El combate entre Jango Fett y (???) había llegado a un punto crítico. Ambos luchadores estaban al límite de su resistencia, cada respiración pesada y cada movimiento una prueba de su determinación inquebrantable. Ninguno quería ceder, pero la fatiga comenzaba a hacer mella.

(???): No podemos rendirnos ahora, no después de todo esto.

Jango Fett: Eres duro de roer, cyborg. Pero no soy de los que se rinden fácilmente.

(???) ideó un plan rápidamente, sabiendo que necesitaba terminar el combate antes de que sus fuerzas se agotaran por completo. Decidido, se lanzó hacia Jango, quien respondió con una ráfaga de disparos. Con una habilidad asombrosa, (???) reflejó varios de los disparos con su sable de luz y esquivó otros con gran dificultad.

(???): Tengo que acercarme antes de que use su jetpack otra vez.

A medida que se acercaba, Jango activó su jetpack para ganar terreno elevado. Pero (???), en un movimiento audaz y preciso, logró dar un corte limpio en el jetpack de Jango, averiándolo en medio vuelo y haciendo que el cazarrecompensas perdiera su ventaja.

Jango Fett: ¡Maldita sea!

Antes de que Jango pudiera reaccionar, (???) se abalanzó sobre él, retirando el casco de su cabeza y apuntando el sable de luz al cuello de Jango.

(???): He ganado, Fett.

Jango asintió con la cabeza en señal de derrota, cayendo de rodillas y suspirando de agotamiento.

Jango Fett: Lo admito... has ganado.

(???) también cayó al suelo de espaldas, respirando con dificultad y suspirando de agotamiento. Ambos quedaron tendidos en el suelo, completamente exhaustos, sin moverse durante un largo tiempo mientras intentaban recuperar el aliento.

El silencio entre ellos era elocuente, una pausa en medio de la batalla que hablaba de respeto mutuo y agotamiento extremo. Después de un rato largo, cuando ambos se sintieron lo suficientemente recuperados, se levantaron lentamente.

(???): Eso fue... increíblemente intenso.

Jango Fett: No esperaba menos de alguien como tú.

Se dieron la mano en señal de respeto, ambos reconociendo la habilidad y el esfuerzo del otro.

(???): Jango, una vez que termine mi misión... ¿te gustaría ir a beber algo?

Jango Fett: Tendré que ver mi agenda, pero seguramente estaré disponible.

Ambos se sonrieron con cansancio pero con una nueva comprensión mutua. Jango recogió su casco y se lo colocó de nuevo, preparándose para regresar a su nave. Mientras tanto, (???) hizo lo mismo, dirigiéndose a su nave con el sable de luz que había encontrado en la cueva junto al holocron que había guardado.

Jango Fett: Nos veremos pronto, cyborg.

(???): Hasta entonces, Fett.

Jango, agotado y cansado, se dirigió a su nave y despegó, mientras (???) hacía lo mismo. Una vez a bordo, (???) encendió los motores y despegó, saliendo de la atmósfera de Korriban y dirigiéndose hacia el espacio. Fijó el destino a Geonosis y entró en la velocidad de la luz, encaminándose al planeta.

Durante el viaje, (???) reflexionaba sobre el combate. Había sido una prueba intensa, una demostración de habilidades y resistencia que había puesto a prueba todos sus límites.

(???): Jango Fett... realmente eres uno de los mejores. Pero este no es el final, hay mucho más por hacer.

La nave surcaba el espacio a gran velocidad, llevando a (???) hacia su próximo destino. Había ganado una batalla importante, pero la guerra aún estaba lejos de terminar. Con la determinación renovada y un nuevo respeto por su adversario, se preparó mentalmente para los desafíos que aún le aguardaban.

Finalmente, el viaje a través del hiperespacio terminó y la nave salió a la órbita de Geonosis. (???) sabía que aún quedaba mucho por hacer, pero por ahora, necesitaba recuperarse y planificar su próximo movimiento.

(???): Es hora de enfrentar el siguiente desafío. Geonosis, allá voy.

Con esa resolución, (???) descendió hacia la superficie del planeta, listo para lo que vendría a continuación.

En la soledad de su nave, mientras se dirigía a Geonosis, (???) no podía evitar reflexionar sobre los recientes eventos. El combate con Jango Fett había sido una prueba dura y reveladora, y conocer a Xoxxan y obtener su holocrón era un punto crucial en su camino.

(???): Jango Fett... realmente eres un oponente formidable. No pensé que encontraría a alguien tan resistente.

El cansancio aún pesaba sobre su cuerpo metálico. Cada movimiento recordaba la intensidad del enfrentamiento, y cada respiración, aunque artificial, era un recordatorio de sus límites.

(???): No puedo seguir así. Si quiero enfrentarme a Dooku y Sidious, necesito mejorar mis habilidades y mi resistencia.

Se acomodó en el asiento de la nave y pensó en Xoxxan. La imagen de la antigua Sith aún estaba clara en su mente. La forma en que había aparecido en el holocrón, con su rostro pálido, cabello negro y esas marcas distintivas en su cara, era algo que nunca olvidaría.

(???): Xoxxan... tus enseñanzas podrían ser la clave. Poseer tu holocrón es un privilegio, pero también una responsabilidad.

Recordaba sus palabras, sus enseñanzas sobre la filosofía Sith. A pesar de sus dudas iniciales, había sentido una extraña conexión con ella.

Xoxxan (en su memoria): La Fuerza no es solo poder. Es comprensión, es dominio. Debes aprender a sentirla, a controlarla. Solo entonces serás verdaderamente poderoso.

(???): Necesito aprender más. El sable de luz que encontré, espero que sea suficiente para impresionar a Dooku y Sidious. Pero no puedo confiar solo en eso.

El sable de luz que había encontrado en la cueva era una herramienta poderosa, pero no era solo el arma lo que importaba. Necesitaba el conocimiento, la habilidad para usarlo con maestría. Sabía que enfrentarse a Dooku y Sidious requeriría más que fuerza bruta.

(???): Si quiero sobrevivir y prosperar, debo dominar la Fuerza y mejorar mi resistencia. El combate con Jango Fett me mostró mis debilidades, pero también mi potencial.

Se permitió un momento de descanso, cerrando los ojos y recordando el duelo. La forma en que Jango había usado su jetpack, cómo había aprovechado cada ventaja táctica... Todo era una lección que debía aprender.

(???): Jango Fett, tu habilidad me ha enseñado mucho. Pero no puedo permitirme ser vencido de nuevo. Debo ser más fuerte, más rápido, más resistente.

Sabía que el camino por delante no sería fácil. Las enseñanzas de Xoxxan serían cruciales, pero también necesitaba tiempo para entrenar, para adaptarse a sus nuevas habilidades y mejorar su resistencia física.

(???): Xoxxan, confiaré en tus enseñanzas. Y también en mi propia determinación. No puedo fallar.

El viaje a Geonosis continuaba, y (???) se preparaba mentalmente para lo que vendría. Tendría que enfrentarse a Dooku y Sidious, mostrarles que era digno de su confianza y de su lugar en sus planes.

(???): El sable de luz es solo el comienzo. Necesito demostrar que soy más que un simple cyborg, que soy un guerrero de verdad.

Con esa resolución, cerró los ojos y se concentró en la Fuerza, tratando de sentirla, de comprenderla más profundamente. Las palabras de Xoxxan resonaban en su mente, guiándolo en su meditación.

Xoxxan (en su memoria): La Fuerza es tu aliada, si sabes cómo usarla. Deja que te guíe, deja que te fortalezca.

(???): Lo haré, maestra. Lo haré.

El viaje continuaba, y (???) sabía que estaba en el camino correcto. La batalla con Jango Fett había sido solo el comienzo, una prueba de lo que estaba por venir. Pero con la guía de Xoxxan y su propia determinación, estaba seguro de que podía enfrentar cualquier desafío.

(???): Geonosis... allá voy. Y estaré listo para lo que venga.

Con una última mirada hacia el holocrón y el sable de luz, se preparó para el próximo capítulo de su viaje. La galaxia aún tenía mucho que enseñarle, y él estaba listo para aprender y conquistar.

Jango fett POV

Jango Fett estaba sentado en la cabina de su nave, contemplando el espacio exterior mientras se alejaba de Korriban. El combate con Grievous había sido intenso, mucho más de lo que había anticipado. A medida que revisaba mentalmente cada movimiento, cada estrategia, no podía evitar reflexionar sobre lo que había aprendido de su oponente.

Jango Fett: Ese cyborg... Grievous. Tiene un potencial increíble, pero aún le falta experiencia.

El cazarrecompensas ajustó los controles de la nave, recordando los momentos críticos de la batalla. La forma en que Grievous había esquivado sus disparos, cómo había reflejado algunos con su sable de luz, mostraba una habilidad formidable, pero también una falta de pulido que solo el tiempo y la experiencia podían ofrecer.

Jango Fett: En una escala de 1 a 3... diría que estoy en un 2.5. Grievous, quizás un 2.6. Casi iguales en poder, pero su falta de experiencia le juega en contra.

Mientras la nave surcaba el espacio, Jango se permitió un momento de reflexión más profunda. Había visto muchos oponentes en su tiempo, pero pocos lo habían desafiado como lo había hecho Grievous. Era una sensación agridulce, saber que había estado tan cerca de la derrota, pero también una lección valiosa.

Jango Fett: Si ese cyborg aprende a controlar mejor sus habilidades, será casi invencible.

Se levantó de su asiento y se dirigió a la pequeña área de descanso de la nave, dejando que su mente volviera al momento en que Grievous había desactivado su jetpack en medio vuelo. Había sido un movimiento brillante, pero también uno que revelaba la desesperación de Grievous por terminar el combate rápidamente.

Jango Fett: (hablando para sí mismo) Un movimiento arriesgado. Pero efectivo. No puedo culparlo por eso.

Mientras tomaba un trago de agua, pensó en la propuesta que Grievous le había hecho después del combate. Salir a conocerse mejor, tomar una bebida juntos. Era una oferta sorprendente, considerando las circunstancias, pero no le molestaba la idea.

Jango Fett: Quizás no sea una mala idea. Conocer a alguien como Grievous podría ser... interesante.

Se permitió una sonrisa irónica, imaginando las conversaciones que podrían tener. Ambos eran guerreros, ambos habían visto y hecho cosas que pocos podrían comprender. Había un respeto mutuo que se había forjado en el calor de la batalla, y eso era algo que Jango valoraba profundamente.

Jango Fett: Sí, tal vez podría aprender algo de él. Y él de mí.

Volvió a la cabina y revisó los sistemas de la nave, asegurándose de que todo estuviera en orden mientras seguía reflexionando sobre la batalla. Cada detalle, cada fallo y cada éxito eran importantes para él. Sabía que en su línea de trabajo, la autocomplacencia podía ser mortal.

Jango Fett: Tengo que estar listo para lo que venga. Si Grievous y yo nos volvemos a encontrar, quiero estar preparado.

Recordó la expresión en el rostro de Grievous cuando había desactivado el jetpack. No era solo un guerrero, era alguien buscando desesperadamente su lugar en la galaxia, igual que él.

Jango Fett: Quizás tenemos más en común de lo que pensé.

Mirando una vez más hacia las estrellas, Jango se permitió un momento de tranquilidad. Había ganado respeto por Grievous, y aunque el combate había sido agotador, también había sido un recordatorio de por qué hacía lo que hacía.

Jango Fett: (hablando a las estrellas) Nos volveremos a ver, Grievous. Y tal vez, la próxima vez, sea en mejores circunstancias.

Con esa resolución, ajustó el curso de su nave hacia su próximo destino, sabiendo que aún había mucho por hacer. Pero esta vez, tenía algo nuevo que considerar: la posibilidad de una alianza, o al menos una comprensión mutua, con el cyborg que había desafiado sus habilidades y le había mostrado sus propias limitaciones.

Jango Fett: Hasta entonces, seguiré mejorando. No puedo permitirme otra sorpresa como esa.

Con una última mirada a las estrellas, Jango se preparó para lo que venía, sabiendo que el futuro aún tenía muchas batallas por delante.

Volviendo con grievous

Grievous aterrizó su nave en la superficie desolada de Geonosis, el familiar paisaje polvoriento y rocoso extendiéndose ante él. Al salir de la nave, fue recibido por un grupo de geonosinos que, con una mezcla de reverencia y precaución, lo guiaron hacia las catacumbas subterráneas. Grievous seguía a sus guías a través de los oscuros túneles, su mente aún ocupada con los eventos recientes y lo que estaba a punto de informar.

Al llegar a una habitación amplia y poco iluminada, Grievous se encontró frente a los hologramas imponentes de Darth Sidious y el Conde Dooku. Haciendo una reverencia respetuosa, se preparó para dar su informe.

Sidious: Grievous, ¿has encontrado algo de interés en tu búsqueda?

Grievous asintió y, sin decir una palabra, levantó un antiguo sable de luz, mostrándolo con un gesto firme. El holograma de Sidious se inclinó hacia adelante, sus ojos brillando con interés.

Sidious: Excelente. Un artefacto de gran valor. Dime, ¿dónde lo encontraste?

Grievous: Fui a Moraband, Maestro. Creí que allí podría encontrar algo de valor para nuestros planes.

Darth Sidious asintió lentamente, una sonrisa de aprobación formándose en sus labios.

Sidious: Has hecho bien, Grievous. Puedes quedarte con ese sable de luz por ahora. Además, tienes mi permiso para viajar a donde necesites. No estás obligado a permanecer en Geonosis todo el tiempo.

Grievous hizo una reverencia profunda, agradecido por la confianza y libertad otorgadas.

Grievous: Gracias, Maestro.

El Conde Dooku, observando con interés, intervino.

Dooku: Grievous, ¿tuviste algún contratiempo en tu misión?

Grievous recordó la intensa batalla con Jango Fett y decidió mencionarlo.

Grievous: Me topé con un cazarrecompensas, Jango Fett. Fue un combate difícil, pero al final, nos respetamos mutuamente. Incluso le extendí una invitación para tomar algo en el futuro.

Dooku arqueó una ceja, sorprendido por la mención de Jango Fett y la inesperada oferta de Grievous.

Dooku: Interesante. No esperaba que surgiera una amistad entre ustedes.

Sidious dejó escapar una risa suave, aunque inquietante.

Sidious: Las alianzas inesperadas pueden ser muy útiles, Grievous. Mantén tus opciones abiertas. Estamos en contacto.

Con esas palabras, los hologramas de Sidious y Dooku se desvanecieron, dejando a Grievous solo en la oscuridad de la catacumba. Se quedó pensativo, reflexionando sobre los eventos recientes y lo que significaban para su futuro.

Grievous: (para sí mismo) La libertad para moverme y actuar es un regalo valioso. Debo aprovecharlo al máximo.

Mientras guardaba el sable de luz y el holocrón en su capa, Grievous no podía evitar pensar en su encuentro con Jango Fett. Aunque habían sido adversarios, había sentido un respeto genuino hacia el cazarrecompensas, algo raro en su existencia llena de conflictos y traiciones.

Grievous: (para sí mismo) Jango Fett... Puede que ese encuentro sea más significativo de lo que imaginé.

Caminó lentamente hacia la salida de la catacumba, sus pasos resonando en los pasillos vacíos. Sabía que la galaxia estaba llena de desafíos y que necesitaba fortalecerse, tanto en habilidad como en estrategia. Las enseñanzas de Xoxxan y su recién adquirida libertad serían cruciales para su desarrollo.

Grievous: (para sí mismo) Debo ser más fuerte, más astuto. La batalla con Jango fue solo el comienzo. Hay mucho que aprender y muchos enemigos que enfrentar.

Emergió de las catacumbas hacia la luz tenue de Geonosis, sus pensamientos centrados en el futuro. Tenía un nuevo propósito, nuevas habilidades que dominar, y la bendición de sus maestros para continuar su búsqueda de poder. Pero sobre todo, tenía la certeza de que cada batalla, cada encuentro, lo acercaría más a su objetivo final.

Grievous: (para sí mismo) Que comience el verdadero desafío. Estoy listo.

Con esa resolución, se dirigió de regreso a su nave, listo para enfrentar lo que fuera que la galaxia le arrojara a continuación. Sabía que el camino sería arduo, pero también sabía que tenía el potencial y la determinación para prevalecer.

Espero que les haya gustado

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