del mundo.
***
Moon Knight abrió la tapa de la alcantarilla y comenzó a mirar hacia todas direcciones.
La calle estaba completamente vacía.
— Limpio... — dijo, saliendo de las alcantarillas.
Peter salió, mientras también ayudaba a Capa.
Cindy fue la última en salir, mientras intentaba mantenerse centrada.
— ¿Qué le pasa? — preguntó el caballero.
— Nuestros Sentidos Arácnidos están conectados de una forma... poco convencional... — le respondió el castaño.
— Odio esto... — expresó Cindy, alejándose varios pasos del joven de Queens.
El caballero de la luna comenzó a mirar a todos lados.
Le pareció muy extraño que no hubiera nadie por allí, sobretodo con la situación que estaba ocurriendo en las calles.
— Bien... — dijo Capa, parándose por si mismo.
— ¿Estás bien? — preguntó Peter.
— No...
Caminar hasta llegar al edificio de donde vivía Miles.
Allí, vieron en lo alto, como varios vidrios de las ventanas estaban rotos.
— Oh no... — expresó el castaño.
Entraron rápidamente y comenzaron a subir por las escaleras.
Y fue cuando llegaron al piso donde estaba el apartamento de Miles que pararon en seco.
La puerta de este estaba destruida.
Moon Knight sacó un bastón y se preparó para lo que sea.
Entró, listo para combatir, pero se dio cuenta que no había nadie allí.
Todo el apartamento estaba destruido, pero ninguno de sus amigos se encontraba en ese lugar.
— No es cierto... — decía Peter, mirando todo el lugar.
— Te lo dije — expresó el caballero — Están muertos.
— No... tal vez escaparon...
— Acéptalo, murieron — dijo — Sus cadáveres estarán siendo usados para matar a más personas.
— ¿Puedes dejar de decir esas cosas? — dijo el joven — Los encontraremos y...
— ¡¿Quieres tú dejar de decir tonterías?! ¡Mira el mundo allá afuera! — dijo Moon Knight — Incluso, si encuentras una forma de derrotar a una de esas cosas, ¿cómo harás para detener a todas?
Le preguntó, moleto.
— ¿Crees que con tus amigos podrás vencer esta locura? ¡Crece de una vez! — continuó — ¡Esa esperanza que tratas de encontrar no existe!
— Escucha encapuchado, he pasado por cosas horribles durante toda mi vida como héroe — le dijo Peter — Y si hay algo que me permitió llegar hasta este punto fue la esperanza.
— ¡Que gran respuesta! ¡Tú grandiosa esperanza te dejó vivir hasta el fin del mundo!
— Mira... solo ayúdanos a viajar bajo el suelo — pidió — Es muy arriesgado ir por arriba.
— Teníamos un trato — dijo Moon Knight — Te traigo aquí y tú me das esas gafas. Cumplí mi parte... ¿y tú?
— Un héroe no debería rendirse así nada más... — le dijo Peter — ¡No cuando aún hay una pequeña pizca de...!
— ¡No me conoces! — dijo Moon Knight, dándole un puñetazo en la cara — Déjame enseñarte algo. En esta vida, no hay nada más importante que tú mismo. El "heroísmo" y los ideales son para tontos...
— ¿Por qué...? — dijo, mientras se sobaba la mejilla.
— Fui como tú... creía que la esperanza era lo más importante en todo... — le explicó — Pero la muerte de mi familia me hizo entender que eso no era verdad... que eso no vale para nada.
— ¿Y crees que eres el único que le falló a alguien? — le cuestionó — Mis tíos, Gwen... muchas personas han muerto por mi culpa. Pero no renuncio. Uso sus memorias como una guía.
— Guarda ese parloteo para cuando te reúnas con tus guías — le dijo — ¡Dame las gafas!
Peter lo miró fijamente por un momento... y solo suspiró.
No podía hacer nada para cambiar el pensar de ese sujeto.
Pasó de largo y fue directamente hasta la habitación de Miles.
No podía darle esas gafas. Las necesitaba para encontrar a sus amigos.
Al entrar a la habitación, vio todo desordenado.
Señal que había ocurrido una pelea.
Pero, por suerte, logró encontrar en el suelo las gafas.
Parecían estar en buen funcionamiento.
Entonces, se las puso.
— ¿Edith? *Bienvenido, Peter* Es bueno escucharte... — dijo el castaño.
— ¿Así es como funcionan? — preguntó Moon Knight.
— A-Ah, sí... algo así... — le respondió, levantándose — Esto...
Pero, no pudo continuar.
Vio, como detrás de Moon Knight, una figura humanoide se hacía presente.
— ¡Cuidado! — gritó el joven.
Moon Knight se dio la vuelta y dio un salto hacia atrás, esquivando las garras de esa criatura.
— ¡Maldita sea! — dijo el caballero, preparándose para atacar.
El simbionte intentó volverlos a atacar, pero unas telarañas le dieron en la cara.
Cindy había podido generar otras.
Peter corrió hasta la bestia y la empujó, encerrándola en la habitación.
— Tenemos que salir de aquí — dijo el castaño, corriendo hasta sus compañeros.
— ¡Espera! — gritó Moon.
Pero, fue un tarde.
Un gigantesco puño salió del suelo y mandó a los cuatro héroes hasta el techo del edificio.
Cayeron en el techo, adoloridos, mientras escuchaban como varios simbiontes comenzaban a salir de los apartamentos y empezaban a subir.
Peter se sentó en el suelo, mientras todo comenzaba a darle vueltas...
Pero, luego de unos momentos, se dio cuenta de que ya no tenía los lentes.
Miró a todas direcciones y vio como Moon Knight los levantaba del suelo.
El joven de Queens intentó ir tras él, pero un simbionte fue y lo tumbó al suelo, intentando morderlo.
Moon Knight lo miró fijamente y sacó una esfera de su cinturón.
Lo tiró al suelo y esta esfera comenzó sacar humo.
Y al cabo de unos segundos... el caballero ya no estaba allí.
Silk fue donde su amigo y golpeó al simbionte que lo tenía tumbado.
Lo ayudó a levantarse y vieron como un montón de esas cosas los tenían atrapados.
— Trataré de sacarnos de aquí... — dijo Capa, intentando concentrar oscuridad.
— Te harás más daño — le dijo Moon.
Las bestias simbióticas comenzaron a ir tras ellos.
Uno de los tentáculos atacó a Capa, haciendo que se estrellara contra Peter.
El golpe fue tan fuerte que ambos fueron lanzados del tejado.
Iban a caer... pero Cindy logró agarrar el brazo del castaño.
Peter tomó a capa de la túnica.
— ¡Gracias! — le dijo el joven de Queens.
— ¡No te preocupes! — le respondió Cindy.
Pero, los simbiontes se acercaron a ella y comenzaron a atacarla.
Silk hizo todo lo posible para defenderse de ellos, sin soltar a Peter.
El castaño intentó pegarse a la pared, pero...
El sonido de la piel siendo atravesada lo hizo levantar la cabeza.
Vio como Cindy Moon era atravesada por varias garras de los simbiontes.
— ¡Cindy! — gritó Peter.
Moon intentó decirle algo, pero no pudo...
Su brazo perdió fuerzas...
Y los soltó.
Los dos héroes empezaron a caer, viendo como Silk se empezaba a transformar en una de esas cosas.
Capa, apretando sus ojos, abrió su túnica e hizo que Peter entrara en ella.
Con todas sus fuerzas, los teletransportó de allí.
Y ambos cayeron sobre el techo del edificio que tenían al frente.
Tyrone soltó un gritó de dolor, mientras Peter golpeaba el suelo.
No tenía idea de que hacer...
No sabía dónde estaban sus amigos y no sabía si es que seguirían vivos.
Y para empeorar, Moon Knight los había abandonado, provocando la muerte de Cindy.
En un momento así, ¿realmente había una forma de poder salvar al mundo?
Peter levantó la vista y volvió a mirar la ciudad.
La luz naranja del atardecer comenzó a desaparecer, comenzando a aparecer el color negro de la noche.
No sabía que más hacer...
Hasta...
Que se fijo en un edificio a lo lejos.
Un edificio, con personas que tal vez podrían ayudarlo...
El edificio Baxter.
El edificio de Los Cuatro Fantásticos.
_________________________________________
Buenas a todos!!!
Pues, este es un capítulo mostrando un poco como son las primeras horas de esta "invasión".
Además de la presentación de Moon Knight!! Un sujeto... algo cansado de la vida jajaja.
Espero les haya gustado!! Y si fue así, pueden darle a la estrellita :D.
Hasta la próxima!
Publicado el 01/06/21
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