HoSeok no esperaría más, ya lo había decidido horas después de hablar con TaeHyung. Tocó la puerta del departamento del menor, le daba igual que fueran las doce de la noche, Chae Young cuidaba a Momo así que estaba todo bien, no tenía nada de qué preocuparse salvo el hombre que estaba en ese lugar y al cual le debía una explicación.

Escuchó unos ligeros pasos acercarse a la puerta antes de que la voz de Tae preguntara por la persona que había ido a esa hora a su casa.

-Soy HoSeok.-su voz había sonado más seria de lo que hubiera querido.

Estuvo exactamente un minuto y medio esperando a que TaeHyung le abriera la puerta. No había oído pasos por lo que sospechó que se debatió ahí mismo si abrirle o dejar que se fuera. Pero al fin de cuentas abrió y lo dejó ingresar, su mirada triste y molesta.

-Lo que sea que vengas a decir, dilo rápido y vete.-supo que estaba siendo brusco con él por miedo, lo pudo notar en sus manos que temblaban y sus ojos que prácticamente le pedían quedarse con él.

-Vengo a hablarte de Momo.-los ojos de Tae lo observaron desconcertado y preocupado-está bien, no le ha pasado nada.

-Entonces ¿a qué vienes? Te dije que si querías jugar conmigo...

-No-lo interrumpió-te dije que confundes las cosas con Momo y Chae Young. No juego contigo, estás creyendo puras estupideces pero me disculpo porque es mi culpa que lo hagas.-lo vio cruzarse de brazos, frunciendo el ceño.

-¿Y ahora de qué me quieres hablar? ¿De qué me quieres convencer? ¿De que Chae y tú no tienen ni tuvieron nada? ¿De que imagino cosas que no son?

-No, no vengo a convencerte de nada, sólo vengo a decirte la verdad.

-¿Verdad? ¿Cuál verdad? ¿Qué Momo vino una noche de borrachera cuando tú y Chae fueron a una fiesta?-el menor rodó los ojos y HoSeok se dijo a sí mismo que debía calmarse.

-Momo ni siquiera es mi hija-vio los ojos de Tae abrirse ante la sorpresa, supo que le había creído pues su tono había sido completamente sincero-y Chae Young tampoco es su madre.

-¿Q-qué? Estás mintiendo ¿verdad?

-No, estoy diciendo la verdad, no somos los padres biológicos de Momo.-la mirada de intriga de TaeHyung lo hizo seguir-sólo mi abuela, una amiga de Chae y JiMin saben esto, por eso no le gustaba hablar del tema, no cuando él sabía lo que sentías por mí, sentimientos que ignoraba por idiota. No creí que fueras a pensar que Chae y yo somos algo, ella es sólo mi mejor amiga, casi una hermana. Pero entiendo que no fuimos muy sinceros, ni siquiera cuando empezamos con nuestra relación lo he sido y te pido disculpas por eso.-suspiró sentándose en el sillón y viendo al menor hacer lo mismo.

-No entiendo, HoSeok...explícame-pidió con una voz más suave y amable que antes.

-Fue hace tres años, cuando te fuiste. Chae Young tuvo un momento de depresión, pasó meses sin salir de casa. La muerte de su madre meses antes y la separación con su última pareja la habían dejado mal, muy mal. Jamás había pensado verla tan destruida. La visitaba cada vez que podía, le decía que los niños la extrañaban y que esperaban verla pronto, JiMin y yo hacíamos lo que podíamos para verla mejor. Comenzó a mejorar, aunque seguía sin salir de casa.-otro suspiro escapó de sus labios y miró el techo-fue un día cuando salía de su casa, tarde en la noche. No me había alejado mucho cuando escuché ruidos extraños en un montículo de basura que estaba en la calle. Pensé que era un gato que buscaba comida, cuando sentí que el sonido parecía provenir de adentro de una bolsa. Yo...fui a ver, creí que se trataba de un animal indefenso que estaba atrapado pero...cuando abrí la bolsa...fue horrible ver a un bebé de pocos días ahí, casi muriendo, TaeHyung.-sus ojos se cristalizaron ante el recuerdo, pero siguió relatando-no sabía cómo reaccionar del todo, mi mente se nubló y lo único que hice fue tomarla, envolverla en mi chaqueta y correr de nuevo a casa de Chae. Ella...llamó a su amiga para que la atendiera. Por suerte llegamos a tiempo antes de que tuviera algún problema grave, así que no fue tan malo, hasta que ella dijo de informarle a la policía. Si lo hacíamos ellos conseguirían a una familia para Momo, personas que la tendrían bien. Pero...cuando vi a Chae tomarla en brazos y sonreírle como hacía tanto no lo hacía...no sé, simplemente no pude, mejor dicho, no pudimos hacer eso. Si le informábamos a la policía y decidíamos quedarnos con la niña llevarían meses los papeles de adopción, demasiado tiempo a decir verdad y cabía la posibilidad de que no nos dejaran adoptarla al no ser pareja. Así que...la amiga de Chae nos ofreció falsificar archivos, hacer de cuenta que ella se hizo controles a escondidas con ella y que Momo nació en casa. Fingir que llevó meses de embarazo sería sencillo y creíble gracias a los meses que pasó sin salir de casa, así que no lo pensamos y...lo hicimos. Fingimos que Momo era hija biológica nuestra para evitar complicaciones, aunque optamos que viviera conmigo hasta que Chae se recuperara de su depresión.-al abrir los ojos vio a Tae mirar el suelo pensativo-si no me crees, puedes hablar con JiMin, él no va a mentirte y lo sabes.

-No, yo...te creo, ahora siento que todo tiene sentido.-aun sin atreverse a mirarlo, preguntó-¿Momo sabe?

-Solo que Chae y yo no somos sus padres biológicos, pero nada más. No pareció molestarle tampoco, solamente preguntó si por eso la íbamos a querer menos cuando tuviéramos un hijo de nuestra sangre.-sonrió-pensamos confesarle el resto cuando sea más grande, pero lo importante al menos ya lo sabe.

-Entiendo.-los ojos de TaeHyung no mostraban emoción alguna y no sabía si eso era bueno o malo.-entonces ¿jamás tuviste una relación con Chae Young?

-No, sería imposible, es homosexual.-vio los ojos del menor abrirse con sorpresa-¿no lo sabías?

-Ni que anduviera preguntando esas cosas a la hermana de mi amigo.-el sonrojo en sus mejillas le hizo darse cuenta que se había sentido tonto por todo-yo...eh...¿por qué...le pusiste Momo?-la repentina pregunta simplemente buscaba ocultar su reciente vergüenza, lo conocía demasiado bien.

-Era el nombre de una profesora de la universidad a la que quise mucho.-sintetizó acercándose-TaeTae...mírame.-el menor no lo hizo y HoSeok tuvo que tomarlo del mentón para que lo haga-TaeTae...

-Lo siento-dijo rápidamente desviando la mirada-lo siento yo...me comporté como un niño y...-rodó los ojos divertido antes de callarlo con un beso en los labios, uno profundo y necesitado, de esos que había extrañado darle en esos días sin verlo.

Lo agarró con fuerza de la cintura, acercándolo a su cuerpo para que se sentara sobre él, las piernas a cada lado de su cadera. Mentiría si dijera que esos días sin él habían sido sencillos, lo había necesitado mucho a su lado, besarlo, abrazarlo y sentirlo.

Sin duda alguna, sin Kim TaeHyung se sentía perdido.

~Sonríe~

Un mes después...

Ese día, aprovechando la ausencia de Eun Yeong y Byeong Ho quienes habían ido a cenar, JungKook y Jin se quedaron en la habitación del mayor, ambos sentados en la cama mirando una película. El mayor, por pedido mudo, lo mantenía abrazado contra su pecho y acariciaba sus brazos mientras observaban la trama que habían elegido.

Luego de arreglarse aquel día, su relación volvió a ser buena, aunque no volvieron a salir. Seok Jin lo entendía así que no decía nada, quería que él tuviera la confianza suficiente para ser quien lo invitara al ya sentirse listo. No quería que dudara al ver a los demás hombres que, según Kook, eran mejores. Sin embargo, no salieron de casa juntos nuevamente, en su lugar el mayor lo invitaba a ver películas en su cuarto o la sala, o bien hablaban de variadas cosas como acostumbraban. Eso era suficiente

Su mano viajó por el pecho de Kook, la película ya había perdido importancia para él desde hacía minutos, lo único que disfrutaba era estar de esa forma con el mayor, sintiendo sus brazos alrededor de su cuerpo y sus caricias en sus brazos. Levantó la cabeza que seguía apoyada en el hombro ajeno, viendo el perfil del hombre al cual amaba y pensando lo mucho que quería besarlo. Sinceramente el ambiente era bueno, todo estaba oscuro salvo por la luz del televisor y el volumen lo suficientemente alto como para no molestarlos a ellos si decidían tener una charla casual.

Se levantó un poco para que sus labios alcanzaran la mandíbula y dejó un suave beso antes de volver a apoyarse en el momento en que JungKook volteó a verlo, haciendo de cuenta que no había cometido ninguna travesura. En cuanto volvió a mirar la película, se alzó un poco más y besó el lóbulo de la oreja, escuchando para su sorpresa un suspiro placentero. Observó a Kook fijamente, este hizo una mueca de incomodidad mientras seguía con los ojos en la trama.

-No vuelvas a hacer eso-dijo con voz grave y seria.

-¿Por qué? No pareció ser nada malo-comentó sincero, JungKook se mordió el interior de la mejilla.

-Ese es el problema.-Jin juró que la sonrisa en su rostro fue inevitable.

-Así que...ese es tu punto sensible.-murmuró separándose del mayor para colocarse sobre él-interesante.

-Jin, no hagas lo que pienso que vas a hacer.-advirtió intentando alejarlo de la cadera, pero cuando se acercó dejando su aliento cerca de su oreja pareció perder fuerzas-J-Jin...

-Shh...te gustará-antes de escuchar objeciones, su boca atrapó el lóbulo y un gemido escapó de los labios de JungKook.

Era cautivador escucharlo suspirar y gemir cada vez que chupaba ese sector o brindaba besos alrededor de la zona. Era extremadamente sensible en ese lugar y lo complacía haberlo descubierto. Sus manos apretaban los hombros mientras sus labios se encargaban de complacer a Kook con besos o succiones, dejando que lo tomara de la cadera y apretara todo lo que quisiera para retener algunos gemidos o suspiros.

En un momento de distracción, el mayor lo separó y le plantó un beso tan apasionado que sintió que se desmayaría. Lo había dejado sin aliento y al momento de separarse un hilo fino de saliva unía ambas bocas. Sus mejillas estaban calientes, por lo que sospechaba que estaría rojo.

-No vuelvas a hacer eso, soy muy sensible ahí y un simple beso me excita demasiado-confesó pasando las manos por sus mejillas-aunque tu simple imagen ahora mismo me excita más... ¿cómo es posible que te veas tan bien así de desastroso? Dios, me haces mal, Seok Jin.-antes de poder responderle, la boca de Kook volvió a besarlo con ganas, logrando que sus manos se aferraran al oscuro cabello mientras se deshacía en sus brazos.

Bien, la película no era muy importante como para que tuvieran que prestarle atención.

Y aquí la historia de Momo, quizás muchos se lo hayan imaginado, quizás no, pero así lo imaginé desde el principio...así que espero que les haya gustado n.n

Además de la historia de Momo un momento del KookJin con un Jin juguetón 7u7 

Nos vemos en el proximo! besos💋💋💋