Noventa y dos
— Tranquilo. — dijo Fred tomando de los hombros al castaño, volviendo a sentarlo —, Yo no estoy más con Deuz. Terminé con él porque, yo te quiero a ti. Y quiero ser mejor, para ti.
Los ojos de Freddy brillaron, como esas veces en las que vas a llorar, pero de felicidad; — Yo no sabía... ¿Desde cuándo?
— Desde que no te besé, pero eso no importa.
— Fred.
— Estoy feliz de gustarte, porque tú también me gustas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro