29
La mañana era nublada y fría, parecía que pronto un diluvio se iba a desatar, Taehyung caminaba vestido con unos jeans negros, camiseta negra con la palabra Celine en el pecho y un abrigo de lana negra que lo cubría hasta la rodilla, traía consigo una mochila con algunas cosas y caminaba serio alejándose de sus amigos Tristan y JK quienes tenían la misma expresión que el mencionado, subió al vehículo junto a su padre mientras en una camioneta también negra, en esta ocasión el señor llevaba un chófer porque quería dedicar su tiempo a su hijo junto a él.
─ No quiero estar ahí, pero no tengo opción, no quiero ver sufrir a Mochi, ¿entiendes cómo se siente eso?, ¿acaso soy egoísta por no querer verlo en persona? ─ preguntó aquel muchacho que no podía dejar pensar en la manera tan cruel que la vida les había cambiado.
─ No eres egoísta, solo es que tu corazón es puro y tu cerebro se resiste a verlo sufrir, tu corazón desea una cosa pero tu cerebro quiere otra para protegerte y tienes razón, no tienes opción porque cuando elegiste a un mejor amigo aceptaste el compromiso de apoyarlo siempre ─ aconsejó el padre.
Taehyung soltó un suspiro cargado de emociones, saber que aquella chica que un día fue amable con él, la misma con la que en ocasiones discutía ahora estaba agonizando le dolía pero también le dolía pensar en que su mejor amigo la amaba y la estaba perdiendo, no sabía cómo manejar aquello porque era joven e inexperto pero al parecer su padre estaría con él en aquel proceso, a ratos su garganta se cerraba pero se negaba a llorar frente a su papá, sabía que al llegar iba ser inevitable porque había hablado con Jimin y sabía cómo estaba.
En la mansión de los Ho, Jimin permanecía sentado junto a Ailin, quién estaba con su pijama larga, un suéter rosa que Jimin le había regalado en su último cumpleaños y ahora lo estrenaba, la joven había pedido estar en la terraza con él, quería recordar los días en la azotea y este la había cargado con autorización de sus padres hasta aquel lugar, estaban haciendo todo lo que la muchacha pedía porque había sido el consejo de los médicos cuando la dejaron ir, ella estaba viviendo sus últimos días y debían ser felices y memorables.
─ ¿Recuerdas nuestra primera pelea? ─ dijo Ailin con voz débil casi al oído de Jimin mientras la abrazaba para mantenerla caliente.
─ No, pero se y estoy seguro que fue por una tontería, porque jamás podría enojarme contigo de verdad ─respondió Jimin siendo dulce con su tono de voz y franco en sus palabras.
─ Fue por nuestras calificaciones, obtuvimos el mismo resultado y te acuse de copiarme ─ informó la joven, soltando una sonrisa frágil después de meditar lo tonto que había sido el incidente.
─ Es verdad, nos dijimos cosas muy feas, aunque odiaba admitir que eras linda, la más linda del colegio según mi punto de vista y hasta hoy lo sigo pensando ─ esta vez quién sonrió fue Jimin mientras acariciaba la mano de su novia.
─ También creía que eras lindo y aunque no lo creas, ese día decidí que quería pasar el resto de mi vida contigo, sabía que no solo eras hermoso físicamente, también dentro de tu corazón y no me equivoque, ¿pero sabes que es lo mejor? ─ habló dejando la pregunta al aire para que su amado la respondiera, sabía que él no iba a acertar porque no podía comprender que se estaba despidiendo.
─ No, no imagino que podría ser, hay tantas cosas lindas que nos han pasado que no sé qué podría ser... ─ respondió Jimin apretando más sus manos, sinceramente no quería escucharlo, no quería avanzar.
─ Jimin dame un beso... ─ pidió siendo correspondida al instante, se quedaron viendo por un momento y entonces ella habló ─ que lo hice, viví los días que me quedaban junto a ti, amándote y sintiéndome amada... ─ dijo finalmente y estando así le sonrió tiernamente para luego cerrar los ojos, su cuerpo perdió toda la poca fuerza que aún tenía.
Jimin lo supo, su gran amor se había ido, la abrazó fuerte contra su pecho entre amargas lágrimas que marcaban su rostro, pero su llanto era tal, que los señores Ho lograron escucharlo y fueron a ver para confirmar lo que su corazón ya les decía, entonces y como sí el cielo lo supiera, la lluvia comenzó a caer, solo segundos después que Taehyung y su padre llegarán a la casa, todo era un caos, la señora Ho estaba fuera de sí viendo cómo su hija era tendida en su cama para esperar a las personas de la funeraria y médicos que confirmarían el fallecimiento.
Taehyung subió rápidamente para buscar a Jimin, lo encontró ahogándose en la pena solo en una esquina de la habitación sin separar la mirada de Ailin, fue hasta que su amigo llegó que reaccionó, entre lágrimas le decía que se había ido, el amor de su vida se había ido y se sentía destrozado, Taehyung lo sacó de la habitación porque debía dejar trabajar a las personas encargadas, los preparativos empezaron y el señor Park estaba ayudando con aquello, dejó que los amigos estuvieran juntos porque al final eran dolientes ambos, eran amigos de la joven y también sufrían.
La lluvia arreció como si estuviera sincronizada con la tristeza del todos, la noticia llegó al colegio y el salón sacó su uniforme de gala para ser llevados a la casa de los Ho, donde sería la reunión, todos estaban listos para despedir a la gran amiga y estudiante, por más diferencias que tuvieran en algún momento, ahora todos sufrían porque pese a lo que fuera, no eran malos, nunca le habrían deseado aquel mal, al contrario no querían vivir eso con nadie más, no podían ni creer que estaba pasando en la vida real.
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