-Sonríe XIX-
Ya era la mañana del 30 de diciembre y Seok Jin terminaba de preparar las maletas para irse a casa, aceptando los cuatro días extras que Eun Yeong le dio para que pudiera festejar el cumpleaños de su hermanita también y pasar más tiempo con las mujeres que amaba.
Había considerado no aceptar los días, o al menos no los cuatro sino sólo dos para poder pasar el cumple de JiSoo con ella...pero la actitud de JungKook le hizo cambiar de opinión.
En esos días que su relación tuvo un gran retroceso, uno demasiado grande desde su punto de vista, el chico parecía muy arisco, incluso con sus padres quienes no entendían su reacción. Se la pasaba encerrado en su cuarto o en el despacho, distrayéndose con vaya-a-saberse-qué. Casi no hablaba y cuando compartían un lugar en común, ya sea por casualidad u obligación, Seok Jin sentía el ambiente demasiado tenso, casi asfixiante. Kook no lo miraba, ni parecía notar su presencia, pero por algún motivo se sentía completamente incómodo a su lado. Byeong Ho había llegado a notar esto, igual que su esposa, y hacían lo posible para mantenerlos alejados. Incluso Sook y Elizabeth solían distraerlo pidiéndole ayuda en algún trabajo lejos del menor de los Jeon. Internamente agradecía ese gesto de ellos, de verdad no sabía si seguiría con vida si pasaba cinco minutos al lado de JungKook. Su compañía ya no era grata como antes.
Al ver sus cosas listas miró el reloj de pared y bajó a la cocina, tenía que hacer el almuerzo. Pero al llegar se encontró con la señora Jeon cocinando en su lugar. Se acercó a ella, sabiendo que entrometerse no era buena idea, y se sentó en una de las sillas para observarla.
-Pensé que yo debería hacer el almuerzo.
-Quería cocinar para ti antes de que te fueras.-la sonrisa de Eun Yeong decayó en cuestión de segundos-Jinnie.
-¿Sí?
-¿Qué pasó entre mi Kookie y tú? Antes...se veían tan bien, riendo y compartiendo parte del día, pero ahora...¿Qué sucedió, Jinnie?-la voz de la mujer sonaba tan preocupada que Seok Jin sintió una punzada en su corazón.
-Sólo... que él y yo nos estábamos volviendo muy cercanos y antes de confundir las cosas, creí mejor distanciarnos para evitar malos entendidos. No pensé que lo tomaría tan mal.-Eun Yeong se sentó frente a él.
-¿Qué quieres decir con confundir las cosas?-preguntó suavemente, tomando sus manos.
-Yo...no quería que JungKook confundiera nuestra amistad...con algo más.-avergonzado al estar hablando eso con la señora Jeon, bajó la mirada.-tampoco...que dependa tanto de mí. Él...los tiene a ustedes, a sus amigos, sentí que lo estaba haciendo dependiente de mí al permitirle pasar tanto tiempo a mi lado.
-Es normal, has sido de mucha ayuda para mi hijo desde que estás aquí. Pero, Jinnie...siento que las cosas son muy distintas a como las piensas. No estoy completamente segura, pero...siento que mi hijo no está confundiendo las cosas. Llamémoslo intuición femenina.
Jin sonrió no muy convencido, Eun Yeong lo notó y decidió cambiar la conversación con respecto a la comida que hacía, pidiéndole ayuda al menor para distraerlo de lo que habían hablado anteriormente.
~Sonríe~
TaeHyung observaba con una sonrisa y un ligero sonrojo las fotos en su cámara. Su corazón latiendo feliz al ver las imágenes de los últimos días que se sacó con HoSeok y Momo. En algunas imágenes recibía un beso de padre e hija en la mejilla, en otros sólo del mayor y en la boca. Desde que él se había confesado habían comenzado a pasar más tiempo juntos, dándose sutiles besos y demostrándose un cariño más allá de la amistad.
Con alegría recordaba la vocecita de la pequeña Jung Momo chillando contenta al verlos juntos o abrazados. Chae Young y JiMin reían cada vez que ella lo llamaba papá, él simplemente se sonrojaba y le pedía que no lo llamara así tímidamente aunque ella no lo escuchaba. La niña insistía en llamarlo papá TaeTae, y a HoSeok parecía no molestarle en lo más mínimo. Podía jurar que lo veía sonreír orgulloso y feliz cada vez que ella lo llamaba de esa manera.
Suspiró cerrando los ojos y pensando que su sueño de ser parte de la familia Jung se comenzaba a hacer realidad. Aunque aún no supiera del todo cómo fue que la pequeña llegó a la vida de la hermana de JiMin y del amor de su vida, al menos estaba seguro que lo quería a él y no a ella como había imaginado. Aunque en ocasiones no podía evitar pensar que él aun sentía algo por ella y entonces volvía a dudar, a sentirse inferior a Chae Young y a que su sueño próximamente se vendría abajo.
Abrió los ojos viendo una foto de Hobi y él besándose. Sonrió, tenía que dejar de pensar en cosas malas y concentrarse en las buenas.
~Sonríe~
Faltaba tan sólo una hora antes de que salieran a la estación. Seok Jin se aseguraba de llevar todo y pronto se dio cuenta que le faltaba un peluche que había planeado llevar para JiSoo, uno esponjoso de color rojo que le había gustado y que sabría que le gustaría por lo adorable que era. Lo buscó en todos lados en su habitación pero no estaba ahí, hizo memoria hasta recordar que se lo había mostrado a Eun Yeong, por lo que había quedado en la sala.
Bajó la escalera y se encaminó hacia la sala, donde se encontró con JungKook. Quiso volverse al darse cuenta que ninguno de los señores Jeon estaba ahí, pero al ver que el mayor tenía el peluche que quería darle a su hermana se dio cuenta que no tenía más opción. Caminó con cuidado de no hacer ruido y al estar cerca se dio cuenta que Kook parecía analizar al pobre peluche rojo.
-Joven Jeon.-JungKook hizo un movimiento con su mano para que prosiguiera-necesito el peluche.-cuando lo miró supo que debía darle una explicación-es mío.
-¿Así que duermes con esto? Que infantil.-dijo serio.
-No, es para JiSoo, es un regalo que quiero darle.-aclaró acercando su mano para tomar el peluche, pero tan pronto como lo rozó, Kook lo alejó-joven Jeon.
-Me gusta, me lo quedaré.-sin esperar comenzó a manejar la silla de ruedas con el peluche entre sus piernas.
Seok Jin vio su oportunidad y lo más veloz que pudo, tomó el esponjoso peluchito entre sus manos, ganándose una mirada de molestia del mayor. Quería explicarle pero pronto se dio cuenta que no había nada que explicar, el peluche le pertenecía y era un regalo para JiSoo, él no debía comportarse como un crío mimado y apropiarse de cosas que no le pertenecían. Así que decidió encaminarse hacia la escalera para subir y guardar el peluche, cuando sintió algo chocar contra su espalda. Uno de los almohadones del sillón estaba en el suelo y Kook lo observaba molesto con otro en mano.
-¿Se puede saber qué pasa, joven Jeon?
-No me gusta que me ignores, deja de hacerlo y devuélveme el peluche.-pidió extendiendo su brazo, Jin no podía creer que se comportara de esa manera tan...infantil.
-Lo siento, pero no le pertenece.-haciendo una reverencia hizo el segundo intento de irse, pero recibió otro almohadazo del mayor.
-Quiero el peluche, es mío.-el menor no podía dar crédito a lo que veía, al reclamo tonto de Kook.-dámelo, lo cuidaré mejor que JiSoo.
-¿Qué? Joven Jeon... ¿acaso le molesta que le haga un regalo a mi hermana?-no contestó pero desvió la mirada y eso lo hizo sonreír enternecido por los claros celos.-JungKook.-de un momento a otro toda la incomodidad que vivió a su lado desapareció por completo.
-No me llames así...-se detuvo al ver a Jin acercarse a él para acuclillarse frente suyo.
-Lo estás haciendo difícil, te comportas peor que antes desde que te propuse lo del distanciamiento.-decía en un murmullo, JungKook lo miraba tranquilo y ya no con molestia o seriedad.
-Es...complicado...tú me ayudas más de lo que crees, Jin y...-la mano del menor acarició su brazo, silenciándolo y haciendo que un sutil sonrojo invadiera sus mejillas al sentir que tomaba su mano.-no quiero que te vayas...podrían pasar año nuevo aquí también y...
-JungKook, debo ir, no sólo por mi madre y mi hermana, sino también por los amigos que tengo allá y también quiero ver.-el mayor suspiró sonoramente, derrotado.-vuelvo en seis días, no es mucho tiempo.-observó al peluche en su mano, esa bola roja esponjosa que tenía dos ojos adorables y dos orejitas pequeñas y suaves-por cierto...puedes quedarte con él.
-¿Qué?-Kook lo miró sorprendido cuando le devolvió el peluche-no, yo...
-Sé que lo cuidarás bien, no te preocupes.-se levantó y acarició una de las mejillas del mayor.
JungKook no dijo nada, pero en su mirada Seok Jin pudo ver mucho más de lo que hubiera podido expresar en palabras. Pudo ver la felicidad y la tranquilidad que sintió, aunque no supo si fue por el muñeco o la pequeña caricia que le dio antes de subir por su maleta.
Mañana les traigo el capitulo XXX donde se viene lo bueno 7u7 pero para dejarlas más ansiosas les dejó un fragmento del capitulo:
"...¿O acaso está mal que un hombre como yo ame a un hombre como tú?..."
"...Se preguntó qué tan idiota se vería haciendo estas escenas de celos a sus veintisiete años. De seguro era estúpido..."
"...Mecostó darme cuenta, pero ya no puedo seguir siendo tan ciego como lo he sido..."
Les dejo a su imaginacion estas frases XD
Nos vemos mañana!!! besos💋💋💋
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