Al llegar a la distancia de nuestros labios, los cuales solo los separaban una fina línea imaginaria, Keegan se echó hacia atrás con una sonrisa en los labios. Y automáticamente mi boca eliminó el aire que había estado conteniendo y por instinto aparté mi mirada de su rostro.

—Tranquila, Jenkins. No pensabas besarte ahora...—Un brillo pícaro se encendió en sus dos mares azules—bueno, nunca, en realidad.

Una extraña sensación recorrió mi cuerpo, no supe que pensar ante esto o cómo responder. Me sentía ajena a mis pensamientos, era imposible de llegar a ellos y que me gritaran una respuesta. Me sentía diferente e incómoda.

Y en lo profundo, tal vez un poco decepcionada.

Decidí soltar una pequeña risa con indiferencia, en cambio me pareció monótona y automática. Mis hombros se relajaron al ver que Keegan no percibió mi rara actitud o tal vez si lo hizo pero agradecí que no haya dicho ningún comentario al respecto.

Claire, vamos, recuerda a Claire. ¿Cómo es que pude olvidarme de ella por un segundo? Ni siquiera Damien pasó por mí mente.

—Oigan, niños, ¿ya terminamos de ver Esposa de Mentira?—La voz ronca de Ethan habló.

Aún no lograba entender su afán de llamarnos niños, solo eran cinco años de diferencia, ¿no? Me obligué a responder tratando de dejar la situación de hace unos segundos atrás y me enfoqué en un recién despertado Ethan.

—No estábamos viendo eso.—Respondí y Ethan entrecerró sus ojos.

—¿En serio?—Se encogió de hombros y dio un gran bostezo—. Bueno, deberían, está Jennifer Aniston.

—En realidad soy más del team Angelina.—Confesé y la cabeza de Ethan se giró hacia mí y el horror se reflejaba en su rostro.

Keegan se inclinó en mi dirección de manera confidencial para murmurar:

—Retira lo que dijiste, Ethan no permite a Brandgelina por aquí.—Una gran sonrisa de diversión se dibujó en su rostro y yo hice una mueca. No estaba lista para bromear, me sentía tensa.

Antes de que pudiera contestar, la habitación fue inundada por un agudo timbre de tono de llamada de algún celular.

—Mierda, es Susie.—Exclamó Ethan mirando la pantalla de su celular con el sueño fruncido. Apretó sus labios y luego dio una gran bocanada de aire y contestó la llamada con sus ojos cerrados—. Hey, Su, ¿cómo va todo? Sí, sé que dije que te llamaría pero tuve que... está bien, no hay razón para utilizar lenguaje inapropiado. Bien, sí, concuerdo contigo, soy un asno y... espera, ¿no habían prohibido la palabra con j en 1973? Bien, sí, ¡ya, mujer, lo entendí!... bueno, te veo en una hora... te quiero... ¿hola? ¿Susie?¡Mierda!—Dijo disgustado al observar la llamada finalizada en la pantalla y giró a vernos.

—No.—Dijo Keegan y Ethan rodó sus ojos.

—Vamos, será divertido. A tu novia le gustará.

—No.—Reafirmó Keegan y se levantó con seguridad para luego clavar sus ojos en mí—. Te llevaré a casa.

—Pensé que no tenías auto.—Respondí dudosa.

—No lo tengo, pero es tarde y no es seg...

—Keegan, por favor, vamos, será divertido...—Siguió insistiendo Ethan levantándose del sofá y acercándose a nosotros con un semblante de súplica.

No entendía la conversación silenciosa que los dos tenían paralelamente a la situación real que pasaba en este momento.

—¿De qué hablas, eh, Ethan?—Me dirigí al amigo de Keegan y él esbozó una sonrisa.

—Una fiesta, ¿quieres ir a una fiesta? A todo el mundo le gustan las fiestas.

—Sí, pero es dif...

—Esta bien.—Interrumpí al chico a mi lado. Las palabras habían brotado de mi boca antes de que me diera cuenta y no sé por qué acepté la invitación; si era solo para molestar a Keegan o por razones más profundas que solo eso.

No quise pensar demasiado, por qué sabía que encontraría la respuesta y estaba segura de que no me gustaría y no estaba lista para aceptarla, prefería que esa oración nublada en mi mente siga sin enfocarse, que siguiera en la oscuridad y no preocuparme por ello. No quería admitir que si lo decía en voz baja, se hiciera realidad.

—Jenkins, te dejaré en tu casa, no irás.—Dijo con autoridad en su voz y yo alcé mi barbilla con seguridad, no sé por qué estaba tan confiada.

—Iré, es solo una fiesta.

—Mierda...—Keegan se dio vuelta y apretó el puente de su nariz con una mueca en su rostro.

No hice ningún comentario al hecho de que haya mencionado esa palabra.

Dejó caer sus brazos hacia sus lados y miró hacia el techo por unos segundos. Tomó si chaqueta, la que le había devuelto, y la pasó por su cuerpo.

—¿Y bien? ¿Qué esperan?—Cuestionó con voz cansada para marchar hacia la puerta.

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—Creo que debería empezar a hacer ejercicio por qué como que esto de la belleza interior no me está funcionando.—Dijo Ethan mirando su cuerpo, negando levemente con la cabeza.

Caminábamos por unas calles demasiadas oscuras para mi gusto, pero ellos dijeron que todo estaría bien cuando les informé si no era mejor pedir un taxi. No quería demostrar explícitamente mi arrepentimiento al aceptar acompañarlos.

—Estoy de acuerdo contigo, tú siempre pierdes todo, menos peso.—Replicó Keegan y Ethan lo golpeó en la parte trasera de su cabeza.

—Niño.—Masculló entre dientes y yo sonreí levemente—. Hey, Sam, ¿eres romántica?

Abrí mis ojos por la sorpresa al brusco cambio de tema y más por qué me involucraba. ¿Yo era romántica? Una empedernida, supuse.

—Un poco.—Decidí responder y Keegan hizo un ruido nasal simulando una risa.

—Esta chica te derretiría si solo la escucharas cinco minutos hablando.—Informó y mi pecho se encogió.

Esa sensación otra vez. Tenía que desaparecer, era horrible, me disgustaba.

—Eh, bueno, mira...—Ethan se volvió a concentrar en mí—, digamos que lo más romántico que yo haya hecho bajo la lluvia es quitar la ropa del tendedero, ¿entiendes? Y ahora, Susie debe estar esperándome para realizarme una castración química en este momento, ¿qué crees que debo hacer?

Nuestros pasos resonaron por el pavimento, el ambiente estaba muy silencioso. Caminé con mis manos en el bolsillo y me repetía si mi ropa no era muy adecuada para esta fiesta. Pero bueno, no iba a tener tacones en la mochila de la escuela, ¿no?

—Eh, bueno, podrías disculparte, supongo.—Respondí y Ethan alzó sus cejas evaluando la posibilidad.

—Eso es, Ethan. El orgullo no engorda, trágatelo de vez en cuando.—Keegan le dijo a su amigo mientras cruzábamos una calle con el semáforo en luz verde.

Debe ser lo más malo que haya hecho en mi vida.

—¿Qué sabrás tú, idiota?—Ethan río—. No diré mucha información por qué la madre del pequeño Ethan está aquí pero tú no eres el mejor ejemplo.—Aseguró y Keegan refunfuñó un poco para luego segur caminando en silencio unos pasos más adelante.

Llegamos a un estrecho lugar donde a la vista solo había una gran puerta metálica. El ambiente exterior era muy silencioso pero si uno escuchaba con atención, se podía escuchar la música retumbar en el interior con algunas risas lejanas. La puerta se abrió bruscamente, revelando a una chica de cabello castaño muy corto, era de estatura media—al menos con tacones puestos—un piercing adornaba su nariz y casi la totalidad de sus orejas.

—Hola, muñeca.—Exclamó Ethan dando unos pasos adelante, hacia donde se encontraba la chica que lo observaba con el entrecejo fruncido.

—Hola, tobillo.—Respondió secamente para después menear sus caderas amargamente hacia el interior y un desesperado Ethan pisándole los talones.

Supuse que ella era la tal Susie. Podía notar el brillo de su vestido desaparecer en el interior. En cambio, yo vestía uno de mis grandes suéteres con zapatillas deportivas y una coleta de caballo. Le hice saber a Keegan de mi inquietud ante este hecho pero él solo se encogió de hombros y movió su mano restándole importancia.

—Tranquila, Susan siempre viste exagerada.—Chasqueó su lengua mientras miraba fijamente la puerta de metal. Ladeó su rostro y me estudió por unos segundos y una media sonrisa se dibujó en su rostro y arrastro sus palabras—. Además, me gustas así, toda rara y mensa.

N/A Hello my dears 💕💕💕 anyway, ah, ojalá pudiese ver sus rostros al ver que, en realidad, no hubo beso (me había gustado leer sus comentarios).

Ah, bueno, ajá. Les traje un capítulo largo en mi opinión (miti-miti). Espero que le haya gustado, faltan cosas por venir pero debido a la extensión de este capítulo, las leerán en el próximo ❤️❤️❤️ Keegan baby.
Pd: Ethan is love, Ethan is life.
Aquí Keegan ❤️

Mitch