Tras el desayuno y teniendo en cuenta que no tenía mucho para hacer, Jin se dedicó a pintar en los libros que Kook le había regalado el día anterior. Era lo más entretenido y lo que más lo distraería hasta la hora del almuerzo. Tal y como hacía en el hospital cuando iba por sus tratamientos o recaía gracias a algo que no debía hacer.

Cambió el lápiz rojo por el anaranjado antes de seguir coloreando el florero con tres distintos diseños de flores. Todas muy bonitas. Con cuidado de no pasarse de los bordes, coloreó uno de los pétalos, cubriendo toda la parte blanca con ese bonito color llamativo. Así siguió con los otros pétalos que componían el dibujo.

Iba bien, coloreando perfectamente, cuando escuchó tres toques fuertes en la puerta que lo asustaron, causando que hiciera un rayón fuera del dibujo por error. Suspiró, dejando el lápiz de lado para levantarse y abrir la puerta.

-¿Sook? ¿Ha pasado algo?-preguntó al ver a la mujer frente a su puerta.

-El joven Jeon quiere verte, está en su habitación.-informó con una pequeña sonrisa antes de regresar a sus tareas.

Seok Jin no lo pensó demasiado y caminó por el pasillo, bajó por la escalera y llegó rápidamente a la habitación de JungKook. Tocó suavemente la puerta y, tras su permiso, giró el picaporte para ingresar.

-Sook dijo que querías verme.-comentaba entrando, viendo al mayor distraído en su escritorio haciendo algo que no podía ver bien.

-Necesito tu ayuda en algo.-dijo cuando escuchó que la puerta se cerraba.

-¿En qué, JungKook?-cuando dio unos tres pasos, Kook volteó.

-¿Puedes enseñarme a hacer grullas?-Jin sonrió al ver los intentos de JungKook en el escritorio-los tutoriales de YouTube mucho no me han ayudado.

De haber podido, Seok Jin hubiera reído por el tierno pedido. Pero como aun sentía que no tenían esa confianza, simplemente se limitó a sonreír y asentir, apoyándose contra el escritorio para comenzar a explicarle a JungKook paso a paso.

Estuvieron un buen rato haciendo grullas, aunque el mayor hizo su mejor intento. Al menos había logrado hacer tres bien aunque el resto terminó como basura en un pequeño cesto que tenía en su habitación. Había sido divertido verlo molesto cuando una parte no le salía, eran esos momentos en los que el menor quería reírse de él por la forma en que arrojaba el papel (hecho una pelota) hacia el cesto, como si tuviera la culpa de que no le saliera.

Él había logrado hacer unas cinco las cuales le regaló a Kook, quien las aceptó con una mueca de molestia, ya que, según él, se las daba porque consideraba que había sido un desastre. Bueno...no había estado muy alejado de la realidad, en parte.

-Bien, es hora de que vaya a hacer el almuerzo.-informó dando unos pasos hacia la puerta.

Pero antes de alejarse, la mano de Kook lo detuvo. Giró a verlo sin descifrar del todo su mirada. Tampoco lo pensó mucho cuando lo soltó y negó en silencio. Simplemente se fue para preparar el almuerzo antes de que los señores Jeon llegaran.

~Sonríe~

JungKook se quedó mirando las grullas que habían hecho juntos esa mañana mientras Jin, en la cocina, preparaba el almuerzo. Vio el blanco papel con todos sus dobleces formando el lindo animal que movía sus alas al tirar de su colita.

Tomó una y la hizo mover sus alitas con lentitud. Sonrió orgulloso de haberlo logrado, los tutoriales de internet se le habían hecho complicados de entender. Pero las explicaciones de Jin resultaron mucho mejor que un tutorial y su compañía la mejor cura de la soledad que inundaba todavía su corazón. Quiso retenerlo unos minutos más a su lado, que se quedara con él en su pequeño espacio, en su pequeño lugar, pero sabía que no podía ser egoísta. El menor tenía que hacer su trabajo y estar con él no lo era. Así que lo dejó ir, su mente pensando en estar con él en la cocina, viéndolo y hablando. Pero se abstuvo, ¿no era raro que quisiera estar con Seok Jin? Sólo era su empleado, nada más. Aunque su presencia era completamente tranquilizadora y perfecta para un alma desastrosa y desamparada como la suya.

Suspiró dejando la grulla sobre la mesa, luego se encargaría de guardarlas donde tenía a las demás. Con ayuda de sus manos cruzó su pierna, cambiando de posición para evitar que las escaras empeoraran. Tal vez sería bueno ver a JiMin hoy ya que tenía entendido que TaeHyung estaría ocupado ese día aunque no sabía con qué. No quiso decir nada en el grupo en el que estaban los tres. Sospechó que se trataba de un trabajo importante.

Tiró su cabeza hacia atrás, mirando el techo de su habitación y pensando si estaba bien pasar más tiempo con Seok Jin.

~Sonríe~

JiMin terminó de ducharse luego de volver de su trabajo, encontrándose con la soledad de su hogar. Ese día Chae Young cenaría en casa de los Jung, por lo que estaría solo hasta las doce de la noche aproximadamente. Ella solía quedarse para jugar con su pequeña también, Momo era una niña muy adorable que te convencía de jugar con ella con tan sólo una miradita con sus ojos dulces.

Sonrió ante el recuerdo de su sobrina, recordando también el daño que le hacía la familia de HoSeok a su amigo Tae. Sabe que Momo no tiene la culpa, mucho menos HoSeok y Chae Young, ninguno de los tres tiene la culpa de lo que pasó. Fueron tan sólo simples acontecimientos que llevaron a hacerlos una familia, a pesar de que su hermana y su mejor amigo no se amaban, al menos no de la forma que TaeHyung cree.

Se colocó la ropa interior y un pantalón cómodo para estar en casa. Estaba solo y no tenía que andar completamente vestido para evitar los regaños de Chae. Bajó a la cocina y se preparó un té, pensando en ver alguna serie o una película para despejar su mente desastrosa por el trabajo. Tomó la tetera donde hervía el agua, cuando en el reflejo logró ver su rostro con las cicatrices que la marcaban. Habían sido pocas las que se habían ido y apenas quedaba una pequeña línea, pero había otras que sin importar las cremas o lo que sea que usase, no se iban y perduraban ahí, casi desfigurándolo.

Dejó todo en su lugar, apagando la estufa y olvidándose de su té. Subió la escalera otra vez, pensando en encerrarse en su cuarto. Ya no estaba de ánimo para nada.

Su celular quedó en la sala, mostrando los mensajes que llegaban pero que JiMin ignoró por completo.

~Sonríe~

Alexander se disculpó una vez más con Christopher, NamJoon era un idiota. Limpió el labio del mayor, quitando los rastros de sangre y escuchándolo quejarse. No entendía por qué su mejor amigo, si es que lo seguían siendo, se acercó hasta él y lo atacó partiéndole el labio de un golpe. Según Christopher él simplemente iba hacia él, con el ramo de rosas que compró para Megan, su novia, llegó de la nada Nam y lo golpeó.

Alex había estado de espalda, por lo que no vio cómo había pasado todo en realidad, sólo supo que NamJoon golpeó a Chris ya que al voltear lo vio a punto de darle un tercer golpe.

Había sido difícil separarlos, pero al lograrlo tomó al mayor del brazo y se lo llevó con él.

-¿Estás seguro que no hiciste algo más? ¿No lo provocaste de alguna manera? Conozco a Nam, él no atacaría por atacar.-insistió dejando el algodón mojado a un lado.

-Él me atacó de la nada, ya te dije, sólo me acerqué contigo y...God!-Chris vio las rosas arruinadas, quería sorprender a Megan con esas bonitas doce rosas rojas, al fin ella había logrado terminar con sus estudios en Inglaterra y podría ir a vivir con él a Corea.

-Lo siento, vamos al aeropuerto, estoy seguro que falta muy poco para que su vuelo arribe. Yo compro otro ramo de rosas.-se ofreció culpable Alex, Chris lo miró, intentando esbozar una sonrisa.

-No es necesario, no te preocupes, Megan lo entenderá. Ahora vamos antes de que piense que no iré por ella.-revolviendo su cabello rubio, se levantó y caminó hacia la puerta.

Alexander lo siguió pensando que debería hablar con NamJoon con respecto a lo que había hecho.

~Sonríe~

Esa tarde la señora Jeon le comunicó a Jin que saldría con su esposo, por lo que Kook quedaría solo en la cena. Joseph había optado por ayudarlo para distraerse de lo que su hermano estaba pasando. Seok Jin no dijo nada, solamente permitió que lo ayudara en silencio, indicándole lo que debía hacer. Aoi también estaba algo triste tras la pérdida de su abuela, así que Sook se encargaba de pedirle que realizara diversas tareas para mantener su mente ocupada. Podía verla pasar de un lado a otro, llevando y limpiando muebles o habitaciones. Un semblante decaído en su joven y bonito rostro.

Cuando sólo quedaba servir el plato para JungKook, Seok Jin tomó la mano del hombre con suavidad, sonriéndole amablemente.

-No te preocupes, yo me encargo de esto.-Joseph intentó sonreírle pero no pudo, por lo que optó por abrazarlo fuertemente, sabiendo que las palabras no serían de mucha ayuda.

El mayor se aferró a él con fuerza, derramando unas lágrimas en su hombro con mudos sollozos que dejaban ver el dolor reprimido. Acarició su cabello, pensando en lo mal que la estaba pasando él. Su hermano Peter junto a su cuñada Alice y sus sobrinos Charlie y Ashley era la única familia que aún tenía. Según recordaba, de lo que Elizabeth le contó, Joseph tuvo una esposa que murió mucho antes de darle hijos. Nunca quiso volver a intentar nada con nadie y quedó solo, simplemente con la compañía de su hermano y su familia. Sus padres habían muerto hacía unos pocos años, por lo que sólo los tenía a ellos. Saber que Peter podría morir, dejando a su mujer e hijos solos, era algo que lo rompía lentamente, sobre todo porque tras la muerte de su querida esposa él estuvo a su lado, consolándolo y dándole ánimos para seguir viviendo.

Cuando supo de la historia de Joseph, recuerda haber sentido un nudo horrible en la garganta. No podía creer que alguien tan amable y generoso como él había sufrido tanto.

Cuando sintió que se calmó, se separó y lo tomó de las mejillas, haciendo que se inclinara un poco para darle un beso en la frente. Le sonrió de manera fraternal antes de darse la vuelta para servir el plato de comida de Kook.

Escuchó un murmullo del mayor agradeciéndole para luego dejarlo en la cocina, terminando de servir el plato de comida para llevárselo a JungKook. Caminó hasta el lugar, viéndolo ya esperando en su lugar con gesto pensativo. Pensó que lo ignoraría, así que dejó el plato frente a él pensando que debía servirle al resto para comer junto a ellos. Pero en cuanto quiso alejarse, el mayor lo tomó de la muñeca sin mirarlo.

-Cena conmigo, por favor.-Jin sonrió dulcemente ante el pedido y le dio una caricia en el cabello antes de volver a la cocina para servirle la comida al resto y luego servirse un plato para él.

Volvió al comedor, donde Kook esperaba sin haber tocado ni un bocado y se sentó enfrente. Le sonrió amablemente, viendo los ojos oscuros de Kook observarlo para luego dedicarle una pequeña sonrisa también como agradecimiento por su compañía.

Durante los primeros bocados no dijeron nada, simplemente se concentraron en probar algo de la comida antes de que una pequeña duda surgiera en JungKook.

-Tú... ¿tienes alguna especie de relación con YoonGi?-Jin lo miró sorprendido ante la pregunta.

-Sólo somos mejores amigos ¿Por qué?

-Me sentí curioso al respecto, es que cuando vino hace unos días él parecía muy...protector contigo.-comentaba recordando su actitud cuando estuvo de novio con la chica que lo abandonó tras quedar en silla de ruedas.

-Oh, YoonGi siempre ha sido así conmigo. Desde que era pequeño, siempre me cuidó, ya sabes, por mi problema. Además él nunca tuvo hermano por lo que JiSoo y yo somos como sus hermanitos menores.-explicó para luego con los palillos llevar algo de comida a su boca.

-Entiendo...pero él parece...no sé...siento como si te viera de manera distinta a la que se ve un hermano.-ante sus palabras, Seok Jin terminó riendo.-¿Qué es tan gracioso?

-YoonGi sólo me ve como un hermano, puede parecer que no, pero él no está interesado en mí de esa manera. Él...podría decirse que está interesado en otra persona.-sonrió, recordando la conversación que tuvo con su mejor amigo con respecto a JiMin.

-Ya veo...lo siento, pensé que él podría verte como algo más que un amigo porque su actitud...su forma de ser contigo, me recordó a cuando estaba con Tzuyu antes de que, bueno...antes de que me dejara por esto.-dijo con amargura, recordando aquel día.

-Yo...entiendo que sea doloroso, sobre todo si aún la quieres, pero creo que fue bueno. Digo, no quiero que lo malentiendas, sólo...si ella te dejó era porque no estaba preparada para una situación así. Por lo que era preferible eso a que siguiera a tu lado y se hicieran un gran daño mutuo durante un buen tiempo. Además cuando determinadas personas se van de tu lado, es porque no estaban destinadas a estar contigo por el resto de tu vida. El destino es inteligente y sólo permite que se queden las personas que realmente deben estar contigo.

-Yo de verdad la amaba ¿acaso al destino le gusta ser hijo de puta?

-Sólo a veces, pero siempre es para traerte algo mejor a tu vida.-estirando su brazo tomó la mano del chico, apretándola ligeramente.-sólo debes ser paciente.

-Han pasado tres años ¿Cuánto más debo esperar?-preguntó sintiendo el suave apretón en su mano.

-Simplemente...sé paciente.-murmuró con una suave sonrisa.-la espera será muy bien recompensada, ya verás.

JungKook lo miró y, sin poder evitarlo, sonrió ante la gran sonrisa del menor frente a él.

JungKook, escucha a Jin, él sabe lo que dice 7u7

ya voy por el capitulo 24...y ni un beso....ni siquiera hay amor :v no de pareja al menos :v esto va lento ._. pero más realista que un amor que surge a los pocos días de conocerse UuU además aun faltan muchas cosas...faltan que aparezcan otros personajes y....bueno iré viendo XD ni siquiera tengo el final aun...bueno sí lo tengo, así que esperenlo con pañuelos y helado...NO MENTIRA NO ME MATEN *se va a esconder*

nos vemos!!! besos💋💋💋