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Capítulo 39: El sello de Gleipnir cae.


Nota: Vean el video xd.

Sí ya sé se suponía que iría, Nacidos en Guerra, pero hice esto, y si hay suficientes reacciones a la actualización, pues mañana mismo subimos Nacidos en guerra.  

Y ES QUE ORIGINALMENTE IBA A  SER UN CAPÍTULO, PERO QUEDÓ LAAAAARGOOO. 

 ADEMÁS, LA PRIMERA PARTE DE LA TRAMA, NO SÉ SENTÍ QUE MERECÍA EN SÍ SU PROPIO CAPÍTULO. XD. 



Gleiipnir, es el nombre de una ligadura "irrompible" con la cual los Aesir apresaron a Fenrir, luego de haber fracasado anteriormente en dos oportunidades: En la primera de ellas, encadenaron al lobo con una gruesa cadena llamada Leding, pero Fenrir, apenas tuvo que estirarse para romper las ataduras. Por esto, los dioses crearon una segunda cadena aún más fuerte llamada Droma (o Drómi), convencidos de que el lobo, no podría con ellas, pero se equivocaron... Fenrir las rompió.

Debido a esto, los dioses, al ver que las ataduras normales no podrían mantener al lobo encerrado, pidieron a los enanos crear una cadena irrompible. Dicha cadena se llamó Gleipnir, fue fabricada con magia y seis maravillosos ingredientes: El sonido de las pisadas de un gato, la barba de una mujer, las raíces de una montaña, los tendones de un oso, el aliento de un pez y la saliva de un pájaro.

Undan Loka Fenrir fæddist, fullur hroka víst var sagt. Er var þoka þá hann læddist, þungbært ok á heiminn lagt. Nú var gaumur að því gefinn, greri aumur hvolpur fljótt. Tíminn naumur, enginn efinn, á hann tauminn þyrfti skjótt. Fyrstan Læðing fengu goðin, Fenri þræði komu á. Úlfur skæður, ljótur, loðinn, leikinn bræði sleit hann þá. Þegar Drómi Fenri festi falskan dóm þá úlfur hlaut. Því með klóm og þrumubresti þennan fróma fjötur braut.

Dijo el demonio bloqueando su ataque, El Nephilim no podía dejar de mirar a los recién llegados, el alto demonio, el menor a su lado que se aferraba a él y lo miraba bruscamente, con odio quizá, y los otros siete sujetos, cada uno de ellos representante de una raza del mundo para humano.

Sabía que en parte necesitaban su ayuda, pero le molesto. Ellos no tenían por qué meterse, tenían sus propias peleas, sus propias dimensiones o mundos, no tenían por qué entrar y menos él. Él no.

Fenrir noto de inmediato su turbación, pero no podía darse el lujo de distraerse. Se lo pensó unos segundos y activo su capacidad de división, separándose en dos bestias, una blanca y una negra. Ambas colosales, ambas enfurecidas amenazando con las fauces abiertas, exhibiendo sus colmillos y lanzando ataques simultáneos, mezcla de luz y oscuridad. Uno hacia los recién llegados a quienes consideraba enemigos y el otro hacía el frente que estaba combatiendo previamente.



−No somos enemigos.

Pero este aun logró impactar lo suficiente para causarle una lesión.

−Somos aliados.

− ¿Entonces por qué los siento como una amenaza?

Preguntó con un tono aterrador. Los demás miembros recién llegados se apresuraron a presentarse, cada uno provenía de una parte del universo alterno, donde existían los seres mágicos, seres como Yun o como los elfos de Alfheim. De hecho, entre ellos había una elfina, Galatea, que dijo ser la actual regente en espera que los legítimos herederos volvieran. Fenrir la miró con sospecha. ¿Sabría ella quienes eran los verdaderos herederos? Había también un orco en el grupo, se hizo llamar Horan, un elfo oscuro representante de Nifelheim, cuyo nombre era Envir, un monstruo que venía de Mupeslheim, no quiso dar su nombre, había también un hombre leopardo, que solo dio su inicial, "S" una chica con cola de conejo y también un gnomo interesado en máquinas mecánicas. Dijo que se llamaba Xiu, estaba buscando a alguien, llamado Du Ze, pero cuando vio que no estaba por allí, se fue de mala gana por no haberlo encontrado, sin importarle más nada.

−Bueno, bueno, esto es Infinity war amigos, no la batalla por la comarca, ni tampoco estamos en una partida de calabozos y dragones, así que ahuecando el ala.

Se escuchó la voz de Tony, desde el intercomunicador. Nidhogg, se carcajeo sacando de sus fauces bolas de fuego que apuntaban certeramente a los enemigos.

− ¿Por qué él sí puede quedarse entonces?

Objeto el demonio. Un tipo de nombre Kobe. Era alto, fornido, imponente, con una mirada penetrante, sus ojos eran amarillos y su piel oscura le daban un contraste exótico. Era atractivo no podía negarse, tenía unas alas de murciélago plegadas a la espalda. Y la cabeza calva con un par de cuernos negros.

Tony respondió de inmediato.

−Pues porque yolo.

− ¿Yolo?

Preguntaron confundidos los recién llegados.

−Yo lo digo.

Aclaro Tony. Nidhogg, volvió a carcajearse provocando fumarolas.

−Por eso lo amo, yo me quedo para protegerlo a él, es mi Dragonlord.

−Como sea, si Thanos se apodera de las seis gemas, entonces medio universo o incluso el universo entero corre peligro.

−Pero no su universo. No les necesitamos, lárguense de aquí.

Dijo finalmente el Nephilim, que hasta entonces había estado callado. El demonio y su pareja le dirigieron la mirada entonces, ambos fruncieron el ceño, pero después sus expresiones cambiaron hasta ser contradictorias. El demonio le miró con algo parecido a la lástima o la culpa, mientras el otro lo hizo con total desagrado, quizá incluso odio, o celos. El instinto alfa de Fenrir se activó y gruño hacia la pareja demoníaca, especialmente aquel que miraba con malos ojos a su omega.

Nidhogg, quien sabía, pues era una especie de oráculo, se dirigió a los recién llegados.

−No son necesarios aquí. Fenrir y yo somos más que suficientes en este frente, si desean ayudar, hay otras partes del mundo que necesitan ayuda y si no lárguense por dónde vinieron.

−No es como si lo hubiéramos decidido, una entidad superior nos ordenó venir.

Aclaró el demonio, aparentemente el líder del grupo. A Nidhogg, no le gustaba verse contradicho. Furioso lanzó un ataque contra el hombre con el firme deseo de calcinarlo, pero sabía que no lo lograría, los demonios tenían alta tolerancia al fuego, aun así, el fuego dragón era capaz de quemar hasta las razas más fuertes. Las alas del hombre se vieron chamuscadas y miro con odio a la bestia. Su compañero se quejó reclamando:

−Nosotros venimos a ayudar y así es como nos pagas. Lagartija sobrealimentada, pagaras por esto. Al alto consejo no va a gustarle. Sólo quieres alejarnos para llevarte toda la gloria.

Después miró hacia el Nephilim y enojado también le insulto.

−Y tú, deja de ver a mi alfa, tú has sido una piedra en el zapato desde que te conocí, él es mío, entiéndelo mío, no importa nada de lo hagas o digas, es mi destinado mío, no importa que tan calentón andes, él no va a volver contigo, te dejo por mí, acéptalo.

No era ni el lugar, ni el momento para revelar esa clase de detalles, no para ese tipo de escenitas, no para esos dramas, pero ese mocoso no tenía filtros y tanto el dragón, como los demás lo veían como si estuviera fuera de lugar. Kobe intentó calmar a su pareja, miro a Yun, y dijo suavemente un "Lo siento" cosa que causó un mayor malhumor en su pareja que le reclamó.

− ¿Acaso aun te gusta? ¿Aun sientes cosas por él? Tu destinado soy yo.

−No es lugar para chismes de lavanderas o verduleras. Si no te sientes seguro de tu alfa es tu problema. A mi hogar no vienes a atacar a los míos. Y apuesto a que ese hombre esté contigo por la fuerza del soulmate, que, si por su decisión fuera se habría quedado con el bello Yun, pero mejor para nosotros, ahora él es mi familia y yo protejo a los míos. Lárguense antes de que le pida a Nidhogg, el favor de que prenda como antorcha a su pareja y le pida a mi padre que te convierta en una vara humana.

El Joven Nephilim escucho a Tony y eso le hizo volver en sí, había dejado de atacar, de defender, había dejado todo por sentirse a punto de colapsar frente aquella pareja que lo enfrentaba a su doloroso pasado. Su alfa anterior no lo había querido, su alfa actual no lo quería, era un fracaso de omega, y se sentía casi en el abismo cuando la voz de Tony, defendiéndolo lo volvió en sí.

Al momento los lobos desaparecieron quedando tan solo un hombre desnudo frente a ellos.

− ¡Ay no! Mis ojos, nooo, padre no quiero ver eso, oh dios no, necesitaré terapia psicológica.

Chillo Tony, apagando la cámara. Debía admitir que su padre era un jodido excelente ejemplar de alfa, y que apagó la cámara para evitar pensamientos pecaminosos incestuosos. Ahora entendía a Jor, aunque pensándolo bien no, porque Jor, era una copia exacta. Si deseaba a Fenrir, era como desearse a sí mismo, quizá eso era algo más bien narcisista que incestuoso. Se dijo, ambos eran tan iguales. Solo que los rasgos de Jor, eran un poco más suaves por sus expresiones.



Era lógico que al haber mutado la ropa de Fenrir, se desgarrarse, así que, al cambiar de nuevo, estaba desnudo, el camino primeramente hacia el Nephilim y lo miro tembloroso aún, pero un poco más calmado. Podía sentir en parte sus emociones, acaricio su mejilla con suavidad y enredo un mechón del largo cabello azulado en su dedo.

−Let it go, let it be. (Déjalo ir, déjalo ser)

−Yo...lo... Lo siento.

−Control, necesitamos esa barrera por Tony, necesitamos tu fuerza, los bebés ya vienen, puedo sentirlo, tu igual ¿verdad? ¿puedes oír el éter?

Yun asintió aun tembloroso.

−Inhala amor, exhala temor.

− ¿Como?

−Hazlo, inhala, exhala, inhala amor, exhala temor. Mi padre solía decir eso a mi madre cuando se alteraba.

Yun le sonrió.

−Soy tu alfa, estoy aquí para ti, deja ir, el pasado es pasado.

−No es tan fácil yo...

−Te cuidaré, deja ir, yo pondré un nuevo niño en tu vientre, yo no te dejaré. No reemplaza él que perdiste, pero es una nueva oportunidad de amar.

− ¿Cómo...?

−Soy tu soulmate, let it go Yun, let it be.

Dijo Fenrir tanto para su omega como para sí mismo. Dejar ir, dejar ser. Era un adiós para Jor, pero era también algo que necesitaba, se dio cuenta de que esta vez no le dolió, se dio cuenta que su corazón ahora estaba dónde debía estar.

El chico asintió sintiéndose confortado y fortalecido. Apretó la mano de Fenrir y sonrió.

−Ya estoy bien, se te necesita de lobo, aunque la legión de hierro y el capitán no lo hacen nada mal.

Todos los recién llegados se habían mostrado asombrados al ver la desaparición de las dos bestias y notar en su lugar al hombre desnudo, mismo que robo la atenta mirada de todos los presentes por su belleza. El tipo era excepcional sin duda, alto y fornido, con un rostro que parecía esculpido por los ángeles, unos preciosos ojos azules y un trasero increíble, además de estar sumamente bien dotado. Los omegas del grupo lo veían babeando, incluso aquel que había insultado a Yun, y los alfas le miraban con envidia.

La elfina camino hacia él y se hinco a sus pies ofreciéndole su cetro mágico.

−Mi lord, eres tú, el legítimo heredero de Alfheim, Fenrir Balderson. Permíteme estar a tu servicio. Esta regente devuelve el trono a su legítimo dueño. Heredero de la sangre real, portador de la luz y la oscuridad.

Fenrir tomó el cetro de manos de la rubia elfina y sonrió. Sintió el poder arremolinarse en él y sus ojos brillaron con una nueva oleada de poder.

Aquella cadena que había atado su poder desde que era un niño comenzó a deshacerse. Era libre de restricciones, finalmente podría canalizar toda su herencia mágica, El poder de su padre corría con más fuerza por sus venas, el poder de su madre, el poder de los gigantes de hielo, el poder de su abuela cambia formas, el legado de Alfheim, que le fue entregado a Balder por los elfos, el mismo poder del árbol de la vida fluyendo por sus venas. Sentía toda esa energía. Al fin recuperaba todo lo que le habían robado. Aquello a lo que Odín tanto había temido.

Un ademán con el cetro y nuevos ropajes cubrieron el cuerpo de Fenrir, una armadura y una espada aparecieron en sus manos.

−Y ustedes...

Se dirigió ahora a la pareja apuntando con su espada.

−Pagarán el precio por haber lastimado y ofendido a mi futuro consorte.

Esas palabras dejaron atónitos al par de demonios y al propio Yun, quien aún no se la creía.

La espada dejó salir una potente descarga que terminó por destrozar las alas del demonio y dejar gravemente herido a su omega, a quien el alfa intentaba proteger a pesar de su propio dolor.

−Una vara humana, eso es algo sádico, no haré eso, pero no conocerán la paz, poco me importa su alto consejo.

Ahora apunto con el cetro abriendo un vórtice haciendo que la pareja desapareciera, envió una onda mental a su hermana. "Hella, deshazte de ellos, por favor que sirvan en tu hogar"

La rubia desde Wakanda respondió" será un placer, siento más fuerza en ti. ¿qué pasó?

−Tengo el cetro de poder de nuestro padre. El sello de Gleipnir, ha caído.

−Llega en buen momento.

El elfo oscuro, el orco, el monstruo, y los otros dos guerreros al ver la situación de inmediato volvieron a sus realidades, temerosos de aquel temible dragón y de esa criatura con el cetro que había enviado a su líder y a su pareja a dios sabría dónde, y aunque estaban algo enfadados con la elfina, quien recientemente se había unido a su pelotón la entendían, si aquel hombre era el heredero de Alfheim, era obvio que le diese su lealtad, pero muchos de ellos habían conocido a Balder, lo sabían fuerte, pero lo sabían amable, dulce, justo, su hijo era temible, era un monstruo. 

   Tal y como le habían pedido, Hella abrió el vórtice absorbiendo a la pareja hacia el Helheim, no sabía el por qué su hermano pidió eso, pero ella siempre complacía los caprichos de los gemelos, sin importar que.

− ¿No fue eso un poco drástico?

−Te hicieron daño, lo merecen.

Respondió con total frialdad y sin mirarlo. Yun, sintió el frio abrazarlo y tembló de nuevo.

−No fue su culpa ellos... son destinados y...

− ¿Y eso qué?

−Cierto, tú eres distinto, a ti no te impone una imprimación, aunque seas un lobo, siempre elegiste a Jor.

−Sí, creo firmemente en la elección sobre la predestinación. Pero te equivocas en una cosa, Jor y yo no tuvimos la clase de relación que crees, nuestras emociones se mezclaron y confundieron, pero jamás hubo nada físico entre los dos, ambos elegimos, ambos decidimos que hacer con esos sentimientos, hubo mucha confusión, no lo negare, pero yo elegí Yun, te elegí a ti, de igual forma que el eligió a Stephen, no se trata de que alguno haya traicionado al otro o de que el enlace nos haya obligado a dejar de lado nuestros sentimientos, siguen allí, siempre lo estarán, el caso es que finalmente esos sentimientos se han aclarado. Ahora sentimos lo que debemos sentir, lo otro fue solo un error. Tú serás mi consorte, a menos que elijas lo contrario. Cuando todo esto termine, ya hablaremos al respecto.

− ¿De verdad quieres que... ¿Oh los niños, hablamos después...?          



¿ Y qué les pareció?

¿ Alguien quiere el Pack de Fenrir?

Iba a poner imágenes más hot, de él pero me arrepenti. je, je.

Bueno les dejo una, sólo una, no sean golosas.

Esta re bueno, verdad, y es que miren que quedó muy bien para el hijo de Loki ( Tom Hidlestom) y Balder  (Travis Flimel) y para el padre de nuestro Tonos.

Con chance mañana subamos otro cap, o si no domingo a más tardar. Sólo si se lo merecen, si estoy de buenas y si la compu esta de buenas ja,ja. 


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