Super Buu y Nishi se colocaron a varios metros de distancia, sus miradas fijas en el otro, midiendo sus fuerzas y estrategias. La tensión en el aire era palpable, cada uno consciente de la magnitud del combate que estaba a punto de desatarse. El silencio que reinaba en el campo de batalla era solo una calma antes de la tormenta.

Super Buu: Listo para esto, Nishi?

Nishi: Siempre lo estoy, Buu. Demuéstrame lo que tienes.

Sin perder un segundo más, Super Buu levantó su mano derecha y formó una esfera de ki brillante y ardiente. Con un grito feroz, la lanzó directamente hacia Nishi. La esfera cortó el aire con un silbido agudo, pero Nishi, con una agilidad impresionante, esquivó la esfera de ki con un elegante salto lateral.

Buu: (sonriendo) No está mal, pero esto es solo el comienzo.

Nishi aterrizó suavemente y en el mismo movimiento bloqueó un golpe de Buu que venía a una velocidad asombrosa. Los ojos de Nishi brillaron con determinación mientras respondía con un golpe directo en la cara de Buu. El impacto fue tan fuerte que Buu retrocedió unos pasos, tocándose la mandíbula con sorpresa.

Nishi: Eso fue solo una muestra. ¿Estás seguro de que puedes seguir el ritmo?

Buu: (riéndose) Vamos a ver si puedes mantener esa confianza.

La batalla comenzó en serio. Buu se lanzó hacia adelante con una serie de golpes rápidos y precisos, cada uno cargado con una fracción de su inmenso poder. Nishi los esquivó con habilidad, moviéndose como una sombra alrededor de Buu. Cada esquive estaba calculado al milímetro, demostrando la destreza y experiencia de Nishi.

Buu: ¡Suficiente de juegos! (gritando) ¡Recibe esto!

Buu lanzó una ráfaga de ki desde su boca, una técnica destructiva que convirtió el suelo en un campo de cráteres. Nishi saltó hacia arriba, esquivando el ataque y posicionándose detrás de Buu en un instante.

Nishi: ¡Demasiado lento!

Con un movimiento rápido, Nishi golpeó a Buu en la espalda, enviándolo volando hacia adelante. Buu se recuperó en el aire, girando sobre sí mismo y aterrizando con gracia. Sonrió con malicia, sus ojos destellando con emoción por el combate.

Buu: Bien, parece que tienes algunas habilidades. Pero veamos si puedes con esto.

Buu concentró su energía y creó múltiples clones de sí mismo, cada uno tan poderoso como el original. Los clones se lanzaron hacia Nishi desde todas las direcciones, intentando abrumarlo con su número y fuerza.

Nishi: (concentrado) ¡No me subestimes!

Con una velocidad asombrosa, Nishi comenzó a eliminar a los clones uno por uno. Cada golpe y patada eran precisos, desvaneciendo a los clones en explosiones de energía. Sin embargo, el verdadero Buu aprovechó la distracción y se teletransportó detrás de Nishi, atrapándolo con un poderoso abrazo de oso.

Buu: Te tengo.

Nishi: (con una sonrisa) No tan rápido.

Nishi canalizó su energía y liberó una onda expansiva que empujó a Buu hacia atrás, liberándose de su agarre. Antes de que Buu pudiera reaccionar, Nishi lanzó un poderoso golpe ascendente que lo envió volando hacia el cielo.

Buu: (en el aire) ¡Impresionante! Pero esto aún no ha terminado.

Buu se estabilizó en el aire y comenzó a cargar una enorme esfera de energía sobre su cabeza, una técnica que prometía devastación. Nishi, desde el suelo, miró hacia arriba con determinación.

Nishi: No dejaré que eso me alcance.

Concentrando su ki, Nishi se preparó para su ataque final. La energía brillaba alrededor de su cuerpo, iluminando el campo de batalla. Buu lanzó la esfera de energía hacia abajo con un grito de desafío.

Buu: ¡Recibe esto!

Nishi: ¡Aquí voy!

Nishi se lanzó hacia arriba con toda su velocidad, atravesando el aire como un meteoro. Con un grito de guerra, lanzó su ataque, chocando con la esfera de energía de Buu en una explosión cegadora de luz y poder. El choque de energías resonó en el aire, sacudiendo el terreno a su alrededor.

Cuando la luz se disipó, ambos combatientes aterrizaron en el suelo, respirando pesadamente. Aunque exhaustos, sus ojos brillaban con el deseo de continuar. Sabían que el verdadero combate apenas había comenzado y que solo uno de ellos saldría victorioso.

Buu: (con una sonrisa) Esto es lo que esperaba. ¡Vamos, Nishi!

Nishi: (asintiendo) Hasta el final, Buu.

Ambos guerreros se prepararon para el siguiente asalto, sus energías recargándose y sus espíritus listos para la batalla decisiva que definiría su destino.

Super Buu y Nishi se enfrentaron una vez más, ambos mostrando signos de desgaste, pero sin perder la determinación en sus ojos. La batalla estaba lejos de terminar, y Buu decidió llevar sus poderes a un nuevo nivel, aumentando su ki hasta niveles nunca antes vistos. La tierra temblaba bajo sus pies, y un aura oscura rodeaba su cuerpo.

Buu: (con una sonrisa malévola) ¿Puedes sentir esto, Nishi? ¡Esto es solo una fracción de mi verdadero poder!

Nishi: (ajustando su postura) Si vas a aumentar tu poder, yo también deberé estar a la altura.

Buu lanzó una ráfaga de energía hacia Nishi, quien apenas tuvo tiempo de esquivarla. La explosión resultante dejó un cráter enorme en el suelo. Nishi sabía que tendría que cambiar de táctica si quería tener una oportunidad contra la abrumadora fuerza de Buu.

Nishi: No puedo igualar tu poder bruto, Buu, pero puedo usar tu fuerza en tu contra.

Buu: (riéndose) ¿Y cómo planeas hacer eso?

Nishi se concentró, recordando las enseñanzas de su maestro sobre el uso de la fuerza del oponente. En lugar de enfrentar a Buu de frente, comenzó a moverse con agilidad, esquivando y redirigiendo los ataques de Buu con precisión.

Buu: ¡Deja de esquivar y enfréntame!

Nishi: (sonriendo) ¿Por qué debería hacer eso? Prefiero dejar que te canses.

Buu se lanzó hacia Nishi con un puñetazo cargado de energía. Nishi, con una elegancia casi sobrenatural, se movió a un lado, agarrando el brazo de Buu y usando su propia fuerza para lanzarlo contra el suelo con un impacto tremendo.

Buu: (levantándose rápidamente) ¡Maldita sea!

Nishi no perdió tiempo y continuó su estrategia. Cada vez que Buu atacaba con toda su fuerza, Nishi utilizaba esa misma fuerza para desestabilizarlo y contraatacar con precisión. Los movimientos de Nishi eran fluidos y calculados, convirtiendo cada ataque de Buu en una oportunidad para contraatacar.

Buu: ¡Esto es ridículo! ¡Deja de jugar y pelea de verdad!

Nishi: (serena) No estoy jugando, Buu. Esta es mi forma de luchar. Y parece que está funcionando.

La frustración de Buu aumentaba con cada ataque fallido. Su ira lo hacía cometer errores, y Nishi aprovechaba cada uno de ellos. En un movimiento particularmente hábil, Nishi esquivó un golpe directo de Buu y giró a su alrededor, aplicando una llave que lo dejó inmovilizado por un breve instante.

Nishi: ¿Ves? No necesitas ser el más fuerte para ganar. Solo necesitas ser más inteligente.

Buu rugió de ira, liberándose con una explosión de energía que hizo retroceder a Nishi. Pero Nishi, manteniendo la calma, se preparó para el siguiente asalto, consciente de que la ira de Buu solo lo hacía más vulnerable.

Buu: ¡Basta de juegos! ¡Voy a aplastarte!

Buu lanzó una andanada de ataques con una velocidad vertiginosa, pero Nishi, enfocada y tranquila, continuó esquivando y redirigiendo cada golpe. Con cada movimiento, Buu se desgastaba más, su respiración se volvía más pesada y sus ataques menos precisos.

Nishi: Te lo dije, Buu. Tu fuerza es impresionante, pero no invencible.

En un momento de descuido, Nishi logró conectar un golpe directo en el abdomen de Buu, dejándolo sin aliento. Aprovechando la oportunidad, Nishi aplicó una serie de golpes rápidos, cada uno dirigido a un punto vital, debilitando a Buu aún más.

Buu: (jadeando) No... puede... ser...

Nishi: Es posible, Buu. Solo necesitas entender que la fuerza bruta no es todo. La estrategia y la inteligencia también son armas poderosas.

Buu, debilitado y frustrado, intentó un último ataque desesperado, pero Nishi, con una precisión impecable, lo desvió y lo derribó con un golpe final que lo dejó en el suelo.

Nishi: (mirando a Buu) Has luchado bien, pero al final, tu fuerza fue tu perdición.

Buu: (con una sonrisa débil) Maldita sea... me... ganaste... esta vez...

Nishi respiró hondo, sintiendo la victoria pero también el respeto por su oponente. Sabía que Buu no se rendiría fácilmente, pero por ahora, la batalla había terminado a su favor.

Tras el intenso enfrentamiento, Super Buu se incorporó lentamente, con su cuerpo regenerándose rápidamente gracias a su habilidad de recuperación. Observó a Nishi, quien estaba exhausta y con varias heridas visibles. Buu levantó una mano y una luz curativa envolvió a ambos, restaurando sus energías y sanando sus heridas.

Buu: Buen trabajo, Nishi. Has demostrado un avance increíble en muy poco tiempo.

Nishi sonrió, agradecida por sus palabras. Su respiración aún era pesada, pero la alegría en su rostro era evidente.

Nishi: Gracias, Buu. Significa mucho viniendo de ti.

Buu asintió, evaluando la situación. Luego, con un tono serio, afirmó que debían regresar a la Tierra.

Buu: Es hora de volver a la Tierra. Tenemos cosas que hacer allí.

Nishi, en sus pensamientos, se sintió un poco triste al saber que su tiempo de entrenamiento y lucha había terminado, pero también sintió una sensación de urgencia.

Nishi: (pensando) No puedo esperar más... necesito decirle ahora.

Justo antes de que Buu pudiera aplicar la técnica de teletransportación Kai Kai, Nishi lo detuvo, colocando una mano sobre su brazo.

Nishi: Espera, Buu. Hay algo muy importante que tengo que decirte.

Buu miró a Nishi con curiosidad, esperando a ver qué quería decir.

Buu: (intrigado) ¿Qué es, Nishi?

Nishi sintió una oleada de nerviosismo, buscando las palabras correctas para expresar lo que sentía. Su corazón latía con fuerza y su mente se llenó de dudas, pero sabía que tenía que hacerlo.

Nishi: (nerviosa) Buu... durante todo este tiempo, he sentido algo muy fuerte hacia ti. No solo respeto y admiración, sino algo más profundo.

Buu la miró con sorpresa, sin saber qué esperar.

Nishi: (respirando profundamente) Me siento atraída hacia ti, Buu. Una de las razones por las que quise entrenar tanto es porque quería estar a tu lado, ayudarte en cualquier pelea futura, ser alguien en quien pudieras confiar.

Buu: (sorprendido) Nishi...

Nishi: Necesito saber qué piensas al respecto. ¿Sientes algo por mí?

Buu se quedó en silencio, procesando lo que Nishi le había confesado. Nunca había considerado la posibilidad de que alguien pudiera sentir eso por él. En su mente, se oía la voz de Ramiro, su yo ilusorio.

Ramiro (en la mente de Buu): Recuerda tu conversación con Baby. Ahora tienes la oportunidad, sé abierto.

Buu salió de sus pensamientos y miró a Nishi con una expresión de sinceridad.

Buu: La verdad, Nishi, es que también siento algo por ti. No sabía cómo llamarlo, pero ahora lo entiendo mejor. También me siento atraído hacia ti.

Nishi se quedó en silencio, procesando las palabras de Buu. De pronto, la voz de Ramiro resonó de nuevo en la mente de Buu.

Ramiro (en la mente de Buu): Te toca dar el siguiente paso.

Buu asintió, decidido. Se acercó un poco más a Nishi y, con una leve sonrisa en su rostro, preguntó:

Buu: Nishi, ¿te gustaría ser mi pareja?

Nishi se quedó mirando a Buu, con el corazón acelerado y una sonrisa que iluminaba su rostro. La respuesta que había estado esperando finalmente llegó a sus labios.

Nishi: Sí, Buu. Me encantaría ser tu pareja.

Buu sonrió con genuina alegría, algo que rara vez mostraba. Extendió su mano hacia Nishi y ella la tomó, sellando así el comienzo de una nueva etapa en sus vidas.

Buu: Entonces, vamos a la Tierra. Juntos.

Nishi: (sonriendo) Sí, juntos.

Con un último vistazo a su alrededor, Buu aplicó la técnica Kai Kai, llevándolos de vuelta a la Tierra. En sus corazones, ambos sentían que habían encontrado algo más valioso que cualquier victoria en combate: habían encontrado un vínculo especial y un futuro juntos.

Una vez que Buu y Nishi llegaron a la Tierra, Buu miró a Nishi con una mezcla de nerviosismo y entusiasmo.

Buu: Nishi, ¿te gustaría venir a mi casa?

Nishi sonrió, notando la incertidumbre en la voz de Buu. Asintió con la cabeza.

Nishi: Claro, Buu. Me encantaría.

Caminando juntos, llegaron a la casa de Buu. Nishi observó el lugar, notando la simplicidad y la falta de decoración. No era una casa grande ni lujosa, pero tenía un encanto propio.

Buu: (con una sonrisa tímida) No tengo muchas cosas aquí. Nunca he sido de acumular mucho.

Nishi: (sonriendo) No te preocupes, Buu. Me gusta así.

Buu asintió, aliviado por la respuesta de Nishi. Sin embargo, en su mente, no podía evitar sentirse inseguro.

Buu: (pensando) ¿Qué debería hacer ahora? No estoy acostumbrado a esto...

Nishi, por su parte, también estaba nerviosa. Aunque se sentía cómoda con Buu, no sabía exactamente qué decir o hacer en esta situación.

Nishi: (pensando) ¿Debería decir algo? No quiero que esto se vuelva incómodo...

Rompiendo el silencio, Buu tuvo una idea.

Buu: Nishi, ¿te gustaría que te cocine algo?

Nishi: (sonriendo) Sí, me encantaría. Gracias, Buu.

Buu se dirigió a la cocina, decidido a preparar algo especial. Mientras Nishi se quedaba en la sala, Buu se aseguró de que ella no lo viera y se sentó en el suelo, con una expresión de preocupación.

Buu: (pensando) ¿Qué hago ahora? ¡No sé qué cocinar!

En ese momento, la voz de Ramiro, su yo ilusorio, resonó en su mente.

Ramiro (en la mente de Buu): Primero, cálmate. Respira y exhala.

Buu hizo lo que la voz le decía, respirando profundamente y exhalando lentamente. Poco a poco, se sintió más tranquilo.

Ramiro (en la mente de Buu): Ahora, cocina algo rico. ¿Qué te parece un plato de milanesa y papas fritas? Y recuerda, sé tú mismo. Habla con ella, charlen de lo que sea.

Buu: (pensando) Gracias, Ramiro. Haré eso.

Buu se levantó con renovado entusiasmo y comenzó a cocinar un plato de milanesa con papas fritas. Mientras cocinaba, Nishi se acercó a la cocina, observando a Buu con una sonrisa.

Nishi: ¿Necesitas ayuda con algo?

Buu: (sonriendo) No, todo está bajo control. Pero me encantaría que te quedaras aquí y charláramos.

Nishi: (sentándose en una silla cercana) Claro, ¿de qué quieres hablar?

Buu: (pensando) Solo sé tú mismo...

Buu: (sonriendo) ¿Cómo te sientes después de todo lo que hemos pasado? Ha sido una experiencia intensa.

Nishi: (pensativa) Sí, ha sido increíble. He aprendido mucho y me siento más fuerte. Pero lo más importante es que siento que he encontrado algo valioso en todo esto.

Buu: (curioso) ¿A qué te refieres?

Nishi: (mirando a Buu a los ojos) A ti, Buu. A nuestra conexión. Ha sido lo más valioso para mí.

Buu se sonrojó, sintiendo una calidez en su pecho.

Buu: Yo también siento lo mismo, Nishi. Ha sido un camino difícil, pero estoy feliz de haberlo recorrido contigo.

La conversación continuó mientras Buu cocinaba, y pronto el aroma delicioso de la milanesa y las papas fritas llenó la cocina.

Buu: (sirviendo los platos) Aquí tienes, Nishi. Espero que te guste.

Nishi: (tomando el plato) Huele delicioso, Buu. ¡Gracias!

Se sentaron a la mesa y comenzaron a comer, disfrutando de la comida y de la compañía mutua.

Nishi: (probando un bocado) ¡Esto está increíble! No sabía que podías cocinar tan bien.

Buu: (sonriendo) Me alegra que te guste. Es una de las pocas cosas que sé hacer bien en la cocina.

La cena continuó con risas y conversación. Ambos se sentían más relajados y conectados que nunca. El tiempo pasó rápidamente, y cuando terminaron de comer, se quedaron sentados en la mesa, disfrutando del momento.

Buu: (mirando a Nishi) Gracias por estar aquí, Nishi. Significa mucho para mí.

Nishi: (sonriendo) Gracias a ti, Buu. Estoy feliz de estar aquí contigo.

El silencio que siguió no fue incómodo, sino lleno de comprensión y afecto. Habían encontrado un lugar seguro el uno en el otro, y sabían que, sin importar lo que el futuro les deparara, enfrentarían juntos cualquier desafío.

espero que les haya gustado

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