Capítulo 24: "Aclarando malos entendidos del pasado"
Milk se encontraba en su habitación cepillándose su cabello mientras estaba sentada en el borde de su cama pensando: No puedo negarle a su hijo, esta en su derecho de verlo pero ojala acepte lo que le propondré.
El pensamiento de la pelinegra fue interrumpido por el sonido de la puerta de su habitación.
Toc toc toc
Adelante, dijo Milk.
¡Buenos días mami¡ dijo Gohan entrando a la habitación.
Mi cielo, ¡buenos días¡ dijo Milk con dulzura.
¿Ya estás lista para desayunar?, dijo Gohan feliz.
Si hijo, ¿tú abuelito ya está en el comedor?, dijo Milk.
Si mami, dijo Gohan sonriendo.
¿Pasa algo hijo?, dijo Milk intrigada.
No, es solo que estaba pensando que deberías llevar uno de esos vestidos que te regalo el abuelo para que te lo pongas cuando termine el entrenamiento, decía Gohan.
¿Vestido?, dijo Milk.
Si, ya se te olvido que hoy tienes una cita con mi amigo, dijo Gohan sonriendo.
¿Cita?, dijo Milk sonrojada.
Si quedaron en verse después del entrenamiento en el restaurante que esta frente al gimnasio, ¿no?, decía Gohan dulcemente.
Si es cierto pero es una reunión no una cita hijo, nos reuniremos porque tenemos algo de que hablar es todo, dijo Milk nerviosa.
Claro mami, dijo Gohan sonriendo.
Gohan, tú abuelito no puede saber de este encuentro, ¿de acuerdo?, dijo Milk con calma.
De acuerdo, dijo Gohan.
Vamos a desayunar, dijo Milk.
Vamos, dijo Gohan.
Milk y su pequeño hijo salieron de la habitación y se dirigieron al comedor donde el gigantesco hombre ya los estaba esperando.
Siéntese, el desayuno se enfría, dijo el señor Ox.
Si, dijeron Milk y el pequeño Gohan.
Minutos después:
Milk y Gohan salieron de la casa para ir rumbo al gimnasio mientras el gigantesco hombre los miraba desde el jardín mientras pensaba: Estuvieron muy extraños en el desayuno, como si me anduvieran ocultando algo ¿o solo será mi imaginación?.
Hotel:
Gokú platicaba por teléfono con su padre.
No comprendo papá, ¿qué te preocupa tanto qué me quede un día más acá?, decía Gokú intrigado.
Pues ya te dije, se supone que participaras del torneo, ¿no?, pues deberías estar entrenando entonces en vez de andar perdiendo el tiempo, decía Bardock con molestia a través de la línea telefónica.
Pues no ando perdiendo el tiempo ando solucionando un asunto muy importante para mí y no te preocupes yo estoy entrenando aquí, decía Gokú.
¿Qué asunto andas solucionando?, decía Bardock.
Es un asunto personal, ya te lo dije, decía Gokú.
Pues sé más especifico, decía molesto Bardock.
Padre ya hablaremos cuando vuelva y discúlpame pero tengo que bajar a entrenar al gimnasio del hotel, dijo Gokú con calma antes de dar por culminada la llamada.
Papá sonaba extraño, extremadamente preocupado diría yo, pensaba Gokú.
Capital Central:
Bardock arrojaba el fono del teléfono que tenía en su mano sobre su cama con furia bajo la mirada sorprendida de Gine.
Bardock, ¿qué tienes?, dijo Gine.
Gokú es un inepto, no debió ir a ese maldito pueblo, no debió oír, decía Bradock.
¿Por qué dices eso querido?, desde que te enteraste que Gokú se fue a la Capital Este andas extraño como aquella vez que fuimos y no nos quedamos más que minutos allí, es más ahora que lo pienso nunca más volvimos a ir para allá, ¿por qué Bardock?, ¿qué hay en ese pueblo que no volvimos a ir?, ¿por qué la presencia de nuestro hijo en ese pueblo te genera tanta molestia?, decía Gine intrigada.
No hay nada mujer y pues no me molesta que Gokú este en ese pueblo el problema es que tiene que entrenar como se debe para mantener su corona, decía Bardock mientras pensaba: Gokú no puede saber que esa chica esta allá, a lo mejor fue por otros asuntos y yo estoy solo confundiendo todo, lo mejor es que me tranquilice, además Ox tampoco permitirá que se le acerque a su hija, estoy seguro que si se entera que mi hijo esta en ese pueblucho se lleva a su hija de allí.
Espero que me estés diciendo la verdad Bardock, dijo Gine.
Si, mujer, si, dijo Bardock.
Horas después: "Capital Este"
Gokú estacionaba su auto frente a un modesto restaurante, bajo de este y camino hacia el local no sin antes mirar hacia el gimnasio.
Mi niña ya estoy aquí, estaré contando los minutos para verte, pensaba Gokú mientras entraba al local.
Pase, dijo un hombre que estaba en la puerta del mismo.
¡Gracias¡ dijo Gokú.
Gimnasio Ox:
Eso es todo por hoy, decía Milk al tiempo que sus pequeños discípulos aplaudían y un rubio la miraba a ella y al pequeño Gohan que se acercaba a ella.
Mami, ya es hora de que te arregles, decía Gohan.
¡Gohan¡ dijo Milk sonriendo.
Mami, mi amigo Gokú debe verte más linda de lo que eres, dijo Gohan.
¿Por qué tanto interés en que me vea bien?, decía Milk sonriendo.
Porque si, dijo Gohan con una dulce sonrisa al tiempo que el rubio se acercaba a ellos.
¿Les ayudo a guardar las cosas?, dijo Broly.
Si, ¡por favor¡ dijo Milk.
Milk, ¿luego me acompañarías a tomar un helado?, dijo Broly.
No puedo Broly, ya se te olvido que hoy quede en encontrarme con el joven Son, dijo Milk con calma.
Claro, se me había olvidado, ¿puedo acompañarlos?, dijo Broly.
No Broly, discúlpame pero creo que son asuntos de mí hijo que solo me incumben a mí, dijo Milk con calma.
Si, tienes razón, dijo Broly con molestia.
¡Gracias por ser tan comprensivo¡ dijo Milk mientras empezaba a recoger los materiales que había usado ese día.
Milk, ¿me parece qué tú lo conoces o me equivoco?, dijo Broly con calma.
La pelinegra miró su hijo que estaba a varios metros de ellos recogiendo también algunos materiales y dijo: No, no te equivocas. Te voy a pedir algo, ¡por favor¡
¿Qué?, dijo Broly intrigado.
No le comentes a mi padre que hable con Gokú Son, ¡por favor¡ dijo Milk.
¡Qué extraño¡ Gokú Son también me pidió discreción ayer que lo encontré. Dime la verdad Milk, ¿por qué yo he estado sacando mis propias conclusiones?, dijo Broly.
Seré breve y a la vez sincera contigo, sabes que te aprecio mucho, eres un gran amigo para mí, dijo Milk haciendo una pausa antes de continuar hablando.
Gokú y yo nos conocemos desde niños, nuestros padres tienen una gran rivalidad desde que eran jóvenes, se detestan pero a pesar de ello la amistad de Gokú y mía creció y cuando fuimos adolescentes nos hicimos novios, dijo Milk con calma.
¿El es el padre de Gohan, verdad?, dijo Broly con calma.
Si, él y yo no supimos de mi embarazo, cuando mi padre me trajo a este pueblo yo desconocía de ello, luego de unos meses me entere, Gokú se marcho al extranjero desconociendo que íbamos a tener un hijo pero parece que el destino quiso que él y su hijo se conocieran, dijo Milk con calma.
¿Qué harás ahora?, lo más probable es que él ya sepa que es su hijo, por eso está aquí, dijo Broly.
Lo sé, como también sé que no puedo negarle a su hijo, dijo Milk con calma.
¿Aún lo amas?, dijo Broly.
Lo que yo sienta no importa además nuestros padres no permitirán lo nuestro, dijo Milk cuando Gohan llego junto a ellos.
Mami, ve a cambiarte, dijo Gohan sonriendo.
Creo que Gohan tiene razón, deberías cambiarte de ropa ya, dijo Broly con calma.
Eso haré, Broly no comentes con nadie lo que hablamos, ¡por favor¡ dijo Milk con nostalgia.
No te preocupes, no lo comentare con nadie, dijo Broly sonriendo.
Milk fue a cambiarse mientras Gohan se sentó a esperar a su madre en una banca.
Minutos después:
Milk ya cambiada de ropa llegó junto a su hijo para que ambos se fueran a ver a Gokú.
Vamos mami, dijo Gohan tomando la mano del pequeñín para llevarla al restaurante.
Vayan con calma, yo cierro todo, dijo Broly.
¡Gracias Broly¡ dijo Milk.
No agradezcas nada, para eso están los amigos, dijo Broly mientras pensaba: Al menos tú amistad quiero conservar ya que nunca podré conquistarte, ya me di cuenta que sigues amando a Son.
Milk y Gohan se dirigieron al modesto restaurante, Gokú al verlos se puso de pie y fue a su encuentro.
¡Gohan¡ dijo Gokú abrazando al pequeñín.
Papi, dijo Gohan en voz baja.
¡Hola¡ dijo Milk tratando de mantener la calma.
¡Hola¡ dijo Gokú.
Mami, voy a los juegos mientras tú y el señor Gokú platican, dijo Gohan sonriendo.
Me parece bien, dijo Milk.
En cuanto Gohan se fue, el joven de cabello alborotado se acercó a la pelinegra y le dio un beso en la mejilla muy cerca de los labios antes de decir: Sentémonos.
Milk sintió su cuerpo temblar ante aquel beso pero trato de mantener la calma para que el joven de cabello alborotado no notara su nerviosismo.
Milk, es momento de que tú y yo aclaremos muchas cosas, dijo Gokú.
Si, dijo Milk en voz baja.
¿Por qué no me dijiste lo de Gohan?, ¿Por qué me dijiste que te ibas a la Capital Oeste?, dijo Gokú.
Porque cuando me entere de mi embarazo tú ya no estabas en el país además no había forma de decirte nada, mi celular se malogro el día en que mi padre y yo vinimos a este pueblo, él ese mismo día me dijo que los sponsor le cambiaron el pueblo del gimnasio, decía Milk con voz entrecortada.
¿Tú celular se malogro?, dijo Gokú intrigado.
Si, se perdieron mis contactos, no había forma de contactarme contigo ni con ninguno de nuestros amigos, tú habías cambiado recién de número, yo aún no lo había aprendido por eso mantenía la esperanza de que tú me llamaras, pero no paso ello, los días, semanas y meses pasaron y nunca recibí una llamada tuya, yo era menor de edad no podía ir a buscarte, mi padre cuando se entero de mi embarazo casi le da un ataque, lo defraude, tuve que dejar las artes marciales, estuve a punto de perder a Gohan pues yo entrenaba sin saber mi estado, pase muchas cosas, muchas, decía Milk sollozando.
Cálmate hermosa, no comprendo que sucedió, yo te llamaba todos los días a toda hora al igual que los chicos del gimnasio y tus amigas pero tú teléfono sonaba apagado, llegue a pensar que rompiste nuestra promesa por ello decidí irme, irme muy lejos tras mis sueños para así olvidarme de ti, durante tres años no quise saber nada del amor, ni de romances, luego termine cediendo ante la persistencia de Lunch y me hice su novio, pero fue un romance muy corto pues no la amaba no podía sacarte de mi cabeza, entonces empecé a salir con muchas chicas para divertirme, pasar el momento y así tratar de olvidarte pero con ninguna logre ello, no pasaba de absurdos besos sin sentido que no me hacían sentir nada de lo que tú me haces sentir con solo verte. Con ninguna de ellas paso nada Milk, nada, yo siempre cumplí mi promesa pues guardaba muy en el fondo de mí corazón la esperanza de verte algún día, de que podamos recuperar nuestro amor. Cuando vi a Gohan en ese torneo sentí algo tan lindo que no sabría como definirlo y cuando supe su apellido inmediatamente lo relacione contigo,......., decía Gokú tomando las manos de la pelinegra.
¿Qué piensas hacer ahora que sabes que tenemos un hijo?, dijo Milk con calma.
Pienso recuperarlos, a los dos, formar esa familia que soñamos, ninguno de los dos tuvimos la culpa de este distanciamiento, es más ni siquiera rompimos nuestro compromiso, eso significa que seguimos siendo novios, decía Gokú sonriendo.
Gokú eso no puede ser, dijo soltando sus manos del agarre del joven de cabello alborotado.
¿Por qué?, dijo Gokú intrigado.
Tú sabes porque, yo no puedo negarte a tu hijo, pero lo nuestro no puede ser, dijo Milk con voz entrecortada.
Milk, no digas eso, tú me amas aún lo veo en tus ojos, dijo Gokú intentando tomar las manos de la pelinegra.
No Gokú, me dio gusto saber que tú si me llamabas, no se que paso, tal vez el teléfono se descompuso tanto que no recibía llamadas que se yo, pero al menos ya se que tú no te olvidaste de mí pero lo nuestro no puede ser, a tu hijo puedes verlo cuando quieras, eso si tendrá que ser de manera discreta por ahora ya que mi padre esta delicado de salud y no quiero que un disgusto le haga mayor daño, decía Milk mientras el joven de cabello alborotado parecía estar pensando algo.
¿Cómo fue qué se descompuso tú celular?, ¿quién lo reviso?, dijo Gokú.
Mi padre, ¿por qué?, dijo Milk con calma.
Ahora lo comprendo todo, dijo Gokú sonriendo mientras miraba a la pelinegra con dulzura.
Nota:
¡Gracias a todas las personas que siguen, votan y se dan el tiempo de dejar sus comentarios para esta bella historia de amor que esta entrando ya en sus últimos capitulos¡
Gokú y Milk ya se encontraron y aclararon todo lo que paso con respecto a su separación y a Gohan, ¿que sucedera ahora?, lo sabran en los siguientes capítulos.
Esta al igual que cada una de mis historias las escribo con muchisimo cariño para todo aquel que guste leerlas.
PrincesaLirio.
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