Peter cruzó por los conductos de ventilación y luego fue a una habitación, donde encontró a un conserje dormido. 

Le quitó los planos que tenía al costado. 

Luego de darle una rápida revisada, se dirigió al laboratorio central, donde no había nadie a esas horas. Bajó y empezó a revisar toda la información que podía.

Al seguir investigando, Peter logró encontrar un montón de archivos extraños, parecía que eran archivos sobre experimentos para curar enfermedades humanas.

— ¿ADN de Lagarto? — dijo Peter al leer uno de los archivos. Trató de entrar, pero se encontraba bloqueado por alguna razón — ¿Ahora qué? ¿GR-27? ¿Próximo GR-35? — Peter leía los nombres de los archivos que iba bajando.

En ese momento, Peter comenzó a escuchar unas voces que se acercaban a donde estaba él, así que cerró todo, lo más rápido que pudo, y dio un salto hasta el techo.

— Norman es algo exigente... — dice uno de los científicos.

— Es lo normal, después de todo, pide lo imposible — dijo su compañero — No podemos crear una poción que solucione todo, si quiere una cura, necesitamos más...

En ese momento, varios gritos alarmaron a los científicos. Estos fueron a ver y se horrorizaron al ver a el Lagarto.

— ¡¿Qué es eso?! — grito uno de ellos.

— ¡No lo sé, pero será mejor que salgamos de aquí!

— ¡Sí!

Luego de que ambos sujetos se fueran, Peter bajo del techo y fue directamente donde estaba el reptil.

— Doctor Connors, por favor... — le hablo Peter mientras se acercaba lentamente al científico — Doc, usted no es así...

— Aghhhh, ¡¿Cómo puedes saber de mí, si no me conoces?! — le dijo Connors.

— Tienes un buen punto... — admitió Parker — Pero no necesitas lastimar a las personas.

En ese momento, Connors saltó y tiró al suelo al joven de Queens — Oh niño, no busco dañar a nadie, busco salvarlos. Sal...salvar... del mundo perfecto...

— ¡Ok, usted esta loco! — dijo Peter mientras le tapaba la boca con sus redes — ¡Ahora quítese de encima! — Peter lo lanzó hacia una pared, destruyéndola.

— ¡No espero que entiendas! — entonces, el monstruo agarró a Peter del cuello con su cola y lo lanzo por la ventana. 

Peter empezó a caer rápidamente hacia el suelo, pero lanzó sus redes y logró volver a donde estaba el Lagarto.

Por suerte, logró llegar justo cuando el reptil había descargado lo que quería.

— No te dejaré escapar, Curt

— Ya lo veremos, niño — dijo mientras escapaba de ahí.

Peter comenzó a perseguirlo, mientras ambos se daban buenos golpes. El Lagarto trató de perderlo lanzándole mesas y sillas que se encontraba de ahí. 

Peter trato de esquivar cada ataque, pero varias sillas si lograron darle y cayó al suelo.

— Demonios, eso no lo vi venir... — dijo Peter, mientras se levantaba del suelo.

Peter, lanzando dos redes en el pasadizo, logró empujar a Connors a las puertas del elevador, cayendo por ahí. Ambos chocaron contra el elevador y luego este cayó hasta el primer piso. 

El Lagarto rompió el techo del elevador y se dirigió a los baños.

— Ese fue un horrible plan... — dijo Peter mientras se levantaba del suelo del elevador, adolorido.

Peter se dirigió donde estaba el Lagarto, pero este había destruido un escusado y se había metido al alcantarillado — Viejo, eso es asqueroso... — dijo, mientras también se metía al lugar.

Al entrar a la alcantarilla, el castaño siguió los rasguños y los ruidos del Lagarto hasta llegar a una especia de laboratorio improvisado, con computadoras con análisis de ADN.

Además del nombre "Alistaer", marcado con equis.

— ¿Qué es esto? — se preguntaba el héroe mientras revisaba las hojas que habían en la mesa. Había pruebas para crear más bestias reptiles.

Al costado de las hojas, había una especie de inyección. Al leer las hojas, vio que era una especie de antisuero que permitiría volver a su forma humana a Connors.

— Doctor Connors, es hora de la siesta — en ese momento, el Lagarto atacó por sorpresa por la espalda de Peter, lanzándolo al agua del alcantarillado.

Peter se levantó con rapidez y se acercó el antisuero a sus manos con sus telarañas.

— ¡No deberías estar aquí! — le gritó el Lagarto, mientras no dejaba de moverse bruscamente.

— ¡¿Qué sabes sobre Richard Parker?! — le gritó Peter, mientras su voz se ponía aguda.

— ¡¿Por qué preguntas eso?! — se volvió contra el y Peter lo esquivó, pegándose en el techo.

— ¡Dímelo! — le gritó el joven de Queens con mucho, pero mucho, miedo.

— ¡Nunca lo entenderías niño! — en ese momento, el Lagarto dio un gran salto y arañó el torso del traje de Parker.

— ¡O-Oye, córtate las uñas! — Peter saltó hacia otra pared — ¡¿Sabes lo difícil de cocer es esto?!

— ¡Cállate!

— ¡No! ¡Tu cállate! — entonces, al dar un salto, logro inyectarle el antisuero al Lagarto, haciendo que comience a volver a su forma humana.

— ¡¡¡Gruaaaaaa!!! — gruñó mientras caía al suelo. Peter aprovechó ese momento para agarrarle de brazo derecho pero comenzó a desaparecer.

— ¡Rayos! Espera, cierto, el doctor Connors no tiene brazo derecho — entonces Peter levantó a Connors en sus brazos — Bien, lo llevare a la policía...

Peter llevo a Connors donde los policías y luego se fue rápidamente del lugar, balanceándose hasta su apartamento en Queens.

***

El joven de Queens llegó a su apartamento, ocultando su traje en su mochila y tratando de ocultar algunas de sus heridas que el Lagarto le había propinado.

Cuando entró a su apartamento, se encontró con su tía May, la cual observaba las noticias, angustiada.

"Una bomba escondida en una furgoneta de noticias estalló en Viena durante una conferencia especial"

"Ciento diecisiete países se unieron para ratificar los Acuerdos de Sokovia, que crearían un marco para el registro y despliegue de individuos mejorado"

"Al menos doce están muertos, incluido el rey T'Chaka de Wakanda. Las autoridades publicaron un video de un sospechoso a quien identificaron como James Buchanan Barnes, alias el Soldado de Invierno, causante de los infames actos de terrorismo y asesinatos políticos. Alguien con información..."

Peter se sentó al costado se su tía, preocupado por lo que pasaba.

— ¿En qué se está convirtiendo el mundo, Peter? — preguntó May.

— N-No te preocupes, May... — le dijo Peter, acercándose — Estoy seguro que el Cap lo tiene controlado...

***

Al día siguiente, Peter pasó su día con naturalidad. 

Estaba decepcionado por no obtener nada de respuestas sobre sus padres, pero ya no había nada más que podía hacer. 

Luego pasar por un callejón, Peter encontró distintos artefactos que podía usar para terminar de arreglar la computadora que estaba construyendo. 

Al regresar, el joven de Queens vio un automóvil estacionado enfrente de su edificio.

— ¿Uh? Que lindo auto — dijo mientras entraba al edificio.

Sin saberlo, a partir de ese día, su vida iba a cambiar drásticamente, otra vez.

— ¿Joven Parker? — le saludó un señor en su apartamento.

Quien era...

Tony Stark.