✨unique part✨
✨Sparks - OS✨
✨disculpen los errores✨
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Hola, aquí una notita para que sepas cuanto te re quiero por ser tan hermosas, recuerda que eres una estrella brillante, y también esas chispas que enciende el fuego con tu amor. ;)
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Joder... no sabe hacer nada más que quejarse, Taehyun se queja y se queja de que no sabe cómo aprenderse la coreografía que la profesora le insisten en hacer, no quiere bailar, no quiere asistir a clases y no tiene muchos amigos.
Es un gruñón.
El chico se lleva la mano a la cabeza restregando su palma contra su sien, con incomodidad, tal vez solo es tímido.
Soobin se acerca a Taehyun dejándole un suave empujón en el brazo y este lo mira de forma fulminante.
- no me toques. - es lo que le dice.
- pero-
Taehyun lo empuja de vuelta soltando una risa, y sonriéndole.
Es tan guapo.
- beomnnie. - escucho que me llaman.
- ¿eh... si?
Huening Kai me está mirando, que espera para hablar.
- te he esperado por más de 20 minutos.
- maldición. - dijo tomando mi mochila. - lo había olvidado.
Yeonjun debe estar molesto.
Corro por los pasillos en busca de yeonnie, pero no lo encuentro Huening Kai comienza a reírse mientras corro con desespero de encontrarlo, cruzo la esquina y él está apenas saliendo de su clase
- me has dicho que tienes... estúpido. - le suelto a Huening Kai.
- lo siento, siempre tardas mucho... ¿porque no solo le dices?
- no es tan fácil.
Él sonríe negando.
- te complicas con cosas así, siempre.
Lo empujo y yeonnie agita su mano en saludo.
- NingNing y beomnnie. - saluda con una sonrisa.
Cuando soobin y taehyun pasan a nuestro lado pego un brinco al sentir el fugaz contacto de un empujon.
- imbecil. - me dice tae.
Pero solo lo ignoro. Es un gruñon.
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Siento como si una piedra fuera hacerme caer y no me mido, suelto un "imbecil" pero no sé a quién es, y cuando volteo me topo con el rostro inocente de beomgyu, me maldigo una y mil veces, y noto que he pasado varios segundos mirandolo cuando soobin me da un suave empujon, el cual devuelvo junto a una risa.
- bin. - lo regaño.
El sonrie antes de hacer una reverencia, sus hoyuelos son demasiado tiernos como para no querer tener un amigo asi.
- lo siento, taehyun-ah.
Mis mejillas se vuelven de color carmin por su disculpa.
- eres muy formal. - lo reprendo. - no soy un anciano.
- pero te comportas como tal.
- idiota.
- taehyun-ah, tu amor eterno te está mirando.
Mis ojos se van a todos lados buscando a quien dice soobin, pero escucho su tranquila risa y lo empujo.
- callate.
Mis ojos volvieron a irse a la puerta principal de la escuela, por alli iba beomgyu, kai y yeonjun, ellos eran los mejores amigos, a veces sentia inmensos celos de yeonjun quien le daba besos inocnetes en el rostro a beomgyu, y él ni siquiera se quejaba acerca de eso.
- joder... - dije. - ¿por qué el sí?
Eran tan unidos.
- soobin... ¿tú que crees que suceda si le digo que me gusta?
- no sé.
Se encoge de hombros. Y sonrio.
- kai me rechazo. - dijo. - no me ha vuelto a hablar, pero se sonroja cada vez que lo saludo.
Era extraño pensar en que soobin un chico tan atractivo y amable fuera rechazado por kai, que era muy infatil y le encantaba molestarlo para que le compara dulce, ahora eran tan diferentes, era gracias a yeonjun.
No sabía por qué siempre los amigos de yeonjun eran tan rebeldes y solian escaparse.
...
En medio de la clase pido permiso para ir por unas pastillas a la enfermeria de la escuela mi cabeza duele por haber pasado la noche estudiando, y suelo tener mis pastillas siempre a la mano.
Camino hasta la enfermeria pero me paro frente a la puerta mirando hacia el final del pasillo.
Veo a un chico con cabello negro oscuro, y las mejillas rojas sentado en el pasillo, está llorando, sus labios hacen un puchero mientra llora y sus manos puños.
- hey. - lo llamo.
Cuando sus ojos se encuentran con los míos se pone de pie, se sacude los pantalones y hace una reverencia.
Casi corrió cuando iba a acercarme.
Comprendí que él no me quería cerca, pero no pude evitar correr detrás de él, el volteo por unos segundos antes de estrellarse contra el suelo, había caído contra el suelo y sus ojos se volvieron a llenar de lágrimas.
- ¿Qué mierda te sucede? - pregunte.
El me miro mal, sabía que había sido brusco pero hasta ahora no me había importado.
- hey. - lo llame. - ¿Qué sucede?
Me hice el cabello rojo hacia atrás, y él me miraba con cierta rabia.
- no es tu asunto.
- beomgyu...
El me miro confundido.
- ¿Cómo sabes mi nombre...? - inquirió.
- ¡me gustas!
Las mejillas de Beomgyu se tiñeron de rosa, sus ojos estaban bien abiertos y sus labios ligeramente separados. Me acerque sin saber qué hacer y cuando me di cuenta ya lo estaba besando.
Me aparte y sin saber que hacer me di la vuelta y comencé a caminar de vuelta a la enfermería.
...
- ¿Qué tu...? ¿Qué? - inquirió Soobin.
- lo bese. - me encogí de hombros.
No era nada nuevo que quería besarlo, solo que era más de lo que iba a creía que sería capaz de hacer, por dios... ese chico era tan dulce, con sus mejillitas de color carmin y su cabello negro cayéndole en sus ojitos.
Soobin de la nada comenzó a golpear mi brazo y quite la vista de mi libro.
- huh... - comenzó beomgyu. - lo siento, taehyun-oppa.
Mis mejillas se pusieron rojas por el "oppa" por qué era tan tierno.
- beomgyu... - lo llame. - ¿Por qué te disculpas?
- creo que hemos confundido las cosas... y-yo... usted me gusta hyunnie.
Mis mejillas estaban a punto de estallar de lo rojas que estaban, una carcajada grande y fuerte resonó, todos los presente miraron al dueño de la carcajadas.
Yeonjun estaba en la puerta.
- Hey, beomgyu... debemos irnos.
Mire a beomgyu ponerse más rojo de lo que estaba. Yeonjun le dio una palmada en el brazo mientras reía con una sonrisa divertida en el rostro.
- beom, deja de bromear.
- ¿Qué mierda? – preguntamos al unísono.
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Había escuchado bien, que había dicho yeonjun, no, no... no era una broma. Por dios...
- ¿Qué mierda? – dijimos al mismo tiempo.
Sonreí ladeando la cabeza.
- ¿Qué haces aquí?
El sonrio. – vine a ver tu broma... veo que salió muy bien.
- ¿de qué hablas? – pregunto taehyun.
Lleve mis manos a la cabeza haciéndome el cabello hacia atrás mientras miraba a yeonjun y a tae, por que yeonjun había dicho eso, y mejor pregunta: ¿Quién coño le había dicho?
- yeonnie, deja de decir estupideces. – le dije.
- era una broma... - dijo taehyun mirándome. – maldito bastardo.
Juro que casi mi corazón se salió de mi pecho, el me miraba molesto, porque yeonjun pensaba que era una broma.
- no, no. No es una broma.
El deslizaba su mirada por todo el lugar, el salón estaba callado todos miraban a nosotros, eran tan abrumador pensar que todos me estarán culpando por el mal humor de taehyun en estos días, pues en ese instante taehyun se puso de pie yéndose con su libro sin decir nada más.
- maldición yeonjun.
- cuida tu boca, beom.
- no me vengas con mierdas. – dije molesto. - ¿Por qué dijiste que era una broma?
- kai-
Huening kai apareció dándole un empujon a yeonjun mientras lo miraba mal.
- te dije que se le iba a declarar. – corto.
- no fue mi intención, arruinar esto... pero creo que estas confundido, además... si él te quisiera no se hubiera ido.
Soobin se puso de pie, caminando aun lado de los chicos, kai lo miro de reojo pero sostuvo los hombros de yeonjun, mientras yo le reclamaba, era un idiota.
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Tenía los estúpidos ojos rojos, idiota de mierda que era ese, porque había hecho una broma tan estúpida como esa, acaso no se tomaba enserio mis sentimientos, su estúpido rostro, no quería verlo más... me parecía tonto hasta que me gustara.
- taehyun-ah. – llamo soobin.
Le obsequie una mirada fría. - ¿qué?
- es cierto...
- ¿Qué es cierto?
- beomgyu esta-
Lo calle. – no quiero escuchar más nunca ese nombre.
- pero-
- callate.
Cuando me puse de pie y limpie cualquier lagrima que allá brotado de mis ojos, pude ver como beomgyu bromeaba con yeonjun... era cierto.
Es un idiota, una chispa que lo único que hace es quemar a los demás.
- hey. – llamo yeonjun.
Me di la vuelta para comenzar a caminar, no quería verlo, ni escucharlo, aquel reía casi como si quisiera que lo escuchara, era frustrante.
- ¡en verdad le gustas! ¡Taehyun-ah! – grito soobin.
- ¡maldición, Choi cierra la maldita boca! – dije molesto. - ¡me importa una mierda!
- oh~
Me había hecho una broma, que quería que hiciera, que corriera a sus brazos solo para vivir un feliz para siempre. Primero tendría que rogarme.
...
- por favor taehyun-oppa. – gritaba beom, estaba detrás de mí desde aquel día, hace ya una semana, sonreía cada vez que se sentaba a mi lado, yo rodaba los ojos.
- no me molestes. – le conteste frio.
Hacia caras lindas y eso me hacia sonreír pero no quería verme tan obvio, yo tenía orgullo.
- fue culpa de yeonjun.
- tu yeonjunnie.
El resoplo mientras hacia un puchero sus labios, lo había hecho sufrir toda una semana, tal vez esta era la oportunidad para decirle que también me gusta y que si podríamos ser novios, pero...
Estúpido pero.
Algo me decía que debía esperar un poco más tal vez me gustaba como se esforzaba para que lo perdonara.
Estábamos en la cafetería de la escuela, leía mi libro y tenía mis pies recostados en el asiento, una maldición se me escapo cuando alguien me arrebato el libro de las manos.
- taehyun-oppa. – me llamo. – ya no puedo seguir aguantando-
Lo bese para que se callara.
- oppa. – me regaño cuando lo solté.
- ¿quieres ser mi novio? – pregunte con desinterés, aunque tenía media sonrisa en el rostro sabía que mi inexpresividad le molestaría.
Sus mejillas se pusieron rojas.
- s-sí. – musito tartamudeando. – si q-quiero.
- está bien. – dije encogiéndome de hombros. – ven aquí.
Y pase mis brazos por su cuello con mi libro en una de mis manos, el me miro directo a los ojos con esa inocencia característica de ellos, era tan tierno.
Posee una de mis manos en su nuca y lo atraje hasta mí.
- ¿Qué ibas a decir cuando te interrumpí?
El ladeo la cabeza. – no era nada.
- dime. – presione.
- venia para dejar de molestarte y decir que renunciaría si no me perdonabas. – dijo bajando la cabeza.
Sonreí. – eres lindo.
Acaricie el contorno de su rostro.
- eres como una chispita.
- tu eres gruñon. – ladee la cabeza. – sí que lo eres.
Toque la punta de su nariz con la mía, haciéndolo callar, era molesto tanto ruido pero con él podría aguantar lo que fuera amaba su voz, su forma de ser tan... ¿extrovertida? ¿Electrizante?
Como decía era aquella chispa que encendía el fuego en mí.
- taehyun-oppa... - dijo. - ¿Por qué no me creías?
- si lo hacía, soobin me conto todo.
- pero-
- haces mucho ruido. – gruñí.
El me miro como lo haría un niño pequeño y curioso.
- ¿te molesta?
- esa pregunta, no viene al caso.
El enarco una ceja.
- ¿por qué?
- porque me gustas.
Uní nuestros labios, y su sabor dulce nunca me empalagaría, era tan dulce que podía decir que con él podría sufrir una sobre dosis de azúcar, era como chispas de todos los colores y tan inquieto como una fiesta.
Cuando me separe de aquella chispa.
- me gustas desde hace tiempo... - admitió en voz baja. – creo que en verdad estaba acosándote.
- acosador. – espete antes de apoderarme de sus labios de nuevo.
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Taehyun se había comportado de forma dulce aunque a veces fuera gruñon, era celoso, me impedía estar algunas veces con NingNing y yeonnie, era por que yeonnie era un poco atrevido solía besar mi rostro sin permiso.
- yeonjun, déjame.
Él me tenía abrazado por la espalda, mientras sonreía como un tonto, decía que debía darles celos a taehyun si quería que me diera atención.
- él es muy dulce. – digo. – no tengo por qué darle celos.
Dejo un beso en mi mejilla.
Logre que me soltara.
- deja de hacer eso.
Lo empujo y veo a y taehyun venir junto a soobin aquel le hace un puchero y el riendo lo empuja, tal vez darle celos no es tan malo.
- yeonnie, dijiste que me comprarías un helado.
- ¿lo dije? – inquirió.
- claro.
Lo empuje diciendo que debía comprarlo, entrelace nuestros dedos, dándole empujones con mi otra mano.
Obligo a yeonjun. - muévete, Choi.
- hey. – saluda soobin. – hola, beomnnie.
Siento como me toman de la cintura y como sus labios están en mi nuca. – hola. – susurra.
- hola, taehyun-oppa.
El gruñe. – suelta su mano.
Era un poco celoso, pero no era porque no me tuviera confianza era porque no le gustaba que tocaran lo suyo, me lo había repetido varias veces y yo seguía sonrojándome solo pensarlo, sentia como si mi corazón se fuese a desbocar.
- lo hare.
Solté la mano de yeonjun lo escuche soltar una risa.
- obedeces ordenes, que tierno eres. – soltó burlón.
Gruño. – callate.
Yeonjun sigue su camino por que debe buscar a kai, sé que ellos son muy unidos y que kai lo idolatra más de la cuenta, lo ve como su dios, y muchas veces le pide consejos, como:
¿Cómo puedo hablarle al chico que me gusta?
¿Cómo le digo que me gusta?
¿Y si me rechaza?
Yo solo sonrio por que fue el, quien rechazo a el chico que le gustaba el pánico era un enemigo muy común entre nosotros, nunca había sentido mi corazón latir de tal forma.
- ¿me estas escuchando, chispas?
- chispas. – hago una mueca.
- eres mi chispa.
Me sonrojo.
-deja de decir esas cosas.
- es la verdad.
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No sé cómo terminar una historia y soy mala haciendo este tipo de cosas, no soy buena con los one-shot, perdón si te decepcione, quería mostrar un poco de lo que sería una dulce relación para mí, pero no estoy tan complacida con mi trabajo.
Gracias por leer, votar y comentar.
Esta historia es un regalo para una amiga y gracias por leerme, eres re preciosa, te adoro.
Lo siento, porque no sé si te gustara y no estoy acostumbrada a los romances pero sé que te gusta y es algo que puedo utilizar para aprender también.
✨ tal vez haga algún extra todo tierno de ellos juntos✨
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