- Len pov -

- ¿En serio estás bien?- Me preguntó preocupada estirando su mano para tocar mi rostro. Agarré su mano para detenerla y le sonreí.- Es que tu ojo está...

- Estoy bien, no te preocupes, Una.- Respondí sin darle mucha importancia a mi rostro.- Solo son unos moretones, no me voy a morir. No te preocupes por eso.

- Pero, están en tu rostro.- Dijo Nana estando frente a nosotros, también tenía un tono de preocupación en su voz.- ¿Cuándo te pasó eso? El día viernes estabas...

- Bien, chicos. ¿Están listos?- Le interrumpió Gakupo tocando mi hombro. No volteé a verlo cuando todo mi grupo lo hizo y asintieron con la cabeza o emitieron un sonido. Comenzó a palmear mi hombro.- Me alegro. Recuerden trabajar en grupo para hacer el mejor verso y ganar cinco puntos extras.

Evité bufar cuando mi grupo se animó y comenzó a reunirse a mis lados para seguir con la lluvia de ideas para tener ventaja. Mi grupo eran diez personas, siete chicas y dos chicos; los últimos me miraban con odio al estar frente a mí, mientras que las chicas daban ideas ignorándolos anotando en su cuaderno.

A Gakupo se le ocurrió la gran idea de hacer una dinámica de convivencia para crear una de las canciones de los pecados y ganar cinco puntos extras, los cuales obviamente necesita Fukase para aprobar. Él nos separó en tres grupos de diez personas, bueno, uno era de nueve y todos eran chicos; el otro era el mío y el ultimo era un grupo mixto, donde estaban Fukase y Nora. Los miré por el rabillo del ojo y ambos estaban hablando normalmente, Nora asentía cada momento a lo que decía Fukase.

- Bien, comencemos con el grupo de los chicos.- Dijo Gakupo apuntando al grupo frente a él mientras sacaba una carpeta de su mochila.- Recuerden, el segundo grupo debe acoplar sus ideas al verso principal para que tenga lógica.

Ella le sonrió y noté como su cuerpo se relajo frente a él. Fukase también le sonrió y agarró sus manos para decirle algo con una expresión de felicidad. Miré hacia otro lado cuando alguien me llamó. ¿De qué están hablando?

- El demonio fue quien con sus manos malditas, ha implantado en mi todo este poder. Sólo un beso hará que a mis pies caigan rendidas.- Levanté la vista al sentirme observado y todo ese grupo de chicos me estaba viendo fijamente.- Sólo para mí, no la dejaré. (1)

- Nos provoca su capacidad de encantarnos una y otra vez.- Cantó otro chico con una sonrisa sin desviar la mirada.- Nos arrastró a este sótano, por cada rincón de su mansión. Una a una, lentamente, van descendiendo en su ambición; construyendo a pleno su harén.

Finalmente, sentí la mirada de todas las personas del salón en mí, desde chicas que murmuraban hasta chicos que reían en voz baja. Mantuve mi sonrisa forzadamente para no caer en su trampa de dar sospechas, si bajaba mi sonrisa y miraba a los demás, todo se arruinaría. Solo tenía que ignorarlos, tenía que mantener mi sonrisa.

- Una vez la ropa fuera ya no pueden, nunca más regresar; han dejado en mis manos sus vidas.- Finalizó otro chico que había interrumpido a su otro compañero. Sus ojos me veían con odio.

Aplaudí cuando todos comenzaron a aplaudir y alabar su improvisación. Mordí mi mejilla interior cuando Fukase me señaló con su dedo con pésima discreción mientras hablaba con Nora acercándose a su oído y ella asintiendo a lo que sea que le decía. ¿Por qué me señala? ¿Por qué asiente?

- Es su turno, grupo dos.- Nos señaló con el bolígrafo, Gakupo con una sonrisa.- Recuerden no interrumpir la coherencia y sin palabras subidas de tono.

- ¿Quién va a comenzar? - Murmuró una chica mirando a todo nuestro grupo.- Oye, Una, ¿Te parece si empiezas?

¿Qué tal si le ha dicho que soy un mujeriego? No, no, estoy pensando cosas tontas.

- Mucho tiempo atrás, mi retrato fue calcinado.- Comencé molesto por su indecisión de comenzar, miré a Gakupo y él me animó a seguir asintiendo con la cabeza.- Quiero abandonar a mi antiguo yo. Intento evitar esas risas que me atormentan. Me han causado ya, gritos de dolor. - Miré a Nora y ella me evitó bajando la mirada al suelo. ¿Qué haces? Me callé de inmediato.

No, no tenía pruebas de nada. Si le decía a Nora que era un mujeriego, yo podía acusarlo de mentiroso, puedo apoyarme en la pelea del viernes y en la actitud que tuvo su madre. Frente a sus ojos, yo soy bueno.

Cuando alguien palmeó mi espada, me di cuenta que otro estaba tratando de continuar el verso, con tartamudeos y mal formación de oraciones. Giré y vi a Una detrás de mí, quién me sonrió y levantó los pulgares orgullosa. No presté atención a lo que decía mi grupo por las miradas que tenía sobre mí aún.

- Lo has hecho genial.- Me murmuró.- Gracias por salvarme. ¿Cómo se te...

Ya no escuché a lo seguía hablando por la vibración de mi celular, asentí cada cierto tiempo cuando me veía y comenzaba a reír en un tono bajo para que no la escucharan. Evité mirar a Nora con todas mis fuerzas, si la miraba de nuevo, sería extraño. Si Fukase le dijo algo estúpido, lo solucionaría. Todo estará bien.

- No me dejen sólo, no quiero que se termine así.- Cantó Fukase en voz alta fingiendo dolor, captando la atención de todos en el salón. Se callaron y continuó cuando lo miré. Sonrió divertido antes eso.- Era el mismo dios, sin pensarlo me abandonaron, y mirándome, aquella dama de verde se quedó. - Levantó la mano en mi dirección como si recitara un poema y miró a Nora.- Fue por un segundo que mi corazón latió.

- N-no te vayas, no he podido todavía...- Cantó con la voz temblorosa y tragó con fuerza. Nora estaba tratando de ser valiente, sonreí por ello. Sus mejillas sonrojadas y el temblor de sus manos, me gustan.- D-decirte la verdad, eras la única a la que yo... Amaba.

Mi celular volvió a vibrar cuando ella me vio y sonrió.

- Tn pov -

Sonreí y asentí mientras Miku contaba lo que había hecho en las nuevas clases adicionales que su madre le había inscrito este mes. Matemática y Química. Eran las únicas materias que no lograba comprender del todo y su madre quería reforzar ese conocimiento al faltar un año de entrar a la universidad para los exámenes de ingreso.

Mordí mi sándwich y trataba de no reír con las anécdotas del sufrimiento de Miku con los elementos químicos y las integrales en los ejercicios. Decía que su mente se apagaba cuando veía transformaciones químicas y Rin era la única que captaba eso a la primera.

Mayu la apoyó diciendo que el año entrante también entraría a clases adicionales y además tenía que investigar sobre algunas universidades y la carrera a la que quería aplicar. Yo también asentí con la cabeza dándole la razón.

- Mi tía me dijo que el próximo año sería pesado para todos.- Respondí al terminar mi sándwich.- Todos querrán nivelarse para el examen de admisión.

- Claro que lo serán.- Miku estiró los brazos sobre la mesa cansada.- Si sabía que iba a sufrir así, hubiera aceptado la oferta de cantar y olvidaba en estudiar ingeniera o medicina, ¿a quién se le ocurre hacer mil formulas cómo si no hubiera un mañana?

- ¿Oferta de cantar? - Pregunté curiosa.- ¿Te ofrecieron una oportunidad?

Asintió con la cabeza cuando la apoyó contra la mesa totalmente desanimada. Soltó el lápiz que agarraba y comenzó a hacer un berrinche por los ejercicios que tendría que entregar esa misma tarde.

- Antes teníamos una amiga que le ofreció esa oportunidad a Miku.- Continuó Rin alegre ignorando a Miku.- Le dijo: ¡Miku vamos a conquistar el mundo juntas! Y ella le respondió: ¡Espérame cinco años, cumpliré los sueños de mi padre y los míos! - Actuó como ella cambiando los tonos de voz y rió.- Supongo que si se iba con ella, ahora Miku sería muy famosa.

- ¡Mi fama! ¡Hubiera sido una hermosa diva! - Lamentó y comenzó a dibujar círculos en la mesa deprimida.- Hatsune Miku en conciertos, que bonito sonaba eso. A los dieciséis años ya conquistaba el mundo, que envidia. Odio las ciencias puras.

- Bueno, también serás una buena doctora o ingeniera.- Traté de animarla al asustarme cómo había convertido su alrededor en pesimismo con colores más opacos.- Serás una de las mejores seguramente, ¿verdad, Rin? ¿Verdad, Gumi?

Rin asintió con una sonrisa y la animó golpeando suavemente su espalda, dejando el lápiz del suelo en el cuaderno con borrones, Gumi también la animó explicándole el tema de Química en sus palabras y Mayu le ofreció una bebida energética, Miku asintió a todo lo que le decían.

- ¿Me acompañas a comprar la bebida? - Me preguntó Mayu señalando hacia afuera. Asentí con una sonrisa.

Traté de iniciar una conversación con Mayu, pero mi atención se posó en la chica de pelo rosa que venía en la dirección contraria a la nuestra, estaba llorando sobre los hombros de su amiga como si se hubiera lastimado con algo, la abrazaba y sollozaba mientras negaba con la cabeza varias veces con la cabeza baja. Suspiré de tristeza al verla de ese modo. ¿Qué le habrá pasado? Espero que no haya sido nada malo.

- Todo va a estar bien, Momo.-La consoló su amiga justo cuando estábamos cerca de ellas.- Te dijimos que él era uno de esos idiotas que solo juega con las chicas. Ya no llores, encontrarás a alguien mejor...

- ¡___! - Me sobresalté cuando Mayu me gritó, la miré confundida y ella volvió a sonreír. Por unos segundos sus ojos se dirigieron a la chica que estaba escuchando.- Su novio la terminó.- Dijo con normalidad cuando salimos de la cafetería.- Bueno, escuché que ella es muy posesiva.- No respondí ante eso y traté de evitar el tema mirando a otra parte.- Oye, ___, ¿me dirás quién te gusta?

La miré sorprendida rápidamente.

- ¿Po-por qué quieres saber eso? - Corazón no comiences a latir de esa manera.

- Porque tengo curiosidad.- Me respondió mirando al frente.- Llevaste ese cubre bocas por una semana y Rin dijo que... Bueno, no dijo nada; Gumi me dijo que era Oliver, pero yo no estoy tan segura, aunque puede que tu amor se manifieste de otra manera. He visto muchas formas de amar a una persona.

- ¿Qué tal si estaba resfriada, Mayu? No quiero enfermar a otra persona solo por mi descuido.- Sonreí.- ¿Cómo te va con tu novio? ¿Algún día podremos conocerlo? Me lo imagino con el pelo negro o algo así.

- Ya no hablamos tanto por su trabajo.- Me respondió. Me sorprendió que trabajara igual que Len, ¿o es que era mayor que ella? Sacudí la cabeza, supongo que a edad buscan trabajo para la universidad. ¿Tal vez yo también debería conseguirme alguno? - Oh, ahora que lo recuerdo. ¿Podrías hacerme un favor, ___? Siempre quiero pedírtelo, pero siempre lo olvido.

- Claro. ¿Qué necesitas?

- ¿Sabes qué comida le gusta a Len? - Me preguntó con una sonrisa. La miré rápidamente sorprendida y me detuve.- Ya sabes, su bebida favorita, sus dulces favoritos o no lo sé, algo así. -Se dio la vuelta cuando se dio cuenta que ya no estaba junto a ella. Me sonrío.- Mi amiga quiere declararse a Len y quiere hacer un picnic para él, no pienses que yo quiero algo con él.

Sentí como me envolvió lentamente un sentimiento parecido a la tristeza acompañado de egoísmo. No quería dárselo, pero me consciencia me golpeó y se cruzó de brazos. No puedo ser egoísta, ¿qué tal si esa chica le gusta a Len?

- ¿Por qué no le preguntas a Piko? Es su mejor amigo.- Jugué con mis manos nerviosas. No puedo arruinar la felicidad de Len, ni de esa chica. Respiré hondo cuando ella desvió la mirada por unos segundos. Pero...

- ¿No sabes lo que hace Piko? - Negué con la cabeza acercándome a ella de nuevo. Pateé esa bola de pensamientos malos.- Si, es su mejor amigo, pero es más difícil conseguir información de él. Si le preguntas sobre la fruta favorita de Len, Piko a veces te dirá que es la manzana, durazno o la piña, incluso te dirá que no tiene un favorito. Por eso, quería pedírtelo a ti, sé que puedo confiar en ti.

Me encogí de hombros, sin saber qué hacer.

- Len pov -

- Papel o... ¡Tijera! - Gritó antes de que ambos extendiéramos las manos con las figuras de papel, piedra o tijera. Vi cómo su alegría se esfumaba al ver que yo había ganado.- ¡Una vez más! - Gritó escondiendo su mano debajo de la mesa.- Piedra...

- No. No estarás satisfecho hasta que yo pierda.- Lo interrumpí y Piko hizo pucheros como berrinche.- Además tú propusiste las reglas. Yo gané.

- ¿Ah, sí? Pues, había una regla secreta D. Si el rey no está satisfecho pueden repetirlo.- Escondió su mano con una sonrisa.- Pap...

- Tú comprarás el jugo en la salida.- Le entregué el dinero sin darle oportunidad de jugar de nuevo. Saqué de mi mochila una hoja para volver al tema que habíamos hablado la noche anterior, seguro con eso olvida el juego.- Este es el documento que me dio Gakupo.

Dejé el documento frente a él. Estábamos en mi paralelo con solo dos personas detrás de nosotros, eran chicos que parecían jugar algo en sus celulares, no le di mucha importancia, aunque sé que debía de darle importancia al asiento del profesor que Piko movió para estar frente a mí.

- ¿Qué es el documento? ¿El poder mundial? - Comenzó a leer el documento.- ¿Podemos gobernar el mundo? - Suspiré y me pregunté si la noche anterior me estaba escuchando o durmiendo en realidad.- Oh, es el concurso, ¿al final participarás? ¡Oh! ¿El premio es dinero? Con este dineral me compro la laptop que le rogaba a mi hermana para jugar.

- ¿Debo preocuparme por tus relaciones con el dinero? - Pregunté sonriendo al ver que había olvidado el juego. Me miró sobre la hoja y negó con una sonrisa.

- Claro que no. Son tus esfuerzos recompensados, no puedo pensar siquiera tocarlos. - Volvió a la hoja.- ¿Cómo obtendrás el permiso de tu padre o el de tu madrastra? Es decir, parece que no te llevas bien con ellos. ¿Le pedirás un favor a Rin?

- Claro.- Afirmé sarcásticamente.- Luego rapearé semidesnudo en el cumpleaños de tu padre y volveré con Momo y Galaco.

- Bien, eso es no.- Dijo entre risas, me devolvió la hoja con cuidado.- Pero, ¿Cuál es tu plan para entrar al concurso? ¿Hacerte una identidad falsa?

- Estaba pensando que alguien más entrara por mi.- Guardé la hoja con cuidado entre mis cuadernos. Frunció los labios.

- ¿No se te hará muy pesado? - Al fin abrió las galletas que había comprado esta mañana y se metió dos en la boca. Me ofreció pero negué con la cabeza.- Es decir, ¿Qué hay de tu tiempo? ¿Cuántas horas duermes por noche? - Preguntó preocupado, desvié la mirada hacia la ventana suspirando.- ¿En serio crees que puedes manejarlo?

- No.- Admití en voz baja y mordí mi lengua. Ya estaba demasiado cansado. Sonreí para no preocuparlo.- Pero no me importa, les demostraré a todos que puedo manejar esto, que no me importa si me quitaron la beca, yo puedo con todo esto.

- No me gusta que no pienses en tu salud, Len.- Suspiró preocupado.- Tu cuerpo no es invencible y puedes caer enfermo. Y la última vez que te enfermaste, tuve que sacarte de tu casa para que te sanaras, mi padre estaba rezando para que tu fiebre no subiera más y mi hermana no dejaba de llamar a doctores.

- Len.- Dijo Gakupo detrás de mí, con un tono de seriedad. Mierda. Volteé a verlo con una sonrisa.

- Profesor Kamui.- Dije divertido.- ¿Cómo está el día de hoy? ¿Soleado, nublado o nevado?- Se cruzó de brazos y bufó molesto.- Estoy bromeando. ¿Qué se le ofrece? ¿En qué puede ayudarme? ¿Ya tiene mis cinco puntos? Me gustó la dinámica.

- Tenemos que hablar sobre el concurso y otras cosas.

- Yo también quería hablar sobre el concurso, profesor. - Me levanté de mi lugar.- Quería hablarle sobre una idea.

(...)

- ¿Por qué no me lo dijiste? - Me preguntó molesto con la mano detrás de la cabeza. Rodé los ojos restándole importancia a sus preguntas. No era para tanto, bueno, para mí no era de importancia.- Len, estoy hablando en serio. ¿Por qué no me dijiste sobre tu canción? Es más, ¿por qué no me dijiste que él era tu padre? ¿Sabes cuánto te puede ayudar en el mundo de la música?

Desvié la mirada hacia la ventana y sorbí un poco del café que Gakupo me invitó. Vi a varias personas en el patio, corriendo de un lugar a otro mientras reían. Miré más detenidamente el cubículo que le pertenecía a Gakupo dentro de la sala de profesores, era blanco, no tan ancho, pero muy alto. Todo estaba ordenado por colores y tamaños.

- ¿Me mirarás con otros ojos al saber que él es mi padre? - Vi a una niña pequeña mirarme a los ojos y sonrió.- ¿Porque tiene dinero, Gakupo? ¿Porque es jefe de tus jefes? ¿Porque hubiera ayudado a Luka en el mundo de la música? - Lo miré y sonreí.- ¿O acaso vas a creer que soy un niño rico? Si mi padre hubiera sido un limpiador de baños, ¿te molestarías aún así?

- ¡Por supuesto que sí, Len! Siempre pregunté por tu padre y siempre decías que era un gerente o algo así, nunca pensé que era uno del empresario más rico en el ámbito de la música. Tiene poder e influencia.

Borré mi sonrisa y rodé molesto los ojos. ¿Por qué siempre tenían que actuar de la misma manera cuando sabían de ese idiota? Por eso, no le digo a nadie cuál es su nombre ni el nombre de mi madre. Todo es tan superficial.

- Si quieres dinero, estás hablando con la persona equivocada, yo no soy heredero de ninguno de sus bienes, habla con Rin, ella es la heredera de todo, junto con los otros hijos de su esposa.

- Len, no hablo en ese sentido.- Soltó un suspiro de cansancio.- Sé que no todo es dinero y no quiero que pienses que voy a utilizarte por eso. Solamente me sorprendió, nada más.- No respondí, solo lo ignoré mirando el reloj. Se quedó callado por unos segundos.- Bueno, acerca del concurso. ¿Se te ocurrió alguna persona para entrar por ti? A mí se me ocurrió una, el fin de semana. También se me ocurrió una idea de cómo convencer a sus padres.

- ¿Aún vas a ayudarme en el concurso? - Pregunté sorprendido.- ¿No vas a decirle a...

- No, Len. Con las palabras de hace unos minutos, puedo intuir la relación con tu padre. Nunca lo vi en tu casa, así que debí intuirlo. Así que voy a apoyarte, voy a llorar como un padre orgulloso si entras en las semifinales. - Bromeó.- ¿Somos amigos, no?

Alcé una ceja por las últimas palabras. Gakupo no decía esas cosas, pero si alguien que conozco realmente bien.

- ¿Hablaste esto antes con Piko? - Me crucé de brazos.- ¿Qué te dijo?

- Bingo.- Rió con los ojos cerrados.- Solo me contó la relación con tu padre y me pidió que te ayudara en el concurso, porque y cito: Len es un terco como vaca cuando se convence de algo.- Relajó su cara y se apoyó en la mano que tenía sobre la mesa.- Hablamos esta mañana y jamás pensé que me diría esas cosas. Es un chico algo excéntrico.- Suspiré cansado.- ¿Te molesta que me haya pedido ayuda?

- No.- Contesté dejando caer mi espalda sobre el respaldo.- Solamente me hace sentir mal conmigo mismo cuando hace esas cosas.- Murmuré y sonreí con tristeza.- Me preguntaste para qué quería el dinero, ¿no? Lo quería para celebrar el cumpleaños de Piko. Quería olvidar todo esto por unos días junto con mi mejor amigo. Quería ser libre.

(...)

Gruñí de ira cuando cerró la puerta detrás de él, luego de empujarme a los baños. Me apoyé en los lavamanos para no caer al suelo y él me miró con seriedad tratando de controlar su respiración.

- Oliver, tengo clases.- Comencé tratando de controlar mi molestia.- Ya tengo quince minutos de retraso y quieres hablar ahora, ¿en serio? ¿No puedes hacerlo después y de una manera más amable?

- No te importaba faltar una clase antes.- Me contestó frunciendo el ceño.- ¿Y ahora te importa? Tu único objetivo era no bajar en las notas para no perder la beca.

- Si, sí, soy detestable. Ya oí esa historia. ¿Qué quieres? No creo que quieras hablarme luego de cumplir tus deseos. ¿___ aún no te hace caso? ¿No eres su príncipe azul?

- Cállate.- Alzó la voz molesto.- Solo escucha, ¿de acuerdo? Fukase me habló el día viernes.

- Eso no me importa en lo absoluto.

- Luego de que lo golpeaste, me habló.- Siguió.- Me dijo que ya no respetaría el acuerdo que teníamos acerca de Piko y su padrastro o no sé qué rayos era ese idiota, así que n te sorprendas si comienza a hablar sobre él.- Fruncí el ceño.- Además me dijo que se disculparía con ___.

- ¿Y? Lo sé, me lo dijo ella esta mañana. - Sonreí orgulloso.

- No seas idiota, Len. ¿Por qué se disculparía con ___? Fukase cree que ella te gusta, que es la primera chica en la que muestras interés porque no dejaste que él la insultara. ¿Qué crees que quiere hacer? ¿Ser su amigo y vender limonada? - preguntó sarcásticamente.- Él quiere tenerla y no sé tú, pero yo no quiero que se enamore de él.

- ¿En serio crees que ella es realmente fácil de tener? - Se calló de inmediato ante mi pregunta.- No dudo que es fácil de entablar una amistad con ella, pero no es fácil de enamorar.

- ¿Quién te dijo eso? ¿Solo por no enamorarse de ti? No me vengas con tonterías, Kagamine.- Bufó.- No eres el último hombre en la tierra.

- No, porque no comprende las indirectas.- Me miró confuso.

- ¿Qué hay de la disculpa? - Preguntó lentamente.- ¿No es una manera de entablar amistad? ¿No te molesta? ¿No te importa?

- Me alegra que lo haya perdonado.- Dibuje una sonrisa en mi rostro e incliné mi cuerpo hacia adelante.- Para mí, significa muchas cosas que haya perdonado a una persona que golpeó a su amigo y robó su canción.- Estoy feliz por una oportunidad.

- ¡Te prohíbo que te aproveches de su amabilidad! - Alzó la voz colérico al entenderme.- ¡Soy un idiota al pensar que me ayudarías! ¡Ambos son despreciables! ___ es solo una chica que se cruzó en tu maldito camino y vienes a... ¡Carajo! ¡Cuando sepa qué tipo de persona eres ella nunca te perdonará!

No, él no me está entendiendo. Podría ser honesta con ella.

-Ella es muy amable y...

- Hay personas detestables como tú.- Me interrumpió.- ¿Quieres saber lo que pasaría si salen juntos? Tú no pararías de lastimarla, Len. Harías de su vida un infierno, sería la peor relación toxica de su vida.- Abrí los ojos sorprendido por sus palabras y comencé a negar con la cabeza. ¿Pero qué cosas está diciendo? - No pararías de aprovecharte de su amabilidad, una y otra vez. Irías de cama en cama para luego disculparte con ella, ¿verdad? La harías llorar por las estúpidas discusiones que tendrían por los celos.

- Estás equivo...

- Cuando ya te sientas harto de ella, la dejarías como las demás.- Alzó la voz.- Y comenzarías a buscar otro juguete, ¿verdad?

- Ella no es un juguete.- Respondí molesto.

- ¿Con qué derecho lo dice una persona que desecha mujeres sin parar? ¿Sabes lo hipócrita que suenas, Len? - Mordí mis labios.- Ni siquiera intentas cambiar tu vida por ella, aún sigues con varias chicas, ¿no es así?

- ¿¡Sabes cuán sospechoso sería terminar con todas al mismo tiempo, maldito idiota?!

- No me salgas con tus tontas excusas. Un mujeriego no puede cambiar nunca.

- Tn pov -

Entré rápidamente al primer salón que vi y cerré la puerta sin hacer ruido. Solté una pequeña risa al ver que la sombra de Piko pasar sin dudarlo. Bien, solo faltaba evadir a Miki y yo ganaría. El profesor de mi última clase, faltó y con Len teniendo pendiente hablar acerca del concurso, que me dijo pocos minutos antes de irse, con el profesor Gakupo. Me quedé sola en el salón.

Así que, se me ocurrió jugar a las escondidas mientras esperaba a Len para acompañarlo a su trabajo junto con Piko y Miki. Me di la vuelta para respirar hondo e ir junto a ellos, pero en cambio me quedé totalmente paralizada, sin aire y con los ojos abiertos.

- Ciro.- Jadeó la chica cuando me vio, parecía que no podía respirar, jadeaba rápidamente y echó su cabeza hacia atrás cerrando los ojos, tragó de manera ruidosa.- Cir, espera.- Chilló.

Noté que su mano acarició algo debajo de ella, bajé mis ojos y vi un chico arrodillado frente a ella, hacia sonidos como si chupara algo; de inmediato sentí mi cuerpo temblar de miedo, ¿qué le estaba haciendo a la chica? ¿Por qué tenía la cara debajo de su falda? La chica jaló el pelo del chico e hizo un sonido que salía dentro de su garganta, como un gruñido.

- Cir, alguien...- Tomó aire parecía que no podía hablar.- Alguien entró.- Chilló.- Cir...

- Que importa.- Le respondió bajo con la voz ronca.- No soy igual que él. Además parece que te gusta mientras ella mira.- Soltó un pequeña risa y metió una mano dentro de la falda de ella.

Quería preguntarle si estaba bien pero mi cuerpo no reaccionaba. Tenía que salir de aquí, eso, lo que hacían parecía no estar bien, pero el rostro de la chica, parecía que lo disfrutaba, lo que sea que esté haciéndole el chico parecía disfrutarlo. Estiró sus brazos y respiró hondo, el chico la observó con una mirada de diversión ¿Qué estaban haciendo ahí abajo?

El chico me miró con la misma sonrisa y por primera vez en mi vida, sentí que podía ver a través de mi, no de manera mental sino física, quise salir de ahí de inmediato. Tragué ruidosamente y antes de que dijera algo, con todas mis fuerzas que tenía, me disculpé y salí de ahí lo más rápido que pude hacerlo.

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(1) The Lunacy/ The madness of Duke Venomania. Music & Lyric: Mothy./ Illu: Suzunosuke.| Adaptación: Aleeku & AquaLeBlanc. 

Hola! Cómo están? Espero que estén super bien! Y yo aquí pensando que pasó una semana otra vez xD ¡Dia no avances tan rapido quiero hacer todo lento y despreocupado!
PD: Este era el Cap 41 xD

Adiuh! Nos vemos en otro capitulo! Por favor, cuiden su cuerpecito u v u Tiene que estar sanos como Popeye(?)