Los meses fueron pasando lentamente y no tuvieron compasión de nadie, mucho menos de los destinos que debían comenzar a formarse desde ahora.

Podríamos catalogarlo como una carrera contra el tiempo antes de que el marcador llegue a cero o no.

¿Qué pesa más: el amor o la obsesión?

Para Gi-hun, el omega que quería acabar con los juegos desde adentro, sus planes fueron desviados completamente al reencontrarse con su hija y ex esposa aquella noche. Aquello lo dejó completamente devastado.

Quiere y anhela con todas sus fuerzas recuperar su custodia, pero ni con todo el dinero ha podido lograr algo contundente.

Quisiera decirse a sí mismo que poder tener visitas regulares calmaba su corazón, pero no era así.

Además de esto, no podía negar el dolor de su corazón por aquel alfa que conoció ese día y con quien pasó su celo. Por momentos, quería hacerse creer a sí mismo que solo fue un sueño de mal gusto y que sus malestares solo eran estrés por cada vez que se encontraba con su ex esposa, terminando en peleas o golpes.

Para Hwang In-ho, haber dejado de esa manera a su omega fue un tanto doloroso, aunque estaba sin negar la satisfacción que sintió por lo que hizo luego. Eso demostraría ante todos quién era el que mandaba y podía hacerle daño a su “peluche”.

Estos meses para él fueron una tortura entre tener que volver a ver a los organizadores de los juegos y comenzar a seleccionar a sus víctimas. No le estaba quedando nada de tiempo para observar a su “peluche” desde lejos, aunque siempre lo mantenía observado y, ¿por qué no?, vigilado y comparado con algunos recuerdos.

¿Qué pasaría si volvieran a ver unos meses antes de la entrada a los juegos? ¿El amor florecería o ese sentimiento nunca llegó a existir? ¿Solo fue la obsesión de uno y el otro un camino de esperanza para salir del infierno en el que se estaba metiendo a sí mismo?

No está mal preguntarse qué pasa cuando no dejas de pensar en esta persona día y noche, a pesar de que te abandonó. En tu cabeza solo buscas respuestas lógicas a lo que pudo haber pasado esa noche.

O cambiemos un poco la perspectiva: ¿esa obsesión renace mucho más fuerte al haber secuestrado a su “peluche” por esos días, volviendo a demostrar quién es el que manda?

¿Cuánto puede cambiar la visión de una persona que fue secuestrada antes de entrar a esos juegos? Su visión de la felicidad podría cambiar radicalmente, llevándola a acabar con todo esto o, sencillamente, a sumergirse en el dolor de haber perdido algo tan importante.

Un Omega y un alfa destinados a estar juntos se vuelven a encontrar en circunstancias totalmente inesperadas. Si se aman, estarán juntos.

¡Redoble de tambores! La nueva obsesión del líder es su amado peluche, que siempre encuentra la manera de escaparse.

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Y con esto, para mí es un honor presentarles el prólogo de este segundo arco, el cual los mantendrá siempre al filo de las emociones en los capítulos, pues cada uno será más impactante que el anterior.

Aunque parezca que no tenga mucho sentido considerarlo como un acertijo, prácticamente les he revelado toda la trama. Ahora, la cuestión es que ustedes la resuelvan y encuentren el sentido de cómo van a acontecer los hechos.

Veremos aquí amor, sangre, obsesiones, más pasado doméstico y los principios de un embarazo.

¡Espero sus teorías por aquí!

Obviamente, en el primer capítulo de este segundo arco, la narración del líder comenzará en el punto del restaurante y luego avanzará hasta el presente. Esto se debe a que ganó la encuesta sobre quién iniciaría la narración.