Capítulo 36
- Len pov -
Dejé las llaves donde siempre y noté la luz de la cocina prendida. Me quedé quieto tratando de escuchar sus pasos pero no había sonido alguno, dudé si debían entrar o no, no quería verla por no saber cómo reaccionar ante ella. Abrí un poco la puerta de la cocina para meter la cabeza y no había nadie dentro de ella, cuando quise apagar la luz, noté ese plato cubierto con otro y a su lado una pequeña nota.
Alcé la nota y leí lo que tenía escrito.
- Hola! Soy tu cena y esperé a que llegaras, ¿puedo cumplir mi objetivo ahora? ٩(。•́‿•̀。)۶
Destapé el plato y vi una porción de bizcocho junto con una cucharilla. Noté el dulce olor que desprendía y agarré la cucharilla de manera inconsciente. Probé un pedazo y de inmediato sentí el delicioso sabor de plátano en mi boca, al mismo tiempo mi estomago sonó de hambre por no haber almorzado nada. Quería comer aún más, pero no quería darle ese gusto.
Di la vuelta a la nota por curiosidad.
- Mamá, no permitía dejar comida por qué...
- Por el esfuerzo de hacerlo.- Murmuré la respuesta.- Eso es manipulación.
Me senté en la silla y dejé mi mochila cerca de mí, comí en silencio el bizcocho, siendo atento de que ella no bajara hacia acá. Cuando no había ningún ruido sospechoso en la plata de arriba, sonreí al volver a probar estas cosas y sentir de vuelta esa cálida bienvenida que mi madre siempre hacía, comí de manera lenta para perdurar ese sentimiento de un recuerdo.
(...)
- Gracias, pero no gracias, Miki.- Respondí observando la puerta.
Sus intenciones eran buenas, lo admito, pero lo único que causarían sería una llamada a ese idiota y realmente no quería darle una razón para que me llamara de manera insistente. El acusar a Fukase con el director no me beneficiaba en lo absoluto, aunque si hubiera sido lo correcto, sí tan solo no existiera mi padre...
- ¿En serio? Pero vi a ___, tan triste ese día y Piko me dijo lo que ella murmuraba.- Dijo triste.- Realmente quería ayudarlos y que tengan justicia.- Suspiró.- Sé que Fukase es mi primo pero no puedo pasar por alto esas cosas.
- ¿___?
Bajé la mirada al decir su nombre. ¿Estoy siendo egoísta? Ese día, ella también lo pasó muy mal, quería llorar y me dio una solución dónde no tenga que llamarlo. Sonreí, era amable y... No quiero hablar con él, recordé. Prefiero perder algo que escucharlo o tenerlo cerca de mí otra vez.
- ¿Hablaste con ella sobre esto? - Pregunté y ella negó con la cabeza.- ¿Por esto faltaste el día de ayer?
- Traté de encontrar alguna pista para demostrar el robo, videos en su computadora o Cd con algo dentro de ella, USB o algo así.- Suspiró frustrada.- No había nada, supongo que está en su celular.
- ¿Por qué hiciste esas cosas? - Cuestioné con una sonrisa en el rostro y ella volteó a verme rápidamente.- Es tan extraño que hagas eso, siendo que no es tu problema. ¿Te hizo algo malo Fukase? ¿Qué te hizo tu primo?
- Supongo que no puedo mentirte, Piko tenía razón.- Rascó su nuca nerviosa y bajó la mirada.- Quería vengarme por lo que nos hizo a Piko y a mí, seguramente Piko te contó acerca de su beso con Iroha ¿no? Hablé con Iroha y me dijo que Fukase le había animado a hacer eso y planear todo eso. T-también quería hacerlo para ayudarlos a ustedes, ____ es muy agradable y tú eres amigo de Piko, así que no podía dejarlo pasar.- Dijo lo ultimo rápidamente con los manos empuñadas frente a ella.- No soy tan egoísta.
Egoísta, ¿eh?
- Habla con Nora.- Pestañeó varias veces al no comprenderme.- Yo apoyaré lo que ella decida, sí acusarlo o no, pero debes decirle sí tienes pruebas o no que es él.- Asintió.- Tengo dos preguntas más.- Dije al ver que se daba la vuelta, alzó la mirada sobre su hombro.- Tú fuiste la persona que le robó su práctica a Fukase, ¿verdad?
- Yo no diría la palabra robar.- Sonrió orgullosa por ello.- Diría ocultarlo de su madre, pero sigue en su cocina.
- De acuerdo, entonces, yo oculté el cuaderno de física en el salón, pero sigue en la bolsa de la basura. Espera.- Me interrumpí.- Creo que está lejos de aquí.
- Estás bromeando.
- Rompí cada hoja de su cuaderno, no fue fácil hacerlo en plena clase,..
Escuchamos carraspeos forzados cerca de la puerta, ambos nos miramos y miramos hacia la puerta. Vi su pelo rubio claro asomarse por la puerta y entrar con una sonrisa en el rostro, su único ojo nos miró a ambos.
- Que buen momento para visitar a ___ Pero... ¿Sabes lo que Piko pensaría de esto? - Preguntó con una sonrisa divertida.- Sus dos personas favoritas teniendo coito a ocultas, aunque es una lástima encontrarlos solos hablando y no entrando en acción para ser coito.
- Es increíble que solo me imagines teniendo sexo, Oliver. No soy gay, ¿quieres dejarme en paz? Te rechacé varias veces, ¿por qué no lo intentas con Fukase? Estoy seguro que él aceptará gustoso. - Se le borró la sonrisa del rostro y la mía creció.- Miki es la novia de Piko, ni loco intentaría tocarla, solo es una amiga. ¿Todo bien en casa para suponer esa tontería?
- Mejor que la tuya por supuesto.- Me respondió cruzándose de brazos e irguiendo su cuerpo.- Bueno, escuché que estaban siendo injustos con Fukase, prácticas hurtadas y cuadernos quebrados, ¡oh por dios! Que terrible injusticia.- Sobreactuó de manera horrible y soltó una risa por ello. Ni Miki y yo le seguimos el juego.
- ¿Qué quieres?
Oliver la miró con una sonrisa por su pregunta. Escuchamos claramente la campana del comienzo del primer periodo de clases y él rápidamente cerró la puerta cuando nos movimos, se puso frente a la puerta.
- Estamos en un salón vacío, ¿cuál es la necesidad de irse? No vendrá nadie. Hablemos de manera calmada, amigos.
- ¿Qué es lo que quieres? - Pregunté buscando algo entre sus gestos. Algo que me diera indicios de su comportamiento.
- Quiero ayudarlos en lo de Fukase, por supuesto.
- ¿No era tu amigo? - Entrecerró sus ojos sin poder confiar en él. Piko seguramente le contó a ella lo que le hizo.- ¿Qué es lo que ganas de esto?
- No quiero jugar sus trucos sucios, no me interesa hacerlo sufrir desde la oscuridad.- Hablaba tan calmado.- Sino quiero demostrar que es culpable, traer pruebas que puedan ayudarla a ella.
No era algo que ganaba, sino a alguien. Mordí mi lengua pero no cambie mi expresión, este idiota quería aprovechar la situación para dejarle parado de buena manera frente a ella, cómo un héroe en la historia. Mierda.
- Tn pov -
Lloré mentalmente por lo Len me había lanzado en media clase de música, esa pequeña nota amarilla que lo hizo con una sonrisa divertida. Mi mente solo se cruzó de brazos y señaló el papel para que hiciera lo que debía hacer.
El día de anteayer, lo pasé genial, Len comenzó animarse y Piko bromeaba con cada cosa, me sentí realmente cómoda y me sentía feliz al estar ahí con ellos. Conocer el lugar de trabajo de Len, me hizo muy feliz y las cosas que me contó Piko cuando me acompañó a casa, me sentí como antes, cuando estaba en el salón B junto con Gumi, sentí esa cercanía con él, un apoyo más si le contaba acerca de mis sentimientos de Len.
- ¿Quieres acompañarme hasta el trabajo el día de hoy? - Leí en la nota. Mi mente golpeó el suelo mientras lloraba frustrado.
Escuché la risa de Len a mi lado mientras anotaba lo que el profesor decía.
No era tiempo de lamentos, tenía que cumplir mi promesa que le hice a Oliver, solo sería un día y mañana podría ir, sí es que me lo pide de nuevo. Me consolé mientras trataba de calmarme internamente.
El mensaje de Oliver del día de anteayer, resultó que era un aviso de que me estaba esperando para acompañarme a casa y en la noche recordé que lo había dicho cuando Len le dijo que haríamos la canción hace una semana. Me disculpe por no haber leído el mensaje y le dije que hoy podíamos irnos juntos, hoy, el día que Len me pide que lo acompañe.
Sacudí ese sentimiento de tristeza de mi cuerpo, no podía despreciar el tiempo que me daba Oliver, eso sería cruel, así que podía ver el lado positivo, además que Len no iba a desaparecer el día de mañana, sino estaría a mi lado, me animé.
- ¿Podemos hacerlo mañana? („ಡωಡ„) Hoy prometí salir con alguien más y prometo que mañana si tendré tiempo! o(TヘTo)
Le lancé la nota después de acomodar mi cubre bocas y me respondió luego de varios minutos.
- Olvídalo. Está bien, hazlo. No te preocupes.
- Esperaré ansiosa el día de mañana! (.❛ ᴗ ❛.) Así que por adelantado te mandaré ánimos para tu trabajo! Ánimos, Len! Ánimos! ╰(*'︶'*)╯♡
Pocos minutos después me respondió con una sonrisa y una mirada cálida. ¡N-no, corazón lo hacíamos bien al controlarnos, no pierdas el control! Le reñí cuando sentí calor en mi rostro de golpe. Movió sus labios sin decir nada y noté que me decía algo. Primero, fue como una A, luego era una sonrisa, e-era una I y luego volvió a ser una A.
¿Aia? ¿Qué era una aia? ¿Un código de agencia secreta? Aia, ajia, malia, valía... Me mente me dio un golpe y reaccioné, ¿e-era un gracias? Me volvió a enviar la notita y la leí sin que nadie se diera cuenta.
- De acuerdo, te irás con alguien más, entonces para recompensar esa hora, baja tu mano a la silla.
¿Bajar mi mano? ¿Me dará algo? Volví a sacudir la cabeza, si lo hacía se lo devolvería tenía suficiente con las notitas, era feliz. Pero hice lo que decía, bajé la mano y lo miré confundida, él también bajó la mano de manera casual y miró hacia el otro lado fingiendo prestar atención a lo que decía el profesor.
Vi que su mano se acercó a la mía poco a poco, chocó nuestros dedos, tanteó la mesa durante unos segundos y entrelazó con tranquilidad nuestros dedos en silencio. Era tan cálida y... ¡Los nervios me dominaron por completo por ello! Sentí todo mi cuerpo comenzaba a temblar como gelatina, con todas mis fuerzas mentales paralicé mi brazo para que no temblara y realmente traté de atender a clases para distraer esos nervios y mi corazón.
- Escucha, ___.- Me dijo mi mente como si fuera un jefe de la mafia al ver que no funcionaba el profesor.- Nunca nos entrenaron para esto y como no puedo renunciar, te aconsejaré que nos desmayemos aquí y el tiempo haga el resto.
¡No iba a hacer eso! Me sentía feliz por esto e iba a superarlo. Y tal vez si me desmayo, él nunca más vuelva a hacer estas cosas conmigo. Concentrada. Concentrada en la pizarra y el profesor.
(...)
- Espero que te vaya bien en tu trabajo.- Lo animé en voz baja mientras veía que guardaba sus cosas. Cálmate, corazón, lo estamos haciendo bien.
No me desmayé durante todo el tiempo que entrelazamos nuestros dedos, para mí era demasiada acción por un día y para mi cerebro. Esto era un triunfo para mí.
- Gracias, cariño.- Me sonrió y cargó su mochila.- Espero que también te vaya bien con la persona que te alejó de mi.- Bromeó.
- ¡Te veré mañana! - Fruncí los labios.- ¡Te contaré lo que pasó y te invitaré un helado!
Asintió con una sonrisa y se despidió con la mano.
Cuando solo quedaba yo en el salón, me quité el cubre bocas y respiré hondo. Ahogué un grito de alegría y salté sin que nadie mirara, me sentía feliz por hoy. Miré mi mano y la admiré. Las mariposas en el estomago no se comparaban en absoluto a lo descrito en los libros, era tan extraño y lindo.
- ¡___! - Gritó sorprendida soltando las cosas que llevaba en las manos, de inmediato volví a ponerme el cubre bocas frente a ella. Rin.- ¿Aún estás aquí? Pensé que habías dicho que te ibas con Oliver.- Trató de esconder las cosas que llevaba.
- ¿Qué estás haciendo aquí, Rin?
Mi mente golpeó el suelo frustrado de nuevo. Ella tenía el cabello en una coleta, tal como él hacía, realmente se parecían demasiado, su cara era un reflejo del otro y la única diferencia era que su pelo estaba más controlado con menos mechones sobresalidos. La próxima vez que me enamore evitaré a los gemelos, me dije.
- Vi que Oliver ya subía acá, así que supongo que deberías ir con él.- Dijo nerviosa.- Escuché que hace unos días, se abrió una cafetería aquí cerca, así que...- Se calló cuando notó que miraba lo que llevaba en manos.- Deja de mirarme así, me siento nerviosa.- Se dio la vuelta para ocultarse.
- P-perdona.- Respondí antes de estar frente a ella moviendo mis manos para explicarlo.- No quise asustarte, es solo que es extraño verte aquí y yo pensé que ya te habías ido con las demás, perdón.
Nos miramos, soltamos un suspiro y reímos por la situación.
- Estoy haciendo un trabajo sin que las demás lo sepan.- Murmuró.- No se lo digas a nadie, por favor. Miku se enfadaría sí lo sabe y realmente quiero solucionar los problemas con Len.- Alzó la voz realmente nerviosa.- Por favor, ___.
¿Trabajó? Pregunté mentalmente observando las cosas que llevaba en el cubo sin agua, trapos, esponjas y guantes para lavar. ¿Trabajo caritativo? Realmente era una buena persona, quisiera ser cómo ella. Escuché que la voz de Oliver me llamaba desde el pasillo, ella se puso aún más nerviosa y tensó su cuerpo. Le sonreí y asentí con la cabeza, no era malo ser buena persona.
- Puedes confiar en mí. No le diré a nadie, pero la próxima vez déjame ayudarte.- Murmuré saliendo del salón antes de que Oliver la viera.
La próxima vez le preguntaré cómo va con el proceso de recuperar la confianza de Len.
- Len pov -
- Tú le dijiste que no dijera nada, ¿verdad? - Me preguntó tratando de aguantar la rabia dentro de ella. Sus pasos detrás de mí se hacían cada vez más molestos.- Fue tu culpa que robaran la canción de ___. ¿Sabes cómo se sintió ___ cuándo lo supo? ¿Al menos estuviste con ella?
- ¿Cambiaron de lugar con Miku? - Traté de desviar la rabia que ella me estaba causando por sus estúpidas preguntas.- Dijeron, el lunes irá Miku, el día siguiente, Rin y luego yo. Qué tontería. Vete, Gumi.
- Sabía que te habías hecho más orgulloso y frío que antes.- Murmuró.- Eres...
Di la vuelta a la esquina ignorando lo que murmuraba, tenía cosas más importantes que pensar. Mordí mis labios mientras pensaba el qué podría hacer con esa situación. Sí Oliver lograba hacer lo que quería, podía alcanzar su objetivo... Y eso es lo que más me molestaba.
Nora no se había enamorado antes, así que actuar cómo el chico ideal sería suficiente para ganar su atención, ser romántico y fingir tener atención hacia ella, la haría caer fácilmente y aun más cuando la proteges de algo, no dudaría de esa persona. Al no tener experiencia antes, podía ser fácilmente manipulable y manejable, podrías cambiar las actitudes que no te gustan y empezar unas nuevas con tan solo demostrar amor y cariño, pero...
- ...No se enamorará de ti.- Alzó la voz y me quedé quieto.- Así que deja de actuar de esa manera frente a ___. Tú no eres amable ni solidario, eres egoísta.
- ¿Actuar? - Murmuré volteando al verla.
- Así es. Ella detesta personas cómo tú, mentirosos, egoístas y apáticos.- Se paró derecha y alzó la vista con determinación.- Deja de fingir frente a ella y muestra quién realmente eres, Len Kagamine.
- ¿Quién soy? - Pregunté fingiendo diversión. Quiero que se calle.- Suenas cómo sí fuera la peor persona del mundo. ___ solo es...
Me callé de inmediato. ¿Qué es? Traté de ignorar ese deseo que crecía, ese deseo que decía que no la quería cómo amiga y a la vez si lo deseaba, quería dejar de tener miedo de perderla un algún momento pero sabía que era inevitable. Era horrible. Conocer el fin de algo cuando no sabes cuándo será, era horrible.
Era peor que perderlo de inmediato.
- ¿No lo eres? - Afiló sus ojos como un gato apunto de atacar.
Quiero cambiar, pensé de inmediato. Quise reírme de esa ridícula idea, pero continuó hablando. Quiero ocultar todo lo malo y poder estar con ella, tener el derecho de abrazar a un ángel que no me pertenecía.
- No lo soy.- Dije de manera forzada, mi cuerpo estaba tenso y sentía que todos podían ver lo que estaba ocultando.
Quiero irme de aquí.
- Ni siquiera tú lo crees.- Dijo con burla.
¿Por qué ya no veía a ella y lo veía a él? Sentía sus ojos sobre mi cuerpo, juzgando cada parte, cada error, cada palabra. Listo para despedazarme con risas mientras los demás miraban divertidos.
- Cállate.- Respondí.- ¿Y tú eres mejor? ¿Olvidas por qué te alejaste de Rin y Miku, Gumi? ¿Ah? ¿Acaso ya les dijiste lo que hiciste? ¿Lo que hicimos? - Pregunté divertido liberándome de lo que él tanto odiaba de mí. Sonreí frente a ella y acerqué mi rostro al suyo.- ¿Ser mi primera vez no fue suficiente, pequeña coneja? ¿Mi ex novia?
- Tn pov -
- Espero que te haya gustado el helado.- Expresó con alegría Oliver mientras esperábamos llegar al ascensor para llegar a mi departamento.- Realmente esperé demasiado por tener esta salida contigo.
- ¿En serio? - Abrí los ojos sorprendida y sonreí después.- Me gustó el helado, fue lindo de tu parte invitarme y acompañarme hasta acá.
- Me importas demasiado, ___.
Se abrieron las puertas del ascensor en el momento que dijo eso, no respondí a lo que había dicho y solo entré de ahí con él detrás mío.
- ¡___! - Gritó mi tía desde atrás. Ambos volteamos y vimos que mi tía Meiko llevaba varias bolsas de compras en sus manos mientras corría tratando de alcanzar el ascensor.
Oliver apretó un botón mientras yo corría hacia ella para ayudarla. Entró al ascensor y cuando se cerraron las puertas, Oliver de manera educada le ofreció ayuda y terminó dejando con las manos vacías a mi tía. Oliver llevaba todas las bolsas que sostenía ella. Me miró y sonrió orgulloso.
- ¿D-disculpe, dónde debo dejar las bolsas? -Le preguntó a mi tía cuando entró adentro del departamento.
Ese momento me pregunté cuándo había dejado que eso pasara.
- Por favor, déjalos en la mesa de la cocina.- Le señaló la cocina con la mano mientras dejaba las llaves y su bolso. Él le hizo caso en silencio.- Vamos, ___, ayúdalo.- Me riñó al ver que solo me quedaba observándolos sorprendida.
- C-claro.- Corrí hacia la cocina y vi que Oliver miraba las fotos que teníamos allí.- La-lamento...
- ¿Son ustedes dos? - Me interrumpió con una sonrisa y asentí al ver a qué fotografía se refería.- ¿Es tu padre? - Señaló al hombre que llevaba un gorro de chef como brócoli.
- Muchas gracias por la ayuda... ¿Cuál es tu nombre? - Apareció mi tía detrás de los dos, me estremecí de sentir su voz tan cerca. Estaba actuando como lo hacía en su trabajo, distante, fría pero amable.
- ¿Mi nombre? Mi nombre es Oliver, ¿cuál es el suyo?
Podía sentir la tensión que estaba formando mi tía con esa pose de alguien superior con los brazos entrecruzados, ser una subgerente en la empresa que trabajaba había forjado su actitud a una más dura. Razón una por la que no traía chicos, era porque mi tía dejaba su actitud divertida y cálida a una más estricta y distante, era otra persona. Recordar la vez que fui a su trabajo por un día festivo, sería cómo revivir el lado macabro de mi tía, se volvía salvaje cuando controlaba algo.
- Soy Meiko, encantada de conocerlo, joven Oliver.- Estrecharon su mano en silencio.- Como agradecimiento por su ayuda, ¿le gustaría almorzar acá? Claro, sin molestar a sus padres o tutores.
- ¿P-puedes hacerlo? - Pregunté tratando de bajar la tensión.- No tienes que hacerlo por obligación.
- No te preocupes, mi padre no dirá nada.
(...)
Cerré la puerta y solté un suspiro por que al fin se había acabado esa tensión. Estaba comenzando a pensar que Oliver era una persona que creaba tensión y la elevaba, y eso no me gustaba no lo absoluto. Sacudí mi cuerpo imaginando que sacaba ese sentimiento de incomodidad.
Fui a la cocina y ayude a mi tía a lavar los platos a su lado mientras ella pasaba la esponja sobre ellas, yo les sacaba la espuma con cuidado.
- Esperaba más de él.- Me dijo sin mirarme, la miré confundida por ello y siguió.- En realidad, esperaba que esté aún más nervioso, pero en cuanto a sus respuestas esperaba más.
- No estamos en la empresa, tía. Deja de evaluarlo.
- No puedo evitarlo. - Bufó.- Hasta el momento, solo hubo un joven que pudo con mi modo de hablar.
- No entiendo de qué estás hablando.- Murmuré realmente confusa.- No somos empresarios, somos adolescentes que ni siquiera están en la universidad.
- Es que cuando le pregunté su nombre a él, me respondía con elegancia y arrogancia.- Dijo al mirarme y parar de lavar.- Además él no es el chico que te gusta, no estabas nerviosa como gelatina andante, pero es el pretendiente de la vez anterior. No le des falsas esperanzas, ___.- Volvió hacia los platos.- Eso es cruel.
Sonó el teléfono para salvarme del regaño. Se limpió las manos y corrió a contestar la llamada.
- ¡Señor berenjena! - Dijo con la voz más animada.- ¿Hace cuánto no me contestas las llamadas? Claro, te daré la dirección para que vengas. No, eso no recompensa mis llamadas y las quejas de Teto. Estoy bromeando, tranquilo.- Comenzó a reír.- Te lo mandaré por mensaje, dame dos minutos.
Colgó.
¿Señor berenjena? Imaginé a una persona con una cabeza de berenjena vendiendo berenjenas en un carrito pequeño. Reí por esa imagen, pero, ¿eso no sería canibalismo? Me estremecí por eso. Ya no quiero comer berenjenas...
(...)
Ambos reían mientras el señor berenjena comía con calma. Realmente no podía creerlo, me desmayé, ¿no? Fue demasiado para mi cerebro entrelazar las manos con Len esta mañana. El mundo no podía ser realmente tan pequeño, que el señor Gakupo sea el señor berenjena, que conozca a Teto y sea amigo de mi tía es... Tan extraño.
- ¿Te es extraño que esté aquí? - Me preguntó con una sonrisa después de que mi tía vaya por unas bebidas.
- N-no. No. No... La verdad si.- Admití nerviosa bajando la vista a mis manos.- No pensé que ustedes se conocieran, ni que seas compañero de Teto. Pero no es malo...
Callé cuando él comenzó a reír divertido. Soltó el tenedor y se limpió con la servilleta de manera elegante. Meiko dejó las bebidas cerca de nosotros y volvió a sentarse.
- ¿Qué sucede?
- Hablamos de que el mundo es pequeño.- Le dijo agarrando la bebida.- ¿Por qué no me dijiste que era tu sobrina? Me hubiera encantado traerle un regalo, no solo para Rin y Len. Por eso Teto estaba loca antes de venir a este lugar, buscando ropas o cosas de chicas.
¿Todos se conocen? ¿Yo soy la única persona que no conoce a nadie?
- Te dije que vivía con mi sobrina. Además no me dijiste que vendrías junto con Teto.
Fingió bufar y beber su bebida mientras trataba de explicarle la razón del por qué no le había dicho antes. Al parecer su jefe se lo dijo al último minuto para buscar a un autor llamado Yuyoyuppe, quien obviamente era el creador de la canción más famosa de Luka. En ese momento el estaba escribiendo otra canción pero su jefe parecía comprender eso, con la salida de ¿Mafumafu? Un bonito nombre para algo, en realidad. Querían contratar al creador de Leia por varios años.
- ¿Tú lo conoces? - Le preguntó Gakupo y Meiko negó con la cabeza.
- ¿No se llamaban así los dulces que comía Rin en Navidad?- Apoyó su cabeza en su mano, la cual estaba sobre la mesa.- Yuyo era el chicle que siempre solía llevar, ¿recuerdas? De sabor naranja y Yuppe era el chocolate que le gustaba tomar en noche buena.
Vi que Gakupo se quedó completamente paralizado por varios minutos al escuchar eso, sus ojos se abrieron por eso, dejó la bebida con calma y comenzó a buscar algo dentro de su maletín en silencio. Mi tía lo llamó confundida por lo que estaba haciendo. Pero él siguió buscando algo, hasta que lo encontró y sacó su celular.
- Teto me va a ahorcar en la próxima reunión.- Murmuró con una sonrisa tensa.- Voy a perder mi trabajo por una persona que ni siquiera sé cómo es.- Dejó caer su cabeza sobre la mesa.- Yuyoyuppe... Yuyoyuppe.- Murmuraba una y otra vez.- ¿Entonces era una mentira?
- Len pov -
- ¡Por favor, piénsalo! Mira tú serás el primer inscrito y tendrás un cupo asegurado.- Me dijo mostrándome los boletines a medio hacer y se puso frente a mi.- Te prometo que tendrás el cupo y te recomendaré con mi agencia.
Sentí la mirada de las personas que salían del trabajo.
- Te dije que no estoy interesado en tu concurso.- Respondí acomodando mi mochila.- Tengo trabajo y no tengo tiempo.
- ¡Vamos, piénsalo! - Teto se puso frente a mí de nuevo, su pose era como estar frente a un jugador de basquetbol cubriendo la entrada.- Gakupo me mostró la canción que hiciste para tu preparatoria, la del gato negro y fue increíble, todo lo que hiciste fue impresionante. Tienes potencial para crecer en la industria musical y todo está a tu favor. Solo necesitas un empujón.
- No voy a ayudarlos a encontrar a ese autor que buscan.
- ¿Qué es lo que te impide entrar al concurso? - Gritó frustrada mirando al cielo.- ¿Tus padres? ¿Son tus padres? Yo hablaré con ellos, estoy segura de que ganarás al menos uno de los premios, ¿el dinero? El premio es dinero y una oportunidad en la agencia. ¿Qué más te impide hacerlo?
- No tengo tiempo.- Le dije de manera lenta y en voz alta, perdiendo la paciencia que tenía con ella.- ¿Qué parte de esa frase no comprendes?
- El concurso será al menos en tres semanas, serán a través de fases y sé que tienes un cuaderno amarillo donde escribes canciones, Gakupo dijo que siempre lo llevas contigo.- Puso sus brazos como jarras en su cintura después de señalar mi mochila. Abrí los ojos sorprendido por sus palabras y protegí mi mochila de manera inconsciente. Mierda.- Lo sabía, lo llevas ahora, ese cuaderno es tu carta de triunfo, Len.
- ¿Qué te hace pensar que...
- ¡Por dios! - Me interrumpió gritando y pateando una piedra del suelo.- ¿Por qué eres tan terco y pesimista? ¿No ves que es una oportunidad una entre mil? Te estoy rogando para que participes. Yo, una persona que es quisquillosa con las personas a su mando, te estoy escogiendo por solo ver una canción tuya, quiero ver hasta dónde eres capaz de crear. ¡¿Qué es lo que no te entra en tu cabeza de mono?!- Se golpeó la cabeza varias veces.
Por un momento imaginé que sus dos coletas rojas se iban a convertir en dos taladros que comenzarían a perforar todo a su paso, pero era de baja estatura, a lo mucho llegaría hasta mi pecho y saltaría para llegar a mi cabeza. Reí por esa imagen en mi mente.
- Lo voy a dejar más claro, señorita.- Dije sin borrar mi sonrisa caminando hacia ella.- Lamento si no he sido claro, pero no quiero estar en la agencia donde usted trabaja, no quiero la presión de tener el primer lugar o las consecuencias que tendré si no lo gano, no quiero ayudarlos a encontrar a su autor, pero quiero el dinero.- Afirmé mirándola a los ojos.- Quiero ser libre.
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Woah! Cómo han estado? No sé hace cuanto actualicé, porque perdí completamente la noción del tiempo xD Bueno, no puedo hacer nada contra eso, aunque deseo que hayan estado muy bien! U W U <3 Muchas gracias por sus bonitos comentarios! Oh! Feliz día del niño atrasado porque todos somos panditas pequeños <3
En otras noticias, menos importantes, porque quiero chismear - 3- vi Yakusoku no Neverland! Entré en depresión por esa montaña de emociones xD Aunque todo fue culpa de la relación de amor-odio que tengo con Ray, sí tan solo Mariya Ise no daba su voz, yo salía impune. También vi Dororo! Me gustó Hyakkimaru(?) KSJNDSSJDV Pronto veré Inuyasha en modo tortuga. Bueno hasta ahí el reportaje que nadie quería leer xD
Hasta el próximo capitulo! Adiuh! <3
PD: Encontré un canal con puros videos/covers de Mariya Ise, los veo en el cielo, bai bai.
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