Un rostro hermoso
“Soy hetero, pero el rostro de Seokjin es hermoso.”
Ocasionalmente me perdía en el brillo de sus bellos ojos, no importaba que alguna veces estuvieran llorosos por su despertar o emociones, no importaba que en ocasiones contaran con ojeras o estorbosas lagañas, no importaba que llevará o no maquillaje, tampoco si sus pestañas estaban arqueadas, o que a veces se encontraras inflamados o decaídos por el sueño, yo podía pasar horas y horas viéndolos hasta que inevitablemente nuestras miradas se cruzaban, y me encontraba obligado a observar hacia otro lado por los nervios de verme atrapado.
Era ridículo, pero no solo sus ojos le quitaban la atención al resto de mi vida, cuando estaba a su lado, también su nariz, sus mejillas, el cabello que invadía ligero su frente, y sus labios, ese detalle que me hacía preguntar si era siquiera natural y hasta real que fueran tan llamativos.
Se lo pregunté muchas veces, y realmente ofendido negaba y reafirmaba que el poseía una belleza natural, que sus labios genuinamente hermoso era genéticos al igual que cada parte de su rostro, hasta contaba egocéntrico, como solían pelirle fotografías creyendo que era famoso antes de siquiera pertener a nuestro grupo.
Pense demasiado en ello, días enteros perdidos por los recuerdos de su perfecto rostro. No podía intentar siquiera cerrar los ojos sin ver pasar su sonrisa alegre y sus naturales labios pomposos por mi mente, hasta cuando podía verlo dormir por suma casualidad, me detenía a admirar a el rostro mundialmente hermoso como si se tratase de un museo, donde él era la mayor obra en exposición, y yo era un simple espectador de arte.
Un día fui tonto, descuidado, atrevido, y me acerque demasiado a él solo para verlo mejor, sin temer siquiera un poco a que despertara, temor que debí tener, porque lo inevitable ocurrió, y no estoy seguro de si sintió mi respiración o mi presencia, pero despertó notoriamente aterrado por lo cercano que estaba de él.
—¡Yoongi! ¡¿Qué haces?!— Mi nombre escapando por sus lindos labios me sorprendieron, y los nervios me obligaron a reaccionar con cualquier tonta escusa.
—Lo siento... Creí ver un insecto en tu cabello, no quise despertarte...— Él tembló al escucharme y desesperado peinó su cabello con su mano en busca te tirar al intrusivo insecto que no existía, provocándome inevitablemente una sonrisa por la tonta escena —Tranquilo, no te muevas, yo voy a ahuyentarlo...
Y en nuestra plena confianza, él asintió, y encontrándome en la orrila de la cama, subí a su lado, me puse de rodillas mientras el se encontraba sentado, y acerqué mis manos a su cabello. Sentía su cuerpo a solo centímetros del mio, y podía percibir el calor de su agitada y temerosa respiración.
No buscaba nada, solo fingí por varios segundos, y con esa cercanía, me aproveché de la situación y disfrute del aroma de su cabello una vez más, y también del privilegio de ver su famoso rostro de cerca. Se sentía bien, era cálido estar a su lado apreciando esos detalles en él, hasta me perdí atento en sus gestos, a tal punto que, cuando levanto la mirada del todo y me preguntó si ya había terminado, me asuste, y por la sorpresa, mi propio cuerpo se empujó hasta caer de espaldas al duro suelo.
Ese día aprendí que el karma existe, y que no debía acercarme demasiado a Seokjin, porque comenzaba apreciar de forma extraña y excesiva, su aclamada belleza.
💐
Otro capítulo más wuuu, el siguiente va a tratar de la icónica risa de Seokjin, asi que esperenlo, hasta mañana.
Gracias por leer.❤
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro