Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

capitulo 40: através de una sombra.

Era como un sueño, un baile infinito en medio de la oscuridad y una promesa hecha, aún luego de mucho tiempo sentía que se estaba perdiendo a si mismo, allí en ese sitio sentía que nada le faltaría.

Ese lugar oscuro y recóndito en el que sentía que estaba completo de nuevo, la soledad su compañera, que venía de su mano desde aquel día, por segunda vez sentía ese comportamiento.

Era el único alivio en medio de su pedido, aquel dónde pidio estar solo para que nadie lo lastimara.

Ni a él, ni a su hijo.

◈ ━━━━━━━ ⸙ - ⸙ ━━━━━━━ ◈

Escarlate con tan solo tener 13 años aprendió a utilizar una arma de fuego, cortesía de Minos, quien aún con la negativa de Radamanthys le enseñó de igual forma.

Esa timidez fue moldeada lentamente a determinación y seguridad, lo que realmente necesitaban ellos para lo que estaban pensando hacer realmente.

Esa capacidad del albino para manipular y moldear a sus víctimas era impresionante, a su vez aterrador, pero cambiar en un par de semanas a un niño que era todo lo contrario a lo que era ahora era impresionante.

-Minos, esto no es lo que buscábamos.

-servirá, se deshará de sus hermanos hasta acabar por si mismo a su padre, claro... No le tocará ni un pelo a albafica sin mi consentimiento.

-¿cual es la deuda de Lugonis?

-el debe más de lo que puede pagar, incluso con su vida... Más que el propio padre de tu noviecito.

-No hemos formalizado nada...

-da igual, he visto como le escribes cartas cuando estás aburrido.

-mmh~

Ahora que lo pensaba tenía que ir a verlo, ya llevaba otro par de meses sin ir a visitarlo desde que se había enterado de la condición de Kanon.

Jugó un poco con sus manos para luego dar un ligero suspiro, lo tenían entre las cuerdas ya bastante tiempo y si se iba con su amigo cubriendo su lugar solo empeoraría la forma en la que lo veían no sola su jefa Pandora, si no esos dos sujetos que no se confiaban ya demasiado de el.

Tenía un contrato, no podía deshacerlo o romperlo, era un contrato para toda la vida y al ser, un semi "inmortal" eso significaba que tenía que responder por toda la eternidad.

Se sentía frustrante, pero si no aceptaba lo habrían matado, no era que se arrepentía de todo lo que había hecho y conocido, solo que le hacía cuestionarse muchas cosas.

-¿Crees que ya está listo?

-Lugonis llega en dos días, lo seguiré entrenando hasta que llegue el día, por lo menos a este sujeto las cosas se le harán sencillas y rápidas, por cierto ... ¿Es verdad que Diamonds se suicidó?

-¿Ah?, ¿Degel?, eso es imposible...

-bueno la verdad no sé sabe, habrá pagado sus errores pero al parecer no fue suficiente karma para el.

Si eso era verdad Aiacos la estaría pasando fatal intentando calmar y acompañar a la viuda y a su hijo.

-¿Que tan lejos llegará esto?

-no lo se... A veces el cargo de conciencia enloquece a las personas de lo arrepentidas que están, o por qué saben que jamás podrán recibir perdón de sus familiares, pero bueno, no deberíamos preocuparnos por eso Radamanthys.

-realmente si me preocupa.

-¿Ah?, ¿Y por qué?

-Por Kanon...

Hubo un leve silencio entre ambos, mirando a la nada el rubio se puso una de sus manos en su cara para frotarsela un poco, tenía el instinto de que ese sujeto de cabello negro le haria algo al peliazul con tal de que no se desviara de lo que realmente importaba.

No quería seguir estando lejos de el, pero lo obligaban a separarse a la fuerza, sin ningún tipo de explicación.

-Necesito ir a verlo.

- si quieres que lo maten por desobedecer órdenes es mejor que te mantengas alejado, tendrás que acostumbrarte, no podemos involucrarnos sentimentalmente con estos jóvenes.

-¿Que hay de ti y albafica?

- solo lo estoy utilizando, ¿Que no te das cuenta?, me tiene confianza pero en el momento en que toda su familia termine en el infierno me odiará por el resto de su miserable vida, no tengo la culpa de que tú y Aiacos se hayan apegado de personas con las que no tienen nada que ver.

Minos río un poco, aunque de forma un tanto forzada, no sabía que ganaba mintiendo así pero sabía que así sería mejor para no ganarse problemas.

Volvió el silencio entre ellos, aún había mucho por hacer, en especial para el albino, quien aún tenía que seguirle enseñando cosas al pelirrojo para que estuviera preparado para ese día.

Cada vez se sentía más cerca, el final estaba por llegar, por fin se irían de aquel país, aun con un mal sabor de boca.

Radamanthys aún pensaba en lo que su amigo le decía, tampoco quería que le hicieran algo por su culpa, jamás debió haberse metido en eso.

◈ ━━━━━━━ ⸙ - ⸙ ━━━━━━━ ◈

-Pastor Novak... Es una sorpresa que venga a esta prisión.

- He oído que hay varios enfermos de gravedad, me contrataron para que viniera a verlos y que dios perdone sus pecados antes de morir.

-Claro, un guardia lo acompañará en el recorrido.

Cabello dorado, ojos castaños... Tenía lentes, una bata negra con un cinturón rojo, y en una de sus manos tenía una biblia junto a una camandula¹ de una cruz.

Tenía una ligera sonrisa, parecía amable, pero venía por una persona en concreto, aún así se encargaría que hacer el trabajo que se suponia que su hermano debería hacer.

Habló un poco con el director de la prisión, luego de un rato llegó el guardia que lo guiaría por las celdas mientras hacia lo que tenía que hacer.

Aquellos profundos pasillos, y fuertes ruidos con golpes a los barrotes, mientras le gritaban indulgencias, no era la primera vez, pero aún así aquellos prisioneros eran creyentes y manipulables como un animal cualquiera.

Una por una.

Estuvo varias horas así, con palabras de consolación e inumerables oraciones para calmar la espiritualidad de aquellas personas enfermas que habían cometido un error en sus vidas por culpa de la avaricia, la ira, la envidia, el temor... Todas aquellas que se habían ganado un lugar en la prisión.

-Me temo que está gente solo son animales matándose unos a los otros por algo que quieren, son decepcionantes.

Se dijo a si mismo mientras anotaba algunas cosas, luego de un trabajo que cualquiera consideraría agotador por fin lo llevaron a aquella celda de aislamiento.

Nadie lo escucharía en medio de sus delirios.

Abrieron la puerta.

-Walden, a levantarse.

Golpearon la puerta con fuerza, el peliazul se alertó levantándose de inmediato para ver de quien se trataba, quizás se había quedado dormido por mucho tiempo.

Pero notó que un hombre rubio entró, tenía una biblia en mano y lo miraba con atención.

-¿Ah?, ¿Un sacerdote?

-dejenos solos guardia.

El nombrado asintió y quedó encerrado junto a kanon allí adentro, pronto esa mirada de calma se volvió una fría y seria.

-¿Y se supone que quiere hablar conmigo?

-Creo que conozco lo suficiente de ti como para saber que hacer contigo.

-¿Cómo?

Eso lo confundió, tan repentino que le decía eso, ¿acaso ya lo conocía antes?, ¿de dónde?, muy pocas veces había tocado una iglesia y podía decir que no era muy fanático de esos lugares, pero para saber quién era le era bastante extraño.

-Kanon, ¿No?

-Bueno si me conoce entonces no debería sorprenderme que sepa mi nombre.

¿Algún amigo de su madre?, no jamás había conocido a otro hombre rubio aparte de Asmita y Radamanthys.

El de ojos castaños lo miró y llegó a hacerle un ligero gesto de asco.

-Dios no comete errores, pero contigo hizo una excepción al parecer...

-¡Oiga!, no me ofenda con eso, me da igual lo demás pero no se meta con esto,que bueno... Ni siquiera se cómo tomarlo, pero diré que es como una bendición.

-¿enserio crees que eso es una bendición?, eres bastante ingenuo.

-segunda vez que se lo advierto...

-es una vida por otra, morirás, a cambio de la vida de esa cosa.

- ¡es la última vez que se lo digo, no me ofenda con eso o juro que...!

-tu solo estorbarás en los planes de Radamanthys, solo le harás un favor si te mueres...

-¿Que?

Eso lo dejó perplejo, completamente en silencio, sintió un bloqueo mental, ¿Ese sujeto también conocía a su rubio?, eso no podía ser coincidencia.

Sintió un aura pesada.

Frustración, desespero... Temor.

¿Enserio se estaba sintiendo así?

-piensa mejor las cosas, Kanon, te perdonaré la vida por ahora, por qué se que mi intervención no será importante en este momento, y si sobrevives entonces la agonía será lo peor que vivirás, escucha mis palabras.

Una aura oscura rodeaba a aquel de cabello dorado que se le había reflejado una estrella de seis puntas en su frente, había hecho que kanon bajara la cabeza intentando dejar de pensar en esas cosas, tapandose lo oidos.

Hypnos ya había hecho lo que tenía que hacer, y si seguía interviniendo en sus planes tendría que tomar medidas extremas.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro