⭐ Yo la neta no tengo una puta idea de lo que estoy escribiendo, solo se que estaba llorando [Estoy bien imbécil, la neta que si] , y una buena rolita me dieron las ganas de escribir.

Ya saben de esas inspiraciones mamalonas y hermosas que le dan luego a uno⭐

Bueno, me gusta mucho el Wangxian y me anime a escribir mi primer fic de ellos al fin, después de todo en mi cabeza la historia se desarrollo hasta casi hacerme llorar en el trabajo.

Pero como no podía escribir bien, tome notas rápidas espero poder tener la esencia que quiero y divertirme en el proceso.

También si gustan darle su apoyo es bien recibido.

"Son las 12:08 pm del dia 11 de diciembre del 2020"

Empezamos♥

Con amor S.Y

-Wangji...-

Xichen detuvó a su hermano con su llamado, quien parecía demasiado perturbado como para ponerle atención al rumbo de sus pasos.
Después de todos, no todos los días el horaculo daba tan mal augurio para toda la Secta Gusu Lan y su imperio.

El segundo jade, tan puro , de porte intachable con su pulcro aspecto ahora lucia a los ojos de su hermano como un niño aterrado y nervioso, ese brillo en los dorados orbes de su Wangji lo hacían sentir tan culpable.

-Yo...Perdoname Wangji...A-Yao no es mi destino, lo se...Wangji pero lo amo y...-

-Hermano-
Tal vez Lan Wangji no lo gritara, u expresara tan siquiera como cualquier otro ser humano, bestia o ser lo haría normalmente, pero Xichen sabia de las emociones que tras aquella mascara de indiferencia azotaban sin descanso el noble corazón de su hermano pequeño.

-Wangji...Yo, de verdad...-

Trato de disculparse, pero el frío viento lo atrajo a la realidad nuevamente, para enfocarse a lo que si entorno aclaro.
Entre fresca brisa nevada, bambú cubierto de blanca escarcha como las tunicas de ambos hermanos.

El largo sendero empredado lo conocían de memoria, a pesar de los años...

El hogar se su madre...

Aquella cabaña...el lugar de su niñez.

Por el patio lleno de flores, un pequeño niño de largas y arregladas tunicas blancas revoloteaba tratando de atrapar las hojas que danzaban libres en el viento.

Bajo la atenta y cariñosa vista de una mujer de largo cabello negro como la tinta que teñia las páginas de los pergaminos, con un tocado delicado adornado exquisitamente por coloridas piedras preciosas.

Madame Lan, la preciosa dama que descansaba en esos momentos de su costura.

Siempre era grato ver a su pequeño tan lleno de vida.

-A-Zhan, ven ven con mamá-

Hablo en voz dulce, dando una lenta señal con su pálida mano derecha, movimientos graciles que rápidamente tomaron la atención del pequeño niño.

-Mnh-
La dama suspiró ante la respuesta de su hijo menor, ¿Es que acaso a todos los Lan les robaban el habla o las habilidades de interacción?
El niño al darse cuenta de la expresión de su madre, A-Zhan tomó una gran bocanada de aire antes de hablar.

-M...Me llamaste, ¿Que requiere, Madre?-
La infantil voz llegó a los oídos de la mujer quien pellizcó con ternuras las rosadas mejillas de su pequeño.

- Oh A-Zhan habla como un viejo...-

No pudo evitar sentir gran afecto en su corazón al ver las puntitas rojitas de las orejas del infante que ahora descansaba entre sus brazos.

Su niño estaba avergonzado.

A-Zhan por su lado sentía arder sus orejas, cuello y mejillas,su madre se burlaba de el.

Eso no era bonito...

-Perdón Perdón, mi dulce A-Zhan, Pero yo no quiero que mi dulce loto blanco me diga madre, mi dulce bebé debe llamarme Mamá-

Exclamó con dulzura, acurrucando a su pequeño hijo contra su pecho.

El amor de madre era tan dulce como la miel.
Tan cálido como los rayos del sol.
Que son capaces de dar dulzura al alma y de llenar de ternura el corazón.

Aun así nada dura para siempre.

El destino...
No siempre es agradable.

Los hermanos Lan, Xichen y Wangji permanecieron quietos dejando de lado su anterior conversación para acercarse al lugar de sus más tiernos recuerdos.

Ambos hermanos eran el orgullo de Gusu Lan, cultivadores en camino a la inmortalidad, quienes poseían la sagrada capacidad de su clan  en su sangre de desplegar la gloria de un Dragón.

Se sabia que de su Clan solo contados eran los que Baoshan Sanren , la Diosa inmortal que los Bendijo y eligió para tener tal poder.

Ni siquiera Los Wen quienes tenían el poder de controlar el Fuego a voluntad aun sin un cultivo poderoso,ellos no podían tomar formas tan potentes, por eso nadie más podía aspirar a ser el Emperador más que los hijos de Gusu Lan.

Lan Wangji fue el primero en acelerar sus pasos hasta llegar al final del sendero para arrodillarse  de golpe, cuidando de que sus túnicas no se estropearan pero inmediatamente agachando la cabeza, dando una corta reverencia.

-Mad...Mamá, Lan Wangji Esta en casa-

El segundo jade saludo hacia la vacía cabaña con todo el respeto y cariño que su cuerpo podía permitirle, sin decir palabra alguna.

Pues el tema que debía tratar con su hermano Wangji no podría tocarlo en ese lugar tan significativo.

Pero es que hacia poco más de un año había conocido durante una conferencia de cultivo entre las grandes cuatro familias del reino que conoció a un joven de bello porte aunque sencillo, cautivo su corazón.

Meng Yao.

El primer jade recordaba ese día...
Durante uno de los paseos por los jardines interiores de Lanling Jin se topó con un muchachito.

De larga cabellera castaña de un tono tan claro y hermoso, tan lacio, que ni todos los versos de un elaborado poema podrían narrar y hacerle justicia.
Ese joven reposaba contra un árbol, dormitando tranquilamente.

Xichen se había acercado para saludar por pura cortesía.
Hasts que detuvo su andar a menos de un metro solo para apreciar a la belleza durmiente frente suyo.

Aquel fino cabello castaño, enmarcaba un rostro de delicadas facciones juveniles e inocentes, largas pestañas rizadas, labios delgados color cereza y una piel inmaculada como la más fina porcelana.

El primer jade quedo prendado de tan preciosa criatura.
Supuso que sintió su presencia pues el muchacho bostezo suavemente, llevando sus manos a su rostro para frotar sus mejillas.

-...-

-...-

Ambos compartieron un largo e incómodo momento donde no desviaron la mirada el uno del otro.

Aún así, la marca del lazo de vida no se formó en ninguno de los dos jovenes.

El destino no los unía eso estaba claro...pero el corazón que latía dentro del pecho de ambos decía lo contrario.

Pese a los contra que se daban por varias de las opiniones de algunos constantes ancianos del consejo , hacia algunos meses habían decidido de pasar de usar la magia para certificar el paradero de sus verdaderos compañeros.

Y unirse ellos en sagrado matrimonio finalmente.

Meng Yao, Hijo ilegítimo de Jin GuangShan y El Lan Xichen futuro Emperador del Reino de Gusu Lan.

Contrajeron nupcias un par de meses atrás, todo marchaba bien.
Ambos eran felices con su tranquila vida en los recesos de la nube.
Aun si no estaba escrito en sus pieles que el destino les unía eternamente, ellos se amaban y permanecerían juntos.

Pero... Todo cambio en menos de un par de días...durante el banquete de celebración del cumpleaños de su esposo.

Su dicha fue opacada por la llegada de un joven de túnicas blancas cuyos ojos permanecian vendados acompañado de otro hombre alto de un traje negro, seguidos por dos pequeños niños inquietos.

Xiao XingCheng.
El Discípulo amado de la gran Diosa Inmortal Baoshen Sanren y su esposo Song Lang.
Ese fue el nombre con el que la niña le presento ante toda su corte.

A-Qing y Xue Yang, ambos niños eran los hijos de esa pareja.
Quienes se mantenían girando alrededor de los adultos en todo momento.

El joven Xiao Xingcheng anunció ante todos con pesar las palabras que su maestra había dado para todos.

Aun recordaba ese momento con toda claridad.

La musica era suave ,demasiado tranquila, algunos murmuraban aun si eso estaba en contra de las reglas de su clan.

Entendía las dudas y sentimientos de inconformidad de muchos de los presentes.

Si el matrimonio real daría una descendencia fructífera que llenara de honor al reino...
Que si la desgracia no les llegaría por desobedecer al cielo y cosas más que solían ser tema de conversaciones de casi todo el mundo.

Por ello, sin duda alguna el evento era algo privado, solo para la familia más cercana y algunos aliados de Gusu Lan.

Después de todo, El cumpleaños del esposo del Joven Emperador era algo especial. Aún cuando Xichen no tomaba el cargo, pues se había escrito que ningún Emperador podría ascender al trono sin una emperatriz, aún cuando las bodas se habían celebrado hacia dos meses por diversas situaciones la coronación aun no era realizada más sin embargo se esperaba que con la proxima luna llena se llevara a cabo dicha celebración.

Meng Yao Y Lan Xichen estaban al fondo del salón decorado por cintas celestes con bordados dorados. Ellos estaban en una mesa hornamentada con oro y seda.

Lan Wangji estaba sentado cerca de ellos, a la mano derecha de Xichen.
Al igual que el serio Lan Qiren quien parecía ignorar todo a su alrededor con los ojos cerrados y su postura recta.

La paz de la festividad fue interrumpida por una poderosa explosión que abrió de en par en par las puertas del salón.

Xichen desenvainó su espada al igual que todos los demás presentes, pero con una mano busco mantener a A-Yao tras de si para poder protegerlo.

El humo no los dejaba dislumbrar mas allá de el umbral de la entrada.
Nadie decía nada, solo esperaban a sus futuros adversarios...

-A-Yang...no debes derrumbar las puertas de las casas ajenas...-

Una voz suave y amable resonó por todo el salón haciendo un eco tranquilo, parecía el tono de voz que una madre usaría con un hijo travieso.

-¡Bajen Sus armas y Arrodillense ante el Discípulo amado de Baoshen Sanren! O los acusare con mi padre-

-Calla A-Qing, Idiota-

Ahora lo que sonaba era la infantil voz de una niña, el humo se dispersaba lentamente.

¿Quienes derribaron la puerta eran niños?

Nadie atacaría por el momento.
No hasta saber que era exactamente lo que estaba pasando.

-Song Lang...Recuerdame Repasar las lecciones en casa con estos niños traviesos-.

Por el suave sonido que esa voz producía se podía deducir que su dueño estaba algo avergonzado.
Todos se tensaron cuando el sonido de una espada cortando el aire los atrapo con un brillo azul...el ambiente se sentía tan frío...como las épocas de invierno en las montañas nevadas.

El viento sopló con ferocidad, barriendo en ondas cual pequeño remolino limpio el salón del humo, polvo y escombros.

Dejando ver a las cuatro figuras.

El hombre de oscuras túnicas parecía proteger a alguien atrás de el, aun cuando los niños estaban al frente.

Como si las espadas apuntándoles no les causara temor alguno.

Uno de los invitados llevaba con el un arco y su carcaj lleno de flechas, al ver que el alto hombre de negro, con una expresión "feroz" no dudo en disparar.

Pero la flecha se desvió...

Xichen trato de gritar pero A-Yao se puso frente suyo, solo para ver como la flecha casi le daba a uno de los pequeños niños, más precisamente de la niña, quien era abrazada por el niño de larga coleta azabache.

Se veía molesto.

-A-Qing...-

La delicada figura que se escondía atrás del hombre fuerte y alto de ropas negras se asomó rápidamente, era un joven hermoso, de largo cabello negro como la tinta que llevaba sobre sus ojos una banda blanca.

-Song Lang...A-Yang, ¿Como esta A-Qing?-

El llanto de la niña solo se hizo más fuerte.
No había persona en esa sala que no estuviera confundido por tal escena.

El joven de ojos vendados usaba una espada como el palo que utilizaban los ciegos.

-Que deshonroso...usar tu arma como un vil instrumento para ciegos...-
-¿Quienes son y que hacen interrumpiendo el banquete de su majestad?-
-¿Como llegaron hasta acá?-

Murmullos...muchos murmullos.

Lan Wangji guardo su espada para lentamente acercarse a su hermano Mayor.
Xichen entendió algo de la mirada dorado brillante que su hermano menor le daba.

Apenas estaba por tratar de arreglar todo cuando Lan Qiren saltó de su lugar.

-¿Quienes son?¿Quienes se atreven a entrometerse frente a su Futuro Emperador?-
El viejo gran Maestro habló con plena autoridad, bajando desde su mesa, caminando hacia el pasillo donde los cuatro intrusos estaban.

-Tsk, futuro Emperador...esas son patrañas-
Masculló el niño que cargaba a la chiquilla de nombre "A-Qing"

-T...Tu ¡Mocoso insolente!-
Lan Qiren estaba demasiado molesto por la impertinencia del niño por lo que ignorando la presencia de quienes lo acompañaban trato de acercarse.

A solo unos pasos del grupo una fuerte presión de energía lo detuvo. Se sentía asfixiado...como si miles de agujas perforaran su piel, y el aire le quemara.

Tosió algo de sangre mientras caía de rodillas, su mano y túnicas se mancharon de carmín.

-¡Tio!-
Los Jades gemelos gritaron al ver a su tío caer al suelo.

-¡No ataquen!-  Declaró Xichen rápidamente. Deteniendo con la breve orden el deseo de muchos de aquellos que sentian la presión de la energía espiritual agobiante proviniendo de los intrusos.
ERA DEMASIADO PELIGROSO.

-Song Lang...Ya basta-
Sonó melodiosa y autoritaria la tersa voz del joven de blancas tunicas.
Quien posó sus manos sobre el brazo del Hombre de oscuro ropaje.

-A-Qing esta herida- Song Lang habló sereno a Xiao Xingcheng.

-Xue Yang...-

-Es solo un rasguño...pero aún así- El pequeño niño mordió suavemente su labio inferior y apretando el agarre que lo aferraba a la pequeña cuya manga había sido rasgada.

Todos los invitados observaban atentos cualquier movimiento por parte de aquellos individuos.

Lan Xichen podía sentir un aire diferente en esas personas.

Emanaban un aura entera de poder. Meng Yao se aferró a sus tunicas.
Tenía miedo. Su A-Yao tenía miedo.El como futuro emperador no debía dejar que su amado sintiera temor.

-Xiao...A-Qing fue herida por ese cultivador mortal...- El hombre de tunicas oscuras miró con frialdad a todo los presentes. En especial al hombre cuyo arco seguía alzado listo para lanzar otra flecha.

El suave llanto de la niña cesó en los brazos de aquel pequeño niño quien de no ser silenciosamente controlado por el mayor de los hombres presentes...por su mirada  probablemente cometería una masacre en el salón de fiestas.

-Disculpen esto, no era nuestra intención acudir sin invitación alguna...Aunque considero que por más nerviosos y asustados que se este, disparar a niños esta muy mal- El delicado joven cuyos ojos permanecían vendados de forma grácil agitó su arma creando una poderosa corriente de energía que derribo arreglos florales y algunos guardias.
Haciendo temblar hasta el más experimentado espadachín en la sala.
Una bella espada de precioso porte, pero con un corte mortal.

La temperatura del salón descendió aún más.
Los presentes temían de aquel peligroso tono azul.

-Dales su merecido Padre- Gritó el niño que con cuidado se levantaba con A-Qing en brazos.
Song Lang se había acercado a los infantes para auxiliarles.

Su amado se encargaría de hacer llegar las palabras de la gran inmortal.

Mortales idiotas.

-He traído conmigo a mi familia...Para anunciarles los decretos del cielo- El Joven hizó resonar en la tierra tres golpes con su espada.

-¡No escucharemos nada de lo que tengas que decir!-

Lan Xichen miró con evidente frustración a aquel anciano hombre del consejo gritando sin temor ante el hombre de blanco.

Su hermano menor manifestó su preocupación con solo una mirada.

-Guarden silencio- Xichen alzó la voz no queriendo tentar más su suerte ni verse expuesto el o su familia a riesgos innecesarios.

Xiao Xicheng esbozó una delicada sonrisa mientras dejaba de sostener su espada en son de sutil amenaza utilizandola nuevamente como bastón para guiar sus pasos.

Acercandose bajo la atenta mirada de sus acompañantes.

-¿Es usted el Joven Lan Huan?-
Los jades de Gusu se miraron entre si, eso era una descortesía evidente.

Llamaba al futuro Emperador por el nombre de pila.
Inaceptable.

Erradicarían a ese hombre ciego... y Como si les leyeran el pensamiento a aquellos mortales una fuerte presión en la atmosfera hizo jadear a más de uno.

Obligando a todos arrodillarse.

Incluso Lan Xichen y su hermano cayeron de rodillas.

-Song Lang...Basta- nuevamente el joven de tunicas blanquecinas y cabello largo deslizandose como tinta desde la punta de su cabeza hasta rozar el suelo, suspiró con cierto grado de pesadez.

-Los mortales deben escuchar- Fue la simple respuesta del hombre.

Aún asi...La mayoría ahora temía  pero tambien la ira crecía como maleza pestilente en sus corazones.

Lan Xichen trató de ver a sus espaldas...Su A-Yao...

Lan Wangji por su parte estaba preocupado por su tio que había caído inconsciente hacia ya un rato.

-Mis sinceras disculpas por esta conmoción, Mi esposo no ha de retirar su poder hasta que termine de decir lo que mi maestra me ha mandado a comunicar...Espero me disculpen por su futura incomodidad.-

La bella figura de porte elegante del invidente hizo a todos poner especial atención.

Era como un fantasma...uno muy hermoso.
De golpe la presión en algunos se hizo más evidente.

E incluso se podría jurar que la mirada de Song Lang cortaba como afilada navaja.

Xiao XingCheng aclaró un poco su garganta, cuidando de su postura, alzo ligeramente sus delgados brazos y habló en voz clara para todos en esa sala.

-Mi maestra...La gran inmortal Baoshan Sanren me manda a decir esto:"Aquel que ustedes han elegido como Emperador tiene prohibido ascender al trono sino es con su destino tatuado en la piel, De negarse a esto me temo que las calamidades les sobrevendran y la gloria de su pueblo desaparecera...He aquí os mando a mi discipulo Xiao Xingcheng que les auxiliara a hechar la suerte en el encantamiento"-

Citó el joven sin perder la eterea elegancia que le acompañaba y lo hacia destacar entre todos.

-Joven futuro Emperador, La gran inmortal me manda a decirle que debe anular su actual matrimonio, ella mejor sabe que nunca se llega a la felicidad si tu pareja no es la elegida por el cielo, pero no se preocupe una vez hagamos el encantamiento hallare a su autentico acompañante- Sonriente el discipulo de Baoshen Sanren pronunciaba con seguridad todo esto al ahora atonito y silencioso Xichen.

Los preciosos ojos de su A-Yao derramaban pesadas lagrimas que hacian doler a su corazón.

No...No deseaba esto, Lan Xichen el  primer jade de Gusu negó.

Sorprendiendo a su gente,esposo y hermano.

La hermosa sonrisa del enviado por la gran inmortal disminuyo un poco.

-¿Por que? -  Al escuchar la pregunta Lan Xichen contestó com seguridad.

-Por que yo amo a Meng Yao, no puedo elegir a otra persona que no sea él- Dijó firme el Primer jade.

-Su matrimonio no será bueno...No va a prosperar como lo deseas- interrumpió la niña que ahora descansaba en los brazos del hombre alto a lado del niño que en sus manos sostenía una espada.

-A-Qing no digas cosas así- Regañó suavemente Xiao Xingcheng- Me temó Joven Futuro Emperador que no será capaz de tomar el trono que le corresponde a su sangre...No sino piensa desposarse con quien el destino ha elegido para usted-

Los murmuros no se hicieron esperar, ni los quejidos de inconformidad e incluso algunos insultos de parte de los aliados y miembros del consejo de ancianos.

Una alegre festividad se estaba transformando para mal.

Lan Qiren habia sido auxiliado apenas por su sobrino menor en cuanto algunos pudieron moverse al ser retirada la presión de energía espiritual.

-En ese caso nada más se puede hacer- Fue la respuesta en un tono extraño que alarmo a todo mundo.

Xiao Xingcheng se volteó hacia su pequeña familia quienes solo asintieron en silencio bajo la mirada estupefacta de los mortales.

-Escuchar bien, Este joven maestro ha elegido el camino de amor - Señaló el sonriente hombre cuyos ojos eran cubiertos por una venda blanca y pulcra, a el candidato a emperador, Lan Huan...Lan Xichen. -Pero los decretos de mi maestra son poderosos, Así que para la siguente Luna llena se ha de ceder el derecho del trono al hermano menor, Lan Wangji y se usaran las artes para buscarle a su pareja de vida-.

Nadie dijo nada...Los orbes dorados de Lan wangji expresaron más que mil palabras apenas su mirar entró al campo de visión de Lan Xichen.

-Espere...Usted...no puede decidir...eso...- El Gran Maestro De Gusu Lan, Lan Qiren expresó debilmente su inconformidad apenas notó que el Joven terminó de hablar y procedia a retirarse.

-Xiao Xingcheng es el enviado de su Gran Maestra inmortal, piadosamente les ha dado una alternativa, mortales no se crean más que aquellos que leen el cielo, lo mejor para todos es escuchar su sabia voz-

Fue el turno de Song Lang hablar firme y contundente, acercandose a su amado compañero seguido de los dos pequeños

Xiao recibió con un beso y un abrazo a su pareja.

Volviendo a hablar con suavidad y elegancia.

-He de volver en unos días, para realizar la ceremonia, Lan Wangji tu haz de ser coronado, no te preocupes...Te ira bien-

Y como habian llegado asi aquellas cuatro singulares personas desaparecieron cuando el niño lanzó un pergamino al suelo haciendo aparecer una matriz que los envolvió en calida luz y los desaparecio.

Dejando blancos petalos aromaticos regados en el suelo donde habían estado.

Lan Xichen corrió donde su esposo lloraba abrazandose a el con fuerza, No quería separse de su amado.

Lentamente miró a donde su tío y hermano lo observaban.

Debido a lo ocurrido la fiesta fue inmediatamente cancelada.
A-Yao se retiro a sus habitaciones y el consejo entro en sesión.

Despues de mucho debatir se tomó la decisión.

Se consulto con uno de los mejores horaculos y la cruel  setencia fue dada a los hermanos.

Su hermano, su pequeño Wangji ascendería al trono.
Era tan joven...Lan Wangji solo tenia 15 años de edad...a diferencia de el que contaba con 21.

Frente a la casa de su madre...Ninguno de los dos hablo.
No había necesidad.

-Lan Wangji...-

-Hermano...¿No puede ser despúes de los juegos entre sectas?-
La oración de su hermano fue larga...e inusual en el.
Por lo que le cuestiono en voz baja.

-¿Te refieres a los juegos de caza que las cinco sectas hacen cada año? ¿Quieres participar?-

-La Luna llena volvera a pasar más tarde, no hay prisas...- Xichen pudo notar en las manos de su hermano tensando ligeramente su puño sobre los dobladillos de las tunicas sobre sus rodillas.

-Hablare con el consejo...no te aseguro nada pero lo intentare- El primer jade sonrió a su hermano.

-Mnh-
El de ojos dorados solo asintió sin más y procedio a retirarse silenciosamente del lugar de su adorada niñez.
Había tanto que asimilar aún.

Wei Wuxian corría traviesamente entre los matorrales con arco en mano listo para disparar a su presa.

Un hermoso faisan que llevaba persiguiendo desde hacia un
a hora por casi todos lados.

Su hermoso uniforme de Yummeng Jiang estaba evidentemente manchado por correr como un animal salvaje en la naturaleza.

Libre y sin temores ni ataduras.

-¡Wei Wuxian detente ahora mismo o te rompere las piernas!- Gritó entre pesados jadeos un agotado joven a varios metros de distancia de Wei Ying.

Quien apenas se detuvo río de forma escandalosa y joval.

-No puede ser A-Cheng...¿Donde esta tu poderosa condición fisica sino puedes correr con la ferocidad de un hermoso Chico como yo?- Canturreó divertido el azabache cuyo cabello largo era atado en una firme coleta con un listón rojo sujetando el peinado.

-Callate tu Wei Wuxian- replicó Jiang Cheng hijo de los grandes lideres del muelle del loto.-No eres la gran cosa...-

Ambos hermanos rieron alegremente sin nada más que su alegria y cansancio.

Los principes de Yummeng Jiang. Jiang Cheng y Wei Wuxian el hijo adoptivo de Madame Yu y Jiang Fengmiang pero nacido de una oscura situación con respecto a quienes le habian traido realmente al mundo.

Se sabia poco de sus turbulentos origenes, de unos padres que desafiaron sin temor al destino y murieron por lo mismo.

En este mundo...no podias vivir una vida completa...Sino el cielo no te otorgaba su bendición.

Wei Changze y Cangse Sanren fueron un claro ejemplo de eso.

La joven habia descendido de los templos sagrados de la gran maestra inmortal Baoshen Sanren
Se sabía que la chica era demasiado hermosa e inteligente en comparación de las bellezas del plano mortal.

Yummeng Jiang la acogió entre los suyos ganandose el prestigio de tener a una gran personalidad entre sus filas.

La doncella destacaba en todas las artes,una mujer temeraria y valerosa, independiente capaz de romperle la cara a quien osara faltarle el respeto.
Entre sus viajes de aventura, llego a conocer a un amigo del joven futuro lider del Clan Jiang.

Wei Changze. Un chico simple y sencillo.
No era un cultivador impresionante ni demasiado guapo y aún así logró embelesar el travieso corazón de Sanren.

Pero...el destino siempre cruel...no pinto en sus cuerpos señal alguna de ser la mitad del otro.
Y peor aún.

La pintó en otras personas cercanas a ellos.

Wei Changze fue caprichosamente emparejado con La prometida de su buen amigo...una tal Yu Ziyuan.

Y Cangse Sanren fue emparejada con Jiang Fengmian.

Una sola reunión de presentaciones habia arruinado todo.

Para celebrar el enlace matrimonial para la alianza. El padre de Fengmian invito a todo mundo a celebrar.

Wei era amigo de la infancia y futura mano derecha así que estaría sin falta.

Cangse regresaba de una misión, emocionada de conocer al hijo de su benefactor y felicitarle por su matrimonio.

Pero...el caos los azotó.

Apenas estuvieron los cuatro reunidos siendo presentados.

El ardor sobre sus pieles se manifesto.

Poco se supo despúes...
E incluso se llego a dudar de los origenes de los hijos del matrimonio Jiang-Yu.

Pues el padre de Wei Wuxian, Wei Changze perdió la vida trayendolo al mundo y Cangse Sanren murió de enfermedad cuando su pequeño tenía alrededor de cuatro años.

Habían negado permanecer con sus verdaderos destinos e incluso engendraron una vida.

Y adiferencia de sus pares no pudieron existir en este mundo, dejando solo a su pequeño hijo.

La tierna encarnación de la dulzura,alegría y contradicción que alzaron sus padres para todos.

Pero era clara la lección...No se podia desafiar al destino sin pagar por ello.

Entre risas y juegos Wei Ying corría alrededor de Jiang Cheng.

A ellos los rumores no les afectaban ni las miradas de su pueblo sobre ellos mientras regresaban a casa con sus faisanes recien atrapados.
Se tenian entre si y a su Hermana Jiang Yanli.

Sus padres los amaban  pese a la salud del Rey y lider de Muelle de loto era delicada sabían sobrellevar todo y les daban una vida digna.

Ese año al fin podrían asistir a la conferencia anual.

Los juegos de caza entre sectas.

No era más complicado que atrapar faisanes.
Serían el orgullo de Yummeng.

Las puertas del palacio se abrieron para ellos, dejandoles entrar.

Pero todo era tan...silencioso. Ambos hermanos se vieron entre si con duda.

¿Que estaba pasando ahora en su hogar?

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9:44 pm del  28 de marzo del 2021.

Me ha tomado meses pero he terminado mi idea inical.
Cuando lo publique espero sea algo más decente y se entienda.

Con amor

SY.