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CAPÍTULO DIEZ
YA LO SABE

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Me senté a la mesa, luego de que Emily me insistiera en que dejara de revolotear a su lado intentando ayudarla. Todos mis intentos por colaborar y que ella no cargara con todo eran en vano, ya que mi amiga era demasiado terca y no daba su brazo a torcer. Se contentaba con que le opinara sobre las nuevas recetas, aunque yo no era una jueza muy adecuada.

Las cosas con Jacob no podían ir mejor ni queriendo. Sin forzar las cosas me encontraba demasiado cómoda a su lado y parecía que todos mis demonios desaparecían cuando él me sonreía o me rodeaba con sus fuertes brazos. Cualquiera que nos viera pensaría que éramos mucho más que una pareja adolescente, pero lo cierto es que ninguno de los dos había dicho nada sobre formalizar la relación. Pese a eso, todo el mundo a nuestro alrededor era consciente de que éramos mucho más que amigos.

Hice una mueca cuando Jared y Paul entraron a la vez, casi llevándose la puerta por delante, mientras parecían pelear. Crucé una mirada con Emily, quien los miraba como si fueran dos niños pequeños peleándose por una dulce. Cuando se dieron cuenta de nuestras miradas, sonrieron de lado e hicieron una extraña reverencia. Me reí sin poder evitarlo, contagiando a mi morena amiga.

Embry entró poco después, poniendo los ojos en blanco al ver a los otros dos. Me sonrió, cogió un vaso de agua y tras beberlo bostezó brevemente. Ahí fue cuando me sentí un poco mal por haberle pedido a Sam no hacer guardia por la noche, ya que no me gustaba dejar a Emily con los trogloditas. La sonrisa de mi amigo me hizo saber que el Alfa se lo había dicho mentalmente. Cuando se percató de mi mirada, hizo un ademán con la mano, como restándole importancia.

—¿Y Jake?—pregunté.

Ignoré las miradas divertidas de Jared y Paul, solo centrándome en mi amigo.

—Se fue a casa corriendo.—me informó Embry.—Se moría de sueño.

—Le dije que no hiciera 72 horas de guardia, pero nunca me hace caso.—hice un puchero.

Emily me rodeó los hombros con un brazo, sonriéndome.

—No tienes ni idea de lo tercos que pueden ser los lobos imprimados.—sonrió.

—Y algunos nos hacemos aún más tercos con el tiempo.

Me reí ante el comentario de Sam, quien entró mirando serio a mis compañeros de manada para luego cambiar su mueca a una dulce cuando su mirada cruzó con la de Emily. Tosí disimulado para separarme de mi amiga y de la imagen que presentía. La morena me miró de reojo, riendo, para luego centrar su atención en su lobo. Fue mi oportunidad de escapar, acercándome a Embry, quien me ofreció un vaso de agua que yo rechacé.

Decidí salir a correr un rato, luego de escuchar las protestas de Embry por que saliera sola —alegando que Jacob les iba a arrancar la cabeza al enterarse— y de prometerle al sobreprotector de mi alfa y su pareja que no iba a ir muy lejos.

Solté un suspiro al aterrizar sobre mis mullidas patas, sonriendo de lado. Brinqué por la reserva, matando el tiempo mientras Jake dormía. Me moría de ganas de verlo, pero quería que durmiera. Mi madre me sonrió a lo lejos, al verme corretear por el bosque cercano a mi casa. Le aullé bajo en saludo, haciendo que el terremoto de mi hermano pequeño saliera.

—¡Lizzie!—exclamó.

Solté un ruido parecido al de una risa cuando mi hermano corrió hacia mi. Bajé la cabeza, haciendo que el acariciara mi peluda cabeza, casi causando que me riera de nuevo. Alcé de nuevo la cabeza, encontrándome con los ojitos brillantes de Joe.

—Ojalá ser un lobo como tú. Mola mucho.

Gimotee disgustada ante ese pensamiento, mirando brevemente a mi madre, quien miraba a mi hermano con el ceño fruncido. Cuando se percató de mi mirada sobre ella, esbozó un intento de sonrisa.

—Joe, no digas tonterías. Si fueras un lobo ya no te haría gracia subirte encima de tu hermana.—

Mi hermano hizo una mueca.—Es verdad. Prefiero que Lizzie sea el lobo.—

Suspiré aliviada, a la vez que me agachaba. Joe no dudó un segundo en saltar sobre mí, haciendo que mi madre rodara los ojos divertida. Ambos la miramos.

—Ah, no, no. No pienso subirme, niños.

Bufé, intentando ocultar que estaba divertida.

—Peso bastante.—se excusó mi madre.

Sin poder evitarlo, una risa lobuna salió de mi interior, haciendo que mi hermano riera conmigo.

—Creo que Lizzie piensa que esa es la excusa más patética que ha escuchado nunca.—dijo Joe.

Otra risa volvió a salir de mí.

Mi madre hizo una mueca.—Ya vale, dejad de reíros de mí.

Joe me dio unas palmaditas en la cabeza, haciendo que dejara de prestar atención a mi madre y sabiendo lo que quería. Soltó una pequeña risa cuando empecé a corretear por el jardín, con nuestra progenitora vigilando que no hubiera moros en la costa. La risa de mi hermano hacía que saltara en el sitio y que también le enseñara pequeños sprints. Él parecía divertido y eso era lo único que me importaba en ese momento.

Me agaché cuando mi hermano volvió a darme palmaditas en la cabeza. Esa era nuestra señal para empezar y acabar la función. Joe bajó de un salto, con una enorme sonrisa en los labios. Se giró hacia mi madre, mostrándole lo feliz que estaba y luego se giró hacia mi. Me abrazó por el cuello, haciendo que yo suspirara al no poder devolverle el abrazo.

—Eres la mejor hermana del mundo.

Luego me soltó, haciendo que mirara a mi madre brevemente, quien ahora nos miraba a ambos sonriendo. Me acerqué a ella, haciendo que me acariciara.

—Ven pronto con Jake.—me dijo.

Hice una mueca, provocando que ambos se rieran de mí.

—En algún momento debe ser formalizado, Lizzie.

Quise bufar, pero en vez de eso, asentí, haciendo que mi madre volviera a sonreír.

—Y traed a Billy.

Volví a asentir, dándole a entender a mi madre que las invitaciones las haría tan pronto como pudiera.

Me despedí de ambos para luego corretear al bosque, siendo consciente de que me seguían mirando. Cuando supe que ya no veían, bajé el ritmo de mi correteo, hasta casi detenerme. Giré la cabeza al ver huellas recientes de otro lobo, casi esperando que no fuera Jacob, sino le patearía el culo. La risa de Embry me llegó al poco tiempo, dándome a entender que era él.

"No me dejas ni cinco minutos sola" me quejé.

Soltó un bufido. "Sam estaba preocupado".

"Fui a ver a mi familia, tampoco es como si fuera a Canadá".

Le mostré imágenes de lo que había estado haciendo, causando que se riera cuando oyó la invitación de mi madre para Jake y su padre. Lo empujé con mi cabeza, pero no frenó la carrera ni hizo que se cayera.

"Parece que alguien va a tener una cena de familia"

"Cállate, Embry"

"O una comida, no ha dicho a que hora"

"Dios mío, eres peor que una cotorra"

"Y tú eres muy impronta de Jacob"

Bufé, volviendo a empujarlo, esta vez haciendo que chocara contra un árbol. Me reí sin querer, viendo como se levantaba y se sacudía.

"Que malas pulgas"

"Para tu información, yo me ducho todos los días, Embry"

"Como digas, princesita"

Esta vez me empujó él, haciendo que casi me cayera. Gracias a mis reflejos, eso no pasó. Le gruñí, aunque él sonreía.

"Eres mala persona"

"Pero si tú me lo hiciste antes, princesita"

"No me vuelvas a llamar así, dios"

"¿Como dices, princesita?"

"Te vas a tragar el polvo, Call"

"Basta. Los dos"

Ambos rodamos los ojos a la vez, fastidiados, para luego decir a la vez: "Vale, papá".

Después de unas horas, decidimos ir a por Jacob. No escuché nada más de lo que dijo Sam, ya que salté por la ventana y fui a buscar a mi lobo. Ignoré las insoportables voces de mis compañeros de manada, enfocada en llegar cuanto antes. Un olor me hizo frenar en seco, casi haciendo que Jared se cayera encima.

¿Qué hace Bella aquí?

Mi pregunta sonaba más fastidiada de lo que esperaba.

El lobo negro llegó a mi lado, viendo la camioneta roja aparcada delante de la casa. Luego giró la cabeza en mi dirección.

"Jake lleva días ignorándola. Ya sabes porqué, pero ella no y quiere saberlo"

No pude evitar que un gruñido saliera del fondo de mi garganta, mostrando que estaba molesta.

Puede que Bella fuera mi amiga, pero no iba a dejar que perturbara la calma que Jake había conseguido. No cuando nos había costado admitir todo y ella solo estaba confundida con lo que sentía por mi chico. Hasta una mosca se daba cuenta de que estaba más perdida que un salmón en medio del bosque.

Me alejé de ellos, para destransformarme. Me vestí con la ropa que tenía atada en el tobillo, que constaba de unos pantalones cortos vaqueros y una camiseta de tiras blanca. Sonreí al encontrar uno de los pares de tenis que tenía escondidos por el bosque.

Giré la cabeza, para ver a los demás en su forma humana. Crucé una mirada con Sam, haciendo que él asintiera. Nos quedamos en el linde del bosque, observando.

Bella salía de la casa, un poco enfadada. Giró la cabeza y nos vio. Juraría que vi como humo salía de sus orejas.

—¡Jacob!

Hice una mueca ante la sutil manera que tenía Sam de llamar al moreno que estaba durmiendo, sabiendo que no valdría de nada. Pero si que valió para que la humana caminara hacia nosotros, echando humo.

—¿¡Qué le habéis hecho?!—chilló exasperada, mirando a Paul y Sam.

—¿Qué te ha dicho?—casi le gruñó Paul.

—¡Nada!—parecía abrumada.—No me dice nada porque os tiene miedo.

Paul soltó una carcajada, mientras Sam intercambiaba una mirada conmigo. Fue en ese momento en el que Bella se dio cuenta de mi presencia. Me miró con los ojos centelleando.

—¡Tú!—exclamó.—Se puede saber que le has dicho a Jacob para que no quiera verme.

—Deja de hacer el ridículo, dios.

Me reí del comentario de Jared, pero creo que Bella entendió que me reía de ella, ya que me empujó a mi y a Paul.

Respiré profundo, usando todo el autocontrol que tenía. Pero a diferencia de mi, Paul era mucho más temperamental, por lo que empujé a la humana, lejos del él. Ella me miró indignada

—Atrás, Bella.—intervino Sam, aunque esta no le hizo ni caso, para luego mirar a Paul—Déjalo ya, Paul.

Pero él me miraba a mí, serio.

—¿Vas a dejar que siga hablándote así, Liz?

Hice una mueca.—Es solo una humana, Paul, déjalo ya.

Bella me miró indignada, pero la ignoré.

—Una humana un poco metiche, ¿no crees?—sabía lo que intentaba.—Quizás así es como le gustan a Jacob.

Fruncí el ceño, notando como me temblaban las manos. Embry se puso a mi lado, apartando de nuevo a Bella, quien lo miró mal, pero él también la ignoró.

—Cierra el pico, Lahote.—gruñí.

—¿Por qué no me lo cierras tú, Wolf?

Le gruñí bajo, sabiendo que Bella no lo escucharía, pero sentí como la sangre me hervía al ver la sonrisa de lado de Paul.

—Basta ya.—intervino Sam de nuevo.—Los dos.

Pero era tarde, ya que Paul se convirtió, haciendo que la humana soltara un chillido de sorpresa. Giré la cabeza al oír al puerta de la casa, sintiendo como temblaba de pies a cabeza.

—¡Lizzie!—exclamó Jacob.

Me calmé un poco al oír a Jacob, pero Paul me gruñó , haciendo que volviera a temblar. Bella se levantó de un salto, corriendo hacia la casa de Jacob.

—¡Jake!—interrumpió Bella, asustada.—¡Jake, corre!

Jacob se convirtió en un salto cuando yo ya estaba siendo tacleada por Paul. Solté un gruñido a la vez que esquivaba el mordisco del lobo, empujándolo lejos. Le gruñí, a la vez que el volvía a saltar sobre mi. Un lobo rojizo se interpuso, empujando a Paul lejos, mirándome brevemente. Rocé mi hocico contra su lomo, mientras ambos mirábamos mal al lobo Lahote, quien se había levantado y se sacudía el pelaje.

—Llevadla con Emily.—oí a Sam.

Miré de reojo a Jacob, haciendo que el se frotara contra mí. Luego, ambos saltamos sobre Paul, haciendo que saliéramos rodando y nos lleváramos por delante la vieja barca de Billy. Solté un gruñido al impactar contra un árbol, pero me levanté al instante, viendo como Paul casi mordía al lobo rojizo en un costado. Aprovechando su despiste, aproveché para morderle una pata, haciendo que soltara un gemido de sorpresa. Jacob me miró brevemente, sonriendo.

Los tres salimos rodando cuando una sombra negra nos llevó por delante. Me levanté fastidiada, me sacudí y alcé la vista. Sam nos miraba, parado en el centro, bufando. Puse los ojos en blanco para luego meterme entre los arbustos y volverme a cambiar.

Solté un chillido cuando los brazos de Jacob me levantaron del suelo y me cargaron como un saco de patatas.

—¡Jake!—me quejé.

—No te puedes quejar de las vistas, pequeña.

—También es verdad.—dije, para luego darle una palmada.

Me bajó después de eso, mirándome indignado, para luego sonreír. Aproveché para besarlo, aunque cuando intentó profundizarlo, mordí su labio y salí corriendo.

Lo escuché gritar mi nombre a la vez que las risas de Paul y Sam. Seguí corriendo hasta que llegué a la casa de Emily. Quise bufar al ver la camioneta de Bella aparcada fuera, pero el olor a comida hizo que me olvidara.

Entré justo cuando Bella decía que no se podía correr con vampiros porque eran muy rápidos.

—Eso es porque no me has visto a mi correr.—me mofé.

Los cuatro se giraron a mirarme, mientras yo entraba como si no fuera conmigo. Emily se acercó a mi, mirándome de arriba a abajo. Cuando me di cuenta de porque era, puse los ojos en blanco, mirando mal a los dos lobos.

—Estoy bien, Emi.—le aseguré.

—¿De verdad que no tienes ningún rasguño?—preguntó Jared.

Me giré a mirarlo, burlona.

—Estoy perfecta.—dije.

Di una vuelta sobre mi propio eje, aún sonriendo con burla. Embry puso los ojos en blanco, divertido, mientras Jared bufaba.

—Lo siento, Bella.—oí a Paul disculparse.

Me iba a reír de él pero otra voz habló.

—Dejad de mirarla así.

Sonreí al ver a Jacob entrar, sonriéndole en disculpa a Bella, para luego mirarme. Antes de que pudiera reaccionar, ya lo tenía rodeándome, haciendo que soltara una pequeña risa.

—Te pillé.—canturreó.

—Supongo que perdí.—me quejé, haciendo un puchero.

Soltó un pequeña risa para luego besarme. Nos separamos riendo al oír las toses falsas de Jared, Embry y Paul.

—Consíganse un hotel.—se quejó Paul.

—No coman delante de los pobres.—dijo Jared.

—Por dios, que estoy comiendo.—murmuró Embry, haciendo muecas.

Jacob puso los ojos en blanco, abrazándome por la espalda.

—Sois unos infantiles.—murmuró Emily divertida, poniendo más magdalenas en la mesa.

Me moví a la vez que mi lobo para comer una, haciendo que mi amiga morena nos mirara con una sonrisa. Le saqué la lengua, para luego morder la gigante magdalena.

—Son como niños pequeños.

Me reí del comentario de Sam, quien seguramente había oído todo. Ignoró a todos y se acercó a Emily, probablemente haciendo el mismo show que habíamos hecho nosotros antes. Las quejas volvieron a oírse, mientras yo seguía comiendo otra magdalena.

—Nos llegaba con unos.—murmuró Paul.

—Esto es un calvario.—protestó Jared.

Embry bufó, pero no dijo nada.

Luego, todos miramos a Bella, volviendo a que estaba delante, mirándonos a todos. Oí el suspiro de Jacob, probablemente acordándose de lo que había visto, por lo que solté un bufido. Me estremecí cuando dejó un beso en mi cuello, logrando que una pequeña risa saliera de mi. Eso llamó la atención de todos, incluida la humana.

No tendría palabras para describir la mirada de Bella. Parecía decepcionada, pero a la vez feliz. 

Si en algún momento de mi vida pensé que era bipolar, ahora lo tenía más que claro.

¡Hola, hola! ¡Ya estoy aquí otra vez! *aplausos* Gracias, gracias. (que rarita soy lpm).

¿Cómo están? Yo muy feliz de volver a traeros capítulo (y porque ayer fui a un fan event de un cantante que me gusta mucho AH).

No sé ni qué decir de este capítulo JAJAJAJA. Yo lo veo algo así como el inicio de una explosión (ella, que quiere ver el mundo arder).

Hemos tenido una escena de familia (bueno, faltaba el padre, ups). Recuerdo que el hermano de Liz tiene la misma edad que Seth Clearwater (pero es muy infantil el niño xd). Usar a los lobos como caballos era mi ilusión desde la primera vez que los vi en las pelis, la verdad JAJAJJAA.

También hemos visto escenas con la manada. No sé vosotrxs pero a mí me encanta el modo hermana/o mayor sobreprotector de Emily y Sam con Lizzie.
Y volvemos a ver qué Embry, Paul y Jared son unos pesados.
¿Qué opináis de estas relaciones?

Soooo... Bella no sabía nada de que Lizzie y Jake estaban juntos. Así que, falta su reacción verbal, porque la facial ya está (a veces me da mal rollo la poca expresividad de este personaje).
¿Cómo creéis que será la reacción de Bella?

¡Espero que os haya gustado mucho! 💙

Estoy realmente sorprendida con la cantidad de gente leyendo esta historia. No creo que haga falta decirlo, pero me hace mucha ilusión.
¡Muchas gracias por darle una oportunidad!
Significa mucho para mi🥰

Ya sabéis que podéis dejarme una estrella 🌟 si os ha gustado mucho mucho. Y también podéis dejar comentarios con lo que se os pase por la cabeza.
¡Siempre os leo! Aunque tengo la cabeza en la quinta nube y a veces se me olvida contestar (ups 🤭).

Os aviso que se viene el dramaaaaaa 🌚🔥

Nos leemos en comentarios 💙

~I 👑