Vemos a Izuku Midoriya en la camilla de un hospital, no tenía heridas pero aún así se le diagnostico con agotamiento mental, lo dejaron en una habitación y le pusieron muchas esposas en la camilla ¿la razón? Acaba de matar al símbolo del mal en televisión internacional y demostró tener más de un poder telekinetico, humilló a los héroes de todo el mundo al destruir a alguien de un poder codiciado y temido. La policía tenía la habitación completamente amurallada con un enorme muro repleto de anti-quirks pero esos muros no duraron nada contra Izuku que cuando se despertó y se levantó de la cama, destruyendo las esposas y el muro, simplemente se largó.

En un lugar donde Fuyumi-sensei estaba paseando con Eri para calmarla después de ver como su padre conseguía su venganza, en el paseo la mujer intentaba cumplirle todo tipo de caprichos de la pequeña pero ella no quería nada más que ver a su papá, del cielo apareció un joven de cabello blanco y algo largo, aterrizando en frente de las dos este miró a la mujer y a la niña.

Eri no aguanto más y saltando contra su padre, le abrazo y con sus manitas lo sujetó como si fuera a desaparecer, Izuku por su parte correspondió su abrazo y le olía el cabello a su hija para calmar su mente. Izuku se fue del hospital con el único propósito de ver a su hija y ahora su mente y alma por fin están tranquilas.

Izuku: Hola mi pequeña (dijo con una dulce voz paternal).

Eri no le dijo nada, su abrazo le decía más de lo que harían las palabras, Fuyumi no quería entrometerse al momento familiar por lo que quería irse pero una fuerza la empujó con un poco de fuerza hasta donde estaban ellos y al ver a Izuku, escuchó en su cabeza que ella era una figura materna de Eri.

El abrazo de los dos jóvenes a la niña les hacía parecer una familia, Eri de las emociones y gracias al tener a su papá cerca de ella terminó dormida.

Fuyumi: se quedó dormida, no paraba de pensar en cómo estarías (dijo susurrando y cargando a Eri).

Izuku: Fuyumi, necesito hacer algo, vine para ver a Eri pero antes de volver, tengo que hacer algo muy importante.

Fuyumi vio a Izuku y entendió que era algo sumamente personal, así que solo le dio un pequeño beso y se fue a su casa con Eri en sus brazos.

Izuku de nuevo se le elevó en el aire y empezó  a volar hasta un cementerio.

Izuku: Hola papá, ha pasado tiempo (le empezó a arreglar la tumba, quitandole las hierbas y musgos, limpiando con algo de agua la piedra y dejando unas rosas en la inscripción) Por fin pude vengarte papá, no sabes cuanto tiempo he estado buscando esto, cuando tú moriste mamá estaba destrozada y después se me enteré que el bastardo que te mató lo hizo para obtener a mamá, me gustaría decir que al matar a aquel que te mató y volvió la vida de mamá en un infierno ahora por fin habría concluido.

Izuku se paró y se coloco delante de las tumbas de sus padres.

Izuku: Pero eso es imposible, mientras exista el mal, habrá siempre gente como yo que se convertirá en asesinos, para impedir que familias como la nuestra vuelvan a sufrir la pérdida de un ser querido, me volveré en aquello que proteja a los inocentes y castigue a los culpable, tendré que ser lo que el mundo NO quiere pero SI que necesita.

Ahora con lágrimas en los ojos.

Izuku: Mamá, Papá, ahora ya pueden descansar en paz (cayendo de rodillas) el tiempo que pase con ustedes fue el mejor que pude haber tenido, fui bendecido con los mejores padres de universo y sus recuerdos me mantuvieron firmes en la oscuridad, jamás los olvidaré pero ahora pueden descansar en paz (derramando lágrimas) al fin pueden ir al cielo donde ustedes estarán juntos toda la eternidad, duermas tranquilos y recuerden que siempre los amaré.

Izuku se acostó en el césped y su lágrimas se transformaron y lloros de alegría al saber que ahora su promesa estaba cumplida, sus padres fueron vengados y sus almas alcanzan el paraíso, la felicidad de saber eso hizo que por primera vez en años, durmiera con tranquilidad.

En el pasado.

Izuku: Mira papá, son globos (decía mientras corría por todas partes).

Hizashi: Espérame Izuku, tu padre ya no está tan joven (decía dándose aire por perseguir a su hijo hiperactivo).

Izuku: Ohh, lo siento papá ¿Quieres que regresemos a casa para que descanses? (Lo decía con una cara que reflejaba su inocencia y bondad).

Hizashi al ver el rostro de su hijo, se agachó y le revolvió la cabeza.

Hizashi: Nop, hace mucho que no me divertía así, así que vamos.

En la casa.

Inko: Izuku, baja a comer, te estamos esperando amor (dijo con una dulce voz).

Izuku: Mamá ¿que vamos a comer?.

Inko se le acercó y le dio un enorme plato de Katsudon.

Izuku: Yipi, muchas gracias mamá.

Inko con su mano le pellizco la mejilla.

Inko: Todo para mi pequeño contenido.

De vuelta en el presente.

Izuku: Gracias por ser mis padres.

En el paraíso.

Inko y Hizashi: Gracias por ser nuestro hijo