Cuando Gwen cerró el portal detrás de ella, no sabía si sentirse feliz, emocionada, o como una completa estúpida. Cuando Miles la invito a balancearse acompañarlo en su patrulla diaria, esperaba atrapar criminales y tal vez algún supervillano menor, como ya había sido antes.

No esto.

Ve la bolsa marrón en su pecho. Fue una compra impulsiva. Fue una suerte que el dinero de su dimensión fuera tan parecido al dinero de la dimensión de Miles para que el cajero no sospechara. O tal vez solo estaba distraído de que Spider-Woman comprara un producto de su tienda como para prestarle atención a esos detalles.

-Esto es estúpido- se dice a si misma, pero abraza la bolsa de compra contra su pecho, casi demasiado protectora.

Fue una suerte que pudo ocultárselo a Miles, también tuvo que agradecer al cielo que, aunque él tenía mucha curiosidad por lo que compro, no la presiono, algo que aprecio mucho, ya que no creía haber podido encontrar una excusa si viera el contenido.

Pero estaba en su propia dimensión ahora, donde el sol ya había caído y justo en la hora donde su padre le daba permiso sin llamarlo. El que no estuviera quería decir que aun estaba dando clases.

Gracias a que el evento Canon solo afecta a los Capitanes de Policía, su padre no tuvo que desligarse totalmente de la policía, ahora trabajaba como entrenador en la academia de oficiales de New York. Por lo que había escuchado, era de los más estrictos pero eficientes.

Todavía sintiéndose un poco tonta, se sienta en el borde de su cama y finalmente abre la bolsa y saca lo que no quería que nadie viera.

El contenido era un peluche de Miles de tamaño medio.

Era temática de Spider-Man, obviamente; no estaba segura de como funcionaba, pero varias empresas vendían productos como juguetes o mascaras con su nombre y colores. Aunque debería considerarse ilegal vender productos de una persona que no ha firmado para eso, Spider-Man no puede cobrar cheques, ya que eso obligaría a revelar su identidad y sin duda sería lo peor.

Ella no tiene nada de eso en su universo. A los ojos del público, Spider-Woman sigue siendo una criminal. Aunque ahora la policía, bajo el mando de Yuri Watanabe, la mano derecha de su padre en su tiempo como Capitán, ya no la persigue, su fama no ha cambiado mucho a comparación de cuando se fue con Miguel y Jess aquella noche en el museo hace más de dos años.

La calidad del peluche no era tan buena: una cuerpo con extremidades esponjosas y una cabeza grande, era algo ridículo.

Pero también increíblemente lindo, casi tan lindo como él.

-¿Qué me pasa?- Gimió, dejándose caer a la cama y poniendo su brazo derecho sobre su frente y levanta la mano izquierda para seguir viendo el peluche de frente. -Soy una tonta- suspiro y rodo por la cama, acostándose de lado y abrazando al peluche.

Miles y ella habían estado trabajando para reconstruir su amistad. Después de meses de silencio, los secretos sobre el Canon y la situación de Miles con Spider-Man; necesitaban dar un paso atrás y tener la oportunidad de respirar, especialmente para Gwen, quien no solo estaba tratando de reconstruir su relación con su padre, sino que también estaba tratando de ponerse al día con todas las clases que había perdido mientras tanto. Teniendo en cuenta cómo terminaron las cosas en el cuartel general, estaba sinceramente agradecida de que Miles quisiera mantenerse en contacto después de ese fiasco.

Solo había un pequeño y diminutivo problema... la persona que le gustaba.

-¿Puedo llamarlo así en primer lugar?- Pensó con amargura mientras volvía a mirar el peluche que apretaba contra su pecho. El pequeño Spider-Man simplemente la miró; a diferencia del real, no había manera de tomar esa máscara y mirarle la cara. Si tuviera más habilidades artísticas, tal vez habría intentado encontrar una manera de ponerle una cara al peluche.

Gwen no siempre fue sincera con lo que sentía, ni siquiera consigo misma. Parte de su pensamiento era que si podía fingir que estaba bien, esas emociones eventualmente la abandonarían y podría continuar con su vida normal. Excepto que no era así, que solo estaba evadiendo el problema en vez de enfrentarlo; no pudo enfrentar la culpa de perder a Peter, no con el enorme vacío que sintió esos meses cuando pensó que su padre la odiaba, y no con sus sentimientos por Miles.

Es un aspecto que ha estado trabajando durante los últimos dos años y cree haber avanzado bien en ese lado, pero a veces no esta segura de eso.

Todo el mundo sabe que esta enamorado de ella, era dolorosamente tierno y obvio, o al menos, los sentimientos que solía albergar hacía ella. Desde toda la situación con Miguel, que finalmente pudiera hablar con él y la incomodidad de estar juntos en un mismo lugar pasara, Miles no ha sido el mismo con ella. Todavía era amable y cálido, pero ya no se sentía como antes, incluso ahora, tras dos años.

¿Podía culparlo? Claro que no. Nadie con sentido quisiera estar con alguien que le mintió y oculto algo tan importante como la posible muerte de su padre. Era un milagro que Miles siquiera haya tenido el deseo de hablarle, cuando cualquier otra persona la hubiera desechado como un ser despreciable y no desearle ver ni en pintura.

El problema era que ella quería más. Estúpido corazón. Estúpido Hobie por animar esos sentimientos.

Fue un poco tonto, pero se alegró mucho de que nadie le hubiera señalado que en una misión que hubiera sido fácil con La Mancha, literalmente sin posibilidad de viajar a otras dimensiones, abrió el portal justo donde estaba Miles mientras ignoraba al malo hasta que su reloj le gritó. Mientras abraza el peluche aún más fuerte, ella sabe que no arriesgas el multiverso solo para conocer a alguien, y no te escapas para conseguir un peluche de alguien mientras te aseguras obsesivamente de que nadie se dé cuenta.

Mirando la cabeza del peluche de Spider-Man, se pregunto cuando iba a dejar de huir y admitir esos sentimientos que sabe que tiene en su corazón pero que no se atreve a mostrarlos al chico que quiere porque teme que se le rompa, y no podía culpar a nadie más que a si mismas por los errores pasados.

Y ni siquiera esta tomando en cuenta su propio evento Canónico. Ya no cree en eso.

-Te amo- susurra suavemente, como si decir esas dos palabras fuera una especie de secreto. Se siente bien en su boca, la verdad con la que ha estado luchando durante tanto tiempo.

Tras unos segundos de silencio, en los que como si ella esperara que ese peluche realmente pudiera responder, en los que se imagino al chico de piel bronceada y hermosos ojos café respondiéndole con las mismas palabras, gimió de frustración y dejo el peluche en su mesita de noche.

-Soy tan estúpida-.

Porque sólo alguien como ella se metería en un lío como éste. Amar a alguien desde lejos sin estar seguro de si realmente podría hacerlo funcionar, pero con tantas ganas de hacerlo.

Y, sin embargo, todavía estaba demasiado asustada para hacer algo más que susurrarle la verdad a un peluche.
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(Al día siguiente)

Gwen estaba en la habitación de su cuarto, terminando su parte de un proyecto en grupo. Ella había empezado estudiar este año en la Universidad Empire State. A diferencia de lo que mostraban las películas, la universidad no eran fiestas y alcohol. Claro, hubo una fiesta de bienvenida a la que ella no asistió por haber tenido que pelear contra Rhino, pero aparte de esa no sucedió nada más que clases y trabajos.

En la universidad también van sus amigas de la banda de Las Mary Jane, con quienes pudo reconciliarse después de todo el caos de La Mancha. Una vez más, Gwen comprobó la suerte de tener personas que la querían y apoyaban aun cuando no comprendían lo que le pasaba. Por eso mismo, ella se ha esforzado mucho en valorarlas y estar ahí para ellas.

Su rutina consistía en la siguiente forma: levantarse, ir a la Universidad, patrullar como Ghost-Spider (se hacía llamar así ahora, aunque aun hay mucha gente que se refiere a ella como Spider-Woman) y enfrentar criminales y supervillanos, volver a casa antes de la cena para tener tiempo para hacer cualquier tarea y pasar algo de tiempo con su padre cuando ambos pueden. Y si tiene tiempo de sobra entre la rutina, visitar el cuartel de la Sociedad Araña por si necesitan ayuda.

A pesar del descubrimiento de la falta de Canon, la sociedad todavía necesitaba existir; la ruptura del segundo universo de Miguel junto con los dos incidentes del Colisionador ha demostrado haber dañado la estabilidad de las dimensiones para siempre. Mientras Miguel y otras personas que formaban parte del equipo científico se dieron cuenta de eso, las Spider-personas restantes que estaban de servicio necesitaban cuidar de cualquier villano, héroe o ser que entrara en otras dimensiones. Canon o no, seguían siendo un problema.

Aunque el problema de villanos llegando a universos que no eran lo suyo ya no era tan concurrido como antes. Parecía que se estaban acabando y dentro de poco todos los villanos estarían en sus respectivos universos, dejando a la Sociedad Araña sin una actividad más.

Tras enviar su parte del trabajo a su grupo, vio la hora. 16:17. Había hablado ayer con Miles y le dijo que hoy transportarían a unos villanos de la Balsa a otra Ravencraft mientras era reparada. Gwen inmediatamente se ofreció a ayudarlo a que el convoy estuviera seguro. Miles le dijo que no era necesario, pero tras una corta conversación de ida y vuelta, termino por aceptar.

Él le dijo que le mandaría un mensaje cuando fuera el momento, y ahora, sin nada más que hacer, se encontró esperando impaciente ese mensaje.

Ese chico la tenía mal.

Un ruido de llaves familiar la distrajo. Escucho la puerta del departamento abrirse y el grito de su padre diciendo "¡ya llegue!". Inmediatamente se levanto y fue a recibirlo.

George Stacy no había cambiado en dos años. Salvo que ahora usaba unos pantalones azul oscuro con una camisa celeste de rayas azules y no el uniforme de la policía, aunque aun tenía la placa en caso de emergencia. También había bajado un poco más de peso y su cabello estaba más arreglado.

-Hola papa- saludo a su padre con un abrazo. Se había vuelto una costumbre entre los dos que, al saludarse o despedirse, lo hicieran con un abrazo. Era un signo de cuan importantes eran para el otro. -Me sorprende que volvieras tan temprano-.

-Eugene quería ganar más dinero y le deje mi turno. Aunque no me quedaré mucho- respondió George a su hija, dejando su mochila de entrenador en la mesa y caminando por la sala.

-¿A donde vas?- Pregunto curiosa Gwen.

George se detiene y Gwen nota como sus hombros se ponen tensos. No puede verle el rostro porque entre movimientos hacía su cuarto, su padre le había dado la espalda. Pero antes que su padre pudiera responder, el reloj de Hobie en su muñeca suena.

Ella deja de lado a su padre para enfocarse en el mensaje, su corazón salta un poco al ver que era de Miles.

-"Oye. Solo te digo que ya voy a hacer lo que te dije ayer, lo de los criminales, por si aun te interesa venir. Puedo hacerlo solo, pero solo si quieres... nos vemos"-.

-"Claro que voy. Espérame un segundo"-.

Le avergüenza un poco la rapidez con la que responde, y le avergüenza aun más cuando deja solo a su padre en la sala mientras ella se cambia a su traje de heroína.

-Oye, papa...- Gwen sale de su habitación con su traje puesto, salvo por la mascara. -¿Has visto mi mascara? No la encuentro-.

-La deje en la mesa chica luego de que la encontré tirada ayer en el suelo- respondió George, caminando hasta quedar detrás frente a su sofá, el mismo sofá en el que solía dormir en los meses en que Gwen desapareció luego de esa terrible noche.

-Gracias- dijo Gwen, caminando hasta dicha mesa y viendo su mascara en ese lugar. Aunque era peligroso dejar algo como eso al aire libre, ella no se preocupa tanto, ya que son escazas las ocasiones en que uno de ellos recibe visitas y siempre que iban a traer a alguien, Gwen se aseguraba de esconder cualquier cosa de Ghost-Spider antes de que entraran.

-Y bien... ¿a donde vas?- Pregunto George, dándose cuenta lo ansiosa que se veía Gwen por irse. Cualquier persona no lo notaría, pero como su padre, George nota esas cosas en su hija.

-Yo solo... voy a ir ayudar a Miles con un problema en su universo. Algo de ida y vuelta- respondió Gwen.

-Miles, ¿eh?-.

Gwen intento no sonrojarse por el tono que uso su padre. Él sabía cuan importante era Miles para ella desde que encontró su polaroid y escucho hablar de él por su hija por primera vez cuando ella se encontraba lamentando como las cosas se habían vuelto entre ellos. Eso sucedió en los primeros meses después de vencer a La Mancha, cuando la esperanza de que Miles volviera a hablarle estaba en su punto más bajo.

Cuando volvieron hablarse y salir, había traído a Miles en algunas ocasiones a su casa para descansar o conversar sin necesidad del traje. En alguna de esas ocasiones, su padre había estado presente, en donde charlaron de diferentes temas. La conversación entre ellos era fluida porque el propio padre de Miles era policía, así que sabía que temas sacar con un ex-capitán.

Pero nunca se ha quedado mucho tiempo. Ya tiene suficiente problemas con sus sentimientos por Miles, no necesita agregar a la mezcla que su padre se haga de ideas raras porque él estaba solo con ella en casa. Ya era suficiente con que su padre supiera que estaba perdida por él.

Mientras Gwen arreglaba su cabello largo antes de ponerse la mascara para que no le estorbara, George apretó suavemente el borde superior del sofá, su mente debatiendo en algo que ha querido decirle a su hija, pero no estaba seguro de como reaccionaría.

Mientras la veía tocar algunos botones de ese reloj que le dio su amigo guitarrista, tomo aire y reunió el valor para hablar.

-Antes de que te vayas, Gwen... quiero decirte algo-.

Parpadeando y con las manos en alto sujetando la mascara para ponérsela, Gwen detuvo su movimiento para ver a su padre. -¿Si?-.

George intento calmar su corazón mientras encontraba las palabras para hablar. Era capaz de enfrentarse sin miedo a criminales y supervillanos, ¿pero no a su hija adolescente? Esperaba que fuera cosa de todos los padres y no solo suya.

-Viste que últimamente hubo muchas noches que... trabajaste hasta tarde y... ¿yo también?-.

Gwen asistió. En los últimos meses, cuando ella estaba hasta tarde patrullando, en la sociedad o con sus amigos, había ocasiones en que su padre llegaba tarde o no llegaba en la noche. Al inicio la preocupo, pero su padre decía que había trabajado hasta tarde y en las ocasiones que no volvía era porque le dejaban dormir o salía con un amigo.

Ella había aceptado esas cosas porque era lo normal en su vida hasta que su padre dejo de ser capitán. Antes, él llegaba tarde o no llegaba por la cantidad de trabajo que tenía, algo a lo que se acostumbro y hasta le ayudo en los momentos que escondía su identidad, así que por eso no tenía problemas en creerle ahora.

-Pues... no estaba trabajando...-.

Gwen abrió ligeramente los ojos y miro a su padre de manera sospecha.

-No me mires así, jovencita, no estoy en problemas. Es que... tuve algunas citas-.

Gwen abrió los ojos de la sorpresa. Eso... no lo esperaba.

-¿Cita, cita? Ósea...-.

-Ósea... saliendo con alguien-.

Gwen abrió la boca para decir algo, pero ningún sonido salió.

No es que sea raro o algo fuera de lo normal. Su padre iba a cumplir 45 años en unos meses y era considerado joven. Tenía algunas arrugas y se le empezaba a notar un poco de canas en los inicios de su cabello, pero eso se debió por el estrés. Ahora que no tiene la responsabilidad de ser capitán, se veía muy bien.

Además, eso explicaba varias cosas: como se esforzaba en lucir bien algunas veces, el bajar de peso, el cabello bien cuidado...

-Ah, claro...- fue lo único que pudo decir Gwen, colocando sus manos en su cintura.

Tomándolo como buena señal, George continuó. -Y hay alguien, que vi varias veces y... bueno... todo va bien con ella...-.

Gwen asintió, aun en el shock inicial mientras seguía asimilando las palabras. -Papa... ¿qué me quieres preguntar?-.

-Quisiera que viniera a casa. A cenar- soltó por fin George, sintiéndose mejor de lo que pensó al decirlo.

-¡Bueno! Me alegro por ti, papa, en serio- dijo Gwen, aplaudiendo y moviendo los dedos. -Seguro que puedo atender asuntos arácnidos y darte algo de privacidad-.

Gwen de repente sentía unas enormes ganas de salir. No entendía porque. Su padre era soltero desde que su madre murió cuando era niña y estaba perfectamente bien que él, ahora con tiempo y sin riesgo de morir, saliera con otra persona. No había nada de malo. Ella debería estar feliz por él.

¿Entonces porque se siente tan incomoda?

-No, quisiera que te conociera- dijo George de prisa, reduciendo la distancia entre él y su hija para tomarle una mano. -Y quisiera que tú la conocieras a ella. Ella es increíble, estoy seguro que te encantara-.

Al decir esa corta descripción, Gwen ve que el amarillo cubre a su padre desde su pecho hasta todo su cuerpo, mientras que ella, al ver sus manos, nota como una mezcla de purpura y rosa la cubren.

-Pero si te incomoda, lo entiendo completamente- dijo George. Gwen ve como el amarillo de su padre se atenúa ligeramente.

-Papa, yo...- Gwen se rasco la cabeza con su mano libre. -El problema es que... ninguno sabe cocinar, así que... ¿cómo la traerás a cenar?- Pregunto. Ella sabía cocinar un poco, pero nada como para muchas personas, apenas sabía cocinar algo comestible para su padre y ella.

Una constante de cada Spider-Man/Woman es salir de situaciones incómodas con una broma. Gwen no es la excepción.

George abre los ojos, dándose cuenta de ese detalle que no había pensado.

-Oh, bueno, si se cocinar un poco, y creo que tampoco hay que hacer algo tan elegante y... debería tomar un curso de cocina, ¿no?-.

-Si- asintió Gwen, sintiéndose más feliz.

Padre e hija se abrazan, los colores mezclándose para dar a un amarillo más claro y brillante.

Pero Gwen sigue manchada con un poco de purpura en su ser, desviando la mirada hacía abajo por unos instantes antes de cerrar los ojos y abrazar más fuerte a su padre.
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Tras despedirse de su padre y llegar al universo de Miles, aterrizando en un edificio cercano, Gwen comenzó a balancearse por la ciudad. Las personas que la veían pasar la saludaban y gritaban ovaciones que ella podía escuchar por sus oído mejorado.

Otra cosa que le gustaba del universo de Miles era que nadie la odiaba. Cuando apareció por primera vez, las personas de esta New York la recibieron con los brazos abiertos. Claro, el Jameson de este mundo tuvo a alguien más a quien criticar, pero JJJ atacando a Spider-Man en su noticiero o periódico parecía ser un Evento Canónico.

En este universo, nadie la llamaba amenaza o la veía como si fuera un peligro, la policía le agradecía por sus servicios en vez de decirle que no estorbara o le apuntara con armas. No le molestaría vivir aquí para siempre.

Se sonrojo ante ese pensamiento y sus implicaciones. -¡Concéntrate, Gwen!- Se dijo a si misma. Tras balancearse una cuadra más, llamo a Miles por el reloj. Una pantalla holográfica con el rostro del moreno con su mascara de Spider-Man apareció. -Miles, ¡hola! ¿Dónde estás?-.

-"¡Hola, Gwen! Estoy llegando a la Balsa, ¿vienes en camino?"-.

-No me lo perdería. ¿Quiénes son los chicos malos que cuidamos?-.

-"Mi padre me dijo esta mañana que moverían a Hydro-Man a Ravencraft. No tienen recursos suficientes desde que Electro era su compañero de celda"-.

-¿Y ese quien es? No creo que lo haya enfrentado-.

Mientras se balanceaba, Gwen escucho a Miles contarle quien era este villano.

Morris Bench obtuvo superpoderes tras quedar atrapado en un accidente de vehículo que transportaba un potente generador experimental que hacía pruebas en el océano. Desde entonces, obtuvo la capacidad de convertir su cuerpo en agua y manipularla a su antojo.

Aunque parecía una versión de agua de Sandman, Morris no era tan conocido ya que en su primera pelea contra Spider-Man fue derrotado, y en la segunda y última que tuvo, hizo equipo con Shocker, en donde fue accidentalmente evaporado por un rayo del criminal y cuando se restauro, fue arrestado fácilmente.

-Un tipo que puede hacerse agua, transportado en un transporte a una isla en medio del mar, no me parece la mejor idea- dijo Gwen, viendo la prisión de la Balsa a lo lejos. Para la próxima, abriría el portal más cerca.

-"Lo se, por eso hay que tener cuidado"- dijo Miles, cortando la llamada.

Tras un gran salto que dio, se impulso lo suficiente como para lanzar una red a uno de los edificios de la Balsa y balancearse. Vio a Miles en la cima de un edificio al lado del muelle de carga de la prisión.

Al otro lado del muelle, en la zona de mar, estaba un gran barco que transportaría al prisionero. Gwen contaba 30 guardias-

Spider-Woman aterrizo justo al lado de Spider-Man.

-Hola Gwen, gracias por venir-.

-Parece que justo a tiempo-.

Las puertas blindadas de la prisión se abrieron, con una alarma avisando su abertura. De la puerta, encadenado de brazos y piernas, salía un hombre adulto de veintitantos, cabello rubio que usaba un sencillo juego de pantalones de mezclilla celeste y una camisa azul sin mangas.

Morris caminaba lentamente, siendo apuntado por todos los guardias. Se detuvo al respirar aire y ver el cielo despejado.

-No pares, Morris- dijo un guardia de prisión.

Morris miro molesto al agua para darle un vistazo al mar. Dos guardias se pusieron delante suyo, adivinando lo que pensaba.

-Ni lo intentes, Morris- dijo un guardia, sujetando un arma diferente al resto. -Si intentas irte al mar, esta pistola de calor te quemara y evaporara antes de que llegues al mar-.

Para probar su punto, el hombre acciono el arma, que tenía un diseño inspirado en una arma clase AK de color blanco, pero que la punta, en vez de disparar balas, emitía desde un foco un calor que, al apuntarlo hacía Hydro-Man, hizo que este retroceda mientras comenzaba a sudar de golpe.

-¡Bien, bien!- Declaro el hombre, siguiendo caminando hasta que empezó a subir la rampa del barco.

Con Miles y Gwen...

-¿Viste esa arma? Parece generar una radiación de calor muy fuerte- exclamo Miles, mirando el arma del guardia. -Debe mezclar diferentes químicos en su interior para producir calor-.

-Nerd- se burlo Gwen.

-¡Oye! La mayoría de Spider-Men son nerds, y gracias a eso puedo derrotar a villanos complicados fácilmente-.

-Lo que digas- juguetonamente golpeo su hombro con el de él.

-Listos para el próximo- dijo un guardia.

-¿Próximo?- Pregunto Gwen.

-No creí que habría otro-.

Las puertas volvieron abrirse, y cinco guardias, más el resto de guardias que estaban en el muelle, apuntaron sus armas a este prisionero en particular.

-Kingpin...- exhalo sorprendido Miles.

También conocido como Wilson Fisk, el Big Man del mundo criminal de New York, quien pago y creo el Colisionador y el causante de dañar al multiverso para siempre.

El que mato a Peter Parker.

El que mato a su tío Aaron.

Wilson era tal y como lo recordaba Miles: calvo, varios pies más grande que cualquier persona normal, que incluso dejaba pequeño a Miles, que era bastante alto para su edad, corpulento y ancho también, no podría ingresar en una puerta normal si quisiera. Era tan ancho que se necesitarían dos puertas para que ingresara y apenas entraría.

Cuando Miles lo conoció, usaba un elegante traje negro con corbata, pero ahora usaba el traje naranja de los prisioneros de la Balsa. Debieron haber pedido hacer uno específicamente para él.

Y al igual que por su tamaño, Fisk usaba esposas de gran volumen en sus manos y piernas que hacían ruido al caminar. Su expresión era estoicamente mortal.

La mente de Miles comenzó a llenarse de imágenes de los sucesos que vivió durante su primera aventura como Spider-Man.

Como fue testigo de la muerte de Peter.

Como su tío, sin saber quien era él, lo persiguió para atraparlo o eliminarlo.

Cuando su tío, teniéndolo agarrado del cuello en la cornisa de un techo y tras mostrarle quien era, le bajo la mascara de su disfraz barato, recibió el impacto de una bala.

Aun podía escuchar el disparo del arma como si fuera ayer.

Sin darse cuenta, Miles comenzó a hiperventilar, su pecho subía y bajaba mientras su respiración se hacía más errática y ruidosa. El sonido del mar y el de los guardias comenzó a sonar muy distante.

Parece que iba a perderse en la sensación, hasta que sintió una mano cálida posicionarse sobre la suya y una suave voz llamarlo.

-¡Miles!- Susurro Gwen tan alto como pudo para que el chico a su lado lo escuchara. Noto que había comenzado a hiperventilar desde que vio a Fisk, y aunque al inicio le extraño, no tardo mucho en atar cabos.

Kingpin fue el primero villano que enfrento Miles como Spider-Man, por lo que claro que le dejo una marca grande; si solo fuera eso no sería para tanto, pero Fisk también es el hombre que mato a Spider-Man, al Peter Parker de este universo y Miles lo vio hacerlo. También fue quien mato al tío de Miles, que, aunque era un supervillano, seguía siendo un miembro de la familia que Miles amaba y que murió protegiendo su identidad.

Claramente todo eso le dejo su marca, una marca que no había cerrado del todo.

-Estoy aquí- le dijo suavemente como pudo detrás de la mascara. No importaba si él le creía o no, mientras la escuchara. -Estoy aquí, Miles-.

La voz de Gwen al lado de su oído hizo reaccionar al moreno, devolviéndolo lentamente a la realidad. Sentir el tacto de la mano de Gwen sobre la suya y su voz llamándolo ayudo a calmar sus respiraciones. Se llevo una mano al borde de la mascara y se la subió hasta por arriba de las ceja, tomando aire y exhalándolo por la boca, regulando su respiración a un nivel más normal.

-¿Estas bien?- Pregunto Gwen, subiendo su mascara para verlo directamente a los ojos.

-Si... si... ahora si- respondió Miles, calmándose más. -Yo... solo... no espere verlo-.

-Te entiendo- dijo suavemente Gwen. Después de la muerte de Peter, tuvo ataques esporádicos de ansiedad y tristeza al verlo en fotos o ser mencionado por su padre. Después de un tiempo pudo controlarlos hasta ya no tenerlos, aunque aun le afectaba el solo pensamiento de su mejor amigo muerto. -Pero no estas solo- le dio un suave apretón en la mano.

-Si... yo... gracias, Gwen, por venir- dijo Miles, alegrándose mucho de haber cedido en que ella viniera. -No podría haberlo hecho sin ti-.

Eso hizo que el corazón de la joven se calentara. Ambos se sostuvieron la mirada durante unos segundos, sin saber que decir, o siquiera hacía falta decir algo.

El sonido del barco en señal que empezaría a moverse los devolvió a la realidad, recordándoles que hacían aquí en primer lugar. Ambos volvieron a ponerse rápidamente sus mascaras y observaron al barco de la prisión acercarse por debajo al puente de Upper East Side.

De la nada, se escucharon explosiones y vieron manchas de humo rojo surgir en el aire por encima del barco.

-...No se como son las celebraciones en este universo, pero en el mío, los fuegos artificiales comienzan en la noche- comento Ghost-Spider.

-Aquí igual- Miles vio como más manchas de humo rojo aparecieron mientras el barco avanzaba.

Ambos lanzaron una red y comenzaron a balancearse. Cuando los dos se acercaron al barco, el humo que ahora salía era amarillo. Los dos se pegaron a un poste del barco.

-Rojo... amarillo...- Miles vio los colores. -El que seguiría es...-.

-Verde- dijo Gwen, viendo explotar ahora un humo verde en el aire.

Ambos tenían un mal presentimiento.

-Que los prisioneros estén seguros- dijo Spider-Man a los guardias.

Uno de los botes de seguridad que escoltaban al barco se volcó de repente, y todos sus ocupantes cayeron al mar. Spider-Man y Spider-Woman vieron como el resto de botes escolta también eran volcados, pero no veían el vehículo u objeto que los hacía darse vuelta.

-Tomo el de la izquierda- dijo Spider-Man, disparando una red hacía los guardias más cercanos que cayeron al mar.

-Protejan la nave- dijo Spider-Woman a los guardias del barco, quienes empezaron a formarse en preparación de cualquier ataque.

Surgiendo de la nada, aparecieron un escuadrón de 6 botes con aviones pequeños con hélices que los mantenían volando a los lados. También habían jetskis montados por sujetos que los guardias nunca habían visto.

Los guardias le dispararon a las naves más cercanas, pero sus balas no atravesaban el blindaje de estas, que también devolvían los disparos con torretas equipadas debajo del casco.

Uno de los sujetos que manejaba un jetskis se dirigió hacía uno de los botes caídos. Usando su postura boca abajo, rampo por la superficie para tener impulso y saltar con vehículo y todo en el aire dirigiéndose hacía el bote. Cuando estaba volando encima del barco, el conductor dio un salto y voltereta hacía atrás, aterrizando limpiamente mientras su vehículo acuático chocaba con un pilar del barco y explotaba.

Dicha persona se acerco a los guardias, que comenzaron a retirarse para reagruparse. El poste con el que el vehículo acuático choco se derrumbo y cayo frente al individuo, quien saco de su espalda dos espadas, y con un corte de ambas al unísono, destruyo el poste que le estorbaba.

Spider-Woman aterrizo, trayendo consigo un guardia que rescato del agua y dejo que se fuera con el resto.

Fijo su vista en la mujer de dos espadas. -Tengo que decirlo, que esa fue una gran entrada amiga-.

-Tu cabeza será un buen trofeo- exclamo la mujer, corriendo hacía Gwen y saltando para un golpe con sus espadas.

Gwen paso de lado de la mujer, viendo las espadas al pasar y viendo su reflejo en ellas.

-Vaya, esas espadas son filosas- exclamo Spider-Woman, disparándole dos redes de telaraña a los brazos de la mujer, tirando de ellos, haciendo que la mujer no pudiera mover lo brazos pese a que lo intentaba, gracias a la red y la superfuerza de Gwen. -No debes jugar con armas filosas, es muy peligroso-.

Tiro un poco más de la red para darse impulso y se lanzo contra su oponente, golpeando su espalda con sus pies que la derribo y la hizo soltar sus espadas. Le disparo un par de telarañas, pegándola en el suelo.

Pero antes que Gwen pudiera hacer un chiste de triunfo, más individuos con ropas similares a la mujer se subieron del barco, algunos desde los botes y otros se bajaron de los aviones.

Algunos sujetos tenían espadas iguales a los de la mujer, otros no tenían armas pero parecía que lucharían con sus puños y otros pocos tenían rifles y armas de fuego que no dudaron en usar contra ella y Miles, quien ya estaba luchando contra ellos.

-¡Oye, Spider-Man! ¿Sabes quienes son estos tipos?- Pregunto Spider-Woman, comenzando a golpear a estos tipos mientras esquivaba golpes de puños, espadas y disparos de bala.

-Ni idea, pero no creo que son turistas- respondió Spider-Man, esquivando en el aire una serie de disparos de dos tipos hasta aterrizar encima de un poste. Les quito las armas con sus redes y disparo otro para tirarlos fuera del barco. -Ehm, ¡hola! Soy Spider-Man y ella es Ghost-Spider, o Spider-Woman si prefieren, mi compañera-.

-Más te vale que lo digas en un sentido igualitario y no como un Sidekick- dijo Spider-Woman, dándole un golpe en el rostro a un tipo con las espadas en el rostro, para luego atrapar sin ver el puño de otro sujeto que intento tomarla desprevenida y golpearlo.

-...Y por si no lo sabían, ¡estos tipos son problemático! ¡Sin duda deben seguir en prisión!- Siguió Miles con su palabrería, esquivando una serie de disparos-

-¡Fuera de nuestro camino! ¡Esto no les incumbe!- Respondió una mujer de los atacantes.

Uno de los enemigos lanzo una granada hacía Spider-Man, que la atrapo con su red y la lanzo al mar, donde estallo, levantando el agua cercana.

-Esto son los turistas más salvajes que he conocido- comento Spider-Woman, brincando hacía atrás para esquivar el golpe de dos espadas de uno de estos sujetos, para luego tirarle una telaraña en la cara y hacerlo estrellar contra el suelo, pegándolo ahí con sus redes. -¡¿Y quienes son ustedes, de todos modos?!-.

-¡Somos los Cazadores!- Respondió uno de los sujetos que atacaban a puño.

-¿Y que cazan? ¿Resfriados?- Gwen disparo una red de cada muñeca a una caja de metal tirada en el suelo, giro para tomar impulso, y la caja giro en el aire mientras la sujetaba, hasta que la soltó, lanzándosela y cayendo encima de dos cazadores.

-¿Resfriados? Hasta para mi ese fue un chiste malo- exclamo Spider-Man.

-Cállate. He estado ocupada con mis clases que no he tenido tiempo para pensar en mis chistes- respondió Gwen.

Spider-Man esquivo una serie de disparos que salieron de uno de los aviones y disparo dos redes a la torreta de ese avión, tirando tan fuerte que la saco. Su Sentido Arácnido le advirtió del peligro que se acercaba detrás, así que se agacho, haciendo que la torreta que saco y que iba en dirección suya, golpeara a los cazadores que intentaron atacarlo por la espalda.

-Dejen de concentrarse en las arañas. ¡Acaben con los guardias y derriben las puertas!- Ordeno uno de los cazadores que parecía ser uno de los líderes.

Spider-Man y Ghost-Spider saltaron y se reagruparon hasta estar de lado a lado, viendo como, a pesar de haber derribado y tirado del barco a varios de estos cazadores, aun quedaban como dos docenas.

-¿Escuchaste?- Le pregunto Ghost-Spider a su compañero.

-Intentan meterse al barco. Hay que detenerlos- dijo firme Spider-Man.

Se separaron para esquivar una serie de disparos, cada uno balanceándose y haciendo acrobacias para esquivar los disparos de las armas de fuego mientras golpeaban a los cazadores que atacaban cuerpo a cuerpo.

-¿Qué quieren con estos tipos? ¡Parece que su club ya tiene muchos miembros!- Dijo Ghost-Spider, saltando. Se agacho en el aire, cruzo sus muñecas y disparo una línea de telaraña a dos cazadores con espadas, para luego descruzar sus muñecas y tirar a los dos cazadores para que chocaran entre si, quedando ambos inconscientes.

-¡Ya verán! ¡Y será glorioso!- Respondió un cazador, acercándose a Ghost-Spider y lanzando una serie de golpes que Gwen esquivo gracias a su sentido arácnido, para que luego ella golpeara un poco al tipo antes de darle una patada que lo dejo noqueado en el suelo del barco.

-¡Siguen apareciendo!- Grito un guardia de la Balsa, tras dispararle en la cabeza a un cazador, para luego ver a dos más descender de una de las naves con cuerdas para ralentizar su caída.

-¡Cubran a las personas araña!- Grito otro guardia.

-¡Concéntrense! ¡Qué no se acerquen a los prisioneros!- Grito un tercero.

Spider-Man noqueo a dos cazadores en la plataforma superior del barco, para luego ver algo volar en dirección a él. Al acercarse a él, más sus sentidos como super-vista, pudo ver lo que eran.

Eran robots con diseño de pájaro, tal vez de un halcón o buitre por sus alas, y eran impulsado por cohetes equipados en la parte trasera. El robot emitió un rugido que quería simular al de una de esas aves y extendió las garras hacía su presa, que era él.

Spider-Man esquivo el primero de esos robot, con su puño cargado de electricidad, destruyo a un segundo que se acerco de frente, pero un tercero que iba detrás del segundo lo tomo de los hombros con su garra y voló al cielo, llevándose a Spider-Man.

-¡Suéltame, pajarito! ¿Vulture es tu padre o que?- Exclamo Miles. Genero electricidad en sus dedos y con un toque, hizo que el pájaro robot hiciera cortocircuito, haciendo que lo soltara.

La distancia a la que fue elevado no era tan grande como para matarse si caía, pero igual le dolería y Spider-Man prefería evitar el dolor siempre que puede, así que disparo una red a un poste para balancearse y aterrizar sin daño, pero otro de esos robots, drones, lo que sean con forma pájaro lo embistió, atravesando un vidrio y pasando por la cabina de navegación, donde el capitán y sus asistentes tuvieron que agacharse cuando paso, saliendo al otro lado del barco tras romper el vidrio. Cayo al suelo y rodo para evitar tanto daño.

-Ese no fue mi mejor aterrizaje- se dijo a si mismo.

Su Sentido Arácnido grito cuando vio cuatro flechas clavarse frente suyo. Solo tuvo que ver las puntas parpadeando en rojo y escuchar el inconfundible sonido de una bomba que iba a explotar para lanzar una línea de red a un poste y salir volando, evitando las explosiones subsiguientes.

Se pegó a un costado del barco, donde pudo ver a más de esos cazadores, pero estos usaban capucha sobre sus cabezas y tenían ballestas que a simple vista, eran de diseño antiguo, ya que eran tomadas con ambas manos, pero Miles pudo notar los detalles tecnológicos que tenían las armas.

Vio a un par de esos cazadores disparar una flecha con cuerda a la cima de un poste, para luego ser atraídos cuando la cuerda se clavo y surcar en el aire hasta aterrizar en la cima del poste. O mejor dicho, el arco retrajo la cuerda, pero al estar pegada a un poste, la fuerza de tensión hizo que el arco y la persona que lo sujetara fueran traídos a la cuerda.

-¡Las presas están ahí adentro! ¡No se distraigan con las arañas!- Grito uno de los cazadores con ballesta, repitiendo lo mismo que dijo uno de los cazadores anteriormente.

-Y con eso me confirman que buscan a Kingpin y Hydro-Man. Lo siento, pero no se aceptan visitas- dijo Spider-Man, lanzando dos líneas de red a un robot buitre (así los llamaría a partir de ahora) y atraerlo hacía él para usarlo como escudo contra las flechas que se pegaron en la espalda del dron.

Miles salto y con los pies empujo al pájaro robot hacía los arqueros, que tuvieron que saltar antes que las flechas explotaran y los dañara. Uno cayo encima del techo de la cabina de navegación mientras que otro cayo al mar.

Spider-Man esquivo los disparos de un cazador y con una red le quito el arma para girarla y estrellársela en la cabeza. Esquivo las flechas del cazador con la ballesta y con una línea de red pegada debajo suyo, tiro para impulsarse y golpearlo en la cara, conteniéndose en el golpe para no matarlo, pero si noquearlo.

Otro robot buitre se acerco a él, pero como eran robots, Miles no tenía problemas en usar su superfuerza sin restricciones para destruirlos.

-¡Spider-Man!- Grito Spider-Woman, girando con una red pegada a un poste mientras esquivaba a dos robots buitre que la perseguían. -¿Viste a estos tipos? ¡Tienen mucho dinero y tecnología!-.

-Si, ¡no están bromeando!- Respondió Spider-Man. -Parece que están desesperados por atrapar a Kingpin o a Hydro-Man, o a ambos. Si estos tipos andan libres de nuevo...-.

-Lo se- respondió Gwen, disparando una red de telaraña a uno de los buitre y tirando para golpearla con su puño, destruyéndole la cabeza. Uso su cuerpo para impulsarse y saltar hacía la espalda del otro buitre, donde disparo dos redes y al tirar, le quito las alas. Salto antes de que cayera y aterrizo en la cima de un poste. -Pero ya los tenemos contra las cuerdas-.

-¡Denlo todo!- Grito un cazador arquero, bajando de uno de los botes con otros tres cazadores con él.

Spider-Man y Ghost-Spider dispararon una red al suelo frente a los cazadores. Usando esa red de impulso, tiraron y aterrizaron encima de dos de los cazadores, dejándolos fuera de combate al instante. Ghost-Spider disparo dos redes a los pies del tercer cazador y lo tiro al suelo, llenándolo de telarañas que lo dejo pegado e incapaz de moverse, mientras Miles tiraba al cazador arquero con un suave ataque de su Golpe de Veneno.

Mientras lo que quedaba de los guardias de la Balsa se reorganizaban alrededor de los dos héroes, vieron de nuevo humo verde estallar en el aire.

-Ay, amiga, ¿y ahora que?- Pregunto Spider-Man.

Spider-Woman le golpeo suavemente el hombro para llamar su atención. -Desearas no haber dicho eso...-.

Al mirar en la dirección que ella miraba, vieron a un cinco vehículos blindados todo terreno de estilo militar, cada uno con arpones equipados encima. Esos arpones fueron disparados y golpearon el barco, atravesando su acero e inmovilizándolo. Todos en el barco tambalearon por el movimiento.

Uno de los arpones golpeo afuera de la celda de contención de Morris Bench, quien miro interesado la punta.

Miles y Gwen no necesitaban saber mucho para saber que esos arpones eran más que para detener el barco, lo querían atraer a la superficie.

-¡Debemos liberar el barco!- Verbalizo Spider-Woman. Ella y Spider-Man se deslizaron por la superficie del barco, ya que debido a los arpones, el barco estaba inclinado hacía el lado izquierdo.

La pareja de arañas se deslizo hasta el borde y pegaron sus pies en la superficie lateral del barco, justo donde estaba un arpón. Entre los dos, tiraron para sacarlo, al mismo tiempo que los vehículos de los cazadores comenzaron a tirar del barco.

Las personas que estaban en el muelle y veían lo sucedido comenzaron a sacar sus celulares y grabar.

Mientras tiraban, ambos se dieron cuenta que el casco del barco se había roto, haciendo que el agua entrara.

-¡Las personas se van a ahogar!- Exclamo Miles, tirando con más fuerza.

-¡Ve tu! ¡Yo seguiré intentando sacar estas cosas!- Dijo Gwen. Miles asintió y fue hacía la zona dañada del casco. -¡Estoy seguro que el Rey Arturo no se esforzó tanto para sacar su espada!-.
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Miles entro por el agujero que hizo el arón. Justo al ingresar vio a dos guardias debajo de un escombro del barco mientras el agua ingresaba por el agujero. Disparo dos redes al escombro mientras saltaba a la pared del otro lado, el largo de la red tocaba una viga instalada al nivel del cielo del pasillo. Usándola como soporte, Miles tiro, levantando el escombro, permitiendo a los dos guardias levantarse.

-¡Hay más gente adentro!- Exclamo uno de los guardias.

-Yo me ocupo de ellos- dijo Miles, disparando telarañas al agujero y espacios abiertos alrededor del arpón para evitar que entre más agua.

Afuera, Ghost-Spider pudo quitar el arpón con el que lucho, pero otro fue disparado desde uno de los autos. Mientras más era tirado por los autos, el barco más se inclinaba al mar. La presión era tanta que se abrieron agujeros.

-"¡Spider-Man! ¡Tienes que ir a la parte superior!"- Dijo Gwen, hablándole a través del reloj.

-¡En cuanto todos estén a salvo!- Contesto Spider-Man. Comenzó a subir, con las manos y pies pegados a la pared. El ángulo en el que estaba le permitía ascender por las paredes. -Se ve grave, Ghost-Spider. ¿Qué ocurrió allí? ¿Esos guardias están a salvo?-.

Spider-Man subió a lo que sería un pasillo, pero por el ángulo del barco se veía como si estuviera caído a la izquierda. Spider-Man disparo dos redes para impulsarse e ir de un salto hasta un poste. Tuvo que repetir la acción para pasar a través de un conducto de aire que estaba detrás de una corriente de agua que caía como cascada.

-"Estoy ayudando a varios a llegar al muelle"- respondió Ghost-Spider. Por su voz, estaba en movimiento y haciendo esfuerzo. -"¿Has visto algún villano?"-.

-Aun no-.

Miles se arrastro con las manos y pies pegadas a lo que sería el techo por el ángulo en el que estaba el barco casi volcado. Paso a través de un conducto de aire hasta llegar a una habitación grande y espaciosa, en donde al fondo había una gran puerta reforzada.

El nivel del agua estaba subiendo, llegando a cubrir 1/4 del barco en total.

-¿Hay alguien ahí?- Grito una voz desde el otro lado de la puerta reforzada. -Hydro-Man escapo y me arrojo aquí-.

Miles disparo una red de telaraña y así llegar de un salto a la puerta.

-¡Te sacaré!- Grito Spider-Man. Intento abrirla a la fuerza, pero la puerta era demasiado pesada para que hasta él la pudiera abrir. Intento con un Golpe de Veneno, pero tampoco sirvió.

-Tranquilo, ¡encontraré otra forma!- Le dijo al guardia para que no se asustara.

Al revisar alrededor, vio un acceso al centro de energía de la sala. Tras quitar la tapa y cruzar de un salto impulsado con su red, se pego al camino volcado y se arrastro rápidamente, mientras que con su voz, le hablaba al guardia para hacerle saber que no lo había abandonado.

Tras u par de minutos, llego a la fuente de la energía de respaldo, cuya luz de alarma brillaba en rojo y el panel de control soltaba chispas por el daño. Golpeo con su puño rodeado de electricidad el panel, pero por un choque, cayo al agua.

-El agua sube. No puedo volver por donde entre- comento, viendo como el agua ya cubría la mitad del lugar.

Nado a través de objetos mientras el agua estaba cubierta de corriente eléctrica. Era una suerte que él viniera y no Gwen, ya que aunque ella es resistente, no aguantaría la corriente eléctrica como él si puede al tener cierta inmunidad a la electricidad gracias a sus poderes.

Llegó nadando de nuevo a la sala con la puerta, donde la corriente eléctrica ya se había extendido. Tenía que encontrar la forma de drenar la energía; pero primero, sacaría al guardia.

Cargado con la energía de reserva del barco, el Golpe de Veneno que uso para golpear la puerta fue más fuerte que el anterior, rompiendo la fortificada puerta en pedazos.

Al hacerlo, vio quien realmente estaba dentro.

-Muchas gracias, chico- dijo Morris, viendo como la electricidad residual del golpe de Miles destruía sus ataduras, liberándolo.

El Sentido Arácnido de Miles se activo, y el moreno hizo una voltereta de lado, esquivando un choro de agua disparado desde el brazo de Morris. Esa extremidad se volvió liquida con cierta forma física y azul.

-Aunque me gustaría luchar con el nuevo Spider-Man, tengo que salir- dijo Morris, disparando otro chorro de agua a Spider-Man que esquivo al mismo tiempo que corría para saltar al agua.

-¡Espera, no lo hagas! ¡El agua esta electrificada!-.

La advertencia de Miles llegó tarde, porque Morris ya había saltado cuando lo dijo. Su cuerpo ya se había vuelto líquido cuando hizo contacto con el agua, donde al tocar la electricidad, el criminal dio un fuerte grito de dolor. Miles pudo ver como su forma física, que era su cuerpo hecho de agua, se alteraba y saltaba. Las partículas del cuerpo de Morris debían estar sufriendo una sacudida por la electricidad, ocasionando un rechazo que hacía difícil mantener sus partículas unidas.

Hydro-Man tuvo el suficiente control de si mismo para reunir agua debajo de sus pies y volver a la superficie metálica de su celda, que aun no estaba inundada.

-Oye, ¿estas bien?- Pregunto Spider-Man, viendo a Morris de rodillas y respirar de manera agitada.

El techo de la celda exploto y tres Cazadores aterrizaron. Morris los vio, pero uno le lanzo una granada. Cuando la granada lo golpeo, no exploto, sino que libero una especie de aire que, para sorpresa de Spider-Man, congelo en segundos a Morris hasta hacerlo una estatua de hielo de si mismo.

-¿Una granada nanotecnológica que congela el agua en segundos? ¿Pero quienes son estos tipos?- Exclamo Miles.

-Tenemos al objetivo. Listo para transportarlo- dijo uno de los Cazadores.

-Oh no, eso si que no- Spider-Man disparo una cuerda de red al borde superior de la entrada de la celda y se lanzo hacía ellos.

Una Cazadora con ballesta le disparo una flecha que lo golpeo y exploto, lastimándolo ligeramente gracias a su resistencia y sobrehumana y que su traje se hiciera para que fuera más resistente para los golpes que los anteriores; pero si logro hacer que cayera al agua.

Miles intento volver a la superficie, pero la corriente del mar lo arrastro por las partes hundidas del barco, chocando con diversos tubos hasta que pudo aferrarse a uno con sus brazos.

-Tengo que salir de aquí- se dijo a si mismo. Disparo dos redes de telaraña a un tubo más lejano y salto, impulsándose con las redes para llegar más rápido.

Era una suerte que su lanzatelarañas produjeran telarañas tan fuertes como para resistir la presión del mar. Estuvo nadando durante unos segundos, en los que pensó que podría quedar asfixiado, hasta que llegó a una parte donde se vio una luz arriba, sobre el agua. Para llegar, debía cruzar diferentes escombros que estaban flotando.

Miles nado hasta llegar a los escombros, y cuando noto que eran demasiados que le estorbaban llegar, genero electricidad que disparo desde sus palmas para impulsarse, ascendiendo hasta atravesar una reja de ventilación, saliendo del agua.

Aterrizo en el suelo de la sala. ¿O era la pared? Daba igual. Se tomo unos segundos para tomar aire, hasta que escucho una familiar voz.

-¡Sáquenme de aquí!-.

Spider-Man giro hasta apoyarse sobre sus rodillas y manos, viendo la luz que vio desde el fondo del agua salir desde una zona del techo, ¿o pared?

Miles camino hasta donde emergía la luz, que se apago. Ahí vio que se trataba de la celda de Wilson Fisk, que estaba cubierta de agua hasta la mitad.

-Spider-Man...- murmuro Fisk, viendo a la araña que lo encerró hace 3 años.

-Fisk...- Spider-Man devolvió la mirada al ex-magnate de la ciudad. Su primer villano. -...Ha pasado tiempo, ¿verdad? El naranja te queda-.

Fisk gruño, forcejeando con las esposas que lo mantenían atado a la silla en donde había estado atado en su celda, pero sin éxito de escapar.

-¡¿Qué estas esperando?! ¡Libérame!-.

Por más tentador que sea dejar que el Kingpin se ahogue como justicia por todos los crímenes que cometió, Spider-Man salva a todos, incluido los criminales.

-Se que me voy arrepentir de esto...- murmuro para si mismo, cargando un Golpe Veneno que destruyo el vidrio de la celda con un golpe, justo cuando el agua ya le llegaba al cuello de Fisk. -¡Espera, ya te desato!-.

Pero antes de hacer algo más, la parte superior del barco en donde estaban exploto, sacudiendo el lugar de nuevo. Miles se hubiera caído de no haber tenido pegado los pies a la celda.

En el cielo despejado que se podía ver, una nave flotaba, de la cual bajaron un grupo de Cazadores. Cuatro colocaron arnés magnéticos a las esquinas de la puerta de la celda de Fisk, mientras el resto disparaba a Spider-Man para que no les estorbara.

-¡Lo tenemos!- Grito una Cazadora.

El avión comenzó a elevarse, arrastrando la celda de Kingpin al aire, y con el propio criminal aun encerrado.

-¡No!- Grito Miles. Fisk no podía escapar. No debía.

-¡Detengan a Spider-Man!- Los Cazadores, ahora con su presa lista, se enfocaron en atacar al trepamuros para que no detuviera el transporte.

Gruñendo, correas eléctricas de un color azulado claro bailaron alrededor del torso de Miles. Miles vio a tres Cazadores acercarse. Extendió sus manos y desde sus palmas disparo un rayo que golpeo a uno de los Cazadores, pero que la electricidad se transmitió, golpeando a los otros dos más cercanos.

-...Eso es nuevo- comento Spider-Man, refiriéndose a golpear con su poder de veneno a más de un sujeto. -Creo que lo llamaré, "Rayo encadenado"-.

El reloj de Hobie sonó en su pulsera, y Miles escucho la voz de Gwen. -"Mi...¡Spider-Man! ¿Estas bien?"-.

-Si, pero tienen a Morris y se están llevando a Fisk- respondió Miles, dándole unas patadas a un Cazador, antes de esquivar unas flechas y disparar una red a la cazadora para atraerla y golpearla.

-"Lo se, estoy siguiendo a los tipos que se llevan a Morris. ¿Crees que puedes encargarte de Fisk? Puedo volver ahora mismo"-.

-No, yo me encargo- dijo Spider-Man, disparando otro Rayo encadenado que dejo noqueado al resto de Cazadores. -Continua-.

-"¿Seguro?"-.

-No puedo dejar que Fisk vuelva a lastimar a alguien o dañe el multiverso de nuevo. No después de lo que le hizo a mi tío y al señor Parker-.

Gwen sintió una opresión en su pecho al escuchar a Miles mencionar ambas cosas, no porque le doliera en si, sino porque sabe que la muerte de ambos pesaban mucho en Miles, y le dolía ver al chico que le gusta sufrir de esa manera, una manera que ella entiende muy bien. Quiere abrazarlo y decirle que no fue su culpa, pero no es tiempo para eso.

-"...De acuerdo. Todo tuyo, Spider-Man"- y con eso, termino la conversación.

-Yo me encargo- dijo Miles para si mismo.

Salió por el agujero creado por los Cazadores y vio a la nave que transportaba la celda de Fisk alejarse. Por suerte, no estaba muy lejos. Brinco sobre el barco ya caído, disparo una red a la parte trasera del avión para elevarse al aire y disparo dos líneas de red a la celda al mismo tiempo que aterrizaba cerca del final del barco.

-Regresa... ahora- hablo, haciendo esfuerzo en tirar mientras la nave avanzaba, también tirando.

Era un tira y afloja entre el vehículo aéreo y la araña por el criminal, hasta que una de las hélices se estrello por accidente con el gancho de una grúa, debido a la proximidad que estaba el barco con el muelle. El avión de manera descontrolada mientras la hélice derecha ardía en llamas y caía al barco, soltando su carga por el impacto.

Debido al impacto, una de las cuerdas de los arpones se corto, provocando que el barco flote un poco más arriba en el agua. Por el ángulo y un arpón menos, el barco comenzó a dirigirse sin control hacía el muelle.

Las personas que estaban en el lugar vieron el barco y se asustaron.

Antes que Miles pudiera acercarse a la celda para sacar a Kingpin, otra nave de los Cazadores llegó, pero esta era diferente: era más grande y estaba pintada en plateado.

La compuerta del avión se abrió, asomándose un hombre que Miles nunca había visto, pero tenía vibras de ser el jefe de estos tipos.

Kraven, con un rifle de francotirador en mano, miro un segundo la embarcación caída. Tomo el rifle y miro por la mira a Spider-Man tensarse al verlo con el arma. Aunque era interesante ver a la que sería su presa definitiva, no era la presa que cazaba hoy.

Cambio de vista al contenedor de bencina del barco y disparo. El contenedor exploto y ardió en llamas, cayendo al mar, llevándose consigo al resto de contenedores. Todos explotaron juntos, haciendo que, literalmente, el mar ardiera en llamas.

Miles supo que ahora si necesitaba refuerzo.

-Ghost-Spider, las cosas fueron de nivel mal... a nivel "incendio en East River"-.

-"Eso no se oye bien. Voy en camino"-.

Las personas del muelle de East River, al ver el fuego en el océano y el barco acercarse cada vez más, no lo pensaron dos veces antes de salir corriendo. Pero el barco se acerco tanto que la hélice en la parte trasera comenzó a destruir el final del muelle con su movimiento, haciendo que se derrumbara hacía abajo, provocando que varias personas en el lugar se tropezaran o se aferraran algún objeto para no ser victimas de la hélice mortal.

Pero la atención de Spider-Man volvió a la jaula de Fisk, que era elevada en el aire por tres robots buitres.

-Lo siento, pero el Kingpin no tiene permiso para salir- dijo Spider-Man, saltando y disparando una red hasta estar en la celda. Destruyo los dos drones que sujetaban la celda por detrás, haciendo que se inclinara hacía abajo, siendo sujetado por un único robot buitre que volaba de manera errática ante tanto peso y su dirección cambiaba, sobrevolando cerca del muelle.

Miles disparo una red para estar encima de este robot y con un fuerte golpe lo destruyo. Salto antes que la celda cayera sobre la madera del puente.

Con Kingpin en el suelo, Miles salto hasta estar frente a la hélice.

-¡Corran! ¡Yo me encargo!- Les grito a los civiles mientras disparaba telarañas que hicieron frenar el movimiento de la hélice.

Los civiles no tuvieron que escuchar dos veces para salir corriendo.

Spider-Man disparo dos líneas de red al centro de la hélice, ocasionando fricción a los engranajes que luchaban para mover la hélice, pero los movimientos eran detenidos. Cuando parecía que iba a detenerla, una Cazadora con espadas corto sus redes y salto hacía él para cortarlo, pero Miles esquivo el filo de sus armas con una voltereta con giro.

-Ya me estoy cansando de ustedes. Son peores que los villanos de la semana- se quejo Miles, viendo llegar a más Cazadores para llevarse a Fisk. -No entiendo porque quieren a Willy, ¿desde cuando ser malo es sinónimo de popularidad?-.

Miles tuvo que enfrentar a los Cazadores mientras disparaba telarañas a la hélice para que no avanzara más y destruyera el puente. Esquivo a la loca de las espadas y disparo una red y tiro quitándole una de sus espadas.

Esa espada voló y la punta atravesó la celda de Fisk, que lo por los distintos movimientos que sufrió dentro de su celda, las contenciones que tenía en una mano se rompieron.

Vio la espada con gran interés y con cuidado, estiro el filo lo suficiente para que tocara las ataduras de su cuello. Empezó a mover la hoja para cortarla.

A Spider-Man le tomo casi dos minutos en derrotar a estos Cazadores. Su Sentido Arácnido resonó en su cabeza. Un segundo después, un fuerte golpe se escucho.

Se giro hacía la celda de Fisk, viendo que la puerta había sido sacada del contenedor. Wilson Fisk salió del contenedor que lo transportaba, respirando con esfuerzo por todo el movimiento que sufrió desde que salió de la Balsa.

-Kingpin...- murmuro Miles. Antes que pudiera dar un paso hacía él, las telarañas que cubrieron las hélices se rompieron, volviendo a girar el mecanismo con la misma intensidad y velocidad.

-¡Ayuda! ¡AYUDA!- Grito con gran pánico una mujer que se deslizo por accidente en el puente rojo, deslizándose directamente hacía la hélice.

-¡Te tengo!- Gwen tomo la mujer en brazos y de un brinco se alejo de la hélice y la dejo en una superficie firme.

Gwen comenzó a disparar telarañas para frenar la hélice, igual que hacía Miles.

Mientras tanto, Spider-Man y Kingpin se sostenían la mirada. El niño que se volvió héroe frente al que mato al héroe de la ciudad. El salvador de la ciudad contra el que casi la condena. La anomalía del multiverso frente a quien empezó todo el problema en primer lugar.

-Spider-Man...- murmuro con Fisk, sus palabras eran veneno a su enemigo. -Tú me arrebataste todo-.

-Y tu no sabes el daño que causaste- respondió Miles. A su mente, regresaron diferentes imágenes.

-Si enciende la maquina de nuevo, todo lo que conoces desaparecerá. Tu familia, todos, todo. Prométeme que lo harás-.

-Yo te convertí en un héroe. ¡Tu me convertiste en esto! ¡Mírame! ¡Tu me hiciste esto!-.

-¡Eres un error!-.

-¡Spider-Man! ¡Necesito una mano aquí!- Grito Ghost-Spider, tirando la hélice desde dos redes que sujetaba.

Antes que Miles decidiera entre ayudar a Gwen o capturar a Kingpin, una cuerda envolvió el cuerpo robusto de Wilson Fisk.

Spider-Man y Fisk vieron el avión en el que estaba Kraven. La cuerda que tenía atado a Fisk estaba pegada a un gancho equipado en el avión. Ambos vieron al sujeto que los miraba. Miles no lo reconoció, pero Fisk...

-¿Kraven?- Lo llamo, aunque parecía dudoso. -Eso es imposible. Tu estas...-.

No termino de pronunciar ya que el avión se elevo, arrastrándolo a él en el aire.

-¡No!- Grito Spider-Man, disparando dos hilos de red al pecho de Fisk, impidiendo que se lo llevaran.

Spider-Woman levanto un escombro mientras dos civiles ayudaban a sacar a un tercero bajo el escombro. Ella veía el esfuerzo que hacía su compañero arácnido en no dejar que estos sujetos se lleven a Kingpin.

-¡Spider-Man! ¡Suéltalo!-.

El último arpón que sujetaba el barco se corto, haciendo que toda la parte trasera cayera sobre el mar, y la segunda hélice del barco giro, destrozando aun más el puente. El peso del barco sacudió todo el puente, levantándolo de arriba-abajo. Spider-Man se mantenía firme al tener los pies pegados en la madera debajo de sus pies.

Debido al ángulo más inclinado hacía abajo del puente, las personas ya no podían mantenerse en pie y comenzaron a deslizarse hacía la segunda hélice que giraba a toda potencia. Spider-Woman tomo la mano de un civil, luego tomo a otro y un tercero se aferro a su pie, mientras que el resto de civiles que quedaban se aferraban a cualquier tablón o a los pies de una de las personas que sujetaba Spider-Woman.

-¡Spider-Man! ¡Realmente necesito tu ayuda aquí!- Volvió a llamar Gwen.

Miles vio a las personas que se aferraban para no caer y morir por la hélice. Miro al frente, a Fisk, debatiéndose por segundos hasta tomar su decisión.

A veces, ser de los buenos apestaba.

Soltó las redes y giro, caminando y cargando un Golpe de Veneno en su brazo derecho. Salto y se dejo caer, golpeando con toda su fuerza el centro de la hélice con su poder veneno.

El impacto saco la hélice del barco y aun girando, se deslizo por el costado, dejando una línea de corte hasta caer al mar.

Mientras el barco comenzaba alejarse quitar presión del puente ya destrozado, Kraven y los Cazadores se llevaron a sus presas.
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Spider-Man y Ghost-Spider ayudaron a evacuar a todas las personas del área durante media hora, hasta que llegaron los rescatistas, sacando a las personas que quedaban y las que se habían caído al agua. También había varios botes de policía ayudando, rescatando a sus hombres que cayeron al agua durante el atraco al barco y arrestando algunos cazadores que pudieron atrapar. Tal parece que la mayoría logro huir o fueron rescatados por sus compañeros.

-La policía sigue buscando, pero no hay rastros de ellos. ¿Hubo suerte río arriba?- Pregunto Miles.

-No, solamente escombros- respondió Gwen.

Ambos se balancearon hasta aterrizar en la cima del puente Upper East Side.

-¿Quienes eran esos tipos? Se hicieron llamar "Cazadores"- dijo Gwen.

-¿Viste su tecnología? Era impresionante. No creo haberme topado con una banda criminal con tecnología igual a esa. Lo más cercano fueron las armas de los matones de Kingpin- destaco Miles.

-Y ahora tienen todo eso, más dos supercriminales. ¿Crees que estén formando un equipo de supervillanos?-.

-¿Otros Seis Siniestro? Espero que no, o si sería difícil-.

De repente, el comunicador en la mascara de Miles sono. Él ve que se trata de May.

-Es May. Tal vez ella sepa algo de estos tipos- contesto la llamada. -Hola, May-.

-"¡Miles! Vi lo que paso en los muelles. ¿Estas bien?"- Pregunto preocupada la tía de Peter Parker.

-Si, estoy bien, tranquila. Gwen me ayudo mucho. Saluda Gwen-.

-¡Hola, May! Ha pasado tiempo- saludo la chica agitando la mano, aunque la mujer mayor no podía verla.

-"No escuche lo que dijo, pero dile que dije hola"- dijo May.

-Se lo diré. Oye, May, ¿sabes de casualidad quienes son estos tipos? Se hacen llamar Cazadores y tienen una tecnología muy avanzada. Fueron los que se llevaron a Hydro-Man y Kingpin. Y estoy empezando a pensar que también fueron los que atacaron la Balsa y permitieron escapar a Electro-.

-"Buen pensamiento, chico. Lastimosamente, no conozco a ningún grupo con ese nombre. ¿No tienes algo más que me ayude a buscarlos?"-.

Miles pensó un segundo, pero recordó a quien parecía su jefe y el nombre con el que lo llamo Fisk.

-Parece que su jefe es un tal Kraven. Si no me equivoco, él formo parte de la primera alineación de los Seis Siniestros, ¿no?-.

-¿Kraven? ¿Te refieres a Kraven el Cazador?- Pregunto Gwen. -Me he enfrentado con ese tipo un par de veces. Fue el último supervillano con el que lidie antes de que el Vulture renacentista apareciera en mi universo-.

-"...Kraven"- tras unos segundos de silencio, pronunció May ese nombre. -"¿Estas seguro de que es él, Miles?"-.

-Pues si, Kingpin lo llamo así, aunque se veía sorprendido al verlo-.

-"No me sorprende"-.

-¿En serio? ¿Por que?-.

-"Por que esta muerto"-.

Las lentes que eran los ojos de la mascara de Miles abrieron ampliamente, reflejando su sorpresa. Esa... si era una buena razón para sorprenderse.

-¿Qué dijo?- Pregunto Gwen, que no podía escuchar la conversación de Miles y May.

Miles ignoro la pregunta de Gwen para enfocarse en el tema prioritario. -Espera, espera. ¿Muerto? Pero si es así, quien...-.

-"¿Aun tienes encendida la cámara en tu mascara?"- El tono de May era serio ahora.

Miles reviso. Una de las mejoras en su mascara era una cámara que no solo transmitía a la computadora de May lo que veía, sino que también grababa sus peleas. Un método que usaba para evaluar sus combates para aprender formar de ser más eficiente para vencer a enemigos sin complicaciones.

-...Si, si esta encendida- afirmo el oriundo de Brooklyn.

-"Qué tu y Gwen vengan a la casa de Peter para que veamos lo que pasa y explicarles sobre porque Kraven esta muerto. Parece que te metiste en una grande, chico"-.

La llamada termino y Miles quedo con más preguntas, pero se las guardo. Miro a Gwen.

-Vamos a ver a May. Parece que este asunto de los Cazadores es más complicado de lo que parece-.

Gwen asintió. Aunque este era un villano de Miles, ella no lo iba a dejar ahora que estaba involucrada. Que el diablo la lleve primero antes de abandonar a Miles.

El par de arañas dispararon sus redes y comenzaron a columpiarse. Lo que sucedió hoy, era el comienzo de algo más grande y peligroso.
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N/A: Hasta aquí el capitulo. Me salió más largo de que creí, pero me siento satisfecho.

Todo la escena del barco es la misma del juego, solo que en lugar de Peter estaba Gwen.

¿Qué les pareció la escena del inicio con Gwen lamentándose sus sentimientos hacía Miles? Ambos creen que sienten un amor no correspondido, cuando es bastante correspondido, pero la duda y palabras dichas en el pasado les impide abrirse a lo que sienten.

Y como dije, los villanos fueron diferentes al juego. Hydro-Man fue algo que elegí de manera espontanea al buscar villanos de Spider-Man que no sean de los Seis Siniestros y me tope con este. Recuerdo haberlo visto en la caricatura de los 90, así que lo elegí como villano menor.

Pero el que si planee que apareciera desde el inicio era Kingpin. Considero a Kingpin el Martin Li de este Miles o el Duende Verde de Peter. Puede que La Mancha trajera la araña que mordió a Miles, pero fue Kingpin y su deseo de ver a su familia que creo el Colisionador y sucedió los eventos de las películas. Él fue quien tuvo la culpa de todo, no Miles. Ojala alguien se lo diga a Miguel en la tercera película.

Y para terminar, vino la revelación de que Kraven esta muerto. ¿Quién es este segundo Kraven entonces? El siguiente capitulo responderá eso.

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.