"Familias Muggles asesinadas"

"Peter Pettigrew, mortífago que vendio a los Potter recibe el beso del dementor"

"Hogwarts...¿un lugar seguro?"

"Mortífagos atacan y destruyen pueblos muggles"

"Quien-Tu-Sabes, toma más poder"

Los titulares del periodico El Profeta eran más desalentadores. Cada día que pasaba al menos 8 familias muggles fallecían a manos de los mortífagos, quienes realmente no les importaba si esta persona tenía alguna relación con la magia, simplemente creían que cualquier sangre sucia debía morir.

El tiempo paso demasiado rapido, Junio terminaba Hogwarts con una sensación de incertidumbre y extasis para sus alumnos, en especial para los que el día de mañana se graduarian del colegio.

Iolanthe y los demás ya tenían todo listo para su plan de escape, donde Theodore Nott y Pandora Lovegood se les habían unido. El primero por Regulus, obviamente, y la segunda por ser lo suficientemente inteligente como para no inmiscuirse en la guerra. Tenían todo listo, el lugar, como se mantendrían, la rutina que seguirían y la manera de mantenerse aún en contacto con sus personas queridas con la suficiente protección como para que no pudieran rastrearlos.

Todo estaba perfecto, solo tenían un problema.

Ni Severus, ni Iolanthe, les habían dicho a Lily Evans y Sirius Black que no lucharian en la guerra.

Para todos era obvio que sus almas gemelas pelearían contra Lord Voldemort y sus mortífagos para tener un futuro mejor. Era algo valiente...y suicida, pero nada sorprendente considerando que eran unos Gryffindor hechos y derechos.

Ambos amigos admitían que fueron irresponsables al no decirles que no pelearían en dicha guerra y que huirían juntos, pero, especialmente Severus, era capaz de dejar todos sus planes con tal de proteger a su alma gemela.

Y los Slytherin no podían permitirlo. Ellos cuatro, independientemente de Theodore y Pandora, habían jurado permanecer juntos y sobrevivir pasara lo que pasara y eso es lo que harían aunque fuera lo último que hicieran.

Severus y Iolanthe caminaron por las largas escaleras de Hogwarts hasta llegar al retrato de la dama gorda en la Torre de Gryffindor, donde un grupo de jovenes de esa misma casa se encontraba platicando fuera.

—¿Podrían decirle a mi hermano, sus amigos y Lily que por favor salgan?—pidió Iolanthe con una sonrisa amable.

—¡Claro, Lanthy!—dijeron los chicos.

La popularidad de los cuatro Slytherin ascendio como la espuma entre los magos de luz desde lo sucedido en el ataque de Hogwarts. Regulus y Snape por proteger a la mayoria de los alumnos menores contra mortífagos mayores y experimentados, Narcisa por vencer a su hermana Bellatrix y Iolanthe por, literalmente, vencer en batalla y perseguir a Lord Voldemort para matarlo.

El retrato se abrio y por el salieron James Potter, Sirius Black, Remus Lupin y Lily Evans. Esta ultima sonrio emocionada al ver a Severus y corrio a abrazarlo. Los tres chicos sonrieron a Iolanthe. Ambos Slytherin sonrieron levemente, demostrando su incomodidad y haciendo que los Gryffindor los miraran con seriedad.

—¿Ocurre algo, Sev?—pregunto Lily.

—¿Fresita?—Sirius miró a Iolanthe preocupado.

—Tenemos que hablar.—dijeron ambos Slytherin.

—¿Qué ocurre? ¿Es por la graduación de mañana?—pregunto James.

—No.—dijo Iolanthe.—Bueno si, es que...

—Nos iremos mañana despues de la graduación.—soltó Severus.

—¿Cómo que se iran?—pregunto Sirius con el ceño fruncido.

—Tienes el mismo tacto que un puercoespín.—masculló Iolanthe mirandolo con el ceño fruncido y regresando la vista a los Gryffindor.—Nosotros no participaremos en la guerra, hemos venido a decirselos. Nos iremos lejos.

—¿Donde?—pregunto Remus.

—Secreto.—dijo Severus.

—¿Cuanto tiempo estaran ahí?—pregunto Lily.

—Hasta que acabe la guerra.—dijo Iolanthe.

—¿Y el colegio? Tu aún no acabas.—dijo James.

—Regulus y yo lo dejaremos.—dijo Iolanthe.

—¡¿No se quedaran a luchar?!—exclamaron Sirius y James, incredulos.

—Se que no lo pueden entender y en realidad no espero que lo hagan.—dijo Iolanthe.—no vine a pedir permiso, solo estoy informandoles. Nosotros estamos en mayor riesgo que ustedes, somos sangre puras de la casa Slytherin que se fueron en contra de Voldemort.

—¡No digas su nombre!—dijo Lily asustada.

—¡Voldemort!—repitió Iolanthe.—Literalmente lo maldije y perseguí por todo el colegio para matarlo. No es momento para temerle a su nombre.—espeto cruzandose de brazos.

—Suena egoísta lo que hacemos.—dijo Severus viendo a Lily.—pero no pensamos cambiar de opinion. Si alguna vez nos necesitan, envienos una carta, pero no vamos a quedarnos en el ojo publico. Podremos vernos cautelosamente cada cierto tiempo.

—Pandora y Narcisa vienen con nosotros.—dijo Iolanthe al ver las miradas de James y Remus.— nos protegeremos entre nosotros no tienen de que preocuparse. Por favor, no pedimos que comprendan u acepten nuestras decisiones, pero si que las respeten.

Todos los Gryffindor asintieron. James se despidio de su hermana con un beso y se fue junto a Remus, quien le dedico una pequeña sonrisa. Lily se quedo con Severus y Sirius llevo a Iolanthe hasta un pasillo seguro.

—Pensé que estabamos avanzando en nosotros.—expresó en voz baja.

—Y lo hacemos.—dijo Iolanthe con una sonrisa triste.— ¿novios por correo?—bromeo jalandolo juguetonamente de la manga de su tunica.

—No es gracioso, fresita.—la jalo haciia el, abrazandola.—yo quiero estar contigo y si te quedabas en Hogwarts podría visitarte en los días de salida a Hogsmeade y estaría mas seguro porque estarías aquí, protegida por Dumbledore.

—No necesito a Dumbledore.—replico Iolanthe—te recuerdo que yo solita me defiendo. Pero igual hemos hablado con el, si algo sumamente importante necesita, siempre puede recurrir a nosotros.

—Quiero que tu y Reg se cuiden, ¿de acuerdo?—acuno el rostro de la chica viendola con seriedad.— si algo sale mal, protejanse mutuamente.

—Nada saldra mal, lo prometo.—beso su mejilla.—es mejor que vuelvas a tu sala común. Mañana es un día importante para ti y tus amigos, debes estar muy guapo. Prometo despedirme antes de desaparecer.

—De acuerdo.—asintió.—Te amo, Lanthy.

—Te quiero, Sirius.

Al día siguiente, todos los alumnos de Septimo año del Colegio Hogwarts de Magia y Hechiceria se encontraban hasta en frente del Gran Comedor, donde Albus Dumbledore llamaba uno a uno a los alumnos graduados:

—¡Sirius Black!

—¡Ese es mi hermano!—grito Regulus, alzando un banderín con un dragón dibujado en el.

—¡James Potter!

—¡Vamos, Jamesie!—grito Iolanthe con un banderin igual al de Regulus.

—¡Lily Evans!

—¡Remus Lupin!

—¡Severus Snape!

—¡WUUUU!—gritaron Iolanthe y Regulus.—¡ESO SEV!

—¡Narcisa Black!

—¡ESO CISSY! —gritaron Iolanthe y Regulus.

—¡Pandora Lovegood!

—¡ESE ES MI PASTELITO HERMOSO!—grito Iolanthe.

—¡ESO, BONITA!—grito Regulus.

—¡Theodore Nott!

—¡ESE ES MI HOMBRE, PERRAS!—grito Regulus.

—¡ESE ES MI CUÑADO!—grito Iolanthe.

Despues de la ceremonia de entrega de diplomas y reconocimietnos, todos los recien graduados fueron felicitados, abrazados y besados por sus familiares y amigos. Se hizo una pequeña celebración ahí en el Gran Comedor y al terminar todos emprendieron camino rumbo a Hogsmeade junto a sus maletas, listos para irse a casa.

El grupo de Slytherins y Gyrffindors caminaba tranquilamente, un poco alejados de los demas. Sirius caminaba abrazado de la cintura de Iolanthe, lo mismo que Severus y Lily, y Theodore y Regulus. Llegaron hasta quedar frente a las Tres Escobas, donde se sonrieron con tristeza.

—Es hora.—dijo Iolanthe.

—Cuidense mucho y por favor escriban seguido.—dijo Lily aferrandose a Severus, soltando algunas lagrimas.

—Estaremos viviendo en mi casa.—dijo James abrazando a su hermana.—cuidense, por favor.—pidió mirando a Pandora, quien sonrió levemente.

—Cuidate, Narcisa.—pidió Remus y ella asintió cabizbaja.

Hermanos, amigos y parejas se despidieron entre si.

—Te amo, Lanthy. Por favor, cuidate.—pidió Sirius con tristeza.

—Te quiero, Sirius.—dijo Iolanthe y, sorprendiendo a todos, besó a Sirius.

Era el primer beso de ambos. Suave, delicado, tierno, lento. Sirius la abrazo con fuerza y al dejar de besarse sonrió felizmente.

—Ahora menos tienes permiso de morir, si algo te pasa no creo poder sobrevivir sin tus besos.—dijo Sirius y ella rio.

Iolanthe Potter, Regulus Black, Narcisa Black, Severus Snape, Theodore Nott y Pandora Lovegood se tomaron de las manos, sonriendo a los cuatro Gryffindor frente a ellos y de pronto, ya no estaban.

Habían desaparecido.

Al fin se habían ido.

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De una vez les aviso que a partir de aquí las posas se ponen feas.

Por cierto, los que no les avisa wattpad cuando actualizo pueden seguirme en twitter, ahí les aviso. Mi usuario es luz_Amadorc